JRM Mensaje de Pentecostés
Pentecostés es la consumación de la promesa de Jesús de no dejarnos solos.
El advenimiento del Espíritu Santo es esa consumación… El Paráclito, la Tercera Persona de Dios y la presencia de Su amor.
El advenimiento del Espíritu Santo es esa consumación… El Paráclito, la Tercera Persona de Dios y la presencia de Su amor.
Ha sido tristemente mal entendido e ignorado por muchos. Esta presencia de Dios es absolutamente singular. Él es el dispensador de los muchos dones que Nuestro Padre, a través de Su Amor por cada uno de nosotros, ha dado al Espíritu Santo para que los otorgue a aquellos que El considere dignos.
Ven ahora Oh Espíritu Santo y llena nuestros corazones, enciende en nosotros el fuego de tu amor. Envía ahora a tu Espíritu sobre cada uno de nosotros para que renueves la faz de esta tierra.
Esta oración al Espíritu Santo se necesita tanto en un mundo que está abandonando a su Creador; que está abandonando su propia identidad y al hacerlo, está perdiendo su sentido común y con ello su realidad.
No puede existir un futuro sin Dios. Y sin embargo, el mundo continúa ignorando los signos de estos tiempos y está enterrando las inspiraciones continuas que el Espíritu Santo está proveyendo a cada uno de nosotros en estos momentos.
Ven, Oh Espíritu Santo y llena mi corazón. Escucho a tu amado Paráclito pero soy débil con respecto a las cosas y los caminos del mundo de hoy. Necesito tu presencia dentro de mí. Oh amado Espíritu Santo, enciende en mí el fuego de tu amor para que nunca me debilite; día tras día, un día a la vez, al decir NO a las cosas y los caminos de este mundo y decir SI al amor de Dios, mi Padre.
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