Mostrando entradas con la etiqueta EVANGELIZACIÓN EN EL AMOR DE DIOS PADRE. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta EVANGELIZACIÓN EN EL AMOR DE DIOS PADRE. Mostrar todas las entradas

domingo, 10 de julio de 2011

Pedidme la Gracia de poder escudriñar vuestro interior..... Mensajes a J.V., EVANGELIZACIÓN EN EL AMOR DE DIOS PADRE

Jun 15_11 El poder de la oración contra la posesión satánica.



Rosario vespertino
Temas:
  • Yo os estoy dando la respuesta a todas vuestras preocupaciones, Yo voy a traer Amor nuevamente a la Tierra.
  • Vosotros gozaréis con lo que Yo le daré, tanto a las almas que se queden, como a las almas que tomaré para el Reino de los Cielos.
  • Quiero que Me pidáis la Gracia de poder escudriñar en vuestro interior, todo aquello que está afectando a vuestro crecimiento espiritual.
  • Os quiero decir esto, para que tengáis mucho cuidado, hay diferentes tipos de posesiones satánicas.
  • Los malos, tendrán su castigo, tendrán su penitencia, pero necesito que regresen a Mí y necesito que vosotros os deis cuenta de ésta necesidad de Mi Corazón.
Mensaje de Dios Padre, Nuestro Señor Jesucristo y Dios Espíritu Santo, a J. V.
Primer Misterio, Habla Dios Padre
Sobre: Yo os estoy dando la respuesta a todas vuestras preocupaciones, Yo voy a traer Amor nuevamente a la Tierra.
Hijitos Míos, os he revelado varias veces sobre la purificación que la misma Iglesia y la humanidad tendrán. Pero el hombre es muy dado a darse a las preocupaciones, a aterrorizarse, a pensar siempre en lo negativo, cuando lo que vendrá será positivo, porque viene de Mí, vuestro Dios.
Mis pequeños, en vosotros mismos Yo escucho, en vuestros corazones, cómo estáis preocupados por la situación en la que estáis viviendo alrededor del mundo. Vuestro corazón sufre por todo lo que ve a su alrededor, estáis pasando momentos difíciles en todos sentidos, escucho vuestras preocupaciones, veo cómo os tratáis los unos a los otros, cómo ya no hay amor en vuestro trato, cómo ya no hay amor en vuestro corazón.
Yo os estoy dando la respuesta a todas vuestras preocupaciones, Yo voy a traer Amor nuevamente a la Tierra.
Con esto, Mis pequeños, quiero haceros entender que ésta purificación que se tiene que dar va a ser benéfica, porque viviréis lo que vuestro corazón anhela. Estaréis sufriendo un momento, el momento de la purificación en la que lo malo se eliminará y vedlo así, Mis pequeños, por eso no os debéis preocupar, al contrario, vosotros debéis estar contentos con lo que sucederá, porque iréis viendo cómo la maldad se irá erradicando de la Tierra e irá quedando todo lo que es bueno, todo aquello que sirve, seréis las semillas nuevas para un nuevo mundo.
Eso os debe alegrar, Mis pequeños, y es por eso que quiero que os fijéis y mantengáis vuestra esperanza en ésos momentos, momentos bellos, momentos en los que vosotros mismos agradeceréis de corazón lo que quedará y lo que quedará va a ser el remanente fiel, el remanente bueno, lo santo, lo bello, lo que sirve, lo que es fértil, lo que os va a ayudar a vivir, lo que traéis en vuestro corazón, porque ya vuestro corazón anhela cosas bellas, anhela paz, anhela armonía, anhela vida, vida en Dios, Mi Amor en vosotros.
Por eso os pido que agradezcáis, desde estos momentos, los actos, las bellezas, Mis actos Divinos que voy a permitir que lleguen a vosotros y a toda la humanidad para que vosotros seáis otra vez felices, para que seáis nuevamente Mi familia en la Tierra.
Segundo Misterio, Habla Dios Padre,
Sobre: Vosotros gozaréis con lo que Yo le daré, tanto a las almas que se queden, como a las almas que tomaré para el Reino de los Cielos.
Hijitos Míos, os pido oréis por aquellos hermanos vuestros, y que son muchos alrededor de la Tierra, que tienen vacío su corazón de Mí. No Me buscan, no Me toman en cuenta en su vida, no se apoyan en Mí. Viven como autómatas, viviendo solamente para obtener el dinero que les servirá luego para gastar en sus necesidades particulares y de ahí en fuera no buscan ningún tipo de espiritualidad, ningún apoyo espiritual para su alma. Viven vacíos y muchos de ellos, para llenar ésa vaciedad, tienden a los vicios y así se van perdiendo cada vez más.
Vosotros, Mis pequeños, estáis como almas salvavidas para muchos, muchos de vuestros hermanos. Vosotros os dais perfectamente cuenta, porque os he ido preparando para estos momentos, de que sabéis que muchos de vuestros hermanos no están preparados para una buena muerte o para llevar una vida espiritual que ameriten quedarse en los Nuevos Tiempos que se han de dar.
Sí, Mis pequeños, ciertamente, así como aquél hombre que busca la mejor semilla para sembrar en sus campos, ése agricultor experto que checa primeramente que su tierra sea de lo mejor, la abona y luego busca el grano más apropiado para que de ahí surja una buena cosecha.
Así Soy Yo, en estos tiempos, Mis pequeños, he de purificar la Tierra, he de quitar todo aquello que ha sido maltratado por satanás y por el hombre mismo, hombres que se volvieron instrumentos de satanás para destruir todas las bellezas que Yo creé para vosotros.
Primeramente haré que la Tierra quede nuevamente en la hermosura en la que Yo la creé en un Principio y luego dejaré aquellas almas buenas, aquellas almas que van a ser semillas de la más alta calidad y que, a través de estas almas se vendrá una nueva generación, en donde se Me amará, en donde se Me pondrá en el lugar que Me merezco, que Soy lo Primero de la Creación y luego, Me daréis hijos, a los cuales les daréis toda la información de vida para que crezcan santos, porque Yo a todos los quiero santos, Mis pequeños, y decir santidad, es llevar una vida en Mí, una vida en perfección, tanto de cuerpo como de alma.
Os vuelvo a repetir, Mis pequeños, se vienen momentos bellísimos, bellísimos para la generación que será escogida para iniciar los Nuevos Cielos y las Nuevas Tierras, el Nuevo Mundo que se ha de dar y eso os debe llevar a una alegría profunda. Si os toca a vosotros seréis consentidos aquí en la Tierra, en este Nuevo Mundo, pero si sois tomados y si habéis vivido Conmigo y si morís por defender lo que es Mío, también tendréis momentos bellísimos en el Reino de los Cielos para toda la eternidad.
Es pura alegría, todo lo que debéis sentir en estos momentos, Mis pequeños, son bellezas que Yo os voy a dar y lo que se vaya dando, como os dije, todo lo penoso, todo lo difícil que va a ver la humanidad, es para que se vaya destruyendo el mal.
Ciertamente se verán cosas terribles, porque satanás querrá contraatacar al Amor con el que Yo voy a estar empezando a limpiar todo lo que él ha destruido. Pero manteneos, Mis pequeños, en esa Fe, en ese deseo del cambio que os estoy prometiendo, porque vosotros gozaréis con lo que Yo le daré, tanto a las almas que se queden, como a las almas que tomaré para el Reino de los Cielos. Os bendigo, Mis pequeños y manteneos en paz.
Gracias, Mis pequeños.
Tercer Misterio, Habla Dios Espíritu Santo,
Sobre: Quiero que Me pidáis la Gracia de poder escudriñar en vuestro interior, todo aquello que está afectando a vuestro crecimiento espiritual.
Mis pequeños, Soy vuestro Dios Espíritu Santo. Desde que sois pequeños, vosotros vais dejando entrar en vuestro corazón, situaciones que os van afectando para vuestra vida, ahí se van quedando y éstas a la vez van normando vuestra existencia, vuestra personalidad. A veces eso se vuelve una situación difícil que no podéis superar y que, de lo cual, muchas veces ya ni consientes estáis que os está afectando a vuestra forma de ser, a vuestra personalidad, a vuestro trato con vuestros hermanos y peor tantito a vuestro trato con vuestro Dios.
Mis pequeños, Yo vivo en vosotros, estoy en vosotros, Yo os guío, Yo os protejo, Yo os aconsejo porque estoy en vuestro interior, y quiero que Me pidáis la Gracia de poder escudriñar en vuestro interior, todo aquello que está afectando a vuestro crecimiento espiritual, a vuestra perfección espiritual y que ésta, afecta también a vuestra perfección humana.
PedidMe esa Gracia, Mis pequeños, para que al conoceros íntimamente, podáis vosotros pedir perdón por vuestros pecados y errores pasados y pronto estará Mi Corazón, Mi Amor, la Sangre Preciosa de Jesús, vuestro Salvador, para limpiaros de aquello que está afectándoos, a veces, hasta fuertemente, como tantos hermanos vuestros, que van creciendo y se van volviendo de un carácter muy feo. Muchas personas no pueden tener un trato correcto con sus hermanos, se vuelven toscos, groseros, aislados y esto hace que la misma gente a su alrededor los rechace y, muchas veces, es por esto que os estoy explicando, que algo que pudo haber sucedido en la niñez, en la adolescencia se quedó ahí, muy profundamente arraigado en vuestro interior y os está afectando fuertemente.
Vosotros no sois perfectos, esto entendedlo bien, Mi Perfección Divina os está ayudando a vuestra perfección humana.
Hacedlo, Mis pequeños y presto estaré para ayudaros a que vosotros podáis eliminar aquello que está afectando vuestra perfección.
Gracias, Mis pequeños.
Cuarto Misterio, Habla Nuestro Señor Jesucristo,
Sobre: Os quiero decir esto, para que tengáis mucho cuidado, hay diferentes tipos de posesiones satánicas.
Hijitos Míos, Soy Jesús, vuestro Hermano. Mis pequeños, os quiero decir esto, para que tengáis mucho cuidado, hay diferentes tipos de posesiones satánicas. Las peores son aquellas en las cuales el alma queda totalmente inhabilitada para hacer su voluntad, satanás toma totalmente la voluntad, tanto de cuerpo como de alma de estos hermanos vuestros, los cuales requieren la ayuda de un sacerdote preparado para liberarlos.
Pero hay otras posesiones satánicas, con las cuales debéis tener más cuidado, porque en estas posesiones, vosotros veis a vuestros hermanos actuando, aparentemente bien, creéis que están consientes con lo que hacen pero, realmente, en su posesión, es satanás quien las está moviendo. Las decisiones, los ordenamientos, lo que ellos hacen, realmente es satanás quien los mueve y entonces, vosotros, debéis, con la ayuda del Espíritu Santo, conocer si realmente lo que se está diciendo, es correcto o es satánico, por eso os dije “por sus frutos los conoceréis”. Si las palabras y los actos de estos hermanos vuestros, son los correctos, os llevarán siempre a un bien, pero si son incorrectos, causarán un mal físico, espiritual, para los pueblos, o aún para las naciones de la Tierra.
La posesión satánica se da, cuando el alma, voluntariamente, está dispuesta a darse al enemigo, entonces éste los va a tomar y él se va a valer de estos instrumentos, ahora de él, para ir causando mucho mal en la sociedad, en las familias, en la Iglesia, en el mundo entero.
Aparentemente, como os dije, creeréis que están actuando por su propia voluntad, pero no es así, Mis pequeños. Ahora lo estáis viendo alrededor del mundo, cómo muchos hermanos vuestros, a todos niveles, dentro de la Iglesia, dentro de los gobiernos de la Tierra, en las familias, estáis viendo cómo están actuando en maldad. Sus frutos no son buenos, sus frutos están llevándoos a un mal camino, sus decisiones no son sabias, son negativas, están destruyendo en lugar de crear.
Como os dije, hay diferentes niveles de posesión pero, por el hecho de actuar en el mal, ya no están viviendo en el Bien, están dejando ellas mismas que sea satanás quien actué en ellas y, por eso os he pedido tanto que oréis. La oración va a ir contrarrestando toda esa actuación de satanás en estas almas de vuestros hermanos.
Debéis de orar por aquellas almas en las cuales estáis viendo que realmente están actuando en el mal, porque sus frutos no son buenos.
Orad por ellas, para que dejen de actuar en el mal, para que satanás no las tome como instrumentos de donde está saliendo maldad y está destruyendo, a través de éstas almas, a otras almas o a las decisiones que se deben tomar en el mundo.
Ayudaos pues con la oración y pedid siempre Mi ayuda, Mis pequeños, para que Yo esté con vosotros, porque Yo estuve en la Tierra y os conozco perfectamente. Conozco los ardides de satanás y conozco aquellos que han dejado entrar en su corazón el mal y están atacando a sus hermanos.
Venid a Mí, Mis pequeños, para que os ayude en todo momento y que os ayude también a discernir, contra esta maldad, lo qué debéis hacer, cómo lo debéis hacer para que no quedéis afectados vosotros y hermanos vuestros y además podáis salvar al mundo de las decisiones de estos hermanos vuestros que se han ofrecido al poder satánico y del mal.
Gracias, Mis pequeños.
Quinto Misterio, Habla Dios Padre,
Sobre: Los malos, tendrán su castigo, tendrán su penitencia, pero necesito que regresen a Mí y necesito que vosotros os deis cuenta de ésta necesidad de Mi Corazón.
Hijitos Míos, estáis sobre la Tierra y sabéis, como os he dicho, que el príncipe de éste mundo es satanás y él siempre os está rondando, está tratando de destruir vuestra vida, tanto humana como espiritual y principalmente la espiritual, para que no podáis tener la salvación eterna. Él siempre os está rondando para haceros caer en pecado, en maldad, en error y que os opongáis a Mí, vuestro Dios, que eso es lo que más desea siempre, que vosotros seáis Mis enemigos, que no seáis Mis hijos, que no Me tengáis como vuestro Padre, que Soy, y ahí que muchos de vuestros hermanos llegan a creerle tanto a satanás, que Me hacen a un lado de su vida y no Me toman como lo que Soy, la Bondad Infinita.
Mis pequeños, os pido oréis por aquellos hermanos vuestros que ya han sido engañados fuertemente por satanás y que, ciertamente, satanás a donde os lleva, es al pecado y el mismo hombre, por conveniencia, por gusto, acepta en parte ése pecado, porque le trae placer, pero luego se da cuenta de su error y en su error, se va encadenando más a la maldad de satanás.
Os pido que oréis por ésos hermanos vuestros, porque Yo los amo, a pesar de que Me rechazan, Yo los amo, a pesar de que se hayan satanizado, Yo los amo, y si sois verdaderamente Mis hijos, debéis entender esto, porque el Amor, el verdadero Amor, nunca va a despreciar a los que le pertenecen. Vosotros, los que tenéis hijos, amáis a vuestros hijos, aún a pesar del mal en el que estén o el mal que produzcan y Yo, que Soy la Bondad Infinita y Soy vuestro Creador, vuestro Padre, con mayor razón os amo, a buenos y a malos.
Ciertamente, los malos, tendrán su castigo, tendrán su penitencia, pero necesito que regresen a Mí y necesito que vosotros os deis cuenta de ésta necesidad de Mi Corazón, os quiero salvar a todos y por eso cuento con vosotros, los que estáis Conmigo.
Os amo, os amo a todos y a todos os quiero de regreso. Que vuestras oraciones sean continuas, Mis pequeños, no os dejéis seducir por satanás, no os dejéis seducir por la flojera o por las diversiones o por todo aquello que os separe de la oración y sobre todo de la oración profunda, en la que Yo estoy Presente plenamente. Mientras vosotros oráis, tenedMe siempre en vuestra mente y en vuestro corazón y de esta forma, satanás no os vencerá. Ayudad a vuestros hermanos y vosotros obtendréis un premio eterno muy grande.
Gracias, Mis pequeños.


miércoles, 6 de julio de 2011

Evangelización en el Amor de Dios Padre


Jun 07_11 La Luz del Espíritu Santo os ilumine para que no flaqueéis en vuestros últimos momentos.



Rosario vespertino
Temas:
  • La purificación de todo lo creado se dará, porque por causa del Pecado Original todo fue afectado, lo visible y lo invisible.
  • Todo se tiene que dar y se dará en el Amor, en el sacrificio, en la entrega, Yo Me di por vosotros, ahora es vuestro tiempo.
  • Vuestro corazón se ha endurecido y porque se ha endurecido, os falta Caridad hacia vuestro prójimo.
  • Buscad pues, Mis pequeños, que se os alabe en el mundo del más allá y no en el de acá, que solamente os lleva al error, a la soberbia y a la separación de Mi Corazón.
  • Os pido que pidáis que la Luz del Espíritu Santo os ilumine para que no flaqueéis en vuestros últimos momentos aquí en la Tierra.
Mensaje de Dios Padre a J. V.
Primer Misterio, Habla Dios Padre,
Sobre: La purificación de todo lo creado se dará, porque por causa del Pecado Original todo fue afectado, lo visible y lo invisible. (Lenguas…) Hijitos Míos, la purificación de todo lo creado se dará, porque por causa del Pecado Original todo fue afectado, lo visible y lo invisible.
Mis pequeños, tenéis la Iglesia fundada por Mi Hijo Jesucristo, no hay nada más bello que podáis tener, en Mi Iglesia y todo lo que pueda salir de ella, porque es Mi Presencia Viva entre vosotros, pero ciertamente la maldad de satanás la ha afectado, la ha ensuciado.
No tenéis ahora lo que es la verdadera Iglesia que debéis vivir y seguir. Ciertamente ella será purificada, junto con toda la Humanidad, quedará en una pureza tal, que vosotros os asombraréis de lo que veréis después de que tengáis Mi Iglesia purificada y santificada entre vosotros. Orgullosos estaréis de tenerla tal como fue creada y la cuidaréis, Mis pequeños, como piedra preciosa.
Orad mucho, Mis pequeños, para que se dé ya está purificación, vosotros, los que estáis Conmigo, vosotros, los que anheláis tener nuevamente las bellezas que fueron creadas para que vosotros gozarais, porque sois Mis hijos y Yo consiento a aquellos que son Míos y que respetan lo que es Mío.
Ciertamente, ahora, en este tiempo, aquellos que debieran respetarla, aquellos a los que se les dio este ministerio de cuidarla, no están ni ellos mismos respetándola.
Orad mucho por ellos, Mis pequeños, por Mis ministros, sacerdotes, muchos de ellos ya no Me aman, ya no respetan lo que debe ser la verdadera Iglesia, han perdido el Amor. Ya no acuden a ella para recibir todos los dones que debéis tener y principalmente ellos, que los deben tener, para guiar a Mi pueblo, a todo el pueblo, que es la Tierra entera.
Ciertamente veréis cosas dolorosas a vuestro alrededor cuando empiece esta purificación de Mi Iglesia, pero ya os he pedido que os mantengáis confiados en que se tiene que dar esta purificación y que veréis cosas tremendas pero de todo ello saldrá un bien supremo, un bien Divino, que es Mi Presencia total entre vosotros y esto lo gozaréis, Mis pequeños, los que Me amáis y los que estáis luchando para que esto se dé nuevamente sobre la Tierra.
Os amo, Mis pequeños y mantened en vuestro corazón este deseo grande de ver Mi Iglesia purificada y santificada entre vosotros.
Gracias, Mis pequeños.
Segundo Misterio, Habla Dios Padre,
Sobre: Todo se tiene que dar y se dará en el Amor, en el sacrificio, en la entrega, Yo Me di por vosotros, ahora es vuestro tiempo.
Hijitos Míos, entre los primeros cristianos se vio el sacrificio, primeramente, el sacrificio de donación, para buscar nuevas almas que se adhirieran a Mí, Mis pequeños. Muchos sufrieron, muchos murieron por traerMe almas, para que vivieran en la Verdad, para que vivieran en Mi Amor.
Estos tiempos, Mis pequeños, van a ser como esos primeros tiempos, ya que vosotros, siendo apóstoles de estos tiempos, también Me atraeréis almas, oraréis por ellas, protegeréis a otros de vuestros hermanos, buscaréis que tengan vida, pero esa vida que vosotros daréis y que buscaréis. A muchos de vosotros os traerá muerte física, mas no la espiritual.
Gracias a ello, vuestra santificación estará asegurada y el Reino de los Cielos, eterno para vosotros, así que no temáis, Mis pequeños, todo se tiene que dar y se dará en el Amor, en el sacrificio, en la entrega, Yo Me di por vosotros, ahora es vuestro tiempo, pero vosotros contáis con Mi ayuda, con Mi protección, pero sobre todo con Mi Fortaleza. Os he dicho que Yo tomaré los dolores, os daré ésa Fuerza Espiritual que doblegará el dolor físico para que vosotros deis un ejemplo santo ante vuestros hermanos cuando seáis llamados a la prueba.
Gozaréis en la prueba, a pesar del dolor, si es que hay alguno, porque os he dicho que Yo lo tomaré, pero gozaréis, Mis pequeños, porque en el momento de la prueba, (Lenguas…), estaré con vosotros, tomándoos de la mano, cubriéndoos con Mi Gracia, gozando con vosotros el momento de la partida, para presentaros eternamente Conmigo y para que os dé el Abrazo del gozo eterno.
Bendigo vuestro apostolado, Mis pequeños, bendigo el amor con el que estáis llevando vuestra misión.
Venid a Mí, Mis pequeños, para que Yo os dé lo que necesitaréis en estos tiempos de misión final para varios de vosotros, pero os pido, a todos vosotros, que oréis de corazón, como ya os he pedido, tanto para vosotros mismos, como para vuestros hermanos alrededor de la Tierra, que están llevando la misma misión que vosotros. Estáis llamados a una misión bellísima, grandísima, la salvación de las almas.
No os imagináis, Mis pequeños, cómo pago Yo, vuestro Dios, el sacrificio que hacéis con vuestra donación el tiempo que dais para salvar almas, para traérMelas a Mí y Yo las pueda salvar eternamente. Cuando estéis en el Reino de los Cielos os daréis cuenta de ésta realidad tan bella y tan grande y es cuando vosotros mismos gozaréis, junto Conmigo, el bien que hicisteis para vuestros hermanos.
Os bendigo, Mis pequeños y os atraigo a Mi Corazón.
Gracias, Mis pequeños.
Tercer Misterio, Habla Dios Padre,
Sobre: Vuestro corazón se ha endurecido y porque se ha endurecido, os falta Caridad hacia vuestro prójimo. Hijitos Míos, os pido Me pidáis que os dé la sensibilidad espiritual. La habéis perdido, Mis pequeños, porque satanás se ha encargado de mostraros crudamente, una realidad que ahora estáis viviendo en lo humano, que os ha quitado esa sensibilidad, esa delicadeza espiritual.
Veis todos los días escenas crudas, groseras, malas y os habéis ya acostumbrado a ello. Veis asesinatos, pero asesinatos en forma cruel, veis cómo son afectados Mis pequeños hijitos y ya lo tomáis como cosa de todos los días. Tanto mal que veis a través de los medios de comunicación que, desgraciadamente, ahora ya lo tomáis como natural, como normal, como noticia de todos los días y eso ha hecho que se forme una costra alrededor de vuestro corazón. Ya no tenéis un corazón sensible, bello, un corazón que busque por el bien de vuestros hermanos y por vuestro propio bien. Ya no se mueve vuestro corazón a esa sensibilidad de ver por la necesidad del prójimo.
Si Yo permito, en un momento dado, que estéis viendo esta crudeza, esta maldad, es para que inmediatamente volquéis vuestro corazón hacia la oración, hacia la intercesión, hacia el pedir a Mi Sacratísimo Corazón, que cambie todos esos corazones, que se han volcado hacia la maldad, hacia el satanismo, para que vuelvan a Mí, para que se arrepientan de sus pecados, para que no sigan destruyendo a sus hermanos, que es un pecado gravísimo ante Mis Ojos.
PedidMe pues, Mis pequeños, que volváis a tener ése corazón de niño que se mueve en misericordia por ver el pajarillo muerto, por ver la abejita que se ahogó, por ver el gusanito que quedó aplastado por la pisada de un adulto que no lo vio. Esa sensibilidad en vuestra mirada es lo que necesito de vosotros, Mis pequeños, para que os deis cuenta de la realidad a la que os está llevando satanás, que ha endurecido vuestro corazón, que al endurecerlo ya no brota oración de vuestro corazón hacia vuestros hermanos y hacia vosotros mismos.
Meditad esto, Mis pequeños y os daréis cuenta que es una realidad, que vuestro corazón se ha endurecido y porque se ha endurecido, os falta Caridad hacia vuestro prójimo.
Gracias, Mis pequeños.
Cuarto Misterio, Habla Dios Padre,
Sobre: Buscad pues, Mis pequeños, que se os alabe en el mundo del más allá y no en el de acá, que solamente os lleva al error, a la soberbia y a la separación de Mi Corazón. Hijitos Míos, satanás llevó a vuestros Primeros Padres a alejarse de Mí, de Mi Voluntad. Los llevó a buscar el vivir totalmente apartados de Mí, haciéndoles creer que podían vivir con sus fuerzas, con sus capacidades, pero cuando se dieron cuenta de su error, ya era demasiado tarde.
Esto se ha venido dando por los siglos, Mis pequeños, en donde el hombre se siente fuerte, ya sea por su fuerza muscular, ya sea por su poderío económico, ya sea por su poderío político, ya sea por ser jefes de grupos, de tropas, y así, el hombre, buscando una protección particular, se siente que puede tener todo y se siente que sin Mí puede lograrlo todo, y no es así, Mis pequeños, porque tarde se da cuenta de que toda esa fuerza en la cual contaba, se pierde, se queda solo y aquellos que antes, supuestamente, lo protegían y le daban su apoyo, le dan la espalda, o lo material, con lo cual contaba, lo pierde y se queda solo.
Mis pequeños, tantas veces que os he dicho que sin Mí no valéis nada, sois como un granito de arena, no sois nada. Mi Amor, Mi Ternura, es lo que hace que valgáis ante Mis Ojos, Yo os he creado y para Mí, valéis mucho, porque sois Mi creación, pero en sí, vosotros, por vuestros méritos y capacidades, no valéis, Mis pequeños, estáis demasiado limitados y no porque Yo os haya creado así, porque Yo no os creé así como ahora estáis, sino porque vuestros Primeros Padres perdieron todo lo que tenían, por eso, por haberse alejado de Mí, estáis así, Mis pequeños, por el Pecado y por vuestra soberbia.
Cuando vosotros, en humildad, os acercáis a Mí y os soltáis totalmente a Mi Voluntad, es cuando empezáis a valer mucho, porque ya es Mi Presencia en vosotros, ya no estáis contando con vuestras propias fuerzas, ya lo que sale de vosotros ya no es vuestra voluntad, sino la Mía, os volvéis instrumentos valiosos de Mi Voluntad. Es cuando empezáis a valer ante Mis Ojos y ante los ojos de vuestros hermanos.
Entended bien esto, Mis pequeños, porque mientras más os alejéis de Mí y os sintáis poderosos, sin Mi Presencia en vosotros, menos valdréis. En cambio, cuando vuestra voluntad es apartada de vuestro ser y dejáis que Mi Voluntad tome el lugar principal en vuestra vida, es cuando valéis y empezáis a ayudarMe en lo que debéis ayudarMe, Mis pequeños, que es en la salvación de las almas de vuestros hermanos y para que Mi Reino se dé ya sobre la Tierra.
Os he explicado tanto esto, Mis pequeños, pero vuestra soberbia os sigue llevando a ese alejamiento de Mi Voluntad en vosotros. Queréis ser algo ante el mundo, queréis ser alguien, a quienes aplaudan, que digan: “miren ahí esta él, sigámoslo”. Queréis sobresalir y por ahí no es el camino que debéis seguir. Buscáis fama, fortuna, queréis ver vuestro nombre en periódicos o en pancartas, que todos os conozcan y mientras más se vea vuestro nombre ante los hombres, menos valdréis.
El verdadero valor radica en Mi Presencia en vosotros y eso os va a llevar a la humildad, al apartaros del mundo, porque vosotros no fuisteis creados para ser del mundo, vosotros veis con vuestros ojos del cuerpo el mundo que os rodea, pero ahora os pido que veáis con vuestros ojos del alma al mundo real, al cual llegaréis en algún momento de vuestra existencia. Dejaréis vuestro cuerpo aquí y entraréis a vuestra verdadera vida en el Reino de los Cielos y el mundo de allá es mucho más grande y mucho más bello que el que ahora veis aquí.
Buscad pues, Mis pequeños, que se os alabe en el mundo del más allá y no en el de acá, que solamente os lleva al error, a la soberbia y a la separación de Mi Corazón con vuestro corazón.
Buscad pues que sea Mi Nombre el que se nombre mientras estéis aquí en la Tierra. Que vuestra vida, vuestra misión, vuestra causa, sea que todo el mundo Me conozca y no se os alabe a vosotros, sino que se alabe Mi Santo Nombre, ésa es vuestra misión aquí en la Tierra y vuestro premio en el Reino de los Cielos. Cuando dejéis esta vida, entonces, vuestro nombre sí será alabado allá y es cuando gozaréis eternamente por el bien que hicisteis aquí en la Tierra de que Mi Nombre fuera conocido por todos vuestros hermanos y en todos los tiempos.
Gracias, Mis pequeños.
Quinto Misterio, Habla Dios Padre,
Sobre: Os pido que pidáis que la Luz del Espíritu Santo os ilumine para que no flaqueéis en vuestros últimos momentos aquí en la Tierra. Hijitos Míos, los que estáis Conmigo, debéis estar seguros, sí, Mis pequeños, os repito, debéis estar seguros de vuestra salvación eterna. Os pido que pidáis que la Luz del Espíritu Santo os ilumine para que no flaqueéis en vuestros últimos momentos aquí en la Tierra, ya sea de muerte natural o ya sea de persecución.
No temáis, Mis pequeños, ciertamente satanás no quiere vuestra salvación eterna pero, estando Conmigo, debéis saber que conozco perfectamente vuestro interior, os conozco desde que fuisteis creados, conozco perfectamente vuestra vida, conozco vuestros pecados íntimos, vuestras faltas, vuestros errores, los conozco perfectamente y con esto quiero decir que ante Mis Ojos, vosotros, os presentáis desnudos, espiritualmente hablando. No podéis esconder nada, así que no temáis, Mis pequeños en ésos momentos de prueba final, ante Mis Ojos estáis como fuisteis desde el Principio.
Os he guiado, os he aceptado, os he preparado, os he trabajado para que vosotros estéis Conmigo eternamente. Ciertamente no hay almas perfectas, porque todos estáis afectados por el Pecado Original. Aun así, Yo os amo con vuestra alma imperfecta y para eso os he dado tantas Gracias y Bendiciones. Os he dado la Vida entera de Mi Hijo para vuestra salvación, así que no temáis, Mis pequeños, de que os presentéis ante Mí con vuestras imperfecciones, os amo así porque vosotros Me habéis amado. Os quiero de regreso Conmigo al Reino de los Cielos y esto, Mis pequeños, tenedlo siempre presente para que en esos momentos podáis enfrentaros a las fuerzas de satanás y podáis decirle: “mi Padre me ama, aún a pesar de la duda que me quieres meter en mi mente y en mi corazón, yo quiero estar con mi Dios eternamente” y de esta forma, Mis pequeños, vuestra salvación eterna estará asegurada porque estaréis seguros de Mi Amor en vosotros.
Gracias, Mis pequeños.


martes, 12 de abril de 2011

EVANGELIZACIÓN EN EL AMOR DE DIOS PADRE - Mensaje de Dios Padre, Dios Espíritu Santo, y La Santísima Virgen María, J.V.


Mar 30_11
Acercaros lo más pronto posible a Mí, para que Yo os proteja de todo lo que se dará.



Rosario vespertino
Temas:
  • Veréis cosas muy, muy diferentes a lo que normalmente veis en la naturaleza y esto será para que vosotros empecéis a reaccionar.
  • Yo no puedo entrar a los corazones si vosotros no Me lo permitís, Yo respeto vuestro libre albedrío. Yo respeto vuestro ser.
  • Siempre estoy con vosotros, por favor, Mis pequeños, no Me hagáis Vivir, -perdón-, junto con las porquerías con las que llenáis vuestro corazón.
  • Estáis viendo por un lado la obscuridad, la maldad de un mundo viejo, pero por otro lado, estáis viendo también la Luz, las Promesas, que se van ya haciendo realidad.
  • No desperdiciéis nuevamente la Gracia que Yo derramaré sobre vosotros, porque será la última antes de la Gran Tribulación.
Mensaje de Dios Padre, Dios Espíritu Santo, y La Santísima Virgen María, J.V.
Primer Misterio, Habla Dios Padre,
Sobre: Veréis cosas muy, muy diferentes a lo que normalmente veis en la naturaleza y esto será para que vosotros empecéis a reaccionar.
(Lenguas…) Hijitos Míos, Yo Soy vuestro Padre y Creador y así como vosotros, que sois padres en la Tierra, conocéis a vuestros hijos, conocéis su carácter, conocéis su forma de ser, sabéis cómo reaccionan en determinadas situaciones, así Yo os conozco y os conozco perfectamente, más que los padres de la Tierra conocen a sus hijos. Y porque os amo, Mis pequeños, y porque quiero la salvación de todos, vais a tener señales. Señales en lo material, en lo físico, alrededor del mundo, ciertamente fuertes, Mis pequeños y que se saldrán de toda lógica humana, para que os deis cuenta que hay Alguien más poderoso que puede lograr esto.
Ciertamente muchas almas regresarán a Mí, vendrán a buscar Mi ayuda y protección, al ver todas estas situaciones que se darán alrededor del mundo, porque el miedo, el temor a lo que pueda suceder, los acercará a Mí y, luego, Yo los traeré a Mi Corazón y el miedo se tornará en amor, en alegría, en paz, porque todos aquellos que Me siguen, que están Conmigo, vienen a Mí, no por temor, ni para vivir en el temor. Si vienen por temor, será como un niño asustado que se ha salido del hogar y que se asusta ante el mundo y las situaciones que se están dando. Y así regresaréis muchos de vosotros, porque os salisteis de la Casa Paterna, quisisteis hacer vuestra voluntad y os asustasteis con el mundo y con lo que satanás os quiso hacer para que destruyera vuestra alma, destruyera vuestro ser.
Por eso, Mis pequeños, os advierto, y os advierto con Amor, os advierto como un padre amoroso haría con los hijos cuando salen del hogar sin permiso y se van a hacer lo que es su voluntad. Tendréis, os repito, situaciones fuertes, dolorosas, que os asustarán, que no sabréis qué hacer en ésos momentos, especialmente aquellos que no contáis con Mi apoyo, porque no lo habéis buscado.
Veréis cosas muy, muy diferentes a lo que normalmente veis en la naturaleza y esto será para que vosotros empecéis a reaccionar y empecéis a daros cuenta que os habéis alejado de Mí, vuestro Dios y Creador, que Yo os estoy esperando, que abro Mis Brazos, para que vosotros, todos vosotros lleguéis de regreso a Mí, porque Yo os voy a proteger.
Ciertamente, satanás, ante toda esta situación, que Yo permitiré, que parte saldrá de Mí y parte de él, no solamente tratará de atemorizaros, sino también de destruiros, por eso, deberéis acercaros lo más pronto posible a Mí, para que Yo os proteja de todo lo que se dará.
Os amo, Mis pequeños, amo vuestra vida, amo vuestro corazón, amo vuestra alma, os quiero proteger contra la destrucción que satanás quiere producir alrededor del mundo.
Que Mi Amor os proteja, que Mi Amor os cubra y que la Gracia del Espíritu Santo esté sobre vosotros y os haga reaccionar para que todos regreséis a Mí.
Gracias, Mis pequeños.
Segundo Misterio, Habla Dios Padre,
Sobre: Yo no puedo entrar a los corazones si vosotros no Me lo permitís, Yo respeto vuestro libre albedrío. Yo respeto vuestro ser.
(Lenguas…) Hijitos Míos, Mi Hijo os dijo: “ámense los unos a los otros como Yo os he amado”. Él mostró ése Amor, el Amor de todo un Dios entre los hombres, un Amor Divino, para que pudierais compararlo con el amor del ser humano, que creíais que era el verdadero.
Este Amor Divino es el que se debe posesionar de las almas, porque este es el Amor Divino que tenían vuestros Primeros Padres, Adán y Eva. Ellos perdieron éste Amor Divino y debéis vosotros volver ahora, con vuestro libre albedrío y sobre todo, deseándolo de corazón a regresar al Amor Divino en vuestro ser, para ello, debéis vosotros ejercitar éste deseo, continuamente debéis repetir, en vuestro corazón, que deseáis que Mi Amor Divino se posesione nuevamente de vosotros, porque Yo no puedo entrar a los corazones si vosotros no Me lo permitís. Yo respeto vuestro libre albedrío, Yo respeto vuestro ser, porque así Yo lo quise hacer para con vosotros, para que vosotros realmente os ganarais el Reino de los Cielos luchando por obtenerlo.
Ciertamente, Soy vuestro Padre, vosotros Mis hijos y el Padre regala a los hijos infinidad de cosas pero, cuando van creciendo, después tienen que ganarse todos ésos regalos. Cuando sois pequeños no podéis meditar sobre esto, porque todavía no tenéis el uso de razón ni tenéis todavía edad para saber que se tienen que ganar las cosas, pero los padres, desde pequeñitos, os van enseñando que si queréis algo, debéis hacer bien vuestra tarea, os debéis portar bien. De una forma u otra se os va enseñando que os debéis ganar las cosas y, por eso os pido, Mis pequeños, que Me pidáis que Yo derrame Mis Bendiciones sobre vosotros, que os dé todo lo necesario para que os podáis ganar Mis Gracias, porque vosotros, ciertamente, sois muy pequeños, no sabéis cómo actuar en verdadera Gracia, en verdadero amor, en verdadera humildad y sobre todo, en verdadera pureza ante Mí.
Satanás os ha desviado tanto que ya vosotros no sabéis lo que es perfectamente bueno, porque lo que es perfectamente bueno, viene de Mí y vosotros, en el mundo, que estáis tan agobiados ya con el ataque de satanás, ya no sabéis realmente lo que es bueno para vosotros y para vuestros hermanos.
Por eso, pedidMe de corazón, que Yo pueda ya entrar en vosotros, dadMe permiso, Mis pequeños, de que todo un Dios, Yo, vuestro Padre, pueda entrar en vosotros, os purifique, limpie todo aquello que se ha ido deteriorando con los siglos y que ya podáis regresar a Mí, limpios, purificados y sobre todo, deseosos de estar ante Mi Presencia y vivir siempre en Mi Amor.
Haced vuestra tarea, Mis pequeños, hacedla lo mejor posible, que el regalo ya está frente vosotros, y se os dará, os lo prometo, pero trabajad, aunque sea un poquito, para recibirlo.
Gracias, Mis pequeños.
Tercer Misterio, Habla Dios Espíritu Santo,
Sobre: Siempre estoy con vosotros, por favor, Mis pequeños, no Me hagáis Vivir, -perdón-, junto con las porquerías con las que llenáis vuestro corazón.
(Lenguas…) Hijitos Míos, Soy vuestro Dios Espíritu Santo, vengo con vosotros, Mis pequeños, porque Soy Luz, Soy Amor, Soy Vida, Soy la Presencia Viva en el corazón de cada uno de vosotros, de vuestro Dios.
Soy la Tercera Persona de la Santísima Trinidad y Vivo en vosotros, Mis pequeños, es un regalo inmenso que Nuestro Padre Dios hizo para cada uno de vosotros, que Yo pudiera habitar, desde vuestra concepción, en vuestro ser.
Mis pequeños, estos son momentos en que Yo os llevaré hacia la Verdad, os llevaré a la Luz Verdadera, os llevaré al Amor Infinito de Nuestro Dios. Soy Dios y reconozco la Paternidad del Padre, porque he sido Creado por Él y Soy el Amor Infinito de Él y que Yo Me doy hacia vosotros y vosotros estáis llamados a ser parte de ése Amor, porque fuisteis creados para el Amor y para vivir eternamente en el Amor.
Ciertamente, satanás se ha encargado de llevaros por caminos contrarios a la Verdad para la que fuisteis creados y para la razón por la que tenéis ésta vida que Él os ha prestado para servirLe.
Mis pequeños, no os dais cuenta de éste don tan grande que habéis recibido de vuestro Padre, de vuestro Dios y Creador, el don de la vida. Servir a vuestro Dios, es lo más grande que un alma puede tener y, especialmente, cuando se os ha dado el don de la vida y para que vuestro camino fuera seguro, fui puesto en vuestro interior. Estoy en cada uno de vosotros para que vuestra misión sobre la Tierra fuera correcta, fuera verdadera, fuera llena de Luz y que vivierais y trajerais de regreso, hacia el Amor, a todas las almas que pudierais.
No os imagináis, Mis pequeños, os vuelvo a repetir, esta Gracia tan grande que habéis recibido, no la habéis meditado lo suficiente para que esta Gracia la pudierais vosotros agradecer de corazón a vuestro Dios, a Nuestro Dios, a Nuestro Padre. Yo, siendo Dios, lleno de Amor, deseo daros a cada uno de vosotros esa Vida, esa Vida Divina a la que vosotros debéis llegar.
Mucha maldad hay a vuestro alrededor y, en lugar de tratar de evitarla, os habéis involucrado dentro de ella, os habéis ensuciado.
Vinisteis a luchar a la Tierra, a que el Amor de vuestro Dios se impusiera, con delicadeza, con respeto, en todas las almas. Y os digo “se impusiera”, porque esa es la realidad en la que debéis vivir, pero no sois forzados a vivir en el Amor si no queréis. Vuestros actos, vuestras palabras, toda vuestra forma de ser, debe llevaros a vosotros mismos y a vuestros hermanos hacia esta realidad Divina: vivir en el Amor.
Esta es la única y real función que tiene vuestra vida en la Tierra, producir Amor, el Amor que os enseñó vuestro Dios, Jesucristo, Encarnado, para que pudierais tomar de Él ejemplo, ejemplo humano y llevarlo a vuestro corazón.
Yo no os abandono, siempre estoy con vosotros, pero hay tantos, tantos de vuestros hermanos que están tan distraídos en el mundo, que a pesar de que Yo Vivo en vuestro interior, no se Me toma en cuenta, no Me buscan, no buscan Mis Consejos, no buscan tener una vida interior, a veces, hasta temen entrar dentro de su corazón, porque están temerosos de ver su realidad pecaminosa, pero, Mis pequeños, para eso estoy Yo. Os conozco perfectamente, no podéis esconder nada ante Mí y, aún así, conociéndoos y conociendo vuestra pequeñez y debilidad, os acompaño en todo momento, para que pongáis vuestro corazón sobre Mi Corazón y os ayude a que éste se purifique y que podáis presentaros, en algún momento, ante Nuestro Padre y Nuestro Dios, purificados y que la Gracia de Nuestra Santísima Trinidad, os lleve a la perfección y podáis gozar eternamente el regalo al que habéis sido llamados.
Mis pequeños, no Me abandonéis, debéis saber que estoy en vosotros. En cualquier momento de tribulación, si no obtenéis ayuda externa, la mejor ayuda que tendréis, es entrar a vuestro corazón, platicar Conmigo, pedidMe ayuda, Yo Soy vuestro Dios y os podré ayudar en todo lo que necesitéis.
Mis pequeños, estáis llamados a algo grande, a algo inmenso, Mi Gracia está con vosotros, Mi Poder Divino está con vosotros, solamente necesito vuestra humildad, vuestra sencillez y, sobre todo, vuestro respeto a Mi Presencia en vosotros. No llenéis vuestro corazón y vuestra alma con la maldad de satanás, ensuciáis Mi Presencia, Me ensuciáis a Mí, que Soy vuestro Dios y que Vivo en vuestro interior.
Yo nunca salgo de vuestro ser, pero quiero que vuestro ser esté limpio, esté puro y esto lo puedo lograr Yo y, si entendéis esto que os acabo de explicar, que siempre estoy con vosotros, por favor, Mis pequeños, no Me hagáis Vivir, -perdón-, junto con las porquerías con las que llenáis vuestro corazón y en las que todo un Dios no debe estar. Tanta maldad y tanta suciedad con la que llenáis vuestro corazón y que aceptáis de satanás, cuando Yo estoy viviendo dentro de vosotros, Yo no Me merezco esto que Me hacéis.
Gracias, Mis pequeños.
Cuarto Misterio, Habla La Santísima Virgen María,
Sobre: Estáis viendo por un lado la obscuridad, la maldad de un mundo viejo, pero por otro lado, estáis viendo también la Luz, las Promesas, que se van ya haciendo realidad.
Sí, hijitos Míos, ésta Maternidad que Me concedió Nuestro Padre Dios, para que a través de Mí, vuestra Madre, llegara El Salvador a la humanidad, fue una Maternidad física. Ciertamente Lo tuve en Mi Vientre, ésos nueve meses Divinos, Celestiales, una Gracia inmensa, grandísima que Nuestro Dios hizo en Mí, Su Esclava, Su Pequeña, Su Creaturita.
Pero, Mis pequeños, Mis hijitos, vosotros estáis llamados también a llevar a cabo una maternidad espiritual, todos vosotros estáis llamados a traer en vuestro interior a Mi Hijo y, es más, a que también Él Viva plenamente en vosotros. También es una Gracia inmensa, que Nuestro Padre Dios, en Su Santísima Trinidad, hace a cada uno de vosotros.
Meditad esto, Mis pequeños, porque es un regalo grandísimo que tenéis cada uno de vosotros, el que Mi Hijo pueda habitar en vosotros y podáis darLo a vuestros hermanos.
Sí, Mis pequeños, gozad este regalo tan grande de la Presencia de todo un Dios en vosotros y que podáis también darLo a vuestros hermanos como Yo Lo di a la humanidad entera.
Yo, en Mi “fiat”, acepté que Mi Hijo pudiera Encarnarse y venir a la Tierra, ahora es vuestro momento, Mis pequeños, también dad vuestro “fiat” a Nuestro Dios y Creador, para que, también, la Presencia de Mi Hijo se dé en estos momentos de tribulación mundial.
Son vuestros momentos, sois Mis hijos, sois Mi Calcañal, sois la Fuerza del Cielo en estos momentos de la humanidad, en estos momentos de la historia, en estos momentos del cambio.
Tenéis esa Gracia inmensa, Mis pequeños, en donde se va a dar el parteaguas, como se dio cuando Mi Hijo vino a la Tierra, y así como se habla del Antiguo y Nuevo Testamento, del antes de Cristo y después de Cristo, se habla ahora de la Venida de Mi Hijo para este nuevo tiempo de purificación. Va a ser el fin del viejo hombre y vendrá el nuevo hombre, el hombre nuevo, que habitará los Cielos Nuevos y Tierras Nuevas, que seréis los elegidos, vosotros, los que os habréis llenado de Gracia y de Amor y sobre todo, los que han aceptado la Voluntad Divina de Nuestro Dios en sí mismos y en su vida.
¿Ahora os dais cuenta, Mis pequeños, de vuestra posición, en estos momentos de la humanidad, la Gracia tan grande que ha hecho Nuestro Dios con vosotros? Termina un mundo viejo y estáis vosotros, con Nuestra ayuda, iniciando un mundo nuevo.
Estáis viendo por un lado la obscuridad, la maldad de un mundo viejo, pero por otro lado, estáis viendo también la Luz, las Promesas, que se van ya haciendo realidad, Promesas antiguas, Promesas actuales, en donde estáis viendo que se van acercando ya los Cielos Nuevos y Tierras Nuevas, para que gocéis el Amor Pleno de Nuestro Dios.
La maldad acabará, la Bondad reinará, tenéis en estos momentos ambas cosas. Tenéis el libre albedrío, pero los que estáis llenos de amor o estáis buscándolo, tendréis ésa Gracia grande de Nuestro Dios de gozar el regalo prometido y que lo estáis sintiendo ya en vuestros corazones, estáis ansiando ya vivirlo, sabéis que existe, tenéis ésa Fe, habéis aceptado en vuestro corazón las Palabras de Mi Hijo, las Palabras de los Evangelios, la Fe os está llevando a obtener ése regalo grande. Pero también, Mis pequeños, hay que terminar la tarea, todavía falta que el Amor destruya la maldad de satanás y, por eso, os debéis dejar invadir por la Presencia Santa y Divina de Mi Hijo en vosotros, para que vuestros actos y vuestra presencia en esta Tierra, sea una realidad Divina, que vuestra presencia sea de Luz, para terminar con estas tinieblas que ya se están terminando, porque el Amor vencerá toda la maldad de satanás. Aunque estéis viendo como que ésta se va acrecentando, porque así es satanás, sabe que él tendrá su fin y luchará hasta el final, definitivamente será vencido por el Amor, por la Virtud, por la Gracia Divina de Nuestro Dios.
Sois Mis hijos, estoy con vosotros, Soy vuestra Madre y os acompañaré en todo momento y agradeced, Mis pequeños, esta Gracia tan grande que os ha dado Nuestro Dios, la de estar en este momento de la humanidad, en este parteaguas que se está dando y que vosotros sois partícipes de él.
Agradeced a Nuestro Dios, como esta Humilde Esclava de Nuestro Dios, agradece.
Gracias, Mis pequeños.
Quinto Misterio, Habla Dios Padre,
Sobre: No desperdiciéis nuevamente la Gracia que Yo derramaré sobre vosotros, porque será la última antes de la Gran Tribulación.
Hijitos Míos, prácticamente la humanidad entera se desvive por obtener las cosas materiales, lo que el mundo os da. Se os enseña, desde pequeños, que debéis estudiar para obtener un trabajo y, a través de él, os podáis llenar de las cosas del mundo que necesitáis para vivir cómodamente y así os afanáis, prácticamente, toda vuestra vida y vuestros valores se vuelven simplemente, materia y, así os clasificáis: el que más tiene, es el más exitoso y se le respeta por ése supuesto éxito, por haberse llenado de más bienes del mundo. Sale en cartelones, su fotografía está en todos lados, alabanzas se les hacen, se les invita a todos lados, porque tienen mucho del mundo.
Mis pequeños, ¿os dais cuenta de los errores en los que caéis y cómo os ha engañado satanás? Estas almas que se han llenado de tanto de lo material, llegará un momento en que llorarán haber perdido tanto tiempo por haberse afanado en nada más llenar sus bolsillos, llenarse de cosas materiales, llenarse de posesiones, que solamente han sido lastre para que ellos pudieran llegar a Mí y pudieran alcanzar el Verdadero Tesoro, que era el Reino de los Cielos.
Vosotros, todos vosotros, en algún momento habéis caído en este error y lo habéis transmitido a vuestros hijos y vuestros hijos a sus hijos y así por generaciones se ha dado, en donde, vosotros mismos, les aconsejabais que buscaran los valores de la Tierra y poco o prácticamente nada les disteis de educación espiritual. Su alma quedó vacía, lo que debisteis de haber llenado, porque los debisteis haber educado para la verdadera vida que cada uno de vosotros tendréis eternamente, ésa vida espiritual quedó vacía, no les preparasteis.
Ciertamente, tuvieron lo del mundo, pero infinidad de almas llegan ante Mi Presencia y su alma está vacía, no saben qué hacer ante Mí, lloran, lloran el haber perdido su tiempo, por haberse llenado de las cosas del mundo y en el momento en el que sienten Mi Amor y que saben que eso es lo valioso para el alma, lloran el haber desperdiciado su tiempo en cosas del mundo, porque Mi Amor realmente es lo que hace, que el alma se satisfaga, se dé como debe ser.
Mucho error hay en el mundo y vosotros sois parte de ese error. Enmendad vuestros errores, pidiéndoMe que Mi Santo Espíritu llegue a todos los corazones de toda la humanidad, que lo que no pudisteis dar vosotros a vuestros hijos, a vuestros hermanos, a sus hijos, que la Luz de Mi Santo Espíritu les provea lo que vosotros no quisisteis o no pudisteis dar.
Sed humildes, Mis pequeños, ante Mi Presencia y pedidMe perdón por lo que no pudisteis hacer con vuestros hijos o lo que vuestros padres no pudieron hacer con vosotros y así, pedidMe, para que Mi Santo Espíritu venga a poner orden a toda la Tierra, porque el desorden existe y lo estáis viendo por todos lados y es porque falta Amor, es porque falta ésa Sabiduría Divina con la que debisteis vosotros haberos guiado toda vuestra vida y no le quisisteis hacer caso, os dejasteis solamente guiar por los valores humanos, que os llevaron al error, pero estos valores humanos, realmente, fueron engaño de satanás hacia todos vosotros.
Se os dio la oportunidad, a lo largo de vuestra vida, de venir a Mí, pero muchos de vosotros, una gran mayoría, no quisisteis escuchar este llamado, pero porque sois Mis hijos, os doy esta oportunidad, de que podáis retomar lo perdido, pero ahora a través de este regalo que os puedo dar a través de Mi Santo Espíritu derramado sobre todos vosotros.
Cuando llegue el momento, tomadLo y agradecedLo, Mis pequeños, no desperdiciéis nuevamente la Gracia que Yo derramaré sobre vosotros, porque será la última antes de la Gran Tribulación. Me conoceréis, conoceréis lo que es Mi Amor, conoceréis Mi Misericordia, pero vuestro libre albedrío decidirá: venir a Mí o estar en contra Mía. No desperdiciéis, Mis pequeños esta oportunidad, el Amor, os llama nuevamente a estar con Él, tomadLo, Mis pequeños, tomadLo.
Gracias, Mis pequeños.