domingo, 8 de agosto de 2010

Nuestra Señora de las Rosas, María Auxilio de Madres

5 Agosto 1976 - Víspera de la Fiesta de la Transfiguración de Nuestro Señor



Verónica - El cielo estaba negro anteriormente, pero hay un bello color azul profundo que se forma todo alrededor y arriba de la estatua de Nuestra Señora. Hacia la derecha y justo arriba de la estatua de Nuestra Señora, el cielo se pone muy claro. No hay estrellas, pero el azul es tan bello - no hay manera cómo poderlo explicar con palabras humanas, la brillantez de la luz que ahora se forma directamente en el centro del círculo azul de luz, que aumenta muy intensamente en brillantez.

Nuestra Señora se viene del centro de la luz. Ella tiene puesta una bella túnica blanca resplandeciente con una banda de un azul profundo. La banda está amarrada; es más como una banda que un cinturón. Está amarrada muy holgadamente, y cae al lado derecho de Nuestra Señora, el cinturón largo como una banda. Nuestra Señora tiene Su Rosario ahora en Sus manos. Ella está rezando con Sus manos juntas, y el Rosario cae sobre Sus dedos. No puedo ver el cabello de Nuestra Señora, porque Su cabeza está inclinada muy baja, Ella está rezando. Ahora Nuestra Señora se acerca más y levanta Su cabeza.

Nuestra Señora - "Hija Mía, Yo también estoy en profunda oración y meditación. Debe de haber una constante vigilia de oración.

NI LA RESPUESTA NI LA CAUSA...

"Mucho que He dado en forma de dirección a Mis hijos en el pasado os está llegando. Hay un gran desafío de la ciencia en vuestra ciudad de Filadelfia, pero sabed, hijos Míos, que vuestros hombres de ciencia no encontrarán la respuesta, ni la causa. En esta guerra de los espíritus, mucho asombro será registrado en las mentes y en los corazones del hombre. Es de esta manera que el Padre Eterno planea regresar a muchos al redil. No podéis comprender, en vuestra naturaleza humana, los caminos del Padre Eterno, hijos Míos.

“Si Nuestros obispos continúan en sus errores, si Nuestros obispos no pueden reconocer los signos de los tiempos, y continúan rápidamente hacia el abismo y llevando a muchos con ellos, si ellos no - en su arrogancia y orgullo - regresan y abren sus corazones y mentes a la verdad, bueno, hijos Míos, habrán muchos castigos enviados a la humanidad y cada uno tiene que ser más severo, hasta que estos castigos envuelvan al mundo entero.

GRAN PUDRIMIENTO DE COSECHAS

"Oh, hijos Míos, en vuestra nación, los Estados Unidos, habrá un gran pudrimiento de las cosechas. Hijos Míos, preparaos ahora para lo que ha de ser.

“Hace muchos años, hijos Míos, Yo dí muchas advertencias de naturaleza similar a la humanidad. Algunos escucharon, y otros escogieron burlarse y desechar Mis advertencias. Verdaderamente soy vuestra Madre dolorosa. He venido a vosotros como una Mediadora entre Dios y el hombre para daros cada oportunidad, hijos Míos, de evitar a lo que rápidamente vais cayendo - un camino de destrucción.

“Cuando, como nación, os habéis entregado a la profanación, la inmoralidad, y volteáis vuestras espaldas a vuestro Dios, y negáis Su divinidad, y negáis Su misma existencia entre vosotros, hijos Míos, el Padre Eterno no tiene otro recurso sino castigaros. Sería más ventajoso, hijos Míos, si vuestros hombres eruditos se pusieran a buscar la verdad. Y ¿qué es la verdad? hijos Míos, sino el conocimiento que os ha sido dado por Dios el Padre, y no el conocimiento del hombre.

“Todas las principales naciones de vuestro mundo, hijos Míos, se preparan para la guerra. Todas claman paz, paz, y colocan una máscara delante de sus intenciones a medida que se preparan para la guerra. Vuestra nación, os prometo, como os He prometido en el pasado, recibiría Mi protección. América la Bella se ha mancillado con corrupción. América, la una vez bella, ha tomado un nuevo líder, y su nombre es satanás. Una nación que ha desechado un verdadero valor moral, una nación que ha abandonado a su Dios para buscar más y más lo material y poder sobre las vidas de los hombres, esta nación ha sembrado las semillas para su propia destrucción.

“Oh, hijos Míos..."

Verónica - Nuestra Señora extiende Su mano, así, y Sus cuentas caen sobre Su mano izquierda, hacia abajo.

Nuestra Señora - "Hijos Míos, vengo de nuevo, no realizando en el pasado que este estado del mundo sería repetido como en el pasado. La humanidad no aprende de su pasado sino que repite sus errores con más ferocidad, más degradación y libertinaje. Muchos en vuestra nación y en las naciones de vuestro mundo están caminando con cuerpos vivos y almas muertas.

DISTURBIOS DE LA NATURALEZA CONTINUARÁN

"Los disturbios en la naturaleza, hijos Míos, continuarán. Vuestra nación experimentará un gran disturbio. Despertad ahora y rezad una constante vigilia de oración.

LOS PASTORES TIENEN QUE DETENER LOS CAMBIOS

"Pastores, aquellos quienes tienen a su cuidado Nuestras ovejas, tenéis ahora que detener estos cambios que buscáis en la innovación, porque estáis destruyendo las almas jóvenes y esparciendo a Nuestras ovejas.

“Os repito, hijos Míos, el gran II Concilio del Vaticano en Roma, las promesas fueron grandes, pero satanás estuvo presente entre vosotros y él los jugó como piezas de ajedrez.

"Fuisteis dados una base de Fe basada en Tradición y conocimiento de los profetas. No podéis iniciar una nueva religión, porque os llevará a una religión que no es de Mi Hijo, que no tendrá Su verdadera base, y tomaréis el Cuerpo de Mi Hijo y lo difamaréis, ya no dando el conocimiento de su Divinidad. ¿Que clase de aventuras contaminadas estáis planeando, oh vosotros de poca fe? ¿Qué será de vosotros? Los Sombreros Rojos han caído y los Sombreros Púrpura están siendo mal guiados. ¡Ay, ay, ay de los habitantes de la tierra!

“Hija Mía, no disminuyas en tu trabajo debido a la opinión del hombre. Sabe, hija Mía, que no eres tú quien habla, sino la voz del Cielo.

“Permanece en tu hogar, no permitiendo que ninguno entre. Tú también, hija Mía, debes mantener una constante vigilia de oración. No siempre será necesario que repitas las oraciones aprendidas, hija Mía, sino que hables calladamente desde tu corazón al Padre Eterno y a Mi Hijo.

“Durante la gran tribulación, hijos Míos, muchos seréis removidos de vuestra tierra. Comprenderéis a su debido tiempo.

“Debéis continuar rezando mucho por vuestros sacerdotes. Tenéis que continuar rezando por vuestros líderes de gobierno. Rezad para que ellos traigan a vuestros hogares el conocimiento de vuestro Dios, ya que muchos rápidamente ahora persiguen un curso de destrucción, no solo del cuerpo sino del alma.

“Mi Corazón ha llevado una carga de tristeza debido a la manera en que Nuestras monjas dedicadas se comportan. Oh mal guiadas almas de Mis hijos, ¿qué será de vosotras? Como esposas de Mi Hijo, habéis jurado una vida de pureza y dedicación. ¿Habéis olvidado vuestros votos a medida que os habéis entregado al mundo, mal guiadas por el humanismo y vuestro rumbo moderno? Ha habido, y no habrá cambio en el Cielo. El Padre Eterno os ordena que mantengáis vuestros cuerpos puros, ya que son el templo de vuestro espíritu.

“En la causa de la obediencia, pastores y Nuestras monjas dedicadas, recordad esto: no podéis ser obedientes a uno quien ha difamado el hábito, a uno quien ha desechado su fe, a uno quien va hacia delante como destructor de almas. El rabat es el maestro de la vida, pero no seáis engañados por los que mancillan estos hábitos.

“El 666, hijos Míos, los agentes del infierno, han entrado sobre el mundo. El 666, los agentes del infierno, han tomado posiciones principales ahora en la Ciudad Eterna de Roma. ¿Y qué debéis hacer? Buenas palabras en una boca cerrada es como colocar carne sobre la tumba de un muerto. Removeros de los que son destructores del alma, ya que no tenéis nada en común con ellos. ¿Qué hay entre, o igual a, la luz y la oscuridad? Qué tenéis, vosotros quienes habéis ganado el conocimiento y retenido vuestra fe y permanecido puros de espíritu, ¿qué tenéis en común con las fuerzas del mal? Evitad toda ocasión de pecado. No participéis de su pecado, ya que las de la misma calaña harán lo mismo.

“Hijos Míos, tenéis que recordar todas las direcciones que os He dado en el pasado para prepararos para el Aviso. Tenéis que revisar en vuestro tiempo libre todas las direcciones del Cielo. Cuando la batalla haya llegado a su fin, hijos Míos, todos habréis sido probados."

Verónica - Nuestra Señora ahora pone Su Rosario, así, enrollándolo en Su mano y extiende Su crucifijo, Su bello crucifijo dorado, así, y Ella hace la señal de la cruz: En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo.

Nuestra Señora va ahora hacia nuestro lado derecho, y se inclina y extiende el crucifijo: En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo.

Ahora del lado derecho, del primer árbol, San Miguel viene hacia delante. ¡Oh, él es tremendo en tamaño! El cubre todo el cielo. Y ahora trae su balanza, la balanza, la balanza dorada, en su mano derecha y su espada larga, una espada como lanza, con la punta señalando hacia arriba.

Y Nuestra Señora ahora cruza el cielo. Ella se detiene justo arriba de Su estatua y hace la señal de la cruz: En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo.

Nuestra Señora ahora se detiene directamente arriba del árbol a la izquierda, el árbol grande, y extiende el crucifijo: En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo.

Nuestra Señora - "Os bendigo a todos, hijos Míos, por Mi Hijo, por el Padre Eterno, y el Espíritu Santo quienes están entre vosotros."

Verónica - Sí.

Nuestra Señora - "Ahora, hija Mía, puedes sentarte. (Pausa) Sólo unos pocos serán salvados. Así como lo fue en el tiempo de Noé, así será ahora en vuestro tiempo. Las personas estarán comiendo y bebiendo y divirtiéndose, y casándose y dándose en matrimonio, y divorciándose. Las personas irán de aquí para allá, buscando conocimiento y lo material. Reconoced, hijos Míos, los signos de vuestros tiempos. Los pergaminos han sido desenrollados; las páginas dan vuelta rápidamente. Todo tiene que llegar a pasar.

“Repito, hijos Míos, el mundo no será destruido. Es la promesa del Padre Eterno que nunca más será el mundo completamente destruido, pero lentamente todo será emparejado. Las fuerzas del mal irán por su curso, ya que será una medida de prueba para la humanidad. Todo lo que está podrido caerá.

“Muchos ahora siguen como ovejas al matadero. Ellos viajan con sus líderes, ni pensando ni importándoles, ni razonando la verdad. Verdaderamente son, hijos Míos, como patos que van corriente abajo rápidamente y son atrapados en un remolino de su propia destrucción. Es un muy desastroso juego de seguir al líder. ¿Y quiénes son los líderes, hijos Míos? Son almas que han sido tomadas por satanás, y ahora están bajo su dominio. Rezad por ellos. Hasta que ellos no dejen sus cuerpos humanos, todavía pueden ser recuperados. Rezad por su conversión.

LA MISA TODAVÍA ES VÁLIDA

"Hija Mía, tú y todos los que se han reunido a través de vuestro mundo como candelas para llevar la Luz a través de la oscuridad, aceptarán mucho sufrimiento a medida que ven las fuerzas del mal reuniéndose. Mi Hijo está siendo recrucificado por los Suyos. No perdáis fe ni esperanza; no abandonéis las iglesias de Mi Hijo a través de vuestro mundo, hijos Míos. La Misa, el Santo Sacrificio, todavía es válida.

“No juzguéis vuestra Iglesia, hijos Míos, por las normas del hombre, ya que un sacerdote legalmente ordenado, un hombre quien ha sido legalmente ordenado, será empleado por el Padre Eterno, a través del Espíritu, para llevaros a Mi Hijo, Su Cuerpo y Su Sangre, lo cual El ahora está derramando en tristeza por vosotros. Todos los que viajan por este peregrinaje de la vida, permaneced con Mi Hijo en los tabernáculos de vuestro mundo, porque El será, y es, el verdadero Pan de Vida para vosotros.

“Padres de familia, guiad a vuestros hijos, ya que sufriréis mucho si descuidáis esta obligación. Guiadlos no en los caminos del mundo, sino en el camino de vuestro Dios."

Verónica - Ahora se vuelve muy oscuro directamente arriba de la estatua de Nuestra Señora. Y Nuestra Señora va hacia el lado izquierdo, directamente arriba del árbol, y toca Sus labios ahora, así.

Nuestra Señora - "Continuarás, hija Mía, con tus oraciones de expiación y leerás las fotografías y esperarás la venida de Mi Hijo." (Pausa)

Verónica - El cielo se abre directamente arriba de la estatua de Nuestra Señora. Todo el cielo ahora es una cascada. Es un rosado profundo, pero los rayos rosados salen como un abanico desde el centro de esta luz brillante. No hay manera alguna cómo explicarlo con palabras humanas. Son rayos rosados, rosados, en todas las direcciones, directamente hacia afuera de la circunferencia, alrededor de la circunferencia de la luz.

Ahora directamente en el centro, puedo ver que Jesús viene a través de la luz. No tiene nada en Sus pies, Sus pies están descalzos. Y El tiene puesta una túnica color crema. Esta noche, puedo ver muy pronunciadas las Llagas de Sus pies, directamente en Sus empeines, en Sus empeines. Ahora Jesús extiende Su mano, la mano derecha. Significa permanecer en silencio y escuchar.

Jesús - "Hijos Míos, no deseo agregar al mensaje de Mi Madre. Os aseguro, ningunas otras palabras podrían enfatizar la precisión y la urgencia de Su Mensaje a Sus hijos. Muchas advertencias han sido dadas a la humanidad en el pasado, y muchas son dadas ahora.

DETENER LA PROFANACIÓN...

"Despertad de vuestro sueño, Mis pastores. Los pastos son ricos, pero las ovejas se adelgazan. La responsabilidad más grande por la destrucción de almas la pongo sobre los pastores. Doy justa advertencia a los que están en comando, en el rango más alto en Roma, os doy justa advertencia como vuestro Dios, que el Cielo ha establecido un tiempo y una hora para detener la profanación dentro de Mi Iglesia. Mi Madre implora constantemente por una extensión de tiempo para la humanidad para expiar los pecados del hombre."

Verónica - Jesús señala hacia Su lado derecho, nuestro lado izquierdo, y allá en el cielo se forma una enorme cruz negra, un signo muy lúgubre.

Jesús - "Sí, hija Mía, una cruz muy pesada es colocada sobre el mundo. El hombre no puede comprender en su naturaleza humana, el camino del Padre Eterno, y el hombre no se esfuerza por comprender. El ya no pregunta ni busca la gracia para conocer lo sobrenatural y el camino al Cielo. Muchos venderán sus almas para llegar a la cima. Pero os aseguro, hijos Míos, que todos y cada uno dejarán esta tierra en la manera como la entraron, sin nada material y solamente un tesoro almacenado en el Cielo, o destruido sobre la tierra, y un alma condenada al infierno o largos años terrenales en el Purgatorio.

“Hijos Míos, el 666, las fuerzas de satanás, han acelerado el mal entre vosotros. Los que han escogido vender sus almas reunirán ímpetu e irán rápidamente al abismo. La tristeza más grande ahora en el Cielo es el conocimiento que el 666 se ha establecido entre los que mandan en Roma. Yo, vuestro Dios y vuestro Juez eterno, os doy la orden, la dirección de regresar ahora y restaurar Mi Casa mientras hay tiempo. Yo planeo en el futuro venidero, venir entre vosotros y enderezar Mi Casa.

“Muchas pruebas y una gran tribulación serán dadas a la humanidad para limpiar vuestro mundo, la tierra, del mal que el hombre ha permitido entrar sobre sí mismo. Toda y cada alma será juzgada por sus comisiones y omisiones sobre la tierra. Muchas almas están cayendo rápidamente al infierno. Y no remováis de entre vosotros el conocimiento y la verdad de la existencia del infierno. Es un lugar de condenación eterna y destierro. El Purgatorio es un gran sentido de pérdida y sufrimiento de destierro, pero aliviado por el conocimiento de un fin que llevará al Cielo.

“El camino, hijos Míos, al Reino eterno es uno de prueba y sufrimiento, y os digo esto porque ahora estos días de prueba están sobre vosotros, y todos los que vienen sobre el camino al Reino eterno en el Cielo llegarán a las puertas a través del sufrimiento.

“Todos tenéis que rezar una constante vigilia de oración en vuestra nación y en las naciones a través de vuestro mundo. Estáis rápidamente acercándoos a una conflagración mayor en que la pérdida de vida será tremenda y más allá de la comprensión humana, tan grande será la destrucción.

MUCHOS SIGNOS DE UN DIOS ENOJADO

"Como os He prometido, el hombre recibirá un gran Aviso. Durante el intervalo, muchos signos de una Dios enojado aparecerán ante vosotros, dándole a cada alma la oportunidad de hacer enmiendas con expiación y sacrificio.

“Cada alma que ha llegado, que ha llegado a la edad de razonamiento tiene que dar un buen ejemplo de fe, modestia, pureza de propósito, y dedicación a su Dios. No habrá ningún compromiso de la Fe en Mi Iglesia. No habrá ningún compromiso con el mundo, ya que Mi Reino no es de vuestro mundo. Mi Reino es eterno. Mi camino no es el camino del mundo.

"Tenéis ahora que purificaros de la contaminación que habéis permitido entrar a Mi Iglesia. Enderezad el mal, restaurad Mi Casa. El Padre Eterno es muy misericordioso en Sus tratos con una generación degenerada. El es sufrido y misericordioso, pero el tiempo rápidamente se termina. Os digo esto no para poner miedo en vuestros corazones, sino para daros una manifestación de hechos. Tenéis todos que trabajar, rezar, y establecer el camino por delante, por medio de un ejemplo. Iluminad este camino con vuestro ejemplo, para que a otros se les pueda dar la Luz."

Verónica - Ahora Jesús extiende Su mano, así, y hace la señal de la cruz: En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo.

Hace mucho viento, y a medida que Jesús cruza el cielo ahora, el cielo - El simplemente se desliza - Su capa ondea a Su alrededor. Y ahora El se inclina - El está del lado izquierdo - y hace la señal de la cruz: En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo.

Nuestra Señora viene desde atrás del árbol a la izquierda, y sigue a Jesús al cruzar el cielo. Y San Miguel está a unos pocos pasos atrás de Nuestra Señora, y él tiene la balanza y la lanza. Ahora Jesús se ha ido, se ha ido al lado derecho, y El se inclina y hace la señal de la cruz: En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo.

Jesús - "Continuad con vuestras oraciones de expiación, hijos Míos. Mantened una constante vigilia de oración, y proteged las almas de vuestros hijos con un buen ejemplo."

Verónica - (Reza el Credo)

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