Mensaje de Nuestro Señor Jesucristo
16 de mayo de 2011
Jesús me llamó dentro de mi corazón y yo Lo atendí con gran alegría. Él me dijo:
Ven a Mi flor de trigo, quiero que escuches lo que te hablo y revela al mundo. Ven, Te daré a conocer lo que todos necesitan hacer con más urgencia.
Fuiste instrumento Mío en este tiempo, debes cumplir tu misión con mucho amor.
Ven. Alegrarás Mi Corazón hija, obedeciendo Mi Voluntad. Quiero que todos reparen las ofensas que Me hicieron y continúan Ofendiéndome hasta ahora.
Día y noche Me ofenden, principalmente en la noche porque gran parte vaga durante la noche usando las horas para pisotear la Gracia que Concedo.
Ven hija, tu Dios te llama.
Mi Señor y mi Dios, aquí estoy delante de Vos para Serviros. Soy toda Vuestra, sin ser nada, aquí estoy.
Primeramente Os pido perdón por mis pecados y Os pido, dadnos a cada uno de nosotros los medios para arrepentirnos de ellos y no pecar más. Haced de nosotros hijos mansos e humildes de corazón como Vos Sois.
Yo os amo, os adoro, os alabo, os bendigo, os glorifico, os rindo gracias por Vuestra inmensa Gloria en las Tres Personas de la Santísima Trinidad.
Hijita, hoy Te hablaré pocas palabras. Quiero que tú digas al mundo solamente esto:
Enderezáis vos, no os provoquéis más Mi Ira de lo que ya la has provocado. Vos no tenéis fuerza para Vencerme.
Voy a desnudar a la humanidad de toda su rebeldía y ella doblará las rodillas de una sola vez para Pedirme el perdón.
Mi Señor y mi Dios, sea hecha Vuestra Voluntad, pero pido a Vos, al corregirnos Señor, que nos des una oportunidad, dadnos de Vuestra Bondad, de Vuestra Misericordia. Pido a Vos para curarnos de todos los males que nos alcanzan, vístenos de Luz Señor, socórrenos para no perder el Cielo.
Hijita, Usaré Mi Misericordia para que todos encuentren la verdadera Felicidad. Debéis arrepentir de vuestros pecados cometidos hasta en la víspera del día en que os Enviaré al Consolador.
Quien no se arrepienta, no tendrá más parte Conmigo. Yo le daré lo que él se merece.
El día del Juicio que viene llegando, os enderezaré a todos antes de que Él llegue.
Mi Señor y mi Dios, Cordero de Dios que quitas el pecado del mundo, estamos en Vuestra espera, sea hecha Vuestra Voluntad, aumentadnos la fe, nuestra esperanza en la Salvación.
Hijita, haciendo lo que es de Mi Voluntad nada tendréis que temer todos vosotros, cultivéis Mis Enseñanzas y ámense los unos a los otros como Yo os he amado.
Quien ama obedece los Mandamientos y hace lo que Yo quiero que sea hecho sin desanimarse.
Ya no es necesario deciros mucho porque la tarde ya viene y después de ella es la oscuridad.
Mi Señor y mi Dios, Divino Rey, ¿cuándo Vos nos avisarás cuando ‘la tarde ya viene y después la oscuridad’ Podéis darnos claridad para que entendamos?
Hijita, la tarde es el último tiempo antes de la oscuridad. La oscuridad son las tinieblas que cubrirán al mundo por tres días. La tarde significa que es hora de prepararse para vencer el peligro de la noche.
El horario de la tarde es para procurar refugio, y para dejar lo que no da más tiempo para hacer después.
Entonces, antes de las tinieblas tendréis que arrepentiros de vuestros pecados o de lo contrario dormiréis con ellos y podréis recordarlos delante de Mi. Seréis juzgados según vuestras obras. Las tinieblas serán cuando el mundo menos lo espera. El que se arrepienta antes y Me pida el perdón, Yo lo perdonaré. El arrepentimiento tardío de nada vale.
Mi Señor y mi Dios, Vos Sois nuestro Salvador, no dejéis que ninguna alma se pierda, Ven a salvarnos.
Continuación del mensaje del día 16 de mayo de 2011
Hijita, haz ahora una oración por los pecadores, Yo quiero Salvar a todos, pero no todos están atentos.
Mi Señor y mi Dios, sea Vuestra Voluntad obedecida por nosotros. Aquí está mi simple oración.
Oración:
“Mi Señor y mi Dios, Corazón Santo digno de toda adoración, honra, alabanza y gloria. Vos que Sois el Divino Rey, ven a reinar sobre la tierra entera. Somos Vuestros Señor, salvadnos, Vos que moriste por nosotros en la Cruz, líbranos de todas las tentaciones y danos Vuestra Paz.
Dadnos Señor, santos pastores, para que nos lleven hasta Vos. Vuestro Amor es infinito, no existe amor mayor que el Vuestro, es Fuente que brota del Corazón del Padre, dadnos de beber de esta Fuente y seremos curados de todo lo que nos contamina.
Nosotros que hemos causado a Vos tantos sufrimientos, hoy nos humillamos y pedimos a Vos perdón, además de ellos pedimos a Vos la cura de todos los males del mundo, las guerras, las dolencias, el hambre, todos nuestros defectos, líbranos Señor de las catástrofes, las tragedias, los crímenes, de toda la violencia y de toda la furia de la naturaleza. Sopla sobre nosotros Vuestro Santo Espíritu, iluminando nuestras mentes y dándonos la Sabiduría, todos los Dones que necesitamos. Dadnos el derecho de vivir junto con nosotros Vuestro Reino y con Nuestra Madre María Santísima. Vos fuiste capaz de darnos Vuestra propia Madre como Madre nuestra también. Ella todo hace por nosotros, nos ama como si fuésemos nacidos de Ella. Ella sabe cómo fuimos culpados de Vuestra Muerte, que nos perdone y nos de Su gran Amor de Madre porque es la Criatura más pura que Dios creó.
Gracias Jesús, cuidad de nosotros. Amén.”
1 Credo, 1 Padre Nuestro, 1 Ave María, 1 Gloria
Hijita, tu rezaste bien y con amor, muchos frutos serían cogidos si todos rezaran en esta hora.
Ahora profetiza a Jerusalén Mi Iglesia, Mi pueblo.
Mi Señor y mi Dios, sea hecha Vuestra Voluntad, yo profetizaré, soy toda Vuestra.
La Profecía
“Jerusalén, Jerusalén, tu Dios te llama, permanece de pie y escucha lo que Él te habla o no tendréis más ayuda.
Escucha Jerusalén, tanto tiempo Te he advertido y tú no estás lista. Tú duermes y despertarás con la destrucción que caerá sobre ti. Nada más te diré hasta que tú te humilles y reconozcas que necesitas de Mí. Entrega tu vida en Mis Manos y Yo te salvaré, Yo Soy Dios, Soy el que Soy y tú eres Mi esposa, Voy a buscarte para vestirte de gloria. Yo te amo con Amor Eterno.”
Hija, ahora ve y lleva al mundo lo que te hablo. No temas nada, tienes Mi protección.
Mi Señor y mi Dios, sea hecha Vuestra Voluntad, gracias por Vuestro Amor por mí.
Hijita, te bendigo y bendigo a todos.
Yo Soy Dios, Soy el que Soy
Soy Jesucristo el Salvador del mundo.
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