martes, 24 de enero de 2012

Ciudadela Mía, les he llamado para anunciarles Mi Regreso. V.V.D.




Asunto: Mensaje del 7 de febrero de 2002

 
El siguiente Mensaje, recibido por Vassula, ha sido distribuido a un
número restringido de personas. Ahora, Vassula ha dado permiso para que
el mismo sea distribuido ampliamente.


Mensaje dado a Vassula, el 7 de febrero de 2002.
"Ciudadela Mía, les he llamado para anunciarles Mi Regreso. Les he
llamado para revelarles Mi Insondable Misericordia hacia todos Mis
Hijos, que todavía se encuentran en la apatía, y en su propio mundo de
indiferencia hacia Mis persistentes llamados al arrepentimiento. Mis
llamados no han sido escuchados. El mundo, ahora, se está arrastrando,
más profundamente, en el lodo del pecado y en la sombra de la muerte. Mi
semilla está muerta por falta de irrigación. Muchos de Mis Pastores Me
han fallado, arrastrando con ellos, a millones de almas, en el abismo y
en la perdición. ¿Puede alguien decir: "No hemos sido advertidos, no
hemos visto ninguna señal celestial?". Y ellos continúan viviendo para
sí mismos....

Esta generación se ha vuelto muerta a Mi Palabra y prefiere vivir para
Satanás, que les da todo lo que se opone a Mi Ley de Amor. Libertad,
ellos la llaman, pero en realidad, son cautivos del Maligno. Ahora, cada
hombre está equipado para la guerra; las tinieblas están dominando al
mundo; sus corazones, que son viles y se encuentran habitados por toda
clase de espíritus malignos, están solo motivados hacia el Príncipe de
las Tinieblas.

Les he dado, a todos, tiempo y ocasiones para deshacerse de la maldad y
de su vivir sin Dios, y reflejarse en Mi Gracia en estos tiempos de
Misericordia. Incesantemente, por ordenes Reales, les he desplegado en
el Cielo, milagrosos prodigios para revivir su fe, pero muchos de
ustedes, especialmente en los Estados Unidos, después de haber sido
alentados a caminar en el camino de las virtudes que los conducen a Mí y
a la Vida Eterna, se han vuelto en Mi contra, y en contra de Mis
enviados, que son los portadores de Mi Palabra y, con desprecio, Me han
rechazado. Tanto los que están en lo alto, como en lo bajo, han mostrado
sus dientes para destrozar esta Obra.

Mi Reino Imperial está a sus puertas, pero ¿están listos para
recibirme?. Con generosidad y con prodigalidad Real, les he preparado un
Banquete de alimento espiritual para revivir su espíritu. Cuando estuve
ahí (Jesús quiere decir, en los Estados Unidos de América), esperándolos
para alimentarlos con Mi Propia Mano, para salvarlos de la muerte,
rehusaron venir a Mí. Por lo tanto, considerando su renuencia a una
verdadera metanoia, y que ustedes han mostrado, en cambio, hostilidad
hacia Mis advertencias, las pasadas escenas de lamentos que ocurrieron,
son nada, en comparación a las mañanas dolorosas que se les avecinan,
mañanas dolorosas que serán atraídas por su propia mano. Su nación se
rige en completa oposición a todas Mis Leyes de Amor que difieren por su
bizarro sistema de leyes. Leyes que cometen los crímenes más atroces, al
punto de poner en peligro, no solo la tierra, sino también, la
estabilidad del cosmos entero.

Muchas veces, he sometido Mi Cetro, incluso a los seres que no existen.
Hoy, con pena, veo desde lo Alto, cómo sus proyectos se volverán contra
ustedes mismos. El mundo ya está probando los frutos de su propio curso,
provocando que la naturaleza se rebele, con convulsiones, atrayendo
sobre ustedes desastres naturales, sofocándolos con sus propios planes.
Los he llamado, desde hace años, pero solo muy pocos lo han advertido.
Generación, esta purificación, que ahora es como un azote sobre ustedes,
atraerá a muchos hacia Mí, y aquellos que han desdeñado Mis
Advertencias, regresarán a Mí en su aflicción. Luego, cuando todas estas
cosas ocurran, cuando cada ser que no existió vuelva a existir, prenderé
la Tierra en fuego y los libraré del azote.

Cuando Dios habla, Su Voz estremece la Tierra. Mi Reino pronto estará
con ustedes porque Mi Visitación Divina está próxima, y todos los que
han sido llamados dar testimonio, abiertamente, a cada habitante de esta
Tierra, ya no serán más reprimidos, ya que la gente será como un suelo
sediento, anhelante del Rocío de Mis Palabras, y ellos serán testigos
de la Obras del Supremo Dios Trino, al que no han conocido antes, ni
visto con el ojo de su alma.

Rueguen al Cielo, que este tiempo de purificación no sea tan duro como
el de Sodoma y Gomorra.

Mi Iglesia será renovada".

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