3.390-Mensaje de Nuestra Señora, emitido el
23/10/2010
Queridos hijos, vivan y sean testimonio de mis mensajes. Los llamados que os dirijo, debéis llevar a todos, porque deseo convertiros a todos mis pobres hijos. ¿O que tenéis que dejarlo todo para mañana? Dios tiene prisa. Abrid vuestros corazones y servid al Señor con fidelidad. No os apartéis de la oración. La humanidad corre grandes peligros y solo en la oración encontrará como soportar el peso de los acontecimientos que ya están en camino. Samara gritará por socorro y cargará su pesada cruz. Los hombres piden por Santa Ana a causa de la devastación. Yo soy tu Madre Dolorosa y sufro por lo que viene para vosotros. Tened coraje. Puedo pedirle a Mi Hijo Jesús por vos. Este es el mensaje que hoy les transmito en el nombre de la Santísima Trinidad. Gracias por haberme permitido reunirme con vosotros aquí una vez más. Yo os bendigo en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén. Quedad en Paz.
Mensaje de Nuestra Madre celestial Número:3391
2010-10-26
Queridos hijos, Asia se estremecerá y un gigante adormecido de hace siglos causará gran destrucción. Sufro por aquello que viene para vosotros. Doblad vuestras rodillas en oración. La humanidad vivirá la angustia de un condenado, pero por fin vendrá la gran victoria de Dios con el triunfo definitivo de mi Inmaculado Corazón. Coraje. Yo estaré siempre a vuestro lado. No os alejéis del camino que os señalé. Amad y defended la verdad. Mi Hijo Jesús necesita de vuestro sincero y valiente testimonio. Abrid vuestros corazones a su gracia y seréis grandes en la fe. Adelante sin miedo. Ánimo. Yo estaré siempre a vuestro lado. No os alejéis del camino que os señalé. Amad y defended la verdad. Mi Hijo Jesús necesita de vuestro sincero y valiente testimonio. Abrid vuestros corazones a su gracia y seréis grandes en la fe. Adelante sin miedo. Este es el mensaje que hoy os transmito en nombre de la Santísima Trinidad. Gracias por haberme permitido reuniros aquí una vez más. Yo os bendigo, en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén. Quedad en paz.
Mensaje de Nuestra Madre celestial Número:3392 2010-10-28
Queridos hijos, sed fuertes y firmes en la fe. No hay vitoria sin cruz. He ahí que vivís ahora los tiempos de la dolorosa purificación. Camináis para un futuro de grandes tribulaciones. Doblad vuestras rodillas en oración. Solamente por medio de la oración podéis soportar el peso de vuestra cruz. La muerte pasará por Japón y por India y dejará un gran rastro de destrucción. Buscad fuerzas en Jesús. Solamente acogiendo los llamados de mi Hijo Jesús, podéis cambiar vuestras vidas. No retrocedáis. Adelante con ánimo. Este es el mensaje que hoy os transmito en nombre de la Santísima Trinidad. Gracias por haberme permitido reuniros aquí una vez más. Yo os bendigo, en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén. Quedad en paz.
Mensaje de Nuestra Madre celestial Número:3393
2010-10-30
Queridos hijos, Yo soy vuestra Madre y vine del cielo para llamaros a la conversión sincera. Os pido que viváis con coraje mis mensajes. No quiero forzaros, pero os pido que seáis dóciles a mis llamados. Los hombres se alejaron de Dios y se hicieron ciegos espiritualmente. He ahí que llegaron los tiempos más dolorosos para la humanidad. Volveos al Señor por medio de una sincera y amorosa entrega. Dios os ama y os espera con inmenso amor de Padre. Camináis hacia un futuro de grandes dificultades. La tierra se agitará y Egipto beberá el cáliz amargo del dolor. Rezad, rezad, rezad. El Oriente Medio experimentará la cruz pesada y mis pobres hijos gritarán por auxilio. Bella estará en lágrimas por la muerte de sus hijos. Doblad vuestras rodillas en oración. Vuestra victoria está en el Señor. No crucéis los brazos. Este es el mensaje que hoy os transmito en nombre de la Santísima Trinidad. Gracias por haberme permitido reuniros aquí una vez más. Yo os bendigo, en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén. Quedad en paz.
Mensaje de Nuestra Madre celestial Número:3394
2010-11-01
Queridos hijos, alegraos en el Señor. Vuestra felicidad plena está en Dios y Él espera vuestro sí sincero y valeroso. No desaniméis ante vuestras dificultades. Abrid vuestros corazones y servid al Señor con alegría. Yo soy vuestra Madre y estoy muy cerca de vosotros. Doblad vuestras rodillas en oración. La paz del mundo está amenazada. El demonio actúa para causar destrucción, pero vosotros podéis vencerlo en la oración y en la escucha fiel de la palabra de Dios. Un descubrimiento extraordinario traerá sufrimiento y dolor a mis pobres hijos. Valle de Sidim: he ahí el lugar. Permaneced en el camino que os indique y seréis victoriosos. Coraje. Yo rogaré a Jesús por vosotros. Adelante con alegría. Este es el mensaje que hoy os transmito en nombre de la Santísima Trinidad. Gracias por haberme permitido reuniros aquí una vez más. Yo os bendigo, en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén. Quedad en paz.
Mensaje de Nuestra Madre celestial Número:3395
2010-11-02
Queridos hijos, esperad la hora de Dios. Él está en el control de todo. Vuestra felicidad está en Sus manos. Confiad en Él y todo terminará bien para vosotros. Dios me envió hasta vosotros para llamaros a la conversión. No retrocedáis. Él espera vuestro sí. Abrid vuestros corazones y descubriréis la voluntad de Dios para vuestras vidas. Dedicad parte de vuestro tiempo a la oración y a la escucha de la palabra de Dios. Escuchad a Jesús. Él es vuestra orientación segura. Animaos y testificad que sois únicamente del Señor. La humanidad corre grandes peligros. He ahí el tiempo de vuestro regreso. Un tesoro escondido será descubierto en Cisjordania: Alegría y dolor para mis pobres hijos. Rezad, rezad, rezad. Este es el mensaje que hoy os transmito en nombre de la Santísima Trinidad. Gracias por haberme permitido reuniros aquí una vez más. Yo os bendigo, en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén. Quedad en paz.
Mensaje de Nuestra Madre celestial Número:3396
2010-11-06
Queridos hijos, Yo soy vuestra Madre y bien sabéis lo mucho que una Madre ama sus hijos. No os alejéis del Amor del Señor. El amor es más fuerte que la muerte y más poderoso que el pecado. Alejaos de la maldad y servid al Señor con fidelidad. Doblad vuestras rodillas en oración y no permitáis que la llama de la fe se apague dentro de vosotros. Cuando estáis alejados, os hacéis blanco del demonio. La oración os acerca a Dios. No crucéis los brazos. Dad lo mejor de vosotros en la misión que os fue confiada. La cruz será pesada para los habitantes de la Ucrânia. El dolor será grande para mis pobres hijos. Sufro por aquello que viene para vosotros. Adelante por el camino que os señalé. Este es el mensaje que hoy os transmito en nombre de la Santísima Trinidad. Gracias por haberme permitido reuniros aquí una vez más. Yo os bendigo, en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén. Quedad en paz.
Mensaje de Nuestra Madre celestial Número:3397
2010-11-07
Queridos hijos, vengo del cielo para conduciros A aquel que tiene palabras de Vida eterna. No retrocedáis. Abrid vuestros corazones y acoged mis llamados. La humanidad se contaminó con el pecado y necesita ser curada. Volveos al Señor. Él os ama con inmenso amor de Padre. Buscad fuerzas en la palabra de Dios y en la Eucaristía. Yo soy vuestra Madre y estaré a vuestro lado. Vine del cielo para enjugar vuestras lágrimas. Confiad plenamente en el poder de Dios y seréis victoriosos. Doblad vuestras rodillas en oración. Un hecho asombroso se dará en un famoso Parque Nacional. Un fuego destructor se levantará y los hombres han de llorar y lamentar. Sufro a causa de vuestros sufrimientos. Rezad, rezad, rezad. Este es el mensaje que hoy os transmito en nombre de la Santísima Trinidad. Gracias por haberme permitido reuniros aquí una vez más. Yo os bendigo, en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén. Quedad en paz.
Mensaje de Nuestra Madre celestial Número:3398
2010-11-09
Queridos hijos, coraje. No desaniméis. Dios está muy cerca de vosotros. Confiad en Él que ve en lo oculto y os conoce por el nombre. Tened confianza, fe y esperanza. En Dios no hay derrota. Volveos a Él y seréis victoriosos. La humanidad camina para el abismo de la destrucción que los hombres prepararon por sus propias manos. No os alejéis de la oración. Yo necesito de cada uno de vosotros. Sed fieles y en todo imitad Mi Hijo Jesús. No retrocedáis. Yo soy vuestra Madre y soy incansable. Os llamo porque deseo conduciros A aquel que es vuestro Único y Verdadero Salvador. Un hecho asombroso sucederá en China y se repetirá en Chile. La famosa Cordillera descenderá y mis pobres hijos han de llorar y lamentar. Sufro por aquello que viene para vosotros. Permaneced firmes en el camino que os señalé. Este es el mensaje que hoy os transmito en nombre de la Santísima Trinidad. Gracias por haberme permitido reuniros aquí una vez más. Yo os bendigo, en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén. Quedad en paz.
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