MENSAJE DE LA SANTÍSIMA VIRGEN MARÍA A SU HIJA AMADA LUZ DE MARÍA

MENSAJE DE LA SANTÍSIMA VIRGEN MARÍA
A SU HIJA AMADA LUZ DE MARÍA
18 DE SEPTIEMBRE DE 2010

Amadísimos hijos de Mi Corazón Inmaculado:


¡LES AMO!

GUSTEN DE ESTE EXQUISITO MANJAR, COMO LAS ABEJAS GUSTAN DE LA MIEL.

LES MUESTRO EL CAMINO PARA QUE SE ENCUENTREN CON MI HIJO JESUCRISTO.

Deseo cubrir la desnudez espiritual que prevalece en medio de la humanidad para que no se pierdan. Mi Hijo Santísimo murió en la Cruz por cada uno de ustedes, por cada uno de ustedes permanece en el Sagrario, por cada uno de ustedes se hace presente en la Eucaristía.

Soy Madre y sufro por lo que les acontece.

La purificación está a un instante, más cercana de lo que la humanidad piensa.

Se asombran por los anuncios del Cielo, pero los desmienten. ¿No debería ser motivo de admiración el que en medio de tantos vicios, Dios no haya intervenido aún?

No olviden que son exhortados a la conversión, no amenazados, sino exhortados. ¡Han olvidado a Nínive!

SON AVISADOS DE LO VENIDERO PARA AVIVAR LA FE, Y PARA QUE TODOS LOS HIJOS DE DIOS TENGAN LA CERTEZA DE QUE NO SON ABANDONADOS, OLVIDADOS. AL CONTRARIO, SON ALERTADOS PARA QUE OREN Y SE PREPAREN.

¿No reconocen el eco de la Creación que les avisa a viva voz?

Este es el instante en que los truenos moverán la Tierra. El corazón humano no palpitará a su ritmo, sino al ritmo que le marque la naturaleza. El agua avanza de tierra en tierra. Los terremotos dejarán países debajo de las ruinas, la naturaleza se ha unido en un mismo sentir, para despertar al hombre, imagen y semejanza de Dios.

Se mueven en medio de la Gran Crisis que aumentará más y más, hasta llegar al colapso mundial. La hambruna se apoderará de Mis pobres hijos. ABRAN EL CORAZÓN A ESTE LLAMADO.

Los demonios han sido soltados para tentar a Mis hijos. No deben medir el tiempo con medida humana; el tiempo vibra en un profundo instante, en el suspiro Divino. Este tiempo ha sido acortado grandemente y lo será aún más. La Tierra ya no es la misma, próximamente cambiará más.

Amadísimos hijos:

TODAS LAS PROFECÍAS SE CUMPLIRÁN EN ESTA GENERACIÓN.

LA CONSUMACIÓN DE LAS MISMAS LLEVARÁ AL CULMEN DEL REINO ETERNO DE PAZ Y JUSTICIA.

Son avisados para que atiendan a Mis angustiosos llamados, ante la Gran Purificación de Fuego por la que pasarán. Les preparo como valerosos guerreros para que batallen contra el maligno, con la seguridad de la victoria. Como Capitana del Ejército Celestial, les mantendré en Mi Corazón, de donde manarán los remedios y elementos para que salgan ilesos de esta gran prueba. San Miguel Arcángel les defenderá con Su Espada, irá delante de ustedes, delante de Mis hijos.

UN CIELO NUEVO Y UNA TIERRA NUEVA, FUSIONADOS, RECONCILIADOS TOTALMENTE,

SERÁN EL FRUTO DE LA FE.

Amados de Mi Corazón: les quito el velo de los ojos para que miren lo que otros se niegan a mirar.

OREN, OREN, LA ORACIÓN LES FORTALECE, no les permite que el espíritu enferme. Oren para que la Luz no les abandone. En este instante es preciso la oración. La oración oxigena el ser.

EL SANTO ROSARIO LES CONDUCE AL REFUGIO DE MI CORAZÓN. El maligno no soporta Mi Presencia, con cada Ave María el maligno retrocede.

Acudan a recibir a Mi Hijo en la Eucaristía, nútranse diariamente.

Oren por Rumanía.

Oren por Medio Oriente.

Oren por Lisboa.

Oren por Ecuador.

Oren por Perú.

ATIENDAN MIS LLAMADOS.

Les amo.

Mamá María.

AVE MARÍA PURÍSIMA, SIN PECADO CONCEBIDA.
AVE MARÍA PURÍSIMA, SIN PECADO CONCEBIDA.
AVE MARÍA PURÍSIMA, SIN PECADO CONCEBIDA.

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COMENTARIO DEL INSTRUMENTO SOBRE EL MENSAJE


Hermanos (as):

EL HOMBRE PASARÁ, PERO LA PALABRA DIVINA VIVIRÁ POR SIEMPRE.

Un Cielo Nuevo y una Tierra Nueva, fusionados. El Cielo Nuevo descenderá y la Tierra Nueva ascenderá, para ser Uno en el Amor de la Santísima Trinidad.

No es momento de continuar con falsos intelectualismos, con razonamientos inútiles que llevan al hombre a continuar en esta ola de pecado, fruto del libertinaje.

Hoy Nuestra Madre se nos presenta con Su Corazón traspasado por la daga de la indiferencia, de la negación del hombre. Lo que nos previene sobre un inminente dolor para la humanidad.

Discernamos las señales que nos da la naturaleza y tengamos la certeza de que Nuestra Madre nos ama y permanece a nuestro lado; por ello nos alerta para que no caigamos.

Abrámonos a la acción del Espíritu Santo, unamos nuestras almas mediante el Santo Rosario y con él perfumemos el Corazón dolorido de Nuestra Madre Santísima.

Estemos seguros de que nos espera Nuestro Señor Jesucristo: alimento de los hambrientos, agua de los que tienen sed, luz de los que no ven, perdón del pecador, misericordia del arrepentido.

NO TEMAMOS: EL REY DE REYES Y SEÑOR DE SEÑORES NOS AMA CON INFINITO AMOR.

Amén.