Ene 26_11 Estáis en el periodo de purificación mundial para prepararos para la 2a. Venida de Mi Hijo |
Rosario vespertino Temas:
Mensaje de Dios Padre y Nuestro Señor Jesucristo a J. V. Primer Misterio, Habla Dios Padre, Sobre: Quiero ver acción de parte vuestra, porque vivís pasivos en vuestra vida espiritual. Hijitos Míos, estos son tiempos en que os debéis cuidar unos a los otros, porque satanás está tratando de destruir vuestras almas y vuestro mundo. Os digo todo esto, Mis pequeños, para que lo den a conocer a los cuatro vientos, a todos vuestros hermanos, al mundo entero. Muchos de vuestros hermanos están muy distraídos en sus cosas, al grado que no se dan cuenta de lo que está sucediendo realmente a vuestro alrededor. Ciertamente están viendo los desastres alrededor del mundo, pero se les hace normal todo esto, cuando ya os he explicado que esto se va a ir agravando día a día, porque estáis en el periodo de purificación mundial para prepararos para la Segunda Venida de Mi Hijo. Satanás está tratando de destruiros, porque no quiere que vosotros gocéis lo que él perdió. Conoce perfectamente vuestras debilidades y especialmente, la debilidad que tenéis de la carne, la impureza. Estáis viendo ahora cómo se está dando éste pecado entre vosotros, muy gravemente. Ya no os respetáis los unos a los otros. Los bebés, la gran mayoría que están naciendo ahora, vienen de uniones pecaminosas, no consagradas por el Sacramento del Matrimonio. Os distraéis malamente con toda esta ola de pornografía y sexo que se está dando por todos lados y así, satanás está haciendo que la carne, vuestra carne, la que debiera estar dominada por el espíritu, esté liberada y de esta forma os pone en contra Mía. Esto lo podéis ver por todos lados, Mis pequeños y cómo, desde la juventud, están cayendo gravemente en este pecado que los aparta tanto de Mí. En una familia os cuidáis como hermanos que sois y protegéis vuestro hogar de las maldades que puedan entrar a vuestro hogar, siempre y cuando viváis bajo Mis Principios y bajo el Amor que Yo os he pedido que viváis, pero ciertamente hay hogares, ya destruidos, en donde ya no se vive en virtud y, desgraciadamente, desde estos hogares, desde el seno familiar, ya destruido, se empieza a vivir la maldad que luego se buscará en las calles. Os repito, Mis pequeños, satanás conoce vuestras flaquezas y os está llevando hacia ellas. Ciertamente estos pecados, antes se vivían en pequeños grupos, porque siempre han existido, pero ahora podéis constatar que es mundial, éste y otros pecados que os están llevando a una separación de Mí. Cuando os distraéis con esto y le dais al cuerpo lo que el cuerpo quiere, vuestra espiritualidad pierde fuerza, y eso es lo que quiere satanás, que os distraigáis con lo que el cuerpo os pide, para que no os podáis defender de sus ataques espirituales, por eso, ahora estáis viendo cómo las Iglesias se van quedando vacías, cómo no hay oración suficiente en la Tierra para poder vencer a satanás y a sus ataques. La naturaleza caída os ataca, porque no hay suficiente oración y satanás os manipula para que os ataque. La destrucción familiar la tenéis, prácticamente, en todos lados, porque no hay oración, porque ya no vivís buscando la unión de vuestra familia. A los primeros ataques y cuando os enojáis, lo primero que queréis, es separación y esto no puede ser, Mis pequeños, si algo os interesa mucho, lucháis por ello, pero ahora os ha llevado satanás a no luchar por lo que queréis, porque ya no tenéis principios bien arraigados ni lucháis por vuestros ideales. Se os hace muy fácil destruir un Matrimonio, una familia, una amistad, una unión fraterna. Ya no queréis luchar, satanás os ha vencido y no os queréis dar cuenta y todo esto sucede porque no hay espiritualidad suficiente ya en vuestra vida, no hay oración, os repito. ¿Cómo os queréis defender de los ataques espirituales de satanás, si no os estáis alimentando espiritualmente? Y este ataque espiritual lo podéis ver en todos los pueblos de la Tierra y aún dentro de la Iglesia. Satanás no está respetando nada, porque aún ya dentro de Mi Misma Iglesia, no se ora lo suficiente como para que se puedan defender de sus ataques. Si seguís así, Mis pequeños, ya os imagináis vuestro futuro, que va a ser desastroso, porque le habéis dejado una libertad total a satanás, porque no os estáis defendiendo contra sus ataques. Ya está actuando libremente, os está venciendo, os está destrozando y, lo peor de todo, se está burlando de vosotros ante Mi Presencia. Ha puesto su pié encima de vosotros y así se presenta ante Mí, humillándoos ante Mi Presencia y no os queréis dar cuenta, se siente ya vencedor y, vosotros, bajo sus pies, vencidos. ¡Despertad ya, Mis pequeños! Si no tomáis la oración como defensa, os a va a aniquilar. Ved cómo muchos pueblos de la Tierra, están sufriendo ya por los desastres que él ha ocasionado. No le he permitido que os ataque con toda su furia, esto lo he hecho, para que vayáis entendiendo lo que está pasando y pongáis remedio a ello, a través de regresar a Mí y empezar con una oración profunda, con que lo podáis vencer. Entended que os estoy protegiendo, porque Soy vuestro Padre, Soy vuestro Dios y Creador, no quiero que os destruya a vosotros ni a Mi Creación. Pero por más que os trato de ayudar, vosotros cerráis vuestro corazón y tapáis vuestros oídos. No queréis saber de Mí, Soy vuestro Dios y os amo, pero vosotros tenéis que poner remedio a esto. Uníos, como os digo, como hermanos y así, en oración, unidos Conmigo, con el Cielo entero, podremos vencer a satanás. Vosotros debéis trabajar por lo vuestro, Yo os ayudaré, pero quiero ver acción de parte vuestra, porque vivís pasivos en vuestra vida espiritual. Ciertamente, todos estos ataques y desastres los he permitido también para que despertéis y os deis cuenta de que tenéis una misión espiritual qué cumplir y que no venís a la Tierra sólo para el goce superfluo de vuestro cuerpo y de vuestras pasiones desordenadas. Buscad Mi Amor, multiplicadlo en vuestros hermanos y, así venceréis a satanás. Gracias, Mis pequeños. Segundo Misterio, Habla Dios Padre, Sobre: Os pido pues, Mis pequeños, que os acerquéis más al Corazón de Mi Hijo, Le compartáis de vuestros dolores y rechazos. Hijitos Míos, cuando os pido oración, os pido que la hagáis especialmente por aquellos que están más cerca de Mí y que tienen un trabajo más fuerte para servirMe sobre la Tierra y, con ello Me refiero principalmente a Mis sacerdotes y religiosas, que son los encargados de llevaros a la Vida Espiritual de Mi Hijo, Sus vivencias, Sus Enseñanzas, los Sacramentos, Mi Amor. Os he dicho que ésta es una guerra espiritual, una guerra entre el Bien y el mal y que claramente lo veis ya también en vuestros hermanos. Vosotros mismos os dais cuenta de aquellos hermanos vuestros que viven en el Bien, que cada vez son menos y aquellos que viven en el mal y que éste número cada día aumenta más. Aparentemente, el mal tiene ahora el camino abierto y seguro y así es como se van desviando muchos hermanos vuestros. En estos momentos la vida para aquellos que viven en el Bien, o tratan de vivir en el Bien, es difícil. Es problemática, atacada, no querida, porque para vivir en el Bien, tenéis que luchar contra muchos de vuestros hermanos que ya han escogido el camino del mal y os hacen creer que vosotros estáis mal, que estáis errados, que sois anticuados, que os tenéis que poner al día y, Yo, vuestro Dios, os puedo asegurar, Mis pequeños, los que estáis buscando luchar en el Bien, que estáis viviendo correctamente, que estáis viviendo como Mi Hijo os lo pidió y que os advirtió también, porque os dijo que aquellos que quisieran vivir como Él, siguiendo Sus Pasos, transmitiendo amor, ayudando a vuestros hermanos a encontrarMe, iban a sufrir, como Él sufrió y, lo podéis constatar, Mis pequeños, los que estáis luchando por vivir en el Bien y de acuerdo a los Mandamientos que Yo os pedí que cumplierais. Ciertamente se os está haciendo difícil caminar por el mundo con sus obstáculos, porque ahora no solamente es satanás el que os los pone, sino vuestros mismos hermanos a vuestro alrededor, porque os ven que no sois como ellos, ellos ya están cubiertos de maldad y de pecado, de corrupción, de muerte espiritual y os ven a vosotros, viviendo en alegría santa, viviendo en las virtudes, transmitiendo amor. Ellos se sienten mal, porque reconocen su maldad y ven que vosotros no estáis en ésa maldad. Es así que se dará ésa persecución espiritual que se os ha anunciado, porque aquellos que estáis viviendo en el Bien, procurando al menos vivir en el Bien, seréis atacados por vuestros mismos hermanos que ya escogieron el camino del mal, porque se sienten acusados continuamente cuando os ven a vosotros viviendo de acuerdo a lo que Yo os pido. Se sienten señalados en sus pecados, en la maldad que provocan, en la muerte espiritual en la que se rodean. Pero tenéis que perseverar, Mis pequeños, porque Mi Hijo os dijo que debierais cargar también vuestra cruz, porque Él también fue atacado por el mismo pueblo, aquellos que por raza, eran sus hermanos. Pero después de este ataque vendrá el triunfo y es cuando gozaréis inmensamente el haber perseverado, a pesar de estos ataques tan fuertes que tendréis. No necesariamente los ataques van a ser corporales, sino espirituales. A veces esos ataques duelen más cuando se os ataca en lo íntimo, porque sois atacados por vuestros hermanos, familiares, por aquella gente en la cual teníais puesta vuestra confianza y os traicionan. Estos ataques en vuestro corazón, son los ataques que también tuvo Mi Hijo y, así Le acompañaréis en Sus Dolores, en el Huerto de los Olivos, o durante Su trayecto en Su Pasión Dolorosa. No toda la gente que lo rodeaba Le lanzaba piedras o Le escupía, el simple hecho de blasfemarLe o de rechazarLe, eso duele mucho más a veces, Mis pequeños, porque cuando confiáis en un ser querido y os da la espalda, sentís que perdéis el apoyo de su amor. Por eso os he dicho que ahora conoceréis otra faceta de los Dolores de Mi Hijo y, es Su Corazón, tan adolorido por el rechazo de aquellos a los que Él amaba o aquellos que decían amarLe, que Le seguían en Sus Predicaciones y que, hasta alivió de sus dolencias y enfermedades. Os pido pues, Mis pequeños, que os acerquéis más al Corazón de Mi Hijo, Le compartáis de vuestros dolores y rechazos, que tenéis ahora vosotros, porque estáis buscando el bien y así aliviaréis Sus Dolores y Le daréis gran alegría. Por vuestro amor, Mis pequeños, gracias y os Bendigo de Corazón. Tercer Misterio,Habla Dios Padre, Sobre: Os digo, aquellos que por vuestras oraciones serán salvados, el cambio va a ser drástico y, os repito, benéfico, pero doloroso. Hijitos Míos, el cambio espiritual se tiene que dar a toda la Tierra. Ciertamente, para algunos, va a ser suave y ligero, porque el estar viviendo Conmigo y de acuerdo a lo que Yo os he pedido en Mis Leyes y en Mi Amor, el cambio no va a ser tan drástico como para aquellos que no están Conmigo y peor para aquellos que Me han atacado. Aquellos que han buscado Mi Amor, de acuerdo a lo que tienen en su corazón, este cambio va a ser bello, porque es cuando viviréis lo que ya sentíais en vuestro corazón y que Mi Santo Espíritu os dejaba vivir y sentir. Empezaréis a vivir manifestaciones Mías de Amor sobre la Tierra, por un lado y, por otro lado, se estará viviendo la maldad y el odio de satanás y así, es como se va a ir separando el trigo de la cizaña, o sea, la maldad y el amor. No es lo mismo vivir deseando un cambio hacia lo bello, porque lo lleváis en vuestro corazón, porque cuando oráis y os acercáis a Mí y estáis viviendo Mi Amor, en cierto grado, y mientras más os acercáis y Me buscáis, Yo Me dejo encontrar y Mi Amor va creciendo entre vosotros, por eso, cuando se empiece a dar el cambio, (Lenguas…), empezaréis a vivir el Amor Divino, el Amor Celestial y eso os va a ir sublimando y estaréis gozando, aún a pesar de los desastres que se vean alrededor de la Tierra, Mi Amor os estará protegiendo, porque lo estaréis viviendo, lo estaréis gozando. Mientras que aquellos que viven fuera de Mi Amor, que no lo buscan, que no les interesa, vuestras oraciones harán mella en ellos y tendrán un cambio para su salvación, para ellos ése cambio será drástico, porque no es lo mismo estar buscando los amoríos de la Tierra, amores equivocados, amores pecaminosos, amores carnales, que subir a niveles espirituales, en donde ya estáis Conmigo y habéis abierto vuestro corazón al verdadero Amor, que es el Mío. Os repito, será un cambio drástico, pero benéfico, porque será cambiar de su carnalidad a la espiritualidad en su alma. Y vosotros, los que habéis sido ya enseñados, motivados, y que poco a poco se ha ido dando este cambio, ahora comprendéis lo que es la vida espiritual y la vida carnal. Los que estáis Conmigo, que habéis perseverado que Me habéis buscado, que habéis luchando contra el mundo, vuestro cambio ha sido lento, pero seguro. Muchos de vosotros, si veis vuestro pasado, si veis vuestra vida anterior, de años para acá, cuando vivíais más en la carne y menos en lo espiritual, ahora que es al revés, que estáis viviendo más en lo espiritual y menos en la carne, podéis comprender Mis Palabras. Tuvisteis tiempo y os di ése tiempo, para que vuestra transformación se fuera dando lenta, pero segura, y no ha sido dolorosa, sino ha sido de gozo, porque habéis crecido poco a poco y habéis afianzado vuestra Fe, vuestra Esperanza y vuestro amor en Mí, vuestro Dios, y ahora será más difícil que a vosotros os pueda vencer satanás, porque estáis ya bien cimentados en Mí. En cambio, como os digo, aquellos que por vuestras oraciones serán salvados, el cambio va a ser drástico y, os repito, benéfico, pero doloroso. Seguid pues, orando, Mis pequeños, por vuestros hermanos que viven en el mal, para que les ayudéis a este cambio, aunque sea doloroso. Os quiero explicar esto de doloroso, que es el pasar del pecado a la Virtud. Hay hermanos vuestros que viven tan enraizados en el mal que no comprenden, es más, ni buscan el cambio benéfico para su alma y perder todo, perder lo material, perder amoríos, perder riquezas, en ése momento para ellos será doloroso, pero ya que venga la transformación en el Amor, agradecerán la pérdida de lo material y se acercarán más a Mí y lo agradecerán. Y esto lo lograréis vosotros, Mis pequeños, por vuestra intercesión hacia ellos. Os bendigo, Mis pequeños y os pido sigáis vosotros creciendo, aunque sea lentamente, pero seguros y bien cimentados en Mi Amor. Gracias, Mis pequeños. Cuarto Misterio, Habla Nuestro Señor Jesucristo, Sobre: La maldad será borrada de la Tierra, junto con aquellos que no la quieran borrar de su corazón. (Lenguas…) Hijitos Míos, Yo, vuestro Hermano Jesucristo, estoy con vosotros. (Lenguas…) Vosotros sabéis, Mis pequeños, porque os lo he explicado, que fue el grupo de los fariseos y escribas, los que urdieron todo este plan para destruirMe, porque venía Yo a señalarlos, venía a castigarlos, venía a mostrarles su pecado y su maldad ante su propio pueblo, pero lejos de arrepentirse, su soberbia creció y con ello, su maldad hacia Mí, vuestro Dios, el Mesías, que venía a Su pueblo, el Hijo de Dios entre los hombres. No supieron apreciar Mi Presencia entre ellos y esto, ¿por qué, Mis pequeños?, porque ya no había vida espiritual en su corazón, en sus pensamientos. Su carnalidad y su materialidad habían crecido a tal grado, que no había cabida de lo espiritual en ellos. Todo era dinero, pasión, desorden, vicio, su vida era un caos y, lo podéis constatar en las Escrituras, cómo se aprovechaban de su mismo pueblo, en lo económico, con las doncellas, con el robo descarado contra su mismo pueblo, amparados, según ellos con las Escrituras. Ahora es el tiempo en que tendrán que reconocer la maldad que causaron, porque si hubieran aceptado Mi Presencia en la Tierra, como Mesías, Me hubieran apoyado. Si su corazón se hubiera humillado y hubieran aprovechado Mis Enseñanzas, ellos las estarían difundiendo con un gozo grande del Cielo, porque sería realmente ése pueblo escogido, pueblo de profetas, pueblo transmisor de Mis Verdades y de Mi Amor, pero negaron todo ello y trataron de destruir Mi Obra. Este será el tiempo de su derrota, Me verán de frente, conocerán su pecado y su maldad. No querrán verMe, porque saben que Soy el Hijo de Dios. Momentos graves se acercan para aquellos que se han mantenido así, traicionándoMe, atacando lo Mío, atacando Mi Amor entre los pueblos y en el corazón de los hombres. Su maldad les traerá su castigo, si no se arrepienten a tiempo. Su maldad ha afectado a todos los pueblos de la Tierra y esto ya no puede seguir así, se han aliado a satanás y también él tendrá otro castigo frente a los hombres, nuevamente será humillado ante todos vosotros. Tiempos duros estáis viviendo, pero tiempos bellos nacerán para todos aquellos que guardan en su corazón ésa Esperanza a Mi Promesa y la veréis, Mis pequeños, porque habéis orado para ello. La maldad será borrada de la Tierra, junto con aquellos que no la quieran borrar de su corazón. Son tiempos de cambio, tiempos benéficos y tiempos de dolor eterno para los traidores a Mi Palabra y a Mi Amor. No aceptaron las Leyes y Preceptos que se os dieron. Conocerán su error y sus equivocaciones, sus planes serán frustrados cuando sientan que ya vencieron junto con satanás. Cuando sintáis que prácticamente todo está perdido, Mis pequeños, estad seguros que el cambio se acerca y vuestras lágrimas serán enjugadas y la sonrisa aparecerá nuevamente en vuestros labios, será el renacer de la humanidad, Mi triunfo sobre la maldad. Lo gozaréis vosotros, que luchasteis también por él, a través de vuestra oración y de vuestros actos. Os compartiré Mi Alegría, porque sois Mis hermanos y juntos gozaremos las bellezas de este nuevo amanecer. Por eso os pido, no estéis tristes, os he dicho que vuestra liberación y vuestro triunfo se acerca, esperadlo con ansia y alegría, porque estaréis junto Conmigo, con vuestro Hermano, vuestro Salvador. Os amo, Mis pequeños y tomadMe de la mano, son los últimos momentos ya, el gozo está cerca, no os fijéis en el dolor, apretaos a la cruz, como Yo Me apreté a la Mía, sabiendo que con esto venía vuestra liberación y vuestra cruz ya la estáis padeciendo, ofrecédMela y gozad ya Conmigo el triunfo que se acerca, que ya está con vosotros, porque vosotros estáis Conmigo. Gracias, Mis pequeños. Quinto Misterio, Habla Nuestro Señor Jesucristo, Sobre: No levantaréis vuestra mano contra aquellos que os perseguirán y que hasta querrán quitaros la vida. Hijitos Míos, os pido que os mantengáis siempre unidos a Mí, Yo he venido a la Tierra para salvaros y Mi Vida sobre la Tierra siempre estuvo unida en oración a vuestra vida y a vuestra misión. Satanás, como os he explicado, se ha liberado porque vosotros ya no le detenéis por la oración que debiera salir de vuestro corazón, de vuestra vida en la virtud y en el amor. Al estar liberado Me atacará fuertemente en vosotros y en todo lo que es Mío, así como lo hicieran, en ése tiempo, en Mi Crucifixión. Con eso quisieron deshacerse de Mí y luego con la persecución contra todos aquellos que seguían Mis Enseñanzas, pero no pudieron terminar con ellos. En este tiempo tendréis algo similar, satanás seguirá atacando Mi Nombre, Mi Presencia en el mundo y en vuestros corazones. Tratará de eliminar hasta Mi Santo Nombre en todos los pueblos de la Tierra. Tampoco querrá que se hable de Mi Madre, de Mi Padre ni que busquéis la vida espiritual, con la cual vosotros crecéis hacia Mí. Pero aunque fueron atacados todos aquellos que Me siguieron, que Me buscaban, que estaban convencidos de Mi Divinidad y de Mi Amor, y no pudieron terminar con Mi Presencia en ellos. En estos tiempos, aunque seáis atacados, tampoco se podrá eliminar Mi Presencia en el corazón de vosotros y de los que estéis Conmigo. Yo estaré con vosotros en todo momento, os lo aseguro. Os aconsejaré, os guiaré, os ayudaré a perseverar. Palabras santas y sabias saldrán de vuestros labios contra aquellos que os ataquen. No levantaréis vuestra mano contra aquellos que os perseguirán y que hasta querrán quitaros la vida. Vuestra oración y vuestra donación serán vuestras armas grandes contra ellos, porque es el Amor el que hará el cambio mundial, como fue Mi Amor el que hizo el cambio en ése tiempo. Mi Amor implantado en los corazones, nunca será vencido. El nuevo pueblo que surgirá, tendrá un gran Poder Divino, porque Yo estaré con ellos y lo que salga de ellos, será lo Mío. Seréis Mis instrumentos de este tiempo y así venceremos toda la maldad de satanás en todo el mundo. Muchos más son aquellos que Me atacan y que no quieren estar Conmigo, pocos son los que aceptaron Mi llamado, pero al estar Conmigo, Mi Poder, Mi Omnipotencia vencerá la maldad de todos los demás. Un gran cambio se acerca y será benéfico para los que estáis Conmigo y dolor para los que no han querido entender. Tuvieron su oportunidad y la desperdiciaron. Mucho dolor causaron durante su vida en el mundo, ahora el dolor será para ellos eternamente. No os alegréis con esto, Mis pequeños, al contrario, orad por ellos para que su dolor no sea tan grande eternamente. En todo momento quiero Caridad y Amor saliendo de vuestros corazones, no quiero odio ni deseos de maldad, quiero amor saliendo siempre de vuestros corazones. Sois Mis hermanos, sois Mi Presencia en este tiempo. Derramad Mi Amor como si estuvierais viviendo en Mi tiempo. Gracias, Mis pequeños. |
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