Ago 03_04 No os distraigáis de vuestras tareas espirituales.

<><> <><> <><> <><>

Rosario. Temas: Os voy a ir conduciendo por esos caminos de Verdad y de Vida, de mucho trabajo y tribulación. Viven no en la libertad, sino en el libertinaje. Mensaje de Dios Padre y la Santísima Virgen María a J.V. Primer Misterio, Habla la Santísima Virgen María. Sobre: Os voy a ir conduciendo por esos caminos de Verdad y de Vida, de mucho trabajo y tribulación. Hijitos Míos cuando os He dicho vivid bajo Mi Amparo; el amparo de una madre nunca miente. Vivir bajo Mi Amparo, es vivir guiados por la Mano de vuestra Madre hacia el Corazón de Jesús, Mi Hijo. Vivir bajo Mi Amparo es protegeros contra todo aquello que os pueda dañar en cuerpo y alma. Vivir bajo Mi Amparo, es protegeros como Mi Pequeño Jesús, que lo protegía contra todo lo que había, siguiendo la Voluntad de Nuestro Padre en obediencia, en docilidad. Mis pequeños, tened esa plena confianza de que nada os faltará, ni a vosotros ni a vuestros hijos en estos tiempos, tiempos difíciles verdaderamente, pero vuestra mira deberá estar en el cumplimiento de lo espiritual. Nosotros os apoyaremos para que no os falte nada de lo material y no os distraigáis de vuestras tareas espirituales. Por eso os repito, Mis pequeños, vivid, vivid bajo Mi Amparo de Madre que os voy a ir conduciendo por esos caminos de Verdad y de Vida, de mucho trabajo y tribulación. No os preocupéis, Mis pequeños, Yo estaré con vosotros, Mi Hijo estará con vosotros, el Cielo entero estará con vosotros; en estos momentos vosotros sois instrumentos del Cielo, instrumentos preciados, porque no todos Nuestros hijos se van a dar para que Nosotros podamos trabajar a través de ellos. Por eso protegeremos a todos aquellos que con docilidad, con mansedumbre se hayan dado a su Dios. Gracias Mis pequeños. Segundo Misterio, Habla Dios Padre. Sobre: Viven no en la libertad, sino en el libertinaje. Hijitos Míos, la invitación a uniros al Sacratísimo Corazón de Mi Hijo y a Mi Inmaculado Corazón es para toda la humanidad. Pero están tan alejados, Nuestros Corazones están tan olvidados, que esto para muchos ya no significa nada. Solamente un compromiso, un compromiso que no quieren tomar. Viven no en la libertad, sino en el libertinaje, viven atacando a Nuestros Sagrados Corazones. La humanidad sigue ofendiendo a su Dios, la maldad va tomando su camino, la muerte, el pecado sigue cobrando víctimas. ¿Hasta cuándo, hasta cuándo entenderá ésta humanidad, éste Pueblo Mío, que sin su Dios no pueden vivir? Yo reprendía fuertemente al Pueblo Judío, cuando éstos se volcaban hacia la idolatría, se perdían en el pecado, se apartaban de Mis Mandamientos. Tenía Yo que estarlos reprendiendo continuamente, el hombre olvida pronto las Leyes que Yo les he dado. La Gloria, el Premio, el Reino, exige un sacrificio, una donación, una libre donación del alma; pero no quiere entender éste Pueblo Mío y tengo que seguir reprendiéndolo... ¿Por qué Mis pequeños no Me ayudáis a hacer las cosas fáciles? Cuando Yo quisiera consentiros, Amaros perfectamente, no con esa Misericordia, sino con un Amor sencillo, tengo Yo que usar Misericordia en estos tiempos para Salvar, cuando no debiera ser así, cuando debiera ser simplemente Amor entre los hijos y su Padre, El Padre y Sus hijos. Mis pequeños, Yo Mismo Me tengo que forzar a detenerMe, a detener Mi Justicia por Mi Misericordia, para no causar, permitir esos males sobre vosotros. El demonio quiere terminar con vuestra vida, quiere terminar con todo lo que Yo He creado; Yo tengo que estar protegiendo a Mi Pueblo, que sois todos vosotros; pero ni aún así os dais cuenta de todo Mi esfuerzo, seguís adelante y en lugar de agradecer seguís cayendo en el pecado. Orad Mis pequeños por aquellos que sabéis que están cometiendo grandes faltas en la humanidad, que son vuestros hermanos, debéis defenderlos, debéis protegerlos, porque sois hijos de Un solo Padre, hermanos todos. Orad fuertemente por ellos, ofreced todo lo que podáis por ellos, los Amo a todos, a todos vosotros os Amo, y estáis en Mi Corazón, aún cuando se condenan, están en Mi Corazón. Entended Mis pequeños, o tratad de entended Mi Amor hacia vosotros, y el Amor necesita ser recíproco. Orad Mis pequeños, y agradeced por ellos, vivid por ellos, entregádMelos a ellos y vosotros mismos, tratad de llevar una vida recta y amadMe por lo que ellos no Me aman. Gracias, Mis pequeños.