martes, 1 de junio de 2010

Mensajes de Nuestra Señora, Anguera - Brasil. Mayo 24 y 25

25/05/2010
Mensaje de Nuestra Señora.....No:3324


Queridos hijos, Yo soy vuestra Madre y vine del cielo para conduciros a mi hijo Jesús. Abrid vuestros corazones al Amor y seréis transformados. Sed mansos y humildes de corazón. Llevad a todos mis llamados al mundo, pues deseo la conversión de todos mis pobres hijos alejados. No perdáis vuestra esperanza. Cuando sintáis el peso de la cruz llamad a Jesús. El vendrá a vosotros y seréis victoriosos. La humanidad se empobreció espiritualmente porque los hombres se alejaron de Dios. Sufro por causa de aquellos que caminan como ciegos guiando a otros ciegos. Volveos a aquel que es vuestro bien absoluto y conoce a cada uno de vosotros por el nombre. Aún tendréis grandes tribulaciones. La humanidad beberá el cáliz amargo del sufrimiento antes de la Gloriosa venida de Mi Hijo Jesús. El Señor transformará la tierra y los justos vivirán felices. Os pido que hagáis el bien a todos y en todo procuréis imitar a Mi Hijo Jesús. En el triunfo definitivo de Mi Inmaculado Corazón mis devotos recibirán la recompensa de los justos. No retrocedáis. Quedad con la verdad. Sed defensores del Evangelio de Mi Jesús.
Yo estaré a vuestro lado. Coraje. Este es el mensaje que hoy os transmito en nombre de la Santísima Trinidad. Gracias por haberme permitido reuniros aquí una vez más. Yo os bendigo, en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén. Quedad en paz.

24/05/2010
Mensaje de Nuestra Señora.....No:3323

Queridos hijos, Mi Jesús es la Luz del mundo y solamente Él es vuestro único y verdadero Salvador. Confiad en Él que ve en lo oculto y os conoce por el nombre. No os desaniméis. Dios está a vuestro lado. Coraje. Nada podrá contra vosotros cuando andáis con el Señor. Doblad vuestras rodillas en oración. La humanidad está enferma y necesita ser curada. No os alejéis de
la verdad. Sois importantes para la realización de mis planes. Dad lo mejor de vosotros en la misión que el Señor os confió. Yo soy vuestra Madre y soy incansable. Vengo para mostraros el camino. No quedéis estancados. Vuestra vida pertenece al Señor. Sois los elegidos de Dios y Él espera vuestro SÍ sincero y valeroso. Italia beberá el cáliz amargo del dolor. Un hecho asombroso acontecerá en Roma y se repetirá en el norte de Francia. Yo soy vuestra Madre dolorosa y sufro por aquello que os espera. Rezad mucho delante de la cruz. Quién está con el Señor jamás sentirá el peso de la derrota. Adelante Este es el mensaje que hoy os transmito en nombre de la Santísima Trinidad. Gracias por haberme permitido reuniros aquí una vez más.
Yo os bendigo, en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén. Quedad en paz.

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