Quien os habla

Invocadme con alabanzas y salmos que Me resarzan un poco de tanta maldad, blasfemia y apostasía

Yo Soy Dios Omnipotente quien os habla. Soy el Todopoderoso, el Único Dios que existe y que existirá. No hay otro Dios fuera de Mí, ni lo ha habido, ni lo habrá.


Hay quienes ponen otros dioses que nada tienen que ver Conmigo, dioses inventados por los hombres, dioses que nunca jamás existieron, ni existirán y Me ignoran a Mí Dios Omnipotente y Dios Único. Quienes apartan a Dios de sus vidas, apartan el Sumo Bien que Soy Yo, porque trato con benevolencia a las almas y perdono una y otra vez al pecador. Yo suplo las necesidades de Mis criaturas y Me acerco a ellas en la tribulación, aunque no Me reconozcan.


Soy un Dios de Amor y de Justicia, por eso, no tenéis que temer Mi Justicia, porque se valorar vuestras virtudes y disculpar vuestras flaquezas. Pero vosotros las criaturas, no queréis acercaros a Mí, y Me ignoráis. No Me llamáis ni siquiera en la desgracia, solo Me nombráis para blasfemarme, para juzgarme, para reíros de Mi Divinidad.


Durante siglos y siglos espero de las generaciones que se Me de el culto que se Me debe como Dios y Señor, pero las generaciones a excepción de unos cuantos, se extinguen ignorándome o blasfemándome. Soy el Omnipotente quien os habla.


Deseo que quien crea en Mí, repare tanta ignominia como se Me hace y se le hace a Mi Divino Hijo. Deseo que Me oréis intercediendo por esta generación que ha llegado al colmo de la perversidad y de las leyes anti-divinas. Invocadme con alabanzas y salmos que Me resarzan un poco de tanta maldad, blasfemia y apostasía.


Soy Dios Omnipotente quien os habla, el terror de los demonios, el gozo de los ángeles, el premio de los bienaventurados, y quiero que Me adoréis y que Me dediquéis un día al año en el que sea recordado y considerado como lo que Soy, un Dios de Amor, Bondad y Misericordia. Así que hijos Míos, ponedme en vuestras vidas con todo el respeto que Me merezco y con el culto que por ser Dios Todopoderoso y Único Me corresponde. Yo, Padre Eterno, os hablo. Paz a todo aquel que crea en este mensaje.