| Abr 04_05 Sabéis que vosotros tenéis una misión grande ante el mundo, Mis hijos de México. |  |  |
Rosario.
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Mensaje de Dios Padre, Nuestro Señor Jesucristo y la Santísima Virgen María a J. V.
Primer Misterio, Habla Dios Padre.
Sobre: Yo Soy un Dios de Amor, un Dios de Creación, un Dios de Vida, que por eso fue lo que Mi Hijo os vino a enseñar. Mi Amor siempre estará por encima de Mi Justicia, que el hombre se atrae, por el pecado, el castigo porque se pone a merced del enemigo. Este es el tiempo en el cual deberéis ser otros Cristos. Hijos Míos, benditos aquellos que, sin el dolor, entienden lo que es el Amor. Benditos aquellos que sin pasar por la tribulación han entendido lo que Yo os he querido dar a través de los Evangelios, a través de las enseñanzas de Mi Hijo, que han tomado todas las enseñanzas y todo ese Amor para hacer su vida, para normar su vida terrena y con ello, dar mucho fruto.
¡Ay! De aquellos que no entendieron con el Amor, con la Paz, con las enseñanzas que os vino a dar Mi Hijo, porque ellos sufrirán en éstos momentos de tribulación, aprenderán con el dolor. Desgraciadamente el hombre, a veces, necesita el castigo para aprender. Eso Yo nunca lo he querido, Mis pequeños, porque Yo Soy un Dios de Amor, no Soy el Dios castigador, como muchos Me tienen asó, en ése concepto erróneo, falso, no es Mío, no Me pertenece, el mismo hombre Me ha hecho ver así, ayudado por las potencias del mal.
No, Mis pequeños, el hombre, al vivir en el pecado, tenía que pensar en un Dios de castigo porque eso es lo que sentía en su corazón, que al vivir en el pecado tenía que ser castigado para poder recuperar su Gracia.
Pero no, Mis pequeños, fuisteis creados para vivir en el Amor, para manteneros en el Amor, para transmitir el Amor.
Este tiempo de tribulación que se avecina será fuerte, especialmente para aquellos que no han de entender de otra forma, pero que será para su bien. Vosotros deberéis hacer entender a vuestros hermanos que Mí Amor siempre estará por encima de Mi Justicia, que el hombre se atrae, por el pecado, el castigo porque se pone a merced del enemigo, Enseñad a vuestros hermanos, cuando estén en tribulación, que Mi Perdón, Mi Amor, siempre les alcanzará, siempre y cuando regresen con humildad a Mí, arrepentidos de su pecado, arrepentidos de su mala vida.
He ido preparando el camino, para que muchas luces como vosotros, puedan irradiarme en éstos tiempos de obscuridad. Sed valientes, Mis pequeños, sed tenaces, pase lo que pase deberéis seguir adelante. Muchos necesitarán de vuestra ayuda, que no os importen los ataques, que van a ser cada vez más fuertes, porque el enemigo quiere destruir lo que Yo, con Amor, he Creado.
Manteneos adelante, dando Vida a través de vuestro ejemplo, dando Vida a través de vuestra oración. Este es el tiempo en el cual deberéis ser otros Cristos. Mantened la Paz en vuestro corazón, a pesar de que vuestros hermanos no encuentren el Camino, vuestra paz, la luz en vuestro corazón, os guiarán y Me atraeréis muchas almas.
Gracias, Mis pequeños, por vuestra donación, gracias por haber entendido, gracias por haber respetado Mis Palabras, Mis Consejos, la educación que os he dado.
Seguid adelante, que Yo estaré con vosotros. Gracias, Mis pequeños.
Segundo Misterio, Habla Dios Padre.
Sobre: Éste es el tiempo en que se os quietará prácticamente todo y vuestra Fe es la que os engrandecerá. Deberéis confiar plenamente en Mí, vuestro Dios. No penséis ya como hermanos, pensad como vuestro Dios y que, al tenerme a Mí, en vuestro corazón, al irradiarme con eso tendréis todo, para vosotros y para vuestros hermanos. Hijitos Míos, el hombre es muy dado a poner toda su esperanza en las cosas palpables, en las cosas que ve. Ponéis vuestra esperanza en los bienes de éste mundo, llámese dinero, llámense posesiones, llámense alimentos, llámense amistades. Vuestra Fe está basada en lo que veis y tocáis, en que Yo os estaré dando todo lo que necesitéis para vuestro cuerpo y para vuestra alma, pero Yo necesito de vuestro cuerpo y de vuestra alma para poder trabajar a través de vosotros.
Deberéis llenaros de Mi Amor, deberéis llenaros de Fe, deberéis llenaros de Humildad, deberéis vivir en las Virtudes, será un tiempo de desesperación. No os dejéis llevar por los temores que os rodearán, la Fe en Mí os hará grandes en éstos momentos. La Fe, es importantísima, Mis pequeños, porque con la Fe, haréis grandes Milagros.
Olvidaos de todo aquello que necesitéis de lo material, se os irá dando cuando lo vayáis necesitando. Al ser vuestra tarea un trabajo espiritual, deberéis acercaros más íntimamente Conmigo, escucharéis en vuestro corazón lo que haréis por vosotros y por vuestros hermanos.
No le deis paso, en vuestro corazón, a las necedades del mal, no dudéis, Mi pequeños, así trabaja el demonio, creando duda, para llevaros a la desesperación, no dudéis en ningún momento de que Yo estaré con vosotros, junto con Mis Ángeles. Mi Hija, la Siempre Virgen María, estará con vosotros, porque éste es el tiempo de la Gran Lucha contra la serpiente antigua y Ella vencerá y Me entregará la humanidad purificada.
Vuestra docilidad, vuestra negación a vosotros mismos, vuestra lucha por mantener Mi Vida entre los hombres, os dará la victoria, a vosotros y a vuestros hermanos.
Manteneos en la alegría, salvando almas, convirtiendo almas, que viven en la pereza, y en la dureza de corazón. OfrecedMe cada alma que ayudéis en su conversión.
Y Yo os vuelvo a repetir, vivid en la alegría, que será alegría santa en éstos momentos de gran tribulación.
Gracias, Mis pequeños.
Tercer Misterio, Habla Dios Padre.
Sobre: Grandes Milagros veréis y palparéis, pero no os encanezcáis, el trabajo es mucho, pocos son los que se han dado a Mí, por eso, dejad que libremente os tome Mi Santo Espíritu, para que Me alcancéis muchas almas a la Salvación. Actuad con Mi Misericordia con vuestros hermanos, llevadles a la profundidad de Mi Amor, enseñadles como Yo os he enseñado, con paciencia. Hijitos Míos, os he hablado de que éstos son tiempos de tribulación, pero también van a ser momentos de grandes Milagros. Dejaos mover y transportar por el Santo Espíritu. Dejaos manejar por Él dócilmente. Podréis estar en varios lugares a la vez, podréis dar servicio a vuestros hermanos.
Grandes Milagros veréis y palparéis, pero no os envanezcáis, el trabajo es mucho, pocos son los que se han dado a Mi, por eso, dejad que libremente os tome Mi Santo Espíritu, para que Me alcancéis muchas almas a la Salvación.
Comprobaréis los grandes Milagros que habéis leído, que habéis escuchado en las Sagradas Escrituras y que se han vivido en la historia de la cristiandad. Mi Poder no se ha terminado, no Me limitéis, éstos momentos serán para mostrar Mi Gloria, Mi Misericordia, pero también Mi Justicia.
Actuad con Mi Misericordia con vuestros hermanos, llevadles a la profundidad de Mi Amor, enseñadles como Yo os he enseñado, con paciencia. Sed tenaces, no os amedrentéis, aunque os ataquen, seguid adelante. Ciertamente, mucho ataque habrá para aquellos que Me han sido fieles y serán fieles en éstos momentos, que no os preocupe esto, debéis dejar ésa semilla que germinará, la cual les dará su salvación Eterna.
Así como veréis ésos grandes desastres, como cuando los mares cubran las tierras, también el Mar de Mi Misericordia protegerá y salvará a las almas.
La inmensidad de Mi Amor llegará a todos los corazones y así, como os he pedido que améis fuertemente a aquellos que viven en el error y en el pecado, no dudéis en dármelos, a pesar de que blasfemen y os ataquen. Tocad las fibras buenas que tengan en su corazón y yo Me encargaré del resto. Confiad, confiad y hacedles ver a vuestros hermanos, que vuestra Fe y vuestra Paz radica perfectamente en ésa confianza que habéis puesto en Mí, vuestro Dios y Salvador.
Gracias, Mis pequeños.
Cuarto Misterio, Habla Nuestro Señor Jesucristo.
Sobre: Éstos tiempos también pueden estar llenos de ello, traición de temor. Si os toca persecución, si os toca muerte por proteger Mi Santo Nombre, pedid Fortaleza, pedid Mi Vida en vosotros, no actuéis solos, pedidMe a Mí que os invada completamente y así no caigáis en el error, en el pecado o en la traición. No dudéis de Mí, vuestro Dios, de vuestro Salvador, cuando tengáis duda, entrad en vuestro corazón, preguntadMe, dejaos guiar. Mis pequeños, en la tribulación, Mis Apóstoles Me traicionaron. Pero no fue la misma traición que tuve con Judas, la de ellos fue una traición de temor.
Éstos tiempos también pueden estar llenos de ello, traición de temor. Si os toca persecución, si os toca muerte por proteger Mi Santo Nombre, pedid Fortaleza, pedid Mi Vida en vosotros, no actuéis solos, PedidMe a Mi que os invada completamente y así no caigáis en el error, en el pecado o en la traición.
El demonio seguirá usando de todos sus ardides para tratar de venceros. Cuidado, mucho cuidado, porque atacará a las almas que han sido preparadas para iluminar éstos tiempos de tiniebla. Os tratará de ridiculizar, pero nos preocupéis, manteneos firmes. El Amor deberá llenar vuestro corazón, para que vosotros podáis orar, aún por aquellos que están haciendo el mal, ya sea que lo hagan a vuestros hermanos o con vosotros mismos.
El Amor no tiene límites y el Amor dará mucha Salvación a infinidad de almas en éstos tiempos.
El Amor perdona todo, el Amor disculpa todo, el Amor salva, aún a aquellas almas que parezcan estar perdidas por tanto mal que han producido.
No dudéis de Mí, de vuestro Dios, de vuestro Salvador, cuando tengáis duda, entrad en vuestro corazón, preguntadMe, dejaos guiar. Nueva Vida se os dará, Mi Santo Espíritu os dará ésa Nueva Vida, transformará vuestro corazón y vuestra mente.
Docilidad, Mis pequeños, como Yo la tuve hacia la Voluntad de Mi Padre, Yo también tuve miedo, pero acepté la Voluntad de Mi Padre.
Es natural, Mis pequeños, máxime en vuestra pequeñez, deberéis venceros y dejarme actuar a Mí en vosotros. Es Mí Vida la que debe fluir a través de vosotros. Soy Yo, vuestro Cristo, el que actuará a través de vosotros, después de que el Santo Espíritu os infunda ésa Fortaleza como en Mis Apóstoles.
Estad atentos a los acontecimientos, se os irá dando de manera similar a como fue Mi Vida y también el demonio atacará en forma similar a lo que ya se dio. Mucha confusión habrá, pero no temáis. Llenad de Vida a vuestros hermanos con vuestro ejemplo con vuestra dedicación. Simplemente, dejaos hacer por Mí Santo Espíritu.
Gracias, Mis pequeños.
Quinto Misterio, Habla la Santísima Virgen María.
Sobre: El mejor refugio en estos tiempos es Mi Corazón Virginal, que Yo, como Madre vuestra os voy a acercar a Él. Muchos lugares alrededor del mundo han sido preservados para que muchas almas encuentren ahí refugio en éstos tiempos de tribulación.
Hijitos Míos, muchos lugares alrededor del mundo han sido preservados para que muchas almas encuentren ahí refugio en éstos tiempos de tribulación, pero ya Nuestro Padre, os ha dicho que el mejor refugio en éstos tiempos es Mi Corazón Virginal, que Yo, como Madre vuestra os voy a dar, os voy a acercar a Él.
Quiero, Mis pequeños, que estéis Conmigo, que Me ayudéis con vuestros hermanos, Yo, como Madre vuestra iré buscando alrededor del mundo a todas aquellas almas que pidan por su Salvación.
En aquellos países en donde la tribulación será más fuerte, se les han dado ésos lugares de protección y preservación. Vosotros aquí, Mis pequeños, Me tenéis fuertemente. Vuestros propios hogares serán de preservación, Me los habéis consagrado y los he aceptado.
Sabéis que vosotros tenéis una misión grande ante el mundo, Mis hijos de México. El ataque del mal también se vendrá sobre vosotros, sobre vuestra patria fuertemente, pero estáis en Mi Corazón, estaréis protegidos por Mis Santos Ángeles.
Vosotros buscad la Pureza y la santidad en vuestro corazón. Sed dóciles, como Yo lo Soy ante la Santísima Trinidad. Sed pequeñitos, para que la Sabiduría Divina os invada. Daos en totalidad, para que vuestro Dios se pueda dar en totalidad en vosotros.
Yo Soy vuestro ejemplo, Mis pequeños y Yo os puedo proveer, por Mi intercesión, ante la Santísima Trinidad, de todo lo que necesitaréis en éstos tiempos.
Buscad los bienes del alma, los bienes espirituales antes que los del cuerpo y antes que vuestras comodidades, eso es secundario Mis pequeños, se os darán por añadidura si buscáis primero el servir a vuestro Dios para ayudar a vuestros hermanos. DadMe vuestra mano, dejadme a Mí que os lleve a dónde se necesite, sed dóciles, sed dóciles Mis pequeños, no pongáis nada de vuestra parte. Vuestra inteligencia, vuestra sabiduría humana, puede echar a perder la obra de vuestro Dios en vuestro corazón, porque fácilmente os llenáis de soberbia. A pesar de que podréis ver grandes cosas fluyendo de vosotros, no las toméis como propias, humildad, pequeñez, reconociendo que sois solamente instrumentos, instrumentos fieles del Poder de vuestro Dios.
Se os ha pedido que entréis en vuestro corazón, para que escuchéis la Voz de Mi Esposo, el Santo Espíritu de Amor. Debéis transmitir esto a vuestros hermanos, la oración, ésa comunicación con vuestro Dios, os dará la seguridad de que estáis siendo guiados correctamente.
Ofreced todo, ofreced vuestros dolores, ofreced los bienes espirituales que se os den, ofreced vuestra vida, unidla a Mi Hijo, ofreced, ofreced, agradeced y gozad, porque estaréis trabajando para el Nuevo Reino que se viene.
Gozad, Mis pequeños, como os hemos dicho, gozad desde ahora con el granito de arena que estáis poniendo para la reconstrucción del Reino, el cual gozaréis grandemente.
Alabad el Nombre de vuestro Dios por sobre todas las cosas, éste es el tiempo, el tiempo en que toda rodilla se doblará para reconocer el Poder, la Grandeza, la Majestad de Nuestro Dios con el trabajo que pongáis cada uno de vosotros.
Estaremos con vosotros, no os dejaremos en ningún momento, confiad y acercaos a Nosotros.
No dudéis, no dudéis, Mis pequeños, porque la duda os traerá debilidad y de ahí se tomará el demonio, satanás para haceros caer.
Acrecentad vuestra Fe en la confianza, en el trabajo que ha hecho vuestro Dios en vuestra alma en todo éste tiempo. Se os ha dado mucho, mucho más que a muchos de vuestros hermanos sobre la Tierra.
Mucho se os ha dado y mucho se os pedirá, éste es el tiempo de la donación y de repartir de aquello que recibisteis gratuitamente.
Bellos momentos se os acercan, serán solamente segundos de prueba, segundos de la Eternidad, para vivir una Eternidad de Gloria.
Confiad, confiad, Mis pequeños. Gracias, os amo.
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