Mostrando entradas con la etiqueta Dios Padre se manifiesta - Mensaje de Dios Padre -. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Dios Padre se manifiesta - Mensaje de Dios Padre -. Mostrar todas las entradas

lunes, 19 de septiembre de 2011

Sep 07_11 El Santo Rosario es ésa honda de David.

Rosario vespertino
Temas:
  • Cuando regreséis a Mí, ésa Fe y ésa confianza en Mí, vuestro Dios, será recompensada con creces y con creces inimaginables para vuestras terrenas capacidades.
  • Vosotros no acabáis de entender que la protección que se os puede dar del Cielo, debe venir primeramente de vuestra petición.
  • En vuestras capacidades humanas, no podéis comprender que el rezo del Santo Rosario, algo aparentemente sencillo, pueda doblegar las fuerzas poderosas de satanás, pero así es.
  • Os pido que abráis vuestro corazón para que Mi Amor os invada plenamente y para que seáis almas salvadoras de tantos hermanos vuestros que necesitan de su salvación.
  • No quiero Ser el Dios de un momentito de vuestra vida, de un momentito de vuestro día, quiero Ser vuestro Dios de todo momento, en las buenas y en las malas.
Mensaje de Dios Padre, Nuestro Señor Jesucristo y la Santísima Virgen María a J. V.
Primer Misterio, Habla Nuestro Señor Jesucristo.
Sobre: Cuando regreséis a Mí, ésa Fe y ésa confianza en Mí, vuestro Dios, será recompensada con creces y con creces inimaginables para vuestras terrenas capacidades.
Hijitos Míos, antes y durante la purificación que se viene para la Tierra entera y el Universo, vosotros, Mis pequeños, conoceréis Mis Bondades. Conoceréis lo que tuvisteis en la Tierra, especialmente en Mi Iglesia. Conoceréis Mi donación por cada uno de vosotros, porque Yo Me doné, obedeciendo a Mi Padre, para las almas del pasado, del presente y del futuro. Conoceréis los regalos de Mi Corazón. Conoceréis el Amor que se derramó por cada uno de vosotros, perdonando vuestros pecados, si es que así lo deseabais, Mis pequeños, porque tenéis que poner de vuestra parte, para recibir Mis Gracias, Mis Bendiciones y sobre todo, Mi Purificación sobre vosotros, que es vuestra redención.
Lloré en el Huerto de los Olivos por las almas duras, por las almas que no apreciarían Mi donación y Mis regalos Divinos sobre ellas; sobre todo, por su falta de Fe, que siendo almas del mundo, ven más lo tangible, lo material y no alcanzan a ver ni vivir lo espiritual.
Mis pequeños, muchos de vosotros no queréis todavía entrar al Reino espiritual que Yo os vine a traer para que lo vivierais, para que buscarais éstos regalos inmensos del mundo espiritual, que son infinitamente mayores que los del mundo material. Por eso, varias veces os he ejemplificado que lo material se podría comparar a la Tierra, que es un granito de arena en una playa y, lo espiritual, sería el Universo entero.
A muchos de vosotros os podría parecer esto exagerado porque, estáis tan embebidos en las cosas del mundo y en lo material, que os sentís satisfechos con lo que tenéis dentro de lo material, dentro de lo tangible, de lo que vivís tocando y viviendo, pero viviendo solamente para vuestros gustos y, es una realidad, que lo que es espiritual, y que os quiero dar a cada uno de vosotros, es infinito, es inmenso, es inconmensurable, es incomprensible para vuestras capacidades, pero, las almas, cuando llegan a Mí y ven todo este regalo que Yo le doy a las almas fieles y amorosas, es cuando Me agradecen de corazón el que Yo sea así, Mis pequeños. Soy ese Rey que reparto a Mis súbditos fieles, a Mis siervos fieles Mis riquezas infinitas.
Entrad pues, Mis pequeños, en el mundo de la Fe y de la confianza de todo lo que os digo y os ofrezco, porque cuando regreséis a Mí, ésa Fe y ésa confianza en Mí, vuestro Dios, será recompensada con creces y, con creces inimaginables para vuestras terrenas capacidades.
Vivid en el bien, Mis pequeños, vivid produciendo amor a vuestro alrededor. Vuestras oraciones que van acompañadas del Amor profundo de vuestro corazón, son las que pueden llegar a cualquier parte del vasto Universo, lo puede aliviar, lo puede purificar, si son así vuestras intenciones porque vosotros os uniréis a Mis intenciones de Salvador y Redentor de todo el género humano, de todo lo creado, de todo lo visible e invisible.
Vuestras oraciones son pequeñitas y lo sabéis, pero si van unidas a las Mías, de vuestro Dios, es cuando podéis hacer grandes milagros para el bien de la humanidad y del Universo entero. Aprovechad pues, Mis pequeños, esta Gracia que os doy, de que podáis uniros a Mí, vuestro Dios y juntos podamos hacer Milagros para todos vuestros hermanos, para el bien de sus almas, para el bien del Cielo mismo, porque Yo Me di por todos vosotros y os quiero de regreso a todos. DadMe ése gusto, Mis pequeños, dadMe almas para su salvación et
erna.
Gracias, Mis pequeños.

Segundo Misterio, Habla La Santísima Virgen María.
Sobre: Vosotros no acabáis de entender que la protección que se os puede dar del Cielo, debe venir primeramente de vuestra petición.
Hijitos Míos, Yo, como Madre vuestra, os voy cuidando, Soy la Protectora de todos los pueblos de la Tierra, porque todos vosotros sois Mis hijos, porque así Me lo pidió Mi Hijo, Me pidió que os protegiera y que buscara vuestra salvación.
Ciertamente satanás, va tratando de destruir la obra de Mi Hijo y va atacando Mi protección Materna sobre todos vosotros, Mis pequeños.
En una familia la madre vela más por los hijos débiles, desvalidos o aquellos que necesitan más amor. Vosotros, los que sois padres de familia, conocéis a vuestros hijos y os dais más por unos que por otros, pero no porque améis más a unos que a otros, sino porque sois diferentes y, así, vais midiendo vuestro amor y vuestra donación para repartir correctamente vuestro corazón hacia ellos.
Se les ama por igual, pero es el alma de los pequeños la que necesita mayor o menor atención y así voy alrededor del mundo, Mis pequeños, cuidando a los pueblos de la Tierra, porque los ataques de satanás van creciendo y esto debido, Mis pequeños, a que vosotros no acabáis de entender que la protección que se os puede dar del Cielo, debe venir primeramente de vuestra petición.
Sí, Mis pequeños, vosotros contáis con la fuerza de protección del Cielo, de vuestro Dios en Su Santísima Trinidad, la Mía, de vuestra Madre, de Mi Esposo, San José, Mi esposo terrenal, que también os ama tanto y os conoce, de los ángeles, de los santos, de las benditas almas del Purgatorio. Mis pequeños, todo esto se os ha explicado tantas veces, pero estáis tan distraídos por el mundo y no estáis inmersos en la vida espiritual en la que debierais estar, porque vuestra vida terrena tiene que estar inmersa en la vida espiritual, porque de ahí tomáis vuestra fuerza para llevar a cabo, correctamente, vuestra misión terrena.
Aquellos que se están basando solamente en vida terrena, que quieren tomar sus fuerzas y su protección solamente en lo terreno, terminan sucumbiendo, Mis pequeños, porque satanás, que es también un ser espiritual, os engaña, os lleva a que os enamoréis solamente de lo terreno y cuando estáis ya embebidos en lo terreno, ataca vuestra parte espiritual y os destruye. No os habéis percatado de ello, la gran mayoría de vosotros, los que estáis inmersos en el mundo, él no quiere lo terreno que vosotros le podéis dar, a él no le interesan los bienes de la Tierra, de los cuales os enamoráis, él ataca vuestra alma, la debilita, la destruye y os lleva a la condenación eterna, pero es vuestra alma, vuestra parte espiritual la que se condena eternamente, no es vuestra parte carnal, humana, material, la que va a sufrir eternamente, sino vuestra parte espiritual, de la cual os separó y vosotros ni cuenta os disteis de sus mentiras. Caísteis en sus redes, no os percatasteis de ésa inteligencia satánica que os estaba envolviendo y os estaba destruyendo.
Soy vuestra Madre, Mis pequeños, y lloro, también, como Mi Hijo, la pérdida de un alma que se condena y, por eso, Le pido a Mi Esposo, el Santo Espíritu de Amor que se derrame sobre vosotros, para que vosotros podáis entender éstas realidades, de las cuales, una gran mayoría de vosotros no queréis reconocer y es más, hasta las atacáis, porque os ciegan las cosas del mundo y no os permiten ver la realidad de vuestra existencia. ¿Qué acaso estáis tan ciegos que no veis la realidad que han vivido vuestros antepasados, vosotros, los que estáis inmersos en las cosas del mundo? ¿Acaso algunos de vuestros antepasados, que tuvieron muchos bienes del mundo, se pudieron llevar con ellos al menos una pequeña monedita? No, Mis pequeños, y ni así entendéis, porque vosotros, como buitres voraces, esperáis solamente que el alma termine su vida sobre la Tierra y que vosotros os podáis quedar con sus bienes materiales, los cuales atesoráis tontamente, porque ni siquiera los aprovecháis para ganar el Cielo, al compartir parte de ellos con vuestros hermanos necesitados. Si esto hicierais, Mis pequeños, muchos, muchos de vuestros hermanos, que están llenos de bienes materiales, se salvarían, porque habrían actuado en Caridad, viendo la necesidad de sus hermanos a su alrededor, pero no, Mis pequeños, satanás os pone un velo ante vuestros ojos y hace que vuestro corazón se vuelva de piedra para que no compartáis aquello de lo cual, ni un centavo os llevaréis a la otra vida. Son bienes desperdiciados que pudieron haber hecho mucho bien entre vuestros hermanos al compartirlos, pero se quedan para otra alma de corazón duro, para que los siga atesorando, que se siga llenado de poderes de la Tierra, porque para eso sí, compráis poderes de la Tierra, que todavía os van a llevar a una condenación más profunda, porque os asociáis con satanás para destruir lo espiritual de vuestros hermanos.
Os insisto, Mis pequeños, Soy vuestra Madre y seguiré orando y pidiendo oración por todos vosotros, Mis pequeños, los que más lo necesitáis para vuestra salvación eterna.
Entended Mi Llamado antes de que sea tarde para vuestra vida eterna.
Gracias, Mis pequeños.

Tercer Misterio, Habla La Santísima Virgen María.
Sobre: En vuestras capacidades humanas, no podéis comprender que el rezo del Santo Rosario, algo aparentemente sencillo, pueda doblegar las fuerzas poderosas de satanás, pero así es.
Hijitos Míos, de todos los pueblos de la Tierra, Me he mostrado a todos los pueblos de la Tierra como Madre vuestra y en diferentes Advocaciones, para con esto, mostraros que estoy con vosotros, que no Me aparto de ninguno de vosotros. Creáis o no, en Mí o en Mi Hijo, os estamos cuidando y os estamos llevando hacia la perfección, que es la santidad de las almas.
Ciertamente, estáis en proceso de purificación, que va a ser un bien supremo que Nuestro Dios os está dando a cada uno de vosotros. Vosotros, ciertamente, lo entendéis mal, porque veis que va decreciendo vuestra economía. Ya no podéis obtener los bienes materiales tan fácilmente como antes los obteníais y no en la cantidad que vosotros quisierais y, en muchos de vosotros, vuestros hogares han quedado destruidos, ya sea por el viento, por las aguas, por los terremotos, por el fuego. Muchos de vosotros estáis siendo atacados por fuerzas malignas de gente armada, que van destruyendo vidas y que van causando mucho pánico en vuestra vida diaria. Y, así, cada país va siendo probado de diferentes formas, pero Yo os he dado el remedio en cada una de Mis Apariciones y el remedio ha sido el mismo, Mis pequeños: la vida en la Gracia y el rezo del Santo Rosario.
Tenéis estas armas poderosísimas contra las fuerzas de satanás y las estáis desperdiciando, las habéis venido desperdiciando porque os habéis alejado de la vida espiritual que tanto necesitáis, ya sea para vuestra vida diaria, para vuestra misión y para protegeros contra las fuerzas de satanás. Al vosotros negar toda esta fuerza espiritual que se os ha ofrecido y que Yo os he traído como Madre que os cuida y os ama, vosotros estáis sufriendo de más.
Vosotros no queréis aprovechar toda esta fuerza espiritual que quizá, la menospreciáis, porque os falta Fe, pero recordad que todo lo que viene de Nuestro Dios es sencillo, siempre y cuando lo hagáis con una Fe absoluta y con un grande amor.
Nuestro Dios no os pide cosas extraordinarias para vuestra salvación, Él se va a lo sencillo y es lo mismo que os estoy pidiendo que hagáis, Mis pequeños, también para vuestra protección contra las fuerzas de satanás.
En vuestras capacidades humanas, no podéis comprender que el rezo del Santo Rosario, algo aparentemente sencillo, pueda doblegar las fuerzas poderosas de satanás, pero así es, Mis pequeños y por eso, Nuestro Dios os da el ejemplo de David y Goliat, un niño luchando contra un gigante poderoso, extremadamente fuerte, un guerrero entrenado para destruir y ése niño, aparentemente indefenso, con un arma sencilla, que hasta risa le dio al mismo Goliat, cuando se presenta a luchar contra él, pero era un arma que tenía la Fuerza Divina. El Santo Rosario es ésa honda de David, es un arma aparentemente sencilla, pequeña, contra el poderío de satanás, que también lo palpáis, pero que os falta Fe para saber que con el Santo Rosario lo podéis destruir.
Os he dado un arma poderosísima, es el Santo Rosario y si os unís, Mis pequeños, en confianza, en Fe, en amor, podréis doblegar las fuerzas de satanás y destruir su poder maligno sobre todos vosotros, sobre el mundo entero, sobre el Universo Infinito. El Santo Rosario es realmente un arma de amor poderosísima y si lo rezáis con ésa Fe con la que se presentó David contra Goliat, veréis que el mal se irá terminando sobre la Tierra.
Tenéis que poner de vuestra parte, Mis pequeños, en la redención del género humano, sois parte de él y, también, tenéis que poner ése deseo y ése granito de amor para sacar adelante a vuestros hermanos, al mundo entero, a la humanidad que se os ha dado para que vosotros la fuerais renovando en el Amor que Mi Hijo os enseñó, confiad más en lo que se os da del Cielo.
Sois pequeños y se os dan cosas pequeñas que podáis entender para destruir aquello inmenso que os rodea y que no podéis entender, simplemente confiad. Sois ésos pequeños Davides, que lucharán contra el Goliat, que es satanás. Venceréis, Mis pequeños, porque vuestro Dios está con vosotros, como lo estuvo todo el tiempo con David.
Gracias, Mis pequeños.

Cuarto Misterio, Habla Dios Padre.
Sobre: Os pido que abráis vuestro corazón para que Mi Amor os invada plenamente y para que seáis almas salvadoras de tantos hermanos vuestros que necesitan de su salvación.
Hijitos Míos, os pido que abráis vuestro corazón para que Mi Amor os invada plenamente y para que seáis almas salvadoras de tantos hermanos vuestros que necesitan de su salvación. Esto os lo digo, Mis pequeños, porque Yo, como Padre vuestro, ciertamente permito que veáis algo de lo malo que está a vuestro alrededor, para que vuestro corazón, que está buscando Mi Amor, se apiade de estas almas de vuestros hermanos para que oréis por ellos. Pero, también, como Padre vuestro, no os dejo ver, en profundidad, la maldad que se ha desatado sobre el mundo y que no la soportaríais si os permitiera ver un poco de esta maldad que se da en lo obscuro, en lo profundo, en lo escondido. Son maldades satánicas y vosotros caeríais muertos, horrorizados, por lo que satanás está haciendo ya entre vosotros, porque hermanos vuestros, alrededor del mundo, se han donado a su maldad y lo apoyan, como instrumentos de mal sobre los pueblos de la Tierra.
Ésta maldad que os rodea y se da así, en lo escondido, por grupos que solamente quieren la destrucción espiritual y humana de todos vosotros. Esta maldad puede ser destruida si vosotros oráis, Mis pequeños, como se os ha dicho, especialmente, viviendo en estado de Gracia, dejándoos llenar de Mi Amor y utilizando las armas poderosísimas que se os han dado, como os dijo Mi Hija, la Siempre Virgen María, con el rezo del Santo Rosario.
Cuando vosotros producís amor, Mis pequeños, éste amor va doblegando a satanás y le vais poniendo una valla, la cual él no puede cruzar. La maldad, con la que os está atacando, es poderosísima, pero nunca más poderosa, como os he dicho, que Mi Poder de Dios, que es el que os está protegiéndoos y que está junto a vosotros cuando oráis y cuando hacéis un bien a vuestros hermanos.
Ciertamente, satanás tiene a sus allegados, que están unidos y os quieren destruir y si vosotros no os unís en el amor, y oráis para doblegar sus fuerzas, entonces sufriréis mucho, Mis pequeños.
Yo Soy vuestro Dios y estoy viendo perfectamente cómo se están dando estas luchas fuertes entre almas buenas y almas malas y, porque os quiero proteger, porque sois Mis hijos, os voy dando todos estos consejos, Mis pequeños, para que venzáis al enemigo.
Recordad cómo se desarrollan las guerras, están los generales de ambos lados y, con tácticas específicas, van moviendo a su ejército para tratar de destruir al opositor. Yo voy conociendo todos los movimientos de satanás, los conozco de antemano y os voy previniendo, Mis pequeños, para que os adelantéis a sus movimientos. Poned de vuestra parte, Mis pequeños, porque todo esto es para vuestro bien, para que no padezcáis tanto dolor, ¿qué acaso necesitáis vivir más dolor y más terror del que ya ahora vivís para que entendáis que Mis Palabras son ciertas y Mis consejos verdaderos?
Entended ya, Mis pequeños, o ¿acaso os gusta vivir en el sufrimiento y en el terror con el que os está atacando satanás?
Venid a Mí, Mis pequeños, venid arrepentidos, entrad en oración íntima Conmigo, con vuestro Padre y vuestro Dios, para que Yo os vaya guiando a cada uno de vosotros y os vaya uniendo como un bloque inquebrantable, durísimo, que podrá vencer toda fuerza de satanás.
Yo os ayudo, os protejo y os voy guiando, pero necesito de vuestra donación y ésta tiene que ser dentro de vuestra voluntad libre.
Os amo tanto, Mis pequeños, y no quisiera que vosotros sufrierais. Daos pues al Amor, dejad que Mi Amor llene vuestro ser, porque con el Amor venceréis las fuerzas malvadas de satanás. Os he dicho que él no puede contra Mi Amor, debéis uniros en ése bloque de Amor que venga de Mí y salvad vuestra alma y la de vuestros hermanos con vuestra donación, pero hacedlo ya, Mis pequeños, porque pronto está satanás para dar su zarpazo final con el que quiere destruir vuestro mundo, vuestra vida y, aunque no lo voy a permitir, sí podréis sufrir excesivamente y esto no lo quiero, Mis pequeños, porque sois débiles.
Os quiero consentir, pero actuad de Mi lado, apoyadMe con vuestra vida de amor y de donación, es una lucha muy fuerte que, ciertamente, Yo puedo soportarla Solo, pero sois Mi familia, Mis pequeños y quiero compartir el triunfo con vosotros, uniéndoos en ésta lucha que la estáis viviendo y que la estáis sufriendo.
Luchemos juntos, Mis pequeños y, así, Nuestro triunfo se dará pronto y lo gozaréis inmensamente Mis pequeños. Que Mi Amor se derrame sobre vosotros y los vuestros.
Gracias, Mis pequeños.

Quinto Misterio, Habla Dios Padre.
Sobre: No quiero Ser el Dios de un momentito de vuestra vida, de un momentito de vuestro día, quiero Ser vuestro Dios de todo momento, en las buenas y en las malas.
Hijitos Míos, mucho Amor se ha derramado de Mi parte sobre todas las generaciones, por las pasadas, las presentes y las que vendrán y, ciertamente, como dicen las Escrituras, que cuando la lluvia cae a la tierra y la moja, la fecunda, también Mi Amor fecundará a las almas y llegará a Mí de regreso, con ése gozo grande de haber salvado a infinidad de almas.
Mi Amor es inmenso por vosotros y, como os he dicho, es incomprensible en estos momentos, porque vuestra mente y vuestros ojos están velados por el pecado, pero cuando vosotros podéis ver plenamente lo que se os ha dado, Me agradeceréis de corazón todo lo que os he dado y os daré y ése será Mi Gozo, porque Mi Sangre Preciosa, Mi Amor Infinito, en ése momento será recompensado por vuestro agradecimiento, por vuestro amor, por vuestra donación eterna.
AmadMe, Mis pequeños, con todo vuestro ser, penetrad más en vuestro corazón y encontradMe ahí, Yo no estoy lejos de vosotros, Soy vuestro Dios que Vive en vosotros, que os acompaña en todo momento, que conoce perfectamente hasta lo más íntimo de vuestro ser, pero que no broto hacia vosotros hasta que vosotros no Me llamáis y Me tomáis en cuenta para vivir a la par en vuestra vida. No quiero Ser el Dios de un momentito de vuestra vida, de un momentito de vuestro día, quiero Ser vuestro Dios de todo momento, en las buenas y en las malas.
Sí, Mis pequeños, si Vivo en vosotros, quiero que Me compartáis todo y os ayudaré en los momentos difíciles y gozaré con vosotros vuestros triunfos, todo lo bueno que hagáis y todo lo que gozáis, pero compartídMelo, Mis pequeños, para que vayáis preparando vuestro camino de regreso porque, en el Reino de los Cielos, ya no habrá ningún momento en que Nos separaremos. Uníos pues ya a ése gozo eterno en que vivamos, ya desde la Tierra, unidos para el gozo eterno.
Gracias, Mis pequeños.




jueves, 17 de marzo de 2011

MENSAJES DE DIOS PADRE A LA HUMANIDAD

Feb10_11 Debéis respetar,ministros Míos, lo enseñado por Mí, vuestro Dios.


Rosario vespertino.


Temas:
Ningún alma entra al Cielo si no está santificada y os santificáis en la Tierra u os santificáis en el Purgatorio.
Mi Santo Espíritu descenderá sobre cada uno de vosotros y os veréis internamente.
Tenéis que levantar ya vuestra cara hacia el Cielo y empezar a
prepararos para éste encuentro Divino.
Aún queda tiempo, aprovechadlo, Mis pequeños, para salvar a tantos de
vuestros hermanos que están viviendo en el mundo y para el mundo.
Esto os lo digo a vosotros, Mis hijos escogidos para ser ministros en
la Iglesia, en la Iglesia de Mi Hijo. (Mensaje a los Sacerdotes)


Mensaje de Dios Padre y Nuestro Señor Jesucristo a J. V.

Primer Misterio, Habla Dios Padre,
Sobre: Ningún alma entra al Cielo si no está santificada y os santificáis en la Tierra u os santificáis en el Purgatorio.

Hijitos Míos, todos vosotros habéis sido llamados a amar, fuisteis creados para amar y ser amados por Mí, vuestro Dios.

Hay almas que comprenden su misión
desde que son pequeños, estas almas dan un ejemplo santo ante sus hermanos y
ellas también regresan pronto al Reino de los Cielos porque estas almas
aprendieron rápidamente cuál es la lección que debe todo ser humano aprender,
que es la de amar, antes de entrar al Reino de los Cielos.
El Purgatorio es un lugar en donde se
santifican las almas. Sí, Mis pequeños, ningún alma entra al Cielo si no está
santificada y os santificáis en la Tierra u os santificáis en el Purgatorio.

Debéis pues, Mis pequeños, aprender a
amaros los unos a los otros, que esta fue la lección de toda una vida de Mi
Hijo sobre la Tierra, que vosotros aprendierais a amaros los unos a los
otros. Y para esto, Mis pequeños, Yo pongo siempre cerca de vosotros a alguna
persona que os va a enseñar a amar, a amarse mutuamente y amarMe a Mí,
vuestro Dios.

Ya sean matrimonios, ya sean
amistades, ya sean hermanos o parientes, pero siempre habrá alguien que os
enseñe lo que es el Verdadero Amor, Mi Amor, el Amor Celeste y vosotros
debéis aprender de ellos y para eso Yo pongo siempre almas que os vayan
enseñando el camino para regresar a Mí.

El regresar a Mí, es haber llenado
vuestra alma de Amor, porque nadie, como os dije antes, nadie va a entrar al
Reino de los Cielos si no ha aprendido a amar y amarMe a Mí, vuestro Dios y
Creador, a quien Me debéis todo lo que tenéis, todo lo que sois y todo lo que
tendréis.

Os pido pues, Mis pequeños, como os
dijo Mi Hijo: “amaos los unos a los otros como Yo os he amado”

Gracias, Mis pequeños.

Segundo Misterio, Habla Nuestro Señor Jesucristo,
Sobre: Mi Santo Espíritu descenderá sobre cada uno de vosotros y os veréis
internamente.

(Lenguas…) Hijitos Míos, os pido que os
mantengáis en estado de Gracia, ya desde ahora, Mis pequeños, porque pronto
un rayo de Luz vendrá a cada uno de vosotros a aclarar vuestra mente, a
aclarar vuestro corazón, Mi Santo Espíritu descenderá sobre cada uno de
vosotros y os veréis internamente, veréis vuestro pasado, vuestro presente,
veréis el dolor que Me habéis causado con vuestros pecados y lloraréis
vuestros pecados cometidos, porque Me habéis hecho llorar a Mí, vuestro Dios,
que vine a salvaros.

Yo lloré en el Huerto, pero también lloré muchas veces durante Mi Vida pública,
al ver tanto pecado, presente, pasado y futuro. Yo, vuestro Dios, no Me
merecía esto, ni Me sigo mereciendo la ingratitud de los hombres y Me seguís
atormentando con vuestros pecados. Me seguís causando tanto mal en Mi
Santísima Trinidad.

¿Hasta dónde queréis llegar, oh
humanidad perversa? Si no hubierais tenido Mi Evangelización, comprendería
vuestro error, y tendríais un paliativo para vuestro castigo, pero no ha sido
así, Mis pequeños. Yo bajé desde los Cielos a convivir entre los hombres y
vine a ser Maestro de la humanidad. Os di conocimiento Divino, para que
conocierais las Verdades, el Amor, la vida que se vive en el Reino de los
Cielos, por lo tanto no tenéis pretexto alguno de que no sabéis qué hacer y
qué es lo que va a pasar con vosotros al final de vuestra existencia.

Algunos de vuestros hermanos siguen
tonteando, al decir, con tal de desviar, porque se han vuelto instrumentos de
satanás, que el alma no existe y que la vida del hombre termina tan pronto
muere, pero es una realidad que cada uno de vosotros vive por el alma que
tenéis dentro de vosotros y esta alma nunca muere, porque es eterna. Aunque
tratéis de negar esta Verdad, es una realidad y tarde o temprano os vais a
enfrentar ante Mí, vuestro Dios, para ser juzgados por lo que hicisteis y por
lo que dejasteis de hacer, también, sobre la Tierra, por todo el mal que
causasteis, pero también veréis todo el bien que hicisteis, también a lo
largo de vuestra vida.

Todo esto lo conoceréis, Mis
pequeños, en unos cuantos momentos, que serán para vuestra ayuda espiritual y
para que retoméis el buen camino, si así lo deseáis, y si no lo deseáis así,
por lo menos sabréis que existe un Cielo, un Purgatorio y un Infierno y que
vuestra alma va a trascender y que va a llegar a cualquiera de ésos lugares.

Tomad pues ya vuestra
responsabilidad, Mis pequeños, y no queráis haceros los ingenuos, haciendo
creer que no sabéis lo que os pasará después de vuestra vida aquí en la
Tierra. Es una realidad de la cual no os vais a escapar, ya que tarde o
temprano os enfrentaréis ante Mí, vuestro Dios y seréis juzgados, buenos y
malos.

Por eso, nuevamente, os pido, Mis
pequeños, que preparéis éste encuentro, que os mantengáis en estado de
Gracia, que luchéis por manteneros en la bondad, actuando en ella, viviendo
para ella, y preparándoos para morir en ella, porque la bondad de vuestros
actos y de vuestra vida, es la que os va a asegurar vuestra vida eterna en el
Reino de los Cielos.

Tened cuidado si habéis obrado mal por mucho tiempo y no os ha importado llevar una vida recta. Si sois de aquellos que no creéis lo que vaya a suceder en un futuro cercano, empezad ya a creerlo, Mis pequeños, porque ya estáis viendo a vuestro alrededor cómo vuestro mundo se está derrumbando y recordad que, cuando algo se derrumba y cae, después viene un resurgimiento más bello que todo aquello que se derrumbó y así va a ser con éste mundo, pronto.

Se va a derrumbar todo aquello que conocéis, será quemado, eliminado, el fuego devorará todo lo que conocéis para que empiece una renovación bella, sana y santa para todos vosotros. Bella, porque ya lo veréis todo a través de Mis Ojos, porque aún no conocéis lo que es verdaderamente bello ante Mis Ojos. Sano, porque ya no tendréis lo que ahora tenéis y que habéis buscado, habéis buscado la maldad y ésta desaparecerá por algún tiempo, para que vuestra alma se expanda, se purifique, crezca y lleguéis a lo santo, porque todos habéis sido llamados a ser santos, como Mi Padre es Santo y todo será Santificado, para que así se cumpla lo que está profetizado.

Poned todo de vuestra parte, Mis pequeños, para que podáis llegar a tener todo lo que se os ha prometido y es cuando Me daréis la razón de por qué tanto os anunciaba que os mantuvierais
en el Bien, porque se os iba a dar un gran regalo en esta nueva Tierra que habitaréis los que seréis escogidos.

Conoceréis el dolor que Me causasteis con vuestros pecados y es cuando vosotros mismos trataréis de aliviar Mis Heridas, las Heridas causadas por vuestros pecados en Mi Cuerpo, en todo Mi Ser.

AmadMe, Mis pequeños, como Yo os amo, cuidadMe como Yo os cuido, llevadMe siempre en vuestro corazón, como Yo siempre os llevo. No os separéis nunca de Mí, porque Yo nunca Me separo de vosotros. Actuad y vivid correctamente para que seáis llamados hijos de Dios y tengáis derecho a los Bienes prometidos.

Gracias, Mis pequeños.

Tercer Misterio, Habla Nuestro Señor Jesucristo,
Sobre: Tenéis que levantar ya vuestra cara hacia el Cielo y empezar a prepararos para éste encuentro Divino.

Hijitos Míos, os he pedido que os llenéis de Mí,
que os protejáis con Mi Persona en vosotros, porque satanás quiere destruir a
toda la humanidad, quiere destruir todo lo que Yo he creado y,
principalmente, vuestra persona, como hijos Míos.

No os imagináis Mis pequeños, todo lo
malo que él está tramando hacer para atacaros y destruiros. Pero,
ciertamente, conozco sus planes y no dejaré que él actúe plenamente, como él
quiere hacerlo, porque entonces sí os destruiría.

Si vosotros estáis revestidos de Mi
Gracia y de Mi Amor, si vosotros sois almas crecidas en el Amor y en las
Virtudes, difícilmente os destruirá.

Muchos de vosotros habéis sido ya
acrisolados por años. He permitido dolores, penas tribulaciones, ataques
hacia lo Mío, que guardáis en vuestro corazón y os habéis mantenido Conmigo.
Habéis sido acrisolados, os repito, para recibir el ataque fuerte de satanás
en estos tiempos y no caigáis en sus tentaciones ni en sus engaños.

La humanidad pronto va a sufrir una
tribulación tremenda, como nunca la ha sufrido y será la prueba final, en Fe,
que tendréis, antes de pasar a los Cielos Nuevos y Tierras Nuevas. Os tratará
de apartar de Mí con sus mentiras, nuevamente, pero vosotros, estando
Conmigo, difícilmente caeréis ante su embate.

Pero os pido, Mis pequeños, que oréis
por aquellos hermanos vuestros que no están preparados para este ataque tan
fuerte. Unos, porque no han crecido en Fe ni en Amor, otros, porque se han
vuelto instrumentos del mismos satanás.

Se habla de que la prueba es fuerte
y, vosotros os atemorizáis, pero ¿qué sucede cuando vosotros vais a la
escuela? Cuando vosotros estudiáis vuestras lecciones y os vais preparando
día a día, al momento en que llega el examen que tenéis que pasar, éste no se
os va a hacer tan difícil, como para aquellos que sólo estudian uno o dos
días antes y, así será aquí, Mis pequeños. Aquellas almas que han tratado de
mantenerse en Mí, aún a pesar de los ataques del mundo y de vuestros mismos
hermanos que os rodean, si vosotros estáis Conmigo difícilmente caeréis en
los engaños y ataques de satanás. Pero veréis muchos de vuestros hermanos
caer, gritaréis, para que no vayan hacia donde los está llevando satanás y no
os harán caso. Van a ser momentos de dolor, porque veréis caer a muchas almas
de conocidos vuestros, que quisierais que se salvaran, pero no lo lograrán,
porque no se han preparado día a día, como debieron haberse preparado.

Todos habéis recibido Mi Mensaje en
algún tiempo. Se os está dando, en estos momentos, a lo largo del mundo
entero, lo que va a suceder en breve, para que se preparen en todas las naciones
de la Tierra, pero muchos, muchos poblados, países, muchos hermanos vuestros
no quieren entender.

Orad, orad, mucho por estos hermanos
que perderán su vida espiritual y esto fue uno de los grandes dolores de Mi
Vida sobre la Tierra y la causa de muchas lágrimas que derramé, por ése dolor
tan grande de perder a tantas almas y eternamente.

Ahora no os imagináis, Mis pequeños,
lo que es el Sufrimiento Espiritual de todo un Dios.

Yo estoy con vosotros, pero ¡cómo
quisiera que todos vosotros estuvierais Conmigo! Tenéis que levantar
ya vuestra cara hacia el Cielo y empezar a prepararos para éste encuentro
Divino.

Que el poco tiempo que tengáis,
todavía sobre la Tierra, sea para quitarMe dolor por vuestros pecados y los
pecados de vuestros hermanos. DadMe ésa alegría, Mis pequeños, por tantas
alegrías que Yo os he dado a lo largo de vuestra vida.

Gracias, Mis pequeños.

Cuarto Misterio, Habla Dios Padre,
Sobre: Aún queda tiempo, aprovechadlo, Mis pequeños, para salvar a tantos de vuestros hermanos que están viviendo en el mundo y para el mundo.

Hijitos Míos, dejaos mover por Mi Santo Espíritu, para que Él os dé ésa vida
espiritual verdadera que cada uno de vosotros necesitáis tener, para que
podáis entrar, primeramente, a los cielos Nuevos y Tierras Nuevas y luego,
eternamente, al Reino de los Cielos.

Y os recuerdo, continuamente, que os
dejéis mover por Mi Santo Espíritu porque, por un lado el olvido del hombre
es continuo, os olvidáis de Mi Presencia en vuestro corazón, os olvidáis de
vuestras obligaciones espirituales que tenéis para Conmigo y para con
vuestros hermanos. Os olvidáis de que en algún tiempo entraréis a una nueva
vida que no conocéis plenamente, pero que ya se os ha dado algún conocimiento
sobre ello y que debéis respetar y luchar por conseguir.

Ciertamente, vivir en el bien es
difícil, porque el mundo quiere vuestra destrucción, pero ¿de qué otra forma
os podréis ganar el Reino de los Cielos si no es luchando por él?

Vosotros decís que el que persevera
alcanza y, vosotros debéis perseverar en la lucha, en la lucha diaria que
tenéis contra los ataques del mal. Ya sean éstos ataques directamente de
satanás hacia vosotros o indirectamente a través de algún hermano vuestro. De
cualquier manera, Mis pequeños, no estáis a salvo si no os unís a Mí.

Mucho se os da, pero poco respondéis. Grandes bellezas os están esperando, os
he dicho, pero os falta mucha Fe, porque estáis como aquellos que están
ciegos, que se mantienen solamente en lo que pueden ver y tocar, que están
ciegos al mundo, que están ciegos a las bellezas que Yo os quiero dar.

Ciertamente, en el mundo tenéis cosas
bellas, pero no las queréis ver, preferís el mundo que habéis construido
vosotros con vuestro pecado y con vuestra maldad. Por eso os había ya dado
otro Mensaje en donde veíais que estaba el mundo dividido, una parte el bien
y otra parte el mal, ¿de qué lado estáis cada uno de vosotros?

Ciertamente el mundo es para todos,
pero cómo habéis hecho vuestro mundo, en lo particular, cada uno de vosotros.
Tuvisteis las mismas oportunidades, pero algunos de vosotros preferisteis el
mal y así, vuestro mundo personal, os destruyó espiritualmente. No tomasteis
del mundo lo que os podía llevar hacia el bien y santificaros, en cambio,
otros hermanos vuestros tomaron del mundo todo aquello que los podía
santificar que, ciertamente, es la parte más difícil, porque la gran mayoría
prefiere gozar, vivir sin molestias, procurando gozar de todo aquello que os
rodea y, desgraciadamente, mucho de aquello que os rodea, os lleva al pecado
y a la pérdida de los valores espirituales.

En cambio, la parte del mundo en
donde veis a vuestros hermanos que viven Conmigo, han sido acrisolados en el
dolor, mucho ataque de satanás, en diferentes formas. Han atacado a hermanos
vuestros a lo largo de su vida y, en lugar de escoger el vivir en ésa falta
de valores, en ésa vida de pecado, han rechazado ésa vida que Me causa tanto
dolor.

Por eso, se os dice en las
Escrituras, que aquellos que vivieron para el mundo, ya tuvieron su premio,
porque eso es lo que buscaron, pero tendrán una tristeza eterna. En cambio
aquellos que no quisieron ser del mundo, que sufrieron, pero que su
sufrimiento fue ofrecido para la salvación de las almas, éstas almas vivirán
Conmigo eternamente, porque el mundo atacó a Mi Hijo y ataca a todos aquellos
que están Conmigo.

Por eso, os vuelvo a decir, si sois
del mundo y el mundo está con vosotros, tened cuidado, arrepentíos y regresad
al Bien, porque vuestra condenación es segura si seguís así con ésa vida, en
donde Me estáis dando la espalda, y que estáis viviendo para satanás y no
para Mí. En cambio, aquellos que han vivido en el mundo, pero no para el
mundo, y el mundo los ha rechazado, como rechazó a Mi Hijo, éstas almas están
asegurando su bien eterno y Me estáis dando una gran alegría, porque sois
ejemplo ante vuestros hermanos.

Yo Me congratulo con vosotros, porque
sabéis que cuando sufrís y cuando se os ataca por defender Mi Santo Nombre,
Yo estoy con vosotros y estáis asegurando vuestro regreso eterno al Reino de
los Cielos.

DadMe más alegrías, Mis pequeños,
trayéndoMe almas a su salvación eterna, aún queda tiempo, aprovechadlo, Mis
pequeños, para salvar a tantos de vuestros hermanos que están viviendo en el
mundo y para el mundo.

Gracias, Mis pequeños.

Quinto Misterio, Habla Dios Padre,
Sobre: Esto os lo digo a vosotros, Mis hijos escogidos para ser ministros en la Iglesia, en la Iglesia de Mi Hijo.

Ciertamente, Mis pequeños, la vida sacerdotal y
religiosa, es una vida de entrega, una vida de donación, de olvido a sí
mismo.

Mis pequeños, os mandé a Mi Hijo para
que vierais en Él, ése ejemplo sacerdotal, y esto os lo digo a vosotros, Mis
hijos escogidos para ser ministros en la Iglesia, en la Iglesia de Mi Hijo.
Estáis llamados a una posición altísima ante los hombres, que es el
Sacerdocio, pero que vosotros no sabéis valorar.

No os dais perfectamente cuenta de lo
que significa ser un sacerdote, habéis perdido ya ésa sensibilidad y la gran
mayoría, de los actuales sacerdotes y ministros de Mi Iglesia, no buscan dar
ése buen ejemplo, que es el de mantenerse en las Verdades que os enseñó Mi
Hijo y que tenéis en las Sagradas Escrituras. Os preguntó: ¿entonces de qué
sirvió que Mi Hijo viniera a la Tierra y os diera el Ejemplo que vosotros
debéis seguir, si ahora estáis inventando formas en que os debéis conducir,
haciéndole creer a los fieles que lo enseñado por Mi Hijo ya es antiguo y
obsoleto, cuando Mis Palabras y Enseñanzas son eternas?

Vosotros, si crecéis, llegáis a la
ancianidad y morís, pero lo que os dio Mi Hijo, es siempre joven, es siempre
presente y día a día podéis tomar lecciones nuevas de las Palabras dadas
desde antiguo y, esto quiere decir que todo lo que viene de Mí, vuestro Dios,
siempre es presente para todas las almas.

Estáis desperdiciando vuestro
Sacerdocio, vuestro llamado, satanás ha sabido introducirse dentro de la
Iglesia y, con sus manipulaciones y vuestra tontería, ha sabido ir
destruyendo lo que debisteis haber mantenido y defendido aún a costa de
vuestra propia vida y por eso habéis desperdiciado demasiado de lo que se os
había dado, pero pronto reconoceréis todo el error cometido y, aquellos que
Me amáis, lloraréis vuestros errores y lloraréis por los errores de vuestros
hermanos y esto ayudará al cambio y a la purificación de Mi Iglesia, para que
la conozca el mundo como primeramente fue creada.

Debéis respetar, ministros Míos, lo
enseñado por Mí, vuestro Dios, ¿o acaso hay algo más perfecto que lo Mío?,
¿acaso aquello que estáis inventando es más sabio y mejor que lo que Yo os
di? No seáis tontos, Yo Soy vuestro Dios, vosotros sois creaturas, creaturas
manipuladas fácilmente por las mentiras de satanás y queréis cambiar lo que
Yo, vuestro Dios, os di, con Mi Sabiduría Infinita y le creéis más a la
serpiente, a satanás, que está destruyendo todo lo que viene de Mí y os está
destruyendo a cada uno de vosotros, Mis ministros y al mundo entero. ¿Por qué
estáis tan ciegos? ¿Por qué sois tan tontos y no defendéis lo que viene de Mí
y que se os hace más fácil decir que es obsoleto y pasado lo que Yo os di,
cuando sigue siendo Perfecto?

Satanás no tiene Mi Sabiduría,
satanás no os ama como Yo os amo, satanás no os ha dado un hijo, como Yo os
di el Mío, para que muriera por vosotros, por vuestros pecados y os diera una
nueva vida. Satanás solamente quiere vuestra destrucción y todo lo creado.

Es tiempo de que abráis ya los ojos y
defendáis lo Mío y, si no sois vosotros, Mis ministros, los que defenderéis
Mi Iglesia, lo serán los fieles que he escogido para estos tiempos, que están
llevando mejor su Sacerdocio Bautismal, que vosotros, con vuestro Sacerdocio
Sacramental.

Tened cuidado, porque Mi Juicio va a ser severo, muy severo contra vosotros, Sacerdotes Sacramentales, que Me habéis dado la espalda y Me habéis traicionado y estáis traicionando a
vuestros hermanos al llevarlos por caminos errados.

Y vosotros, Mis pequeños, fieles a Mí, os Bendigo y os pido que no os separéis de Mí ni de lo enseñado por Mi Hijo, porque esto es lo que os va a asegurar la vida eterna y ése gozo
inmenso de conocer lo que todo un Dios tiene para vosotros.
Gracias, Mis pequeños.

martes, 8 de marzo de 2011

MENSAJE DE LUZ DIVINA EXTRA URGENTISIMO PARA LA HUMANIDAD DE DIOS PADRE Y LA SANTÍSIMA VIRGEN Y NUESTRO SEÑOR JESUCRISTO


EL DIA 05 DE FEBRERO DEL 2011.

A SU PEQUEÑA HIJA E R I K A

 
Hijita Mía, el Momento ha comenzado, las puertas se han abierto y la bestia ha cobrado más fuerza que nunca, no puedo hacer nada, mi labor ha sido guiarlos y hasta ahora lo he hecho como un buen pastor que cuida sus ovejas, está fuera de mi el poder detener a la bestia, no es ella sino sus pecados los que están acabando con ustedes mismos.

El tiempo ha terminado, asegúrense en sus hogares, guarden las provisiones que os he dicho, que el litigio apenas comienza.

La labor de la bestia ha sido hoy y siempre alejarlos de mí envenenándolos con el vicio del pecado, alejarlos de obediencia alguna y encaminarlos hacia lo más obscuro del abismo.

No temáis yo estaré con Ustedes; Las Familias serán destruidas, separadas , desmembradas , pero quién esté cerca de Mí no temerá, y no tendrán temor por quien dice ser Yo Su Dios todo poderoso Rey de Reyes Dador de Dadores, La Señal será dada, el caos e incertidumbre serán prueba de ello.

No teman confíen en mí su Dios que jamás os ha abandonado, Su Fe será puesta a prueba y ella misma será quien los protegerá en estos días de desastre y soledad.

Cuando más desesperados estéis no os preocupéis Yo estaré Ahí y Ustedes estarán en Mi.

Basta ya de pereza Espiritual El Tiempo se ha acortado y su alma está en peligro.

DISTRIBUID MIS MENSAJES DE LUZ ES YA Y AHORA

No os quiero perder más almas, los quiero conmigo y en Mí

En Mi Servicio y Caridad no para el servicio de otros,

Alejad de malas compañías que sólo provocan más cargas a su Alma, algunas almas las he perdido, No quiero perder las Vuestras.

Tapad Puertas y Ventanas, el caos está próximo a comenzar acercaos a Mí que nada os faltará; Solo un padre que jamás lo ha sido se desatiende de sus Hijos y no los cuida.

ORAD, ORAD, ORAD, Hijos Míos que es la única arma que os he dejado más fuerte que cualquier ataque del maligno.

REZAD, ORAD, tenéis Mi Libro Sagrado para Oración, ¿Qué Más Queréis Hijitos Míos? NO os he dejado solos y desamparados.

El tiempo fue acortado y el momento ha llegado.

No temáis que Yo Su Dios os protejo Hijitos Míos.

Les Bendigo Yo Su Padre y Señor Vuestro

En El Nombre del Padre que Soy Yo, El Hijo y El Espíritu

Santo.

ORAD, ORAD, ORAD, EN FAMILIA ORAD

Les Bendigo, Les Protejo y no os dejo.

De gozo se llenó Mi Corazón, cuando escuché una voz iremos a la casa del señor… (Alabanza que escucho cuando termina de infundirme su palabra)

AMEN.



FIAT LUX

OPUS DEY.


MENSAJE DE MARIA MADRE Y REDENTORA DE TODO EL UNIVERSO.

Tenedme presente hijitos Míos que Yo os acompañaré durante tanto dolor y sufrimiento, al igual como lo he hecho con Vuestro Hermano Jesús.

Serán pruebas fuertes pero os prometo que jamás os abandonaré.

Les Bendigo, Les Protejo y Les Cuido.

En el Nombre Del Padre Del Hijo y Del Espíritu Santo

Amén.

De gozo se llenó mi Corazón Cuando escuché una Voz iremos a la casa del Señor……..


MENSAJE DE JESUS HIJO Y ESPÌRITU QUIEN DIÒ LA VIDA POR VOSOTROS.

Hermanos Míos Así como Yo fui apresado, encarcelado y crucificado así mismo serán puestas pruebas para su Fe.

No temáis, es el Amor de Mi Padre que os quiere libres de pecado y sólo así podrá sacar los más bellos frutos dentro de un Valle de helechos y hierbas secas.

Os Bendigo, os cuido y os protejo.

En El Nombre del Padre Del Hijo que Soy Yo y del Espíritu Santo.

Amén.

De gozo se llenó mi Corazón Cuando escuché una Voz iremos a la Casa Del Señor………

FIAT LUX

OPUS DEY