DIOS SE MANIFIESTA

Mar 02_10 Yo quiero la vida del hombre y no su muerte eterna.

Rosario vespertino.

Temas:

•Os pido, Mis pequeños, que os mantengáis así, como os pedía Mi Hijo, como niños siempre necesitados de Mi Presencia en vuestra vida.
•Si recibís en lo espiritual y lo compartís con vuestros hermanos, recibiréis infinitamente.
•Vosotros debéis fincar vuestra vida en lo espiritual, Mis pequeños.
•El Conocimiento que se os da tiene que terminar en obras y así es como alcanzareis fácilmente la santidad de vida.
•Os necesito como corredentores de estos tiempos vuestra vida es importantísima para salvar muchas vidas.

Mensaje de Dios Padre a J. V.




Primer Misterio, Habla Dios Padre,
Sobre: Os pido, Mis pequeños, que os mantengáis así, como os pedía Mi Hijo, como niños siempre necesitados de Mi Presencia en vuestra vida.
Hijitos Míos, la humildad es un arma poderosísima para el alma del hombre y digo es un arma poderosísima por que satanás, siendo soberbio, él no puede contra las almas humildes. El soberbio siempre se muestra autosuficiente, siente que no necesita de nadie, porque tiene, según él, fuerza de apoyo, tanto de amistades o de él mismo creyendo, que su sapiencia humana, es muy grande y que nadie le supera. El soberbio, tarde o temprano, decae porque ya no permite nada nuevo en su vida, ningún tipo de conocimiento y menos Sabiduría Divina y así es como satanás va engañando a los hombres, llenándoles de conocimiento humano, de inteligencia humana pero esto no es nada ante la Sabiduría Divina.

Cuando sois humildes, os reconocéis pequeños y Mi Hijo siempre os pidió que vivierais ésa pequeñez, la pequeñez del niño, o sea, del necesitado. El niño lo muestra así, necesitado de protección, necesitado de conocimientos, necesitados en todos sentidos. Necesita los cuidados del adulto y aquí el adulto Soy Yo, vuestro Dios. Si no venís a Mí, nunca adquiriréis la Sabiduría Divina. Si sentís que con vuestra humanidad ya sois lo suficientemente grandes, como para moveros en el mundo y para alcanzar luego el Reino de los Cielos, estáis muy equivocados.

El soberbio siempre va hacer un mal ejemplo ante la sociedad, tanto en lo humano como en lo espiritual, en cambio el humilde, ése es el que adquiere la Sabiduría Divina y, también, siempre va hacer un gran ejemplo ante sus hermanos, los hombres porque, ante el humilde Me voy a mostrar Yo, vuestro Dios. Sus palabras van a engrandecer a otras almas, sus palabras van a ayudar a muchos otros de sus hermanos a salir de problemas, tanto humanos como espirituales. El humilde siempre buscará Sabiduría, Me pedirá ayuda, buscará literatura que le ayude a crecer, siempre habrá hambre y sed de conocimiento. El humilde siempre tendrá un lugar muy especial ante Mí y Yo, siempre le ayudaré. El humilde recibe de Mí y da a los demás, el soberbio no, el soberbio ni quiere llenarse de conocimiento ni quiere dar a los demás porque no quiere que los demás sean tan grandes como él se siente.

Os pido, Mis pequeños, que os mantengáis así, como os pedía Mi Hijo, como niños siempre necesitados de Mi Presencia en vuestra vida, siempre necesitados de Mi Amor y de Mi conocimiento y así, es como llegareis a ser grandes, primeramente ante Mis Ojos y luego ante vuestros hermanos.

Dadme esa alegría Mis pequeños, Mis hijitos, manteneos así pequeñitos, porque sois a los que realmente Yo amo.
Gracias, Mis pequeños.

Segundo Misterio, Habla Dios Padre,
Sobre: Si recibís en lo espiritual y lo compartís con vuestros hermanos, recibiréis infinitamente.
Hijitos Míos, Yo Soy ésa perla preciosa de la que se habla en la Parábola del hombre que busca y encuentra, aquel que encuentra ésa perla preciosa y da lo que sea por obtenerla. Mis pequeños, Yo Soy el gran tesoro que debe ser la búsqueda más preciosa del hombre. Vosotros continuamente soñáis en poder encontrar un tesoro inmenso para que vuestros males económicos terminen, soñáis en riquezas descomunales, en riquezas inmensas, pero lo soñáis solamente en lo material, cuando en la realidad lo podéis tener cuando Me buscáis y Me encontráis a Mí.

Mis pequeños, el alma puede llenarse inmensamente de Mí, puede gozar infinitamente más que lo que podéis gozar en el cuerpo. Cuando un alma Me encuentra y empieza a tener ésos regalos de Mi Amor, ya no se puede apartar de Mí, ha encontrado el tesoro, que Soy Yo y ése tesoro nunca se termina, al contrario, se va engrandeciendo, porque cuando Me encontráis a Mí, vuestro Dios, en ése momento Yo Me muestro de menos a más ante el alma, os voy dando más y más, mientras más estéis Conmigo.

Cuando encontráis un tesoro de la Tierra, lo vais gastando, va menguando y os lo termináis al paso del tiempo, en cambio, al estar Conmigo, siempre recibiréis más y más y más, nunca se acaba lo que viene de Mí, nunca se acaba Mi Amor, nunca se acaban Mis Bendiciones especialmente cuando seguís Mi consejo de que de lo que tenéis, deis a vuestros hermanos, así recibiréis más, al ciento por uno. Es así como no se termina lo que viene de Mí, cuando nace en vosotros esa Caridad por compartir con vuestros hermanos. Os he dicho, que si tenéis de lo material y lo compartís con vuestros hermanos recibiréis al ciento por uno pero, si recibís en lo espiritual y lo compartís con vuestros hermanos, recibiréis infinitamente, porque el alma está capacitada para recibir infinitamente de Mí.

El alma es un parte de Mí, vuestro Dios, tiene capacidades inmensas y vosotros no las aprovecháis, no aprovecháis el gran portento, el gran regalo que os he dado con vuestra alma, por eso os pido, Mis pequeños, que busquéis ésa perla preciosa, que Me busquéis a Mí, vuestro Dios, para que empecéis a recibir ésos regalos descomunales que Yo os puedo dar, para que vosotros gocéis y para que también vuestros hermanos los gocen cuando vosotros compartáis con ellos, del bien que yo os regalo.
Gracias, Mis pequeños.

Tercer Misterio, Habla Dios Padre,
Sobre: Vosotros debéis fincar vuestra vida en lo espiritual, Mis pequeños.
(Lenguas…) Hijitos Míos, vivís preocupados por las cosas que os puedan faltar, vivís preocupados por las cosas que perderéis, vivís preocupados por tantas y tantas cosas que puedan afectar vuestra vida, que os quiten la comodidad que ahora tenéis, que os lleven a una pobreza humana.

Mis pequeños, ¡cuánta equivocación tiene el hombre! Buscáis, como os he dicho, cosas del mundo, cosas materiales que solo os llevan a tener preocupaciones o para que finquéis, en pura falsedad, vuestra vida. Cuando vosotros fincáis vuestra vida en lo material estáis volando en el aire, no tenéis buenos cimientos, fácilmente podéis caer en una destrucción física y espiritual.

Mis pequeños, cuando vosotros fincáis vuestra vida en Mí, que tenéis cimientos fuertes, profundos en Mí, en Mi Amor, en Mi Sabiduría Divina, es cuando vosotros podéis decir que estáis fuertemente unidos a Mi Vida, que estáis protegidos fuertemente por Mí, vuestro Dios y así es como Yo protejo, no solamente a las almas, si no también a vuestro cuerpo, a vuestro ser, contra todos los ataques del enemigo, cualquiera sea la forma en la que él os pueda atacar y esto lo conocéis porque lo habéis visto en el pasado, en hermanos vuestros, en santos que han tenido ataques fortísimos y que gracias a Mí, vuestro Dios, los he librado, tanto en su cuerpo, como en su alma.

Vosotros debéis fincar vuestra vida en lo espiritual, Mis pequeños. Os he dicho que cuando tenéis un soporte muy fuerte espiritual, lo espiritual siempre va a proteger a vuestro exterior que es vuestro cuerpo y vuestras posesiones. De ésta forma pasáis por el mundo seguro, pero sobre todo, llevando una vida que va hacer agradable a la de vuestros hermanos, todos aquellos que han mantenido contacto con vosotros, porque van a aprender de Mí. Ahí es donde entra la humildad, Mis pequeños, y ése es uno de los frutos del estar Conmigo y de buscarMe en esa humildad, como os he explicado antes.

Vosotros daréis y reconoceréis que lo que estáis dando no viene de vosotros que vosotros sois solamente instrumentos, que vosotros os estáis soltando a Mi Voluntad, que sois dóciles a lo que Yo os pido. Yo os pido que os hagáis pequeños, que no pongáis nada vuestro en vuestra obras, que Yo sea el que actúe a través de vosotros, porque así es como van a reconocer vuestros hermanos que Yo estoy comandando vuestra vida, y esto es realmente el gran regalo que puede tener un alma, el que se den cuenta vuestros hermanos y, primeramente vosotros mismos, que lo que estáis viviendo, que lo estáis enseñando, que lo que estáis transmitiendo, que lo que estáis gozando, todo es Mío, Soy Yo en la vida del hombre.

Eso era el Paraíso Terrenal con vuestros Primeros Padres, Adán y Eva, Yo era la Presencia en ellos, ellos sentían ese gozo infinito porque estaban gozando Mi Presencia real y total en su vida, en su interior, en todo lo que hacían, era una Sabiduría Santa y Divina lo que ellos tenían, era una vida Divina lo que estaban gozando, porque Yo era en ellos, no es por que ellos fueran Divinos, si no era Mi Divinidad en ellos y eso es lo que pasa en la vida de los santos, es Mi Divinidad viviendo en ellos, y a eso estáis llamados todos vosotros, y es cuando el alma realmente encuentra su “por qué” en su vida. El vivir y buscar esa Divinidad es lo que os va engrandecer y os va hacer gozar plenamente, para lo que estas viviendo y para lo que fuisteis creados, Yo en vosotros y vosotros totalmente anonadados a Mí Voluntad.
Gracias, Mis pequeños.

Cuarto Misterio, Habla Dios Padre,
Sobre: El Conocimiento que se os da tiene que terminar en obras y así es como alcanzareis fácilmente la santidad de vida.
Hijitos Míos, desde que sois pequeñitos, vosotros vais a la escuela, vais creciendo y vais aprendiendo de muchas materias. Se va aumentando la base del conocimiento que primeramente os dieron vuestros padres con el que luego vais tomando de la escuela, de la universidad y luego de que vosotros mismos vais tomando de los libros. ¿Qué pasaría Mis pequeños, si después de tener todo ese conocimiento no hicierais nada?, ¿que os quedarais con el conocimiento, que no lo compartieras, que no trabajarais con lo que aprendisteis para poder vivir del fruto de ese conocimiento? Dirían que fue inútil, en vuestra vida, que os hubierais llenado de tanto conocimiento, aunque hubierais hecho una maestría o todavía más, un doctorado, para nada. Lo mismo sucede en la vida espiritual, si vosotros os llenáis de Conocimiento y aún a pesar de que tuvierais, por ejemplo, Mi Gracia y que Yo os transmitiera directamente Conocimiento Divino, Sabiduría Divina, leyerais infinidad de libros, que os llenarais de gran conocimiento religioso, gran alimento para el alma, si no dierais nada de esto, sería inútil, sería una pérdida de tiempo, sería estéril vuestra vida espiritual y en vuestra vida humana.

Voy a esto, Mis pequeños, todo lo que obtenéis de Mí, si no lo ponéis en obras, de nada sirve lo que aprendiste. Es una obligación Divina dar a vuestros hermanos lo que Yo os doy, tanto en las capacidades que vosotros tenéis en lo humano como en lo espiritual. Yo os las he regalado, Yo os las di para que vosotros las potencializárais. Vosotros de ninguna forma podéis obtener capacidades si no habéis nacido con ellas y, si nacisteis con ellas, Yo os las di, Mis pequeños, son Mis regalos para cada uno de vosotros, pero si el Conocimiento que se obtiene no se da, os repito, es estéril vuestra vida y ahí es a donde os quiero llevar, a las obras de Misericordia.

Debéis dar el Conocimiento, debéis ayudar a vuestros hermanos, os debéis dar a vuestros hermanos y, de ésa forma, empezaréis a hacer dinámico todo Mi Amor y Conocimiento que Yo os doy, para eso os mandé a Mi Hijo. Os mandé a Mi Hijo, para que os enseñara todo esto, Él, siendo Mi Hijo y siendo Dios, pudo haberse quedado en el Reino de los Cielos, pero Él, con todo ese Conocimiento Divino, os lo dio, caminó entre los hombres, ahí está lo dinámico, convivió con gente de todos niveles para darse y para dar. No mandó a ángeles, se pudo haber quedado aquí en el Reino de los Cielos, pudo haberMe pedido eso, mandar emisarios, ángeles que enseñaran a los hombres, pero Yo le pedí que bajara a la Tierra y que conviviera entre vosotros y ahí entra la primera parte del fruto del Amor, que es la humildad, como os decía antes. Si no tenéis humildad y ésa empieza Conmigo, con vuestro Dios, no sois nada. El aceptó como Hijo Mío, en obediencia, en humildad Divina, convivir entre vosotros, todo un Dios inmenso, inconmensurable, enseñándoos en su propia persona lo que son las Virtudes, lo que es el Amor.

Aprendisteis del Maestro por excelencia, aprendiste de todo un Dios cómo os debéis comportar. Hubierais tenido pretexto de alguna forma si Yo hubiera enviado otro tipo de emisario a enseñar a los hombres, no tendría la Perfección que tiene Mi Hijo. Así no tenéis pretexto y, por otro lado, tenéis el Conocimiento real y Divino, en el cual no podéis tener ningún tipo de duda de lo que debéis hacer para que también podáis ser perfectos. Aquellos que han buscado ésa vida que dejo Mi Hijo, ésas Enseñanzas que él os dio, encontraron la santidad, porque, además, se dieron igual que Él, recibieron Sabiduría Divina, porque Me la pidieron, porque Me buscaron, porque hicieron a un lado el mundo y prefirieron la perla preciosa que Soy Yo, vuestro Dios y al tener ésa perla preciosa, se dieron cuenta del tesoro tan grande y lo compartieron y a eso estáis llamados todos vosotros, Mis pequeños.

Podéis alcanzar la santidad y debéis alcanzarla para entrar fácilmente al Reino de los Cielos, porque ningún alma entra al Reino de los Cielos si no es santa; os purificáis en la Tierra u os purificáis en el Purgatorio, pero tenéis que alcanzar la santidad para estar en el Reino de los Cielos y si seguís el ejemplo de vida de Mi Hijo Jesucristo, es como alcanzareis la santidad en la Tierra y podréis pasar fácilmente al Reino de los Cielos al momento en que Yo os mande llamar al final de vuestra vida, de vuestra misión en la Tierra. Por eso os repito, el Conocimiento que se os da tiene que terminar en obras y así es como alcanzareis fácilmente la santidad de vida.
Gracias mis pequeños.

Quinto Misterio, Habla Dios Padre,
Sobre: Os necesito como corredentores de estos tiempos vuestra vida es importantísima para salvar muchas vidas.
Hijitos Míos, cuando sois realmente niños, cuando os sentís desamparados, aún siendo ya personas adultas, reconocéis vuestra impotencia para resolver muchos problemas que se presentan en vuestra vida.

Muchas cosas van a suceder en la vida del hombre a nivel mundial, si el hombre no entiende las lecciones que se le están dando y que todo lo que va a pasar se puede agravar si me seguís dando la espalda. Si no entendéis que solamente estando Conmigo podréis tener paz y armonía, tanto en vuestra vida interior, como familiar, como de pueblo, como mundial, si no entendéis esto, Mis pequeños, satanás va a causar problemas gravísimos entre todos vosotros.

Mis pequeños, os he dicho que éstos males que Yo voy a permitir en vuestra vida, serán para que primeramente, en humildad, reconozcáis vuestros errores y vuestros pecados pasados, que reconozcáis que os habéis alejado de la Fuente de todo Bien, que Soy Yo y repito Soy Fuente de todo Bien.

Todo Bien que tenéis en vuestra vida en lo material y el lo espiritual viene de Mí, vuestro Dios, todo mal que también tienes en vuestra vida, viene de vuestro enemigo, satanás, que no quiere que tengáis vosotros los Bienes que vienen de Mí, vuestro Dios, con los que Yo os consiento, porque sois Mis hijos, porque Yo os he creado para cuidaros, para que Me ayudarais en la redención del género humano.

Sí, Mis pequeños, es una tarea bellísima e inmensa el ser corredentores junto con Mi Hijo Jesucristo. No os imagináis, Mis pequeños, los regalos con los que Yo os colmo cuando regresáis al Reino de los Cielos, cuando realmente llevasteis una vida de ejemplo sobre la Tierra, que fuisteis realmente ésos corredentores que Yo quiero que seáis. No os imagináis, Mis pequeños, en estos momentos de la historia, de vuestra historia, cuántas almas Me están dando la espalda, cuántas almas viven en pecados graves y no les interesa limpiar su alma, no les interesa enmendar su vida. No os imagináis, Mis pequeños cuántas almas se están condenando porque ya no creen en la vida futura, ya no creen en una vida espiritual que va a tener su premio o su castigo, de acuerdo a la vida humana que se os concedió para servirMe y, el hecho de que Yo os diga “para servirMe” es para que sirvierais a vuestros hermanos, para que les ayudarais a ellos a alcanzar su salvación eterna, después de que vosotros mismos os hubiereis llenado de todos Mis Bienes espirituales y compartierais con ellos. Es lo que vosotros aceptasteis con gran agrado en vuestro corazón.

No os imagináis, Mis pequeños, cuánto dolor tiene Mi Corazón, porque es una gran mayoría las almas que están viviendo en la obscuridad espiritual, que no quieren abrir sus ojos, espiritualmente hablando, que no quieren tener ningún compromiso de vida para Conmigo, vuestro Dios y, al no tenerlo Conmigo, no lo tienen tampoco con sus hermanos y por eso estáis viendo tanta depravación, tanta degeneración espiritual, moral, humana a vuestro alrededor. Estáis viviendo peor que animales y digo peor que animales porque estáis vosotros escogiendo, con vuestro propio albedrío, vivir solamente con el instinto animal, con el instinto humano, y no estáis viviendo en lo espiritual, defendiendo vuestro cuerpo y vuestra alma, con la vida espiritual que debéis poseer y la que debéis dejar actuar en vuestra vida. Dejáis entrar en vuestra alma, en vuestro ser, vicios destructivos que destruyen vuestro cuerpo y vuestra alma y, como no tenéis soporte espiritual, llegáis a un camino sin salida, estáis en callejones sin salida porque no sabéis cómo acudir a Mí, os desesperáis, os quitáis la vida u os sometéis a grandes vicios, que os impiden ver la realidad de vida que debéis llevar.

Recordad Mis pequeños, que Soy vuestro Padre y vuestro Dios, que Soy la Misericordia Infinita, que perdono vuestros pecados, aún los más graves, pero debéis tener la confianza plena de venir a Mí y, con humildad, cuando os reconozcáis pecadores y pidáis Mi ayuda, la recibiréis de inmediato, eso no lo dudéis. Mis pequeños, Yo quiero la vida del hombre y no su muerte eterna, quiero que reaccionéis a tiempo, antes de que vuestro Juicio sea negativo para vosotros en vuestra eternidad. Os quiero devolver la vida que os di en un Principio, pero que vosotros la volviste muerte, por escoger el pecado en vuestra vida. Os quiero salvar, quiero que regreséis a vuestro Hogar Celeste y, os pido a vosotros, los que sabéis orar, los que estáis Conmigo, los que estáis luchando contra el mundo y todo aquello que satanás os regala, que pidáis por vuestros hermanos, por aquellos que no Me conocen y no Me quieren conocer, por aquellos que ya están en vicios tan grandes y tremendos que están desesperados, y que algunos de ellos quieren salir, pero no encuentran por dónde. Vuestra oración, de corazón, les puede dar Luz, Mis pequeños, para que encuentren el camino de regreso a Mí, dependo de vosotros, Mis hijos, Mis pequeños, los que estáis Conmigo, para la salvación de muchas almas. Os necesito como corredentores de estos tiempos, vuestra vida es importantísima para salvar muchas vidas. Entendedlo por favor y no desperdiciéis vuestro tiempo, que de ahora en adelante vuestra vida sea una vida de oración profunda, con la finalidad de salvar muchas, muchas almas para el Reino de los Cielos.
Gracias, Mis pequeños.