martes, 1 de junio de 2010

MENSAJE DE NUESTRO SEÑOR JESUCRISTO A SU HIJA AMADA, LUZ DE MARÍA.



31 DE MAYO 2010


Amadísimos hijos:


¡PUEBLO MÍO, AMADO PUEBLO MÍO! LES MANTENGO EN LA PALMA DE MIS MANOS.
No decaigan ante la dureza de la humanidad que camina sin rumbo hacia su propio destino. No teman ser incomprendidos por sus hermanos, manténganse firmes, no cedan terreno al pecado.


Aléjense de lo mundano, no sean cautivos de la supremacía de lo que lo que el hombre ha creado, que es finito y superfluo.


SON MIS HIJOS, POR USTEDES ME ENTREGUÉ PARA REDIMIRLES Y MANTENERLOS JUNTO A MÍ.


La humanidad continúa atada a lo mundano, no miran más allá de donde la vista corporal les permite. Es esa la razón por la cual no atienden Mis llamados a la conversión. Viven apegados a lo mundano, esto les dificulta el camino correcto. El hoy en que viven es pasajero, Yo les traigo la vida eterna.


NO EN VANO MIS PALABRAS SON APREMIANTES EN ESTE TIEMPO DE MISERICORDIA, DE SALVACIÓN, ANTES DE QUE EL DÍA CAIGA.


Hijos: no continúen siendo cautivos del enemigo del alma. La humanidad vive dominada por el espíritu de perversión. Esta cuota tan alta de pecados, se vierte sobre la Tierra que se estremece desde sus entrañas, en su búsqueda incesante de reencontrarse en Mi sintonía. Las profecías han confluido sobre la humanidad en esta generación que clama ser purificada.


PUEBLO MÍO: PERMANEZCAN ALERTA. Mi Iglesia está siendo socavada por los enemigos que la atacan solapadamente, mientras ustedes viven sin tomar con la seriedad requerida Mis llamados y los de Mi Madre.


Una nube se acerca al hombre sin que eleven la mirada al Cielo. La lucha de poder del hombre contra el hombre asombrará al mundo. La crudeza del terrorismo se dejará sentir, la inmoralidad, y la degeneración forman parte de los actos que avivan la náusea de la Tierra que continuará limpiándose, y en este acto, el hombre sufrirá la inclemencia de la naturaleza por todo el orbe.


CAMINAN SIN OBEDECER. Ante tanta negación, cuanto Mi Madre y Yo les hemos revelado permanece ante ustedes para que al mirarse la conciencia ante su realidad, sin ocultar nada, enmienden la vida y salven el alma. (1)


(1) Nuestro Señor se refiere al AVISO.




CUANTO HA SIDO REVELADO SE HA ADELANTADO PARA BIEN DE LOS MÍOS.




Pueblo Mío: deben contrarrestar el mal recibiéndome cada día, orando; y mediante la concordancia de vida, siendo testimonios vivos de Mi Palabra en los actos diarios.


Deben reparar los constantes pecados alimentados por una humanidad aturdida por el maligno, que se apodera fácilmente de los hombres, los que se han tornado frágiles al vivir sin Mí.


Son Mis hijos, les llamo, no desatiendan Mis llamados.


Su Jesús.

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