3,418-mensaje del Nuestra Señora, enviado el 12 de 28 de 2010
Queridos hijos, vivid de cara al paraíso. Dios debe ser la meta alcanzada por todos los hombres y mujeres de fe. Dios es el principio y el fin, por más que los hombres se admiren de su grandeza, El es siempre mayor. Alegraos porque teneis un Padre amoroso y Misericordioso que os ama a vosotros y conoce su nombre. Sois importantes para El. Ahora vivis protegidos de Su Gracia. Doblad vuestras rodillas en oración, porque solo así podréis comprender los designios de Dios para vuestras vidas. Berna: sufrimiento vivirán mis pobres hijos. Coraje. En el Señor está vuestra salvación. Volved a El quien os ha creado a Su Imagen y Semejanza. Adelante. Este es el mensaje que hoy os transmito en nombre de la Santísima Trinidad. Gracias por haberme permitido reunirme con vosotros aquí una vez más. Yo los bendigo en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén. Quedad en paz. 3,419- mensaje del Nuestra Señora, el primer mensaje del día, transmitido el 01/01/2011
Queridos hijos, Yo soy la Reina de la paz y e venido del cielo para traer la paz. Caminais a un futuro de grandes provocaciones. Entrais ahora en el tiempo anunciado durante siglos por los profetas. Es el tiempo de los dolores a la humanidad. Doblad vuestra rodilla en oración. El futuro también os reserva descubrimientos extraordinarios esperados por los hombres. Alegraos porque el Señor está a vuestro lado y sólo en su gracia encontrareis la salvación. La Iglecia de Mi Jesús carga pesada Cruz. Vive en el Calvario por causa de persecuciones y pasarán un dolor muy grande los hombres y mujeres de fe. Por favor, mentened la llama de la fe. Solamente por la oración podeis permanecer fieles a Mi Hijo Jesús y a Su doctrina. Yo quiero conduciros a la santidad. Abrid vuestros corazones a Mi llamado e imitad en todo a mi Hijo Jesús. El rey va a experimentar grandes sufrimientos y se removerá de su trono. Rezad, rezad, rezad. Este es el mensaje que hoy os trasmito en el nombre de la Santísima Trinidad. Gracias por haberme permitido reunime con vosotros aquí una vez más. Yo les bendigo en el nombre del Padre, del Hijo, y del Espíritu Santo. Amén. Quedad en paz.
Queridos hijos, yo soy vuestra Madre y os amo. Abrid vuestros corazones y dejad que la gracia de Mi Señor os transforme. No permitáis que el demonio coloque la duda en vuestros corazones. Creed firmemente en el poder de dios. Por favor continuad orando. La humanidad vivirá la angustia de un condenado y mis pobres hijos van a llorar y lamentar. La muerte vendrá de las profunidades. Pasará por Caiena y llegará al Norte de Brasil Sufro por aquello que viene para vosotros. No os quedéis estacionados. Dios os llama, no crucéis los brazos. No dejad las cosas para mañana. Este mensaje os transmito en el nombre de la Santísima Trinidad. Gracias por haberme permitido reunirme una vez más con vosotros. Yo los bendigo en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén. Quedad en paz.
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