Mensajes de Dios Padre a J.V.
Mar 23_11 IMPORTANTÍSIMA ORACION QUE NOS PIDE DIOS PADRE QUE HAGAMOS. |
Rosario vespertino ORACIÓN: “Que el Amor de la Santísima Trinidad cubra, proteja a todo lo visible e invisible, a todas las almas, a todo lo creado, contra todo aquello que satanás ha afectado y que ha llevado hacia el mal” Temas:
Mensaje de Dios Padre, Nuestro Señor Jesucristo y La Santísima Virgen María a J. V. Primer Misterio, Habla Dios Padre, Sobre: Los acontecimientos ya empezaron y seguirán hasta terminar con la purificación total de la Tierra, es Mi Promesa y así será. Hijitos Míos, el Amor viene a renovar toda la Tierra, esa es Mi Promesa. Os lo he dicho ya por mucho tiempo y ganarán aquellas almas que han perseverado, como en los días de Noé, que avisó del Diluvio que se vendría y pocos, solamente su familia, fueron los que perseveraron, porque creyeron en Mis Palabras. En este tiempo, también, Mis pequeños, se os ha ido avisando desde hace mucho tiempo para que os fuerais preparando y si entendíais lo que Yo os estaba diciendo, con vuestra oración, con vuestra donación, pudisteis haber aminorado los acontecimientos, pero os cansasteis de esperar y volvisteis a vuestra vida pasada, vida de pecado, vida fuera de los Sacramentos, vida sin oración, vida solamente para vosotros, en donde Yo ya no estoy, ya no acudís a Mí, ya hacéis vuestra vida propia y no estáis Conmigo. Pues bien, Mis pequeños, os prevengo ya de los acontecimientos más fuertes, como se os ha ido señalando. Empezó a llover fuertemente, pero no creían aquellos hombres que la lluvia seguiría y ahora así serán los acontecimientos, como ya os había anunciado, que los acontecimientos de la purificación, se iban a venir uno tras otro y cada vez mayores. Aquél fue el diluvio de agua y purificó toda la Tierra, ahora estos desastres y el fuego que ha de venir del Cielo, también purificará a todas las almas. Será un fuego renovador, limpiando almas y limpiando la Tierra. Habéis atacado lo Mío, os habéis apartado de Mis Leyes y de Mi Amor sobre todo. ¿Creéis acaso, Mis pequeños que puedo seguir soportando vuestras burlas y, sobre todo, vuestro desinterés hacia lo que viene de Mí, todo aquello que es Mío, todo aquello que os iba a dar y asegurar vuestra salvación eterna? No, Mis pequeños, Soy vuestro Padre, Soy vuestro Dios, os amo infinitamente y vosotros, como hijos desobedientes y muchos de vosotros, malvados, porque habéis hecho trato con el enemigo, tendréis vuestro castigo, pero es un castigo paternal y deberéis tomarlo así. Deberéis aceptar que el castigo es por vuestro error y con humildad deberéis tomarlo, para que Yo Me apiade de vosotros, porque si aún en el momento del castigo, vosotros os mantenéis soberbios ante él, Mi Ira será más grande contra vosotros, porque vuestra burla seguirá contra Mí y vosotros no sois nadie para burlarse de Mí, vuestro Creador. Estos son momentos de purificación, en donde quedarán las almas obedientes, buenas, aquellas almas que comparten Conmigo, Me aman, aceptan Mis Mandamientos, aceptan Mis Órdenes de Amor. Estas almas dóciles, pequeñitas, humildes, sencillas, son las que se ganarán éste Nuevo Tiempo, en donde serán consentidas las almas escogidas. Las almas soberbias y malas no tendrán cabida en Mi Nuevo Reino sobre la Tierra, serán eliminadas, pero si os arrepentís de vuestros pecados y de vuestra maldad, Me apiadaré de vosotros y no os perderéis eternamente. Os repito nuevamente, a Noé no le creyeron hasta que empezó a llover y, en estos tiempos, muchos no han creído a Mis advertencias a través de Mis hijos escogidos en toda la Tierra, que os avisaron con tiempo para que tuvierais un cambio efectivo de vuestra forma de ser hacia el Bien. Los acontecimientos ya empezaron y seguirán hasta terminar con la purificación total de la Tierra, es Mi Promesa y así será. Gracias, Mis pequeños. Segundo Misterio, Habla Nuestro Señor Jesucristo, Sobre: Satanás se ha introducido aún hasta en el lugar Santo y se las ha ingeniado para que no haya Transubstanciación de Mi Sangre, al cambiar las palabras de la Consagración. Hijitos Míos, ya os había pedido que fuerais bendiciendo todo a vuestro paso (Lenguas…), para que todo aquello que bendijerais, tanto personas como cosas, todo lo creado por Mí, visible o invisible, regresara a Mí. Pero ahora os pido, Mis pequeños que cubráis todo con Mi Amor. Mi Sangre, que se dio por todos vosotros debiera estar purificando perfectamente todo, a través de todas las Misas que se dicen alrededor de la Tierra y así Mi Sangre debiera ir protegiendo y purificando a toda la humanidad. Pero sabéis que satanás se ha introducido aún hasta en el lugar Santo y se las ha ingeniado para que no haya Transubstanciación de Mi Sangre, al cambiar las palabras de la Consagración y, de esta forma, el vino se queda como tal y Mi Sangre no aparece para purificar continuamente a la humanidad entera. Por eso os pido a vosotros, los que estáis Conmigo, Mis pequeños, que vayáis cubriendo a la Tierra entera con Mi Amor y pedidlo así, Mis pequeños: “Que el Amor de la Santísima Trinidad cubra, proteja a todo lo visible e invisible, a todas las almas, a todo lo creado, contra todo aquello que satanás ha afectado y que ha llevado hacia el mal”, continuamente repetidlo también, Mis pequeños y, de esta forma, Mi Amor protegerá a toda la Tierra. Ciertamente Mi Sangre os sigue protegiendo, pero no al grado que debiera ser, Mis pequeños, pero Mi Amor protegerá y de esta forma le quitaréis a satanás poder, porque él no puede contra Mi Amor y él no podrá destruir a todos aquellos y a todo aquello que ya quede Bendito y protegido con Mi Amor. Os doy todo esto, Mis pequeños, en la sencillez de Mi Corazón, para que veáis que, en cosas sencillas, podéis hacer grandes cosas para Mi Reino y para la protección de vuestros hermanos y de toda la Creación. No os doy fórmulas rebuscadas ni difíciles, es Mi Amor el que va a hacer el cambio, os lo he dicho y os lo repito y, es Mi Amor al que debéis hacer que llegue hacia vosotros y hacia los vuestros. Por eso, continuamente repetid esto que os pido, que Mi Amor os cubra y os proteja a vosotros y a los vuestros y así anularéis las potencias de satanás. Os amo, Mis pequeños, y traedMe a muchas, muchas almas a su salvación eterna a través de Mi Amor. Gracias, Mis pequeños. Tercer Misterio, Habla Dios Padre, Sobre: La Tierra entera será purificada, es tiempo de estar de rodillas, Mis pequeños, es tiempo de pedir perdón, es tiempo de pedir Misericordia, el tiempo ya os alcanzó. Hijitos Míos, Yo, vuestro Dios y vuestro Padre, estoy guiando los acontecimientos. Sí, Yo Mismo voy cuidando de que nada se salga de orden, aunque satanás así quisiera y lo desea provocar. No os preocupéis vosotros, los que estáis Conmigo, ciertamente él quiere atacar a las almas buenas y destruirlas, a todas aquellas almas que todavía perseveran, aquellas almas que han tomado en su corazón Mis Palabras y las guardan en lo profundo de su ser, con respeto, con cariño, con amor. ¿Cómo creéis pues, Mis pequeños, los que estáis Conmigo, que Yo voy a permitir que los acontecimientos fuertes de la purificación caigan sobre vosotros? Yo Soy un Dios Justo, Bueno, Misericordioso, Yo no puedo tratar igual al alma buena que al alma mala. Por eso, en Mi Misericordia Infinita, os avisé desde hace mucho tiempo, que éste tiempo llegaría a vosotros, para que os fuerais preparando todos, todos vosotros, todos los habitantes de la Tierra y se os avisó desde mucho tiempo antes, para que Mis Promesas, advertencias, Mis Palabras, llegaran a toda la Tierra, porque os amo y para que vosotros tuvierais tiempo de lograr un cambio real en vuestro interior y, que ése cambio real, aminorara o cancelara los acontecimientos y que os diera a vosotros también una posición segura ante Mí, ante Mi Ira Divina, ante Mi Justicia, contra todo aquello y todos aquellos que están en contra Mía. Mi Amor se derramó y se sigue derramando por toda la humanidad. Se ha ido derramando en todos los tiempos. Mi Misericordia llega a almas buenas y malas, en las almas buenas produciendo crecimiento alto, bello, un crecimiento purificador y, en las almas malas, esperando que Mi Gracia, al llegar a ellas, las hiciera reflexionar y cambiaran de forma de ser, pero en muchas almas, no ha sido así. No podrán decir ésas almas que fui injusto, porque mucho tiempo se os dio, por muchos lados todas las almas tuvieron acceso a Mi Palabra, a Mis Advertencias, a Mi Amor, pero mantuvieron sus oídos sordos, su corazón cerrado al Amor. Yo respeto su libre albedrío, pero también Mi Justicia caerá sobre ellos y tendrán lo que se merecen, porque eso es lo que escogieron. En cambio, las almas que abrieron sus oídos y dejaron entrar Mis Palabras en su corazón, Mi Misericordia Infinita, también les dará su premio. Sí, Mis pequeños, Yo Soy un Dios Justo, Yo Soy un Dios de Amor, cada quien tendrá lo que ha trabajado durante su vida. Si buscasteis el Bien, seréis protegidos por ése Bien y veréis Mi Misericordia sobre vosotros, en estos tiempos de tribulación, mientras tanto veréis, también, Mi Justicia caer sobre las almas que no quisieron estar Conmigo. Os sigo Bendiciendo y os sigo dando tiempo, pero estáis ya sobre el tiempo, el tiempo ya os alcanzó, ya estáis en los acontecimientos y estos se irán agravando día a día. La Tierra entera será purificada, es tiempo de estar de rodillas, Mis pequeños, es tiempo de pedir perdón, es tiempo de pedir Misericordia, el tiempo ya os alcanzó. Gracias, Mis pequeños. Cuarto Misterio, Habla La Santísima Virgen María, Sobre: AyudadMe, Mis pequeños, a luchar contra toda la maldad que se ha diseminado sobre toda la Tierra, necesito vuestra ayuda, necesito vuestro apoyo, sois Mis hijos, sois Mi familia. Hijitos Míos, Soy vuestra Madre, la Siempre Virgen María (Lenguas…) Estoy con vosotros, Mis pequeños y con todos aquellos que han buscado el Amor de Mi Hijo. Os protejo, Mis pequeños, ved cómo estoy de pié sobre las naciones de la Tierra. Ved cómo estos rayos de Amor que salen de Mis Manos, que salen de Mí, protegen a los pueblos, protegen a las naciones. Estoy con vosotros, Mis pequeños, os cuido. Estáis en los momentos de la Gran Lucha, pero estáis Conmigo, Mis pequeños, Mi Corazón de Madre os cuida y os protege, pero no quiero que os salgáis de Mí, que os apartéis de Mi Corazón. Os pido, Mis pequeños, que en estos momentos, de ahora en adelante, hagáis un esfuerzo mayor en vuestra vida por manteneros en pureza, buscando vuestra santidad y ayudando a vuestros hermanos, con vuestro ejemplo, para que ellos también busquen el vivir de acuerdo a lo que tanto os pidió Mi Hijo, para vuestro crecimiento espiritual y para tener una vida llena de Amor, en donde Mi Hijo pueda tomar Presencia real en vuestro ser, porque cuando un alma busca su perfección, busca vivir en amor, en pureza, Mi Hijo hace morada en ésas almas y no hay regalo más grande y más bello que un alma pueda tener junto a sí a su Dios, al Amor Infinito. ¿Qué más queréis vosotros, que sois tan pequeñitos? Tener a vuestro Dios con vosotros mismos en vuestro ser, es un regalo inmenso y os estoy diciendo la forma en que vosotros lo podréis tener. Luchad contra vosotros mismos, contra todo aquello que os pueda quitar la pureza, el amor de vuestro corazón, principalmente el amor hacia vuestro Dios y luego el amor hacia vuestros hermanos. Mi Hijo os habló solamente de Amor, tenéis ésta escuela de Amor y solamente debéis seguirla, Mis pequeños. No habéis luchado mucho por obtener todo lo grande que Mi Hijo os dio. Estáis desperdiciando mucho de lo que todavía podéis obtener si ponéis más de vuestra parte. Grandes regalos espirituales os están esperando, pero debéis luchar por ellos. Vosotros sabéis, del mundo, lo que debéis luchar para obtener las cosas que necesitáis; en lo espiritual, también debéis luchar por ello, aunque, ciertamente, la Gracia de vuestro Dios se os da gratuitamente y, ciertamente, la tenéis pero, para mantenerla en vuestro ser, debéis luchar por ella, para que no la perdáis, porque la Gracia no puede habitar en donde hay pecado y si la Gracia se os da continuamente, al momento en que vosotros buscáis el pecado y lo dejáis entrar a vuestro corazón, la Gracia sale, le estáis faltando al respeto, estáis ensuciando Su Gracia, no le estáis dando el valor que tiene y sale de vosotros, porque no puede convivir con el mal, que vosotros aceptáis, en vuestro libre albedrío, que entre y que habite en vuestro corazón. Mis pequeños, estáis viendo la gravedad de los acontecimientos a vuestro alrededor y no solamente estoy hablando de lo destructivo en los pueblos de la Tierra, sino en la espiritualidad de vuestros hermanos. Estáis viendo cómo ya no se buscan los verdaderos valores del espíritu y, eso es más destructivo que ver cómo caen edificios y casas. Ciertamente duele y a Nosotros Mismos, acá en el Cielo, Nos duele ver el dolor que se da por los desastres en los pueblos y en las naciones, pero más dolor nos da ver un alma condenada, que aceptó que satanás entrara a su corazón. Ved las almas, Mis pequeños, ved las almas de la Tierra, no veáis lo físico, lo que vuestros ojos ven, ved el corazón de vuestros hermanos, ved cómo se comportan, escudriñad en ellos y daos cuenta de su espiritualidad y así os daréis, verdaderamente cuenta, de cómo está vuestro mundo. Le habéis quitado el amor, le habéis quitado la vida en Dios, habéis entregado vuestro mundo a las garras de satanás. No habéis luchado por mantener la Herencia de Mi Hijo, todo el Amor, todas las Enseñanzas, toda la vida espiritual que os dejó. Éste Tesoro Divino no lo habéis protegido, satanás os lo ha arrancado y, ahora, satanás ha tomado posesión de vuestras almas. Vuestras almas fueron creadas para que fueran llenadas de amor, de buenas obras, de cosas bellas, de cosas santas. ¿Qué habéis hecho con vuestra alma, Mis pequeños?, en vez de ser un recipiente transparente, purísimo, limpísimo a los Ojos de Nuestro Dios, ahora es un cesto de basura, horripilante, sucio, pestilente, eso es ahora el alma de muchos de vosotros. No hay transparencia, no hay nada que valga en vosotros, no podéis transmitir nada bueno, porque no hay nada bueno en vuestro interior pero, aún, a pesar de todo esto, Mis pequeños, Mi Hijo, os sigue buscando y Yo os sigo protegiendo, sigo sobre todas las naciones protegiéndolas de los ataques de satanás, cuidándoos a cada uno de vosotros, esperando vuestra conversión. Venid a Mí, Mis pequeños, éstos son Mis Tiempos, los tiempos de una Madre que os ama infinitamente y que está luchando fuertemente contra las fuerzas de satanás. Os amo inmensamente, ayudadMe, Mis pequeños, a luchar contra toda la maldad que se ha diseminado sobre toda la Tierra, necesito vuestra ayuda, necesito vuestro apoyo, sois Mis hijos, sois Mi familia, luchemos, Mis pequeños, con el Amor de Nuestro Dios. Os amo, Mis pequeños, gracias, gracias por vuestro amor. Gracias, Mis pequeños. Quinto Misterio, Habla Dios Padre, Sobre: Mi Justicia será benévola con vosotros, con Mis verdaderos hijos y gozaréis Mi Justicia, ciertamente, y la llamaréis para que os purifique, porque sabréis que la necesitaréis para estar ante Mí. Hijitos Míos, es solamente un delgado velo el que os separa de Mí. Yo os puedo ver a través de ése velo, es muy delgado, Mis pequeños, y éste velo se va a ir descorriendo, así como se vayan sucediendo los acontecimientos de la purificación que tendréis sobre toda la Tierra. Poco a poco iréis viendo lo que ahora no ven vuestros ojos, iréis viendo Mi Presencia entre vosotros, iréis viendo el Cielo en la Tierra. El dolor, que iréis teniendo cada uno de vosotros, irá descorriendo este velo y os iréis dando cuenta de la realidad que os rodeaba, que tanto os traté de explicar y que vosotros no queríais entender. Vuestra falta de Fe no quería entender todas estas Verdades que Yo os daba y que estaban al alcance de vuestra mano pero, aunque vuestros ojos estaban velados, vuestra razón no quería entender, con humildad, lo que Yo os estaba dando. Qué difícil es para muchos de vosotros vivir en la humildad. Si realmente os dejarais cubrir por ella, tantas cosas que veríais, tantas cosas que entenderíais, pero os mantenéis así, a ciegas, porque queréis seguir viendo con los ojos de vuestro cuerpo y no con los ojos de vuestra alma. PedidLe a Mi Santo Espíritu, que habita en vosotros, que vaya descorriendo este velo de vuestros ojos del alma, para que podáis ver ya, todas las bellezas que Yo os daré si perseveráis en la prueba, que ya tenéis a vuestro alrededor. Muchos de vosotros sentís que la prueba de purificación, que tendréis, será muy difícil, insalvable, porque os sentís llenos de pecado y de maldad en vuestro corazón. Cuando vosotros reaccionáis así, Mis pequeños y realmente lo estáis diciendo de corazón y con humildad, ésa humildad es la que os va a salvar y os va a quitar muchos de los dolores, que la gran mayoría de vuestros hermanos tendrán, en esta purificación mundial. Mientras más os acerquéis a Mí, mientras más llenos esté vuestro corazón de amor, pero de un corazón sincero, puro, profundo, verdadero, es el que os va a ayudar a sobrellevar fácilmente, sí, Mis pequeños, lo repito, fácilmente, los acontecimientos difíciles de la purificación, porque Yo estaré con vosotros y os estaré protegiendo de tantos dolores. El hecho de que vosotros hayáis escogido el buen camino, eso implica sacrificio, trabajo, pero sobre todo, amor. Escogisteis la mejor parte y esa parte, que Soy Yo, os protegerá. Os he dicho que Soy Justo y veréis Mi Justicia sobre vosotros pero, Mi Justicia sobre vosotros, será leve porque, ciertamente, también Mi Justicia tiene que caer sobre los buenos, porque el pecado también os ha tocado y alguna vez le habréis permitido que os ensuciara. Mi Justicia será benévola con vosotros, con Mis verdaderos hijos y gozaréis Mi Justicia, ciertamente, y la llamaréis para que os purifique, porque sabréis que la necesitaréis para estar ante Mí. Llamadla pues, Mis pequeños, en vuestra vida, en vuestra persona y no temáis que, os repito, Mi Justicia no será la misma sobre las almas buenas que sobre aquellas que Me han atacado y han atacado a vuestros hermanos. Confiad en Mí y confiad de corazón, porque os he dicho que Me duele inmensamente cuando un alma no confía en Mí, vuestro Dios. Gracias, Mis pequeños. |
No hay comentarios:
Publicar un comentario