miércoles, 18 de febrero de 2015

Mensaje de Dios Padre a J.V. - Enero 29 del 2015. -Son Tiempos de Mi Hija, la siempre Virgen María, Ella le va a aplastar la cabeza (A satanás).

Ene 29_15 Son tiempos de Mi Hija, la Siempre Virgen María, Ella le va a aplastar la cabeza.ImprimirE-Mail
Rosario vespertino

Temas:

  • Os vuelvo a repetir, no os desaniméis, Yo estaré a vuestro lado en todo momento, ayudadme, pues, a sacar adelante a ésta pobre humanidad que vive en el error, en el pecado.
  • DejadMe, Mis pequeños, a que alcancéis una felicidad sublime, ya desde la Tierra, dejándoMe a Mí vuestro Dios, trabajar en vosotros.
  • Meditad, Mis pequeños, ahora, que todavía podéis, todo esto que os digo, porque voy a Ser Implacable cuando os presentéis ante Mí.
  • Satanás es una realidad en vuestra vida y en la de vuestros hermanos, es el príncipe de este mundo y os quiere destruir, él no quiere saber nada que venga de Mí, Me Odia y os odia, porque sois Mis hijos.
  • No os imagináis, Mis pequeños, lo que podéis hacer por vuestros hermanos, lo que puede hacer una oración de intercesión por vuestros hermanos, el Amor lo puede todo y estos son tiempos del Amor.
Mensaje de Dios Padre a J. V.

Primer Misterio. Habla Dios Padre.
Sobre: Os vuelvo a repetir, no os desaniméis, Yo estaré a vuestro lado en todo momento, ayudadme, pues, a sacar adelante a ésta pobre humanidad que vive en el error, en el pecado.
Hijitos Míos, ya os he dicho antes, que si Yo permito algo en vuestra vida, es porque de ahí va a brotar un bien y, no solamente para vosotros, sino para muchos de vuestros hermanos.

Mis pequeños, tened siempre esto en mente, para que no os desaniméis cuando vengan las pruebas. Las pruebas, os ayudan a vosotros a crecer, os ayudan en vuestra santificación, os ayudan a que estéis más cerca de Mí. Yo no permito cosas malas en vuestra vida, como para daros un castigo o un escarmiento por vuestros pecados, por el mal que hayáis hecho, recordad que Soy un Padre amorosísimo y lo primero que quiero de vosotros, es vuestro bien.

Vosotros, cuando castigáis a alguno de vuestros hijos por algo que hicieron mal, siempre estáis buscando que enderecen su camino, que, entiendan, primeramente, lo que hicieron mal, que se percaten de ello, para que no lo vuelvan a cometer y, segundo, para que se den cuenta de que hay que mejorar.

La vida del hombre, desde que nace, hasta que muere, es de continuo mejoramiento, por eso, Mi Hijo, os dijo que fuerais perfectos, como Yo, vuestro Padre, Soy Perfecto y ésa es la finalidad que vosotros debéis buscar en vuestra vida, la perfección y cuando alcanzáis la perfección, realmente, lo que estáis alcanzando, es vuestra santidad.

Ciertamente, hay algunos de vosotros que tardáis más tiempo en encontrar esta santidad, porque os desviáis mucho, buscáis tantas cosas a vuestro alrededor, satanás os pone tantas tentaciones y vosotros tenéis tantos desvíos, a lo largo de vuestra vida, que muchos de vosotros, hasta que no habéis probado de ésos desvíos, o malos caminos, a donde os llevó satanás, es cuando os dais cuenta del error, enmendáis todo aquello en lo cual caísteis y, si sois sabios, tomáis el camino correcto, después de haber sufrido mucho.

Ciertamente, algunos sufrís menos que otros y otros, más y eso ya depende del grado de amor que tengáis hacia Mí y hacia vuestros hermanos, y todo se resume en eso, Mis pequeños, y Mi Hijo os lo dijo, que los Mandamientos se podían resumir en dos, amarMe a Mí, vuestro Padre, y a vuestros hermanos, en eso se resume la Ley, en Amor.

El cambio que tendréis Universal, será precisamente para llevaros hacia el Amor, para que vosotros podáis vivir, o empezar a vivir, como se vive aquí, en el Reino de los Cielos. Todavía vuestros amores terrenos serán imperfectos, porque, ciertamente que no buscáis el Amor por el Amor, ya que estos amores están afectados, todavía, por pecado, porque, aunque vayáis a tener la Purificación Universal, todavía, el resto fiel, quedará afectado por el Pecado Original. Ya os he explicado esto y será hasta que entréis al Reino de los Cielos, para vivir ya eternamente Conmigo, cuando vuestro Amor será verdadero Amor, Puro, Santo y sin ningún desvío.

Mientras tanto, Mis pequeños, gozad de esta Purificación, aún a pesar de lo que se vea a vuestro alrededor. Habrá dolor, habrá pruebas, también habrá dicha y habrá esperanza, no os desaniméis, Mis pequeños, todo lo que sea que veáis a vuestro alrededor, tiene un por qué y un para qué y todo está guiado por Mí. Especialmente aquellos que se han dejado guiar por Mí, van a tener menos complicaciones en pasar esta prueba, porque Yo os voy enseñando, Yo voy tomando también el dolor de vuestra vida, en Mí.

Me tendréis presente en cada prueba, pero sí necesito que vosotros pongáis de vuestra parte, que si son dolores, Me los ofrezcáis, junto con una aceptación vuestra y una sonrisa.

Se os hace raro esto, quizá Me podáis decir, ¿cómo vamos a sonreír en un momento de desastre? Y ciertamente así lo quiero, porque la prueba que os permitiré tener a cada uno de vosotros, será para que os vayáis purificando y que vayáis incrementando vuestro amor por Mí y por vuestros hermanos. Mucho tenéis qué hacer todavía.

PedidMe, pedidMe lo que necesitéis, Mi Santo Espíritu, que habita en vuestro interior, os hará entender cada uno de los momentos que viviréis.

Os vuelvo a repetir, no os desaniméis, Yo estaré a vuestro lado en todo momento, ayudadMe, pues, a sacar adelante a ésta pobre humanidad que vive en el error, en el pecado. AyudadMe, Mis pequeños, todo un Dios os lo está pidiendo, ved cómo os amo. Vosotros, que sois apenas granitos pequeñitos, de una inmensa playa, en donde no sois nada, os estoy pidiendo, Yo, vuestro Dios y Creador, que os unáis a Mí, y lo que necesito de vosotros, es vuestra intercesión, que Me pongáis en Mi Corazón los deseos de vuestros hermanos, vuestros propios deseos y todo lo que Mi Santo Espíritu ponga en vuestro corazón, como es la paz, el amor, la fraternidad y todas las Virtudes que están en vosotros, que están en vuestro corazón y, así, pidiéndoMe vosotros, lo que vuestros hermanos y vosotros mismos necesitáis, es cuando Yo podré actuar.

Quiero que seáis corredentores, quiero que Me ayudéis a la renovación de Mi Iglesia, por eso os pido que continuamente estéis pidiéndoMe, intercediendo y dándoos por vuestros hermanos.
Gracias, Mis pequeños.

Segundo Misterio. Habla Dios Padre.
Sobre: DejadMe, Mis pequeños, a que alcancéis una felicidad sublime, ya desde la Tierra, dejándoMe a Mí vuestro Dios, trabajar en vosotros.
Hijitos Míos, os pido ser prudentes y sabios para todo lo que se venga. Habéis sido preparados para estos momentos.

Hay millones de hermanos vuestros que no les interesa estar Conmigo, que no les interesa saber qué está sucediendo en lo espiritual. Ven cómo se convulsiona el Mundo, verán cómo los planetas se irán afectando también, todo se irá modificando.

Tendréis situaciones difíciles, afectarán la vida de muchos, muchos de vuestros hermanos ni aun así, se moverán al cambio, (lenguas…) han cerrado su corazón.

Entended, Mis pequeños, vosotros, los que no queréis cambiar, vosotros, los que no estáis viendo la realidad espiritual que os rodea, entended que todo esto lo estoy permitiendo para vuestro bien, especialmente para vosotros, que estáis tan distraídos con las cosas del Mundo.

Habrá un momento en el que lloraréis no haber querido cambiar, cuando se os dio la oportunidad, porque muchos moriréis en pecado grave y no tendréis posibilidad de salvación. Ciertamente, Yo Me derramo sobre cada uno de vosotros, He hecho tanto, para que, cuando vierais todas las Manifestaciones Divinas que se dan alrededor del Mundo, os hicieran cambiar, pero ya las veis como cosa normal, ya no veis lo extraordinario que tenéis a vuestro alrededor día a día y, ciertamente, que al no ver lo que Yo os estoy dando para vuestro bien, tampoco Me lo agradecéis. Soy el Dios Desconocido, Soy el Dios Olvidado, Soy el Dios que ya no entro a formar parte de vuestra vida ni un segundo. Solamente, cuando tenéis problemas, es cuando aparezco, a veces, solamente ligeramente en vuestra vida, no con la fuerza en la que debiera Yo entrar en vuestro ser, porque no Me lo permitís. No os imagináis, Mis pequeños, lo que lograríais si Yo pudiera trabajar plenamente en vosotros.

Es como cuando erais pequeños, y aprendiendo las letras, no podíais hacerlas y venían, ya fuera vuestro padre o vuestra madre, os tomaban la manita con el lápiz y guiaban el trazo y, os salía perfecto.

Así quiero estar Yo en vuestra vida, tenéis que entender, como os he dicho tantas veces, que sois imperfectos, pequeños, que os falta mucho por crecer, pero Yo puedo entrar en vuestra vida, si Me lo permitís, Yo os puedo ayudar a hacer, lo que normalmente hacéis, pero en una forma perfecta. Yo tomaré vuestra mano, tomaré vuestros labios, tomaré vuestra mente, tomaré vuestro corazón, os tomaré plenamente y vosotros mismos sentiréis el cambio y os daréis cuenta de cómo, Mi Estancia en vuestro ser, os puede ayudar a alcanzar cosas, que ni siquiera os podéis imaginar. Ciertamente, os daréis cuenta que sois instrumentos de Mi Bien, gozaréis lo que haréis y Me daréis el crédito, aunque vuestros hermanos, quizá, no lleguen a saber, que Yo estoy en vosotros y os estoy ayudando en vuestra perfección. Será un secreto entre vosotros y Yo.

DejadMe, Mis pequeños, a que alcancéis una felicidad sublime, ya desde la Tierra, dejándoMe a Mí vuestro Dios, trabajar en vosotros, dejadMe lo difícil de la vida y empezaréis a gozar lo que es tenerMe a Mí, no solamente a vuestro lado, sino en vuestro interior, ayudándoos a hacer todo lo que tenéis qué hacer, en la misión que os he encomendado y lo que tenéis qué hacer en vuestras obligaciones diarias. Vosotros mismos os admiraréis de la perfección en que todo empezará a salir y los que estén a vuestro alrededor y los que reciban la Bendición de que Yo, en vuestra persona, pueda ayudarlos en algo, también lo gozaréis.

DejadMe, pues, Mis pequeños, que os haga felices a vosotros y a vuestros hermanos a través de vosotros.
Gracias, Mis pequeños.

Tercer MisterioHabla Dios Padre.
Sobre: Meditad, Mis pequeños, ahora, que todavía podéis, todo esto que os digo, porque voy a Ser Implacable cuando os presentéis ante Mí.
Entended, Hijos Míos, que mucho tardé en que se diera esta Purificación, que estáis viviendo y que se irá incrementando, hasta que quede un resto muy pequeño de toda esta humanidad. Os di muchas oportunidades que no quisisteis aprovechar, fui muy paciente con vuestra necedad. Muy pocos hermanos vuestros entendieron y su oración, dirigida a Mi Hija, la Siempre Virgen María, hizo que detuviera Mi Brazo Justiciero, aunque Amoroso.

Muchas oportunidades tuvisteis para un arrepentimiento total y verdadero y con eso hubierais detenido o aminorado los acontecimientos que estáis viviendo y se han de venir, pero no entendisteis. Preferisteis el mal que os rodeaba y que, en lugar de eliminarlo de vuestra vida, lo avivasteis y ahora os aplasta.

¿Por qué no entendisteis, Mis pequeños? ¿No os dais cuenta que un padre sufre al ver a los hijos sufrir? Me hacéis sufrir con vuestro sufrimiento, Me hacéis sufrir con vuestra necedad, Me hacéis sufrir con vuestra falta de Sabiduría, no Me la quisisteis pedir, porque quisisteis vivir vuestra vida. No acatasteis Mis Mandamientos ni Mi Voluntad, habéis sido niños malcriados, que se os dieron todas las oportunidades para que tuvierais un crecimiento altísimo espiritual y esto lo ibais a obtener solamente siguiendo todo lo que Mi Hijo os dio, pero no lo quisisteis tomar. Os mantuvisteis en lo que a vosotros os divertía, queríais pasar solamente momentos que os favorecieran y no quisisteis acatar lo que Yo os pedía para vuestra salvación, para la salvación de vuestros hermanos, para un crecimiento espiritual que os llevara a la santidad, para que gozarais la Nueva Vida que se goza al llegar de regreso al Reino de los Cielos.

Usasteis vuestra inteligencia humana para gozar de lo humano, tratando de eliminar todo mal que se acercara a vuestra vida, no importando lo que sucediera o lo que causarais, y en forma egoísta, solamente buscando vuestro bien y afectando a muchas almas a vuestro alrededor.

No actuasteis en Caridad, no visteis por el bien de vuestros hermanos. Puse a vuestro alrededor, tantos hermanos vuestros que necesitaban de vuestra ayuda y eso os iba a redituar ganancias inmensas en el Reino de los Cielos y no lo aprovechasteis.

Quisisteis vivir sin ningún compromiso ni hacia Mí ni hacia vuestros hermanos, buscasteis un bien efímero que, además, no os va a redituar nada bueno en el momento de vuestro Juicio.

Ciertamente, en poco tiempo, os tendréis que enfrentar a Mi Justicia Divina. ¿Cómo estaréis ante Mí? Vergüenza os dará estar ante Mí, vuestro Dios, ¿u os comportaréis ante Mí, como os comportasteis con vuestros hermanos en la Tierra?

Meditad, Mis pequeños, ahora, que todavía podéis, todo esto que os digo, porque voy a Ser Implacable cuando os presentéis ante Mí. Tuvisteis Mi Amor y Mi Misericordia y no los aprovechasteis, ahora os enfrentaréis todos a Mi Justicia, ¿qué postura tendréis ante Mí?
Gracias Mis pequeños.

Cuarto Misterio. Habla Dios Padre.
Sobre: Satanás es una realidad en vuestra vida y en la de vuestros hermanos, es el príncipe de este mundo y os quiere destruir, él no quiere saber nada que venga de Mí, Me Odia y os odia, porque sois Mis hijos.
Hijitos Míos, en las Escrituras se os ha dicho que los tiempos se iban a acortar, precisamente, para que los justos, no fueran a ser también engañados por satanás. Vosotros no os imagináis Mis pequeños, el poder que tiene satanás, contra vosotros, Si Yo no os cuidara, os destruiría, os he dicho ya, pero no os queréis dar cuenta de ésta realidad pero, poco a poco, estáis viendo cómo se va incrementando la maldad a vuestro alrededor y en el Mundo entero. Se están preparando ya los verdugos que azotarán a la humanidad, podéis ya percibir los momentos, el sentimiento en vuestro ser, ya no vivís en paz, sentís que hay algo alrededor vuestro que no os permite vivir a gusto. Os cuidáis en todo momento cuando salís de vuestro hogar y, aún a veces, dentro de vuestro hogar os sentís inseguros. Este es el sentimiento satánico que está envolviendo la Tierra.

Os he dicho, que satanás se ha entronizado ya en toda la Tierra y no queréis daros cuenta de esta realidad y, al no querer daros cuenta de esta realidad, no estáis poniendo nada de vuestra parte para detener esta ola inmensa que os quiere aplastar.

Meditad honestamente, qué estáis haciendo, día a día, para detener la maldad que hay a vuestro alrededor. A la gran mayoría de vosotros, os da igual, simplemente vivís el día como viene, no pedís ni por vosotros ni por vuestros hermanos, simplemente desperdiciáis Mi protección y bendiciones. Satanás, se aprovecha de esta situación, de vuestra debilidad espiritual, es vuestro enemigo y lo dejáis suelto, está actuando a vuestro alrededor, os está atacando a vuestro alrededor en múltiples formas y, a pesar de que vosotros tenéis el remedio para atacarle, no lo utilizáis y luego os quejáis de todo lo que sucede a vuestro alrededor.

Entended que para poder atacarlo y quitarle poder, debéis regresar a Mí. Mi Amor, Mi Fuerza Divina, Poderosa, es lo único que lo puede aplastar. Son tiempos de Mi Hija, la Siempre Virgen María, Ella le va a aplastar la cabeza, pero ni a Ella os acercáis ni pedís de Su ayuda y de Su Intercesión. Os vuelvo a repetir, solamente dejáis pasar los días de vuestra vida, buscáis nada más cumplir bien o quizá, medianamente bien, lo que tenéis qué hacer día a día y Yo no existo en vuestra vida, no tenéis prácticamente vida espiritual. Vuestra alma está raquítica, está enferma, está muriendo. ¿Acaso un soldado puede salir al campo de batalla así como está vuestra alma, débil, raquítica, enferma?

Ciertamente, el enemigo os destruirá fácilmente porque no tenéis fuerza ni siquiera para levantar el arma con que os defenderéis.

Satanás es una realidad en vuestra vida y en la de vuestros hermanos, es el príncipe de este mundo y os quiere destruir, él no quiere saber nada que venga de Mí, Me Odia y os odia, porque sois Mis hijos, os quiere destruir.

Mucho os he explicado esto y no lo queréis entender, pedid Sabiduría, Mis pequeños, para que entendáis lo que se está dando en vuestra vida. Queréis permanecer ciegos y sordos a esta realidad, y esto solamente os llevará a la condenación eterna. ¿Acaso luego os quejaréis de Mí, vuestro Padre y vuestro Dios, de que no os ayudé, como soléis hacerlo? Me decís “injusto” cuando, realmente, vosotros fuisteis necios y tontos, porque Yo os amo y os previne, en múltiples ocasiones, a lo largo de vuestra existencia, para que os protegieras del mal y no lo quisisteis hacer.

Os repito y os repito la misma lección y no lo queréis entender. Os daréis cuenta, ciertamente, en algún momento, pero para la gran mayoría de vosotros, será demasiado tarde. Vuestra alma, no la tenéis preparada para que se presente ante Mí en estado de Gracia y pueda vivir eternamente Conmigo, estáis descuidando vuestra vida espiritual y vosotros seréis los causantes de vuestra condenación.
Gracias, Mis pequeños.

Quinto MisterioHabla Dios Padre.
Sobre: No os imagináis, Mis pequeños, lo que podéis hacer por vuestros hermanos, lo que puede hacer una oración de intercesión por vuestros hermanos, el Amor lo puede todo y estos son tiempos del Amor.
Hijitos Míos, todo va a ser renovado. Os he hablado de lo que padecerán las almas que no están Conmigo, pero las almas que se han mantenido Conmigo, a pesar de los ataques de satanás, que os rodean, gozarán inmensamente el cambio que tendréis aquí en la Tierra, y las que se hayan ofrecido por la salvación de sus hermanos, gozarán también inmensamente de Mis Bienes en el Reino de los Cielos.

Todo va a ser purificado, lo que veis ahora, no lo volveréis a ver, creceréis a unos niveles que ni siquiera imagináis, os he dicho ya antes, pero así tiene que ser, Mis pequeños. Yo Soy vuestro Dios, Soy Omnipotente y Mis Regalos también son inmensos, para aquellas almas que han luchado por mantenerse Conmigo, en Mi Amor, cumpliendo Mis Leyes y Preceptos.

¡Cuánto bien y cuánta alegría tendrán éstas almas! Imaginad un Mundo Nuevo, como llegar a otro país más adelantado que el vuestro. Conoceréis muchas cosas nuevas, tanto materiales como espirituales, gozaréis más fuertemente Mi Presencia en vosotros. La misma Naturaleza será diferente y vosotros entenderéis mejor Mi Creación, la cuidaréis, porque ella os cuidará. Habrá una hermandad verdadera entre vosotros, al menos, en los primeros tiempos de este nuevo tiempo por venir.

Algunos de vosotros habéis tenido ya Mi Gracia de sentir fuertemente Mi Presencia en vuestras vidas; pues tendréis eso y más, porque el alma que Me posee, goza inmensamente de Mí y, esto es lo más grande que puede tener un alma, poseerMe.

Lo Creado, os lo di para que lo gozarais pero, el tenerMe, es mucho más grande que cualquier cosa Creada y, solamente, las almas que Me buscan, logran esto, Mis pequeños, Me dejo encontrar por las almas que Me buscan, las ayudo a que Me alcancen y Me gocen.

Pero, ¿cuántas almas, realmente, Me buscan? ¡Son tan pocas! ¡Tanto, que podría darles a las almas buenas! Y, de hecho, las que son verdaderamente buenas, logran gozar, no solamente momentos de Mi Gracia y de Mi Amor, sino que ya viven una vida íntima, continua. Pero hay otras almas, que son buenas, pero no Me buscan con ahínco, también Me dejo encontrar, pero no Me doy plenamente a ellas, porque ellas no Me están buscando plenamente a Mí.

Por eso, esta purificación será apreciada y gozada por las almas que están Conmigo. Las almas que están Conmigo, la Luz del Espíritu Santo les ha dado la Gracia de entender lo que se os dará, están gozando. A pesar de la maldad que se da a vuestro alrededor, gozan, porque están viendo cómo el mal se está eliminando, cómo está siendo vencido poco a poco por Mi Bien en múltiples formas.

Benditas las almas que Me buscan y que quieren ya el cambio, gozosas están con Mi decisión, porque Yo estaré con ellas, amparándolas de todo mal y buscando solamente su bien. Han sido acrisoladas, han luchado para que Mi Amor se implante en la Tierra, en el corazón de los hombres. Han perseverado y van a lograr lo que llevan en su corazón, que es Mi Presencia en vosotros.

Ciertamente, sois Mis elegidas, almas buenas que, a pesar de ver la maldad y la lucha entre hermanos, vosotros os mantenéis en Caridad y buscando la hermandad entre los hombres. Buscáis la paz, procuráis la paz a vuestro alrededor, aún a pesar de que veis tanta guerra, maldad y destrucción entre vuestros hermanos.

Vosotros no sois almas distraídas, que no os interesan los acontecimientos malvados que está causando satanás alrededor de vuestro mundo, sois almas atentas, para interceder por vuestros hermanos de cualquier afectación de maldad que les esté mandando satanás en sus vidas. No os imagináis, Mis pequeños, lo que podéis hacer por vuestros hermanos, lo que puede hacer una oración de intercesión por vuestros hermanos, el Amor lo puede todo y estos son tiempos del Amor. El amor que hay en vuestro corazón, va a lograr el cambio que ya necesitáis.

Manteneos cerca de Mi Corazón, para que Yo os cuide, para que os dé Sabiduría y podáis seguir salvando almas y así Me daréis mucho contento. Vosotros, sois Mis verdaderos hijos, porque sois hijos del Amor, porque vivís Mi Amor y transmitís Mi Amor a Mis hermanos, a vuestros hermanos, a Mis hijos.
Gracias, Mis pequeños.


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Ene 22_15 La purificación la tenéis a las puertas.

Ene 22_15 La purificación la tenéis a las puertas.
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Rosario vespertino


Temas:

  • Confiad en que si estáis Conmigo, suceda lo que os suceda, será para bien, porque lo que suceda en vuestra vida en estos momentos, os acrisolará.
  • Os doy múltiples oportunidades para vuestra salvación eterna, no las desperdiciéis, os he dicho, el Tiempo se terminó, las grandes pruebas empiezan ya, nadie podrá escaparse a Mi Justicia, recapacitad en todo lo que os he dicho.
  • Meditad profundamente, ¿Me merezco todo esto? Yo, que os he dado puro Amor, fuisteis Creados en el Amor, habéis sido consentidos toda vuestra vida en el Amor, ¿Me merezco vuestra actuación? ¿Acaso no os merecéis un segundo Diluvio?
  • El libre albedrío que os di, os lleva a un Bien eterno o a un mal eterno, la decisión es vuestra, ¿qué escogéis? Es vuestra decisión y la respeto.
  • Buscad Mi Sabiduría, porque es un gran Tesoro que puede tener el alma, teniendo Mi Sabiduría, nunca caeréis en el mal, Mi Sabiduría siempre os protegerá y, con ella, también protegeréis a los vuestros.
Mensaje de Dios Padre a J. V.


Primer Misterio. Habla Dios Padre.
Sobre: Confiad en que si estáis Conmigo, suceda lo que os suceda, será para bien, porque lo que suceda en vuestra vida en estos momentos, os acrisolará.
Bajo inspiración Divina, Javier ora: (Lenguas…) “Ven, Señor Espíritu Santo, ven y purifica las almas, purifica a todo lo Creado, purifica a todo aquello que ha caído por el pecado. Purifica las Naciones, purifica la Tierra entera, purifica todo lo visible e invisible, purifica el Universo entero. Ven, Señor Espíritu Santo, que por los Méritos de Nuestro Señor Jesucristo, todo vuelva al Principio, al Amor del Principio, a la Paz del Principio, a la Perfección del Principio, a la Vida del Principio. Ven, Señor Espíritu Santo, son tus tiempos, junto con tu Esposa, la Siempre Virgen María. Ven, Señor Espíritu Santo y tráenos la Sabiduría que todos necesitamos para entender estos momentos de la historia, someternos a Tu Voluntad y dejarnos llevar por ella, para que te ayudemos a cambiar todo, lo que nuestra maldad, nuestro pecado, a afectado y alterado lo que Tu Creaste, por Amor y en Perfección para todos nosotros. Ven, Señor Espíritu Santo y trae la Vida, la Verdadera Vida que nos trajo Nuestro Señor Jesucristo, Vida que hemos perdido por nuestra tontería, por nuestra maldad y por querer hacer nuestra voluntad”.

Ciertamente, Mis pequeños, vendrá el Espíritu Santo, afectará todo, devolverá todo aquello que cayó por el Pecado. La maldad no ha sido erradicada de vuestros corazones, vosotros no habéis hecho gran cosa para eliminar la maldad de satanás, que vive con vosotros, y a la que vosotros le habéis sacado provecho para vuestra vida.

Mis pequeños, ciertamente, se esperan bellezas inimaginables para todos vosotros, pero tenéis que pedirlas, en humildad, en sencillez y con Fe. Yo no puedo obligar a los corazones a aceptar lo Mío, aunque sé que les conviene. Tenéis el libre albedrío, Yo no impongo, Yo os doy lo que Sé que es bueno para vosotros, pero vosotros tenéis que poner de vuestra parte, para que os podáis ganar lo que Yo os prometo. No os imagináis, Mis pequeños, lo que son Mis Bienes, Mis Regalos Espirituales y aún materiales.

No entendéis todavía la magnificencia de una Virtud, de un Don, ya estáis muy acostumbrados a tener lo que tenéis y que no agradecéis, y no queréis agradecer tampoco aquellos momentos en los que os quito todo aquello que sé que os puede dañar y os puede evitar llegar hacia la santidad.

Mucho Amor sigo derramando, pero vosotros cerráis vuestros corazones. ¡Cuántas Bendiciones Mías se desperdician!, cuántos momentos gratos podríais tener, pero preferís los momentos difíciles, sucios, malos, a los que os invita satanás, para que lo sigáis y, vosotros, ¿por qué no Me pedís el Espíritu de Discernimiento?creéis que todo lo que llega a vuestra vida, es bueno, ¡cuánto os falta por crecer, Mis pequeños! ¡Cuánto!

Debéis poner más de vuestra parte, Mis pequeños, debéis buscar la Verdad Absoluta, que Soy Yo.

Os amo, Mis pequeños, y entended que quiero lo mejor para vosotros, pero vosotros…, (hay un dejo de tristeza de nuestro Dios).

Recibid Mis Bendiciones, Mis pequeños y que éstas os ayuden a caminar por caminos rectos, que os lleven a Mi Sacratísimo Corazón. Pedid por todos aquellos hermanos vuestros que han cerrado su corazón. Mi Amor hará el cambio, esperadlo, Mis pequeños, por eso sentís que cosas buenas se vienen, dentro de toda la purificación que tendréis con cosas terribles también, pero confiad, confiad en Mí, vuestro Dios. Confiad en que si estáis Conmigo, suceda lo que os suceda, será para bien, porque lo que suceda en vuestra vida en estos momentos, os acrisolará.

Gracias, Mis pequeños, recibid Mis Bendiciones y dejad que Mi Amor penetre hasta lo más profundo de vuestro ser, este Amor Mío que tendréis dentro de vosotros, empezará a modificar vuestra vida, os empezará a hacer crecer espiritualmente y llegará el momento del gran cambio, y Me lo agradeceréis.
Gracias, Mis pequeños.

Segundo Misterio. Habla Dios Padre.
Sobre: Os doy múltiples oportunidades para vuestra salvación eterna, no las desperdiciéis, os he dicho, el Tiempo se terminó, las grandes pruebas empiezan ya, nadie podrá escaparse a Mi Justicia, recapacitad en todo lo que os he dicho.
Hijitos Míos, os iba a decir, “os pido”, pero por vuestro bien, os tengo qué decir, os exijo, sumisión en éstos momentos que ya están pasando y que se harán más graves en el poco tiempo por venir. Os exijo sumisión a Mi Voluntad.

Mis pequeños, tengo que ponerMe firme, quizá, hasta autoritario, porque os amo, porque no queréis entender, a pesar del buen trato que os he dado siempre. Me molesta esta situación, en el sentido en que veo cómo muchas almas se condenan, a pesar de todo lo que he hecho por vosotros y para vosotros.

Os he dado a Mi Hijo, Yo en Él, Él en Mí. Se dio por vosotros y para vosotros, por vuestra salvación, para vuestro crecimiento espiritual, para vuestra perfección y, así, regresar al Cielo y vivir eternamente en vuestro Hogar, del cual salisteis.

Soy un Padre que os ama, como ningún Padre sobre la Tierra lo puede hacer y, porque veo hasta lo más profundo de vuestro ser y de vuestra mente, os conozco perfectamente y por eso os tengo que hablar así, fuerte, para que entendáis que, si seguís como estáis ahora, os perderéis eternamente.

Os habéis ganado los castigos que se vienen para toda la Tierra y para cada uno de vosotros en particular. El Rostro de Mi Hijo, todo Su Cuerpo, pero sobre todo, Su Corazón, fueron dañados enormemente en Su Pasión y Muerte. Os digo esto y, ¿cuántos de entre vosotros, realmente se mueven hacia el arrepentimiento, hacia la compasión, hacia vuestro Dios, Mi Hijo? Pregunto nuevamente, ¿cuántos de vosotros se mueven en dolor y compasión por lo que Mi Hijo hizo por vuestra salvación, por Su Donación total, para el perdón de vuestros pecados y para que entrarais nuevamente al Reino de los Cielos?

Amor, solamente Amor, habéis recibido de Mí y, ¿cómo Me habéis pagado y, cómo Me seguís pagando?

Ciertamente, un padre ama a los hijos y se siente orgulloso cuando presenta a sus hijos,  los demás, los ven a ellos bien educados, ven que han aprovechado su tiempo en la escuela, que han aprovechado y agradecido todo lo que se invirtió en ellos, tanto para su crecimiento espiritual, como para su crecimiento profesional. El padre, la madre, se gozan de ellos ante sus amistades, presumen de su forma de ser y de sus capacidades. Qué bello es esto y Yo Mismo gozo con lo que vosotros hacéis con vuestros hijos, pero, ¿cómo os sentís cuando vuestro hijo, cuando vuestra hija, han llevado una vida, todo lo contrario de lo que vosotros quisierais? No han aprovechado los estudios, quizá, hasta ya se hayan apartado de ellos. Algún hijo, que sea un maleante, un asesino, ¿cómo os sentiréis ante vuestros conocidos? Ciertamente os dan vergüenza, vuestros hijos no os hacen sentir bien a vosotros; los amáis, ciertamente, porque son vuestros hijos, pero ante vuestros amigos o conocidos, no los podéis presumir, no estáis contentos con su actuación y os sentís mal.

Mis pequeños, Soy vuestro Padre, Yo os Creé, os he dado infinidad de capacidades, dones, virtudes, os he llevado de la mano a través de vuestros padres de la Tierra, pero ¿cuántos de vosotros habéis caído en el mal, en el error y, a veces, hasta en situaciones graves, sobre todo cuando habéis hecho pacto con el enemigo? De muchos de vosotros no estoy orgulloso, os amo, porque sois Mis hijos pero, vuestro actuar sobre la Tierra, deja mucho que desear. Os habéis apartado de Mis Mandamientos, de Mis Leyes de Amor, de una vida de ejemplo, Yo no puedo estar contento con vuestra manera de ser. Os repito, cuántos dolores, muchos de vosotros Me causáis. ¡Cómo quisiera que vosotros enmendarais vuestro camino y que fuerais mejores!, pero, en vuestra terquedad, en vuestra falta de Sabiduría, preferís manteneros en lo que estáis y en lo que tontamente habéis escogido para vuestra forma de ser aquí en la Tierra. Entended que no sois perfectos, entended que no sois sabios.

¡Oh!, Mis pequeños, cuánto dolor Me causáis, porque os he dado a Mi Hijo, Yo en Él, Él en Mí y cómo Nos habéis hecho sufrir.

Cuando un hijo Mío prefiere estar viviendo para el mal, ser instrumento del mal, vuestro actuar, causa grandes dolores en Mi Corazón. Os conozco perfectamente, conozco vuestro interior, conozco vuestra forma de ser, conozco vuestra reacción a lo que Yo os pido y dejáis mucho qué desear.

Ciertamente, podría decir que Me avergüenzo de vosotros, los que no queréis estar Conmigo, los que estáis viviendo para atacarMe, para darMe la espalda, para destruir el Amor que Yo he puesto en los corazones. Me causáis tanto dolor, y es cuando Mis Palabras, las repito para vosotros, y Me duele tanto el deciros, que más os valiera no haber nacido. Cuánto dolor Me causáis y vosotros no queréis comprenderlo, no enmendáis vuestro camino, no Me pedís Sabiduría para entender bien lo que os pido, para vuestro bien eterno.

Yo os instruyo y os pido que acudáis a Mí a través de Mi Santo Espíritu. Él Vive en vosotros y os pide que os acerquéis a Mí, vuestro Padre y vuestro Dios. Oportunidades habéis tenido muchas y no respondéis. El tiempo, ya no es tiempo, vuestra vida ha dejado de ser, el Amor se ha acabado, Mi Justicia ha llegado, ¿qué haréis sin Mí, cuando ahora es cuando más Me necesitabais?

Pobres pequeños Míos, sufriréis solos, porque Me habéis hecho a un lado de vuestra vida. Quiero que entendáis que vosotros Me hicisteis a un lado, Yo no Me hice a un lado. La maldad no sale de Mí, porque Soy Todo Amor, el mal está con vosotros y no lo queréis erradicar, sufriréis por vuestra necedad.

Todavía os aviso de futuros acontecimientos, ahora, que todavía entendéis. Meditad lo que se os ha dado hasta estos momentos de vuestra existencia porque, de estos momentos, ya no tendréis muchos más. Añoraréis estos momentos de paz que teníais en los que Yo os daba todo y no los apreciasteis. Ahora olvidaréis todo esto que os digo pero, en tiempo breve, entenderéis estas Palabras y os daréis cuenta de vuestro error, y vuestro error consiste en que pudisteis haber cambiado vuestro futuro personal, vuestro futuro en la sociedad, vuestro futuro como Mundo y no quisisteis mover ni un solo dedo para ello, que era para vuestro bien. Os entercasteis en vuestra voluntad y en vuestras tonterías, padeceréis vuestros errores pero, recordad, que siempre estaré junto a vosotros, que todavía tomaré a las almas sencillas y las que realmente se sientan necesitadas, que esto os llevará a la humildad, los soberbios caerán y se darán cuenta que vivían en el error. Algunos podrán, todavía, ganar un poco de tiempo, se arrepentirán y podrán pasar a un lugar de recuperación espiritual, pero, al menos, no se condenarán.

Os doy múltiples oportunidades para vuestra salvación eterna, no las desperdiciéis, os he dicho, el Tiempo se terminó, las grandes pruebas empiezan ya, nadie podrá escaparse a Mi Justicia, recapacitad en todo lo que os he dicho. Ya no hay tiempo, arrepentíos, para que podáis gozar de Mi Benevolencia Divina.
Gracias, Mis pequeños.

Tercer Misterio. Habla Dios Padre.
Sobre: Meditad profundamente, ¿Me merezco todo esto? Yo, que os he dado puro Amor, fuisteis Creados en el Amor, habéis sido consentidos toda vuestra vida en el Amor, ¿Me merezco vuestra actuación? ¿Acaso no os merecéis un segundo Diluvio?
Hijitos Míos, vosotros pedís más allá de lo que os merecéis. Entre hermanos, y no hablo solamente dentro de la misma familia, sino de todos vosotros que sois hermanos, perdéis el tiempo con la crítica y, a veces, deseando el mal a vuestros hermanos.

Cuántos de vosotros realmente estáis buscando una vida de santidad. Se os ha dicho varias veces, que no podéis dar de lo que no lleváis en vuestro corazón, ¿cuántos de vosotros Me lleváis en vuestro corazón?

Las Escrituras os dicen que los labios hablan de lo que se tiene en el corazón. ¿Cuántos lleváis una vida espiritual profunda? Las Escrituras os dicen, que cuando queráis hablar Conmigo, que os encerréis en vuestro cuarto y en el silencio Me encontraréis. Tantas y tantas Enseñanzas tienen las Sagradas Escrituras para vuestra perfección, para un trato íntimo Conmigo y, sobre todo, os enseñan a tener un trato familiar, además de lo íntimo.

Soy vuestro Dios y Creador, Inmenso, Poderoso, Infinito y demás adjetivos, con los que se Me Nombra y se Me conoce en las Sagradas Escrituras. A tal grado que, si notáis,en el Antiguo Testamento, más que amor, se Me tenía miedo, precisamente, porque veían solamente Mis Potencias y el pecado en el que vivían, hacía que se Me tuviera miedo por sentir, precisamente, un Juicio profundo de Mi Parte hacia ellos, porque vivían en el mal, porque no tenían las Enseñanzas, todavía, que se os dieron a vosotros, de parte de Mi Hijo. Intuitivamente sabían que vivían en el mal y no podían levantar los ojos para verMe, no querían llevar una vida íntima, de fraternidad, de familia, como Mi Hijo os vino a enseñar y que Yo lo deseo para con vosotros.

El Antiguo Testamento es de temor, el Nuevo Testamento, es de Amor. El Antiguo Testamento era de Misterio, de obscuridad, el Nuevo Testamento, es de Luz, felicidad, Amor, y comprensión de Quién Soy y de lo que deseo de parte vuestra.

Quiero que entendáis bien estos dos periodos de la humanidad, para que podáis entender el tercero.

En el Antiguo Testamento, no se Me conoce y es temor, temor al Creador, temor a Mis Potencias, temor al ser juzgados y encontrados culpables, temor a lo desconocido, sabiendo, intuitivamente que había algo más y que os presentaríais ante Mí. El Nuevo Testamento, os da Luz, os da confianza, os da Fe, os da seguridad, os da Sabiduría, porque Me muestro en pleno, a través de Mi Hijo. Me tenéis entre vosotros con la Presencia de Mi Hijo. Ya no Soy el Dios oculto del Antiguo Testamento, Me muestro a los hombres en el Nuevo Testamento, convivo con vosotros, os conozco en vuestros mejores momentos y en vuestros momentos difíciles, ya no es ése Dios lejano que aparentemente, se olvida de Su Creación, ¡no!, Soy el Padre, Soy el Hermano, porque ya estoy entre vosotros, y Me conocéis, dejo que Me conozcáis, os muestro Mi Amor, Me podéis ver frente a frente, ya no Me teméis.

Pero el hombre, a pesar de tener a su Dios frente a frente, traiciona a su Creador, traiciona a su Redentor, traiciona Mi Obra en vosotros.

Esto es falta de Sabiduría, Mis pequeños, es maldad en vuestro corazón, os seguís dejando conducir y aconsejar por satanás, os pregunto, ¿de qué os ha servido todo lo que os he dado? Se abrieron las Puertas del Cielo y de ahí, bajó el Amor, la Sabiduría, Mi Presencia, Mi Donación, todo enseñado a través de Mi Hijo, todo donado a través de Mi Hijo y no lo aprovechasteis y se siguen desaprovechando infinidad de Bendiciones porque no queréis caminar Conmigo.

La humanidad merece otro Diluvio, que, ciertamente no se dará por Mi Promesa, pero merecéis un castigo, porque Me duele vuestra actuación. ¡Cuántas bendiciones y cuánto Amor desperdiciado para el hombre!, no ha habido respuesta grata a Mis Ojos, de la gran mayoría de vosotros que Yo he Creado.

Aún, para vosotros mismos, como seres humanos, pequeños, imperfectos, éste trato que Me dais, no la soportaríais si os sucediera a vosotros. Si os pasara algo similar en vuestra existencia, no tendríais la paciencia que Yo he tenido para con vosotros. He tenido mucha paciencia, lo sabéis, he derramado Bendiciones en exceso, vosotros lo sabéis. Milagros inmensos, que al verlos, debierais quedar estupefactos, maravillados y agradecidos de que tenéis un Dios, un Padre, un Creador que os ama y, ¿cómo respondéis?, dándoMe la espalda.

Mucho Amor de todo un Dios se ha derramado sobre vosotros, Amor en abundancia, para que tomarais de él, gozarais con él, os recrearais con él y, ¿qué hace el hombre?, hace tratos con el enemigo, llena su corazón de odio, de maldad, de pecado, de traición.

Meditad profundamente, ¿Me merezco todo esto? Yo, que os he dado puro Amor, fuisteis Creados en el Amor, habéis sido consentidos toda vuestra vida en el Amor, ¿Me merezco vuestra actuación? ¿Acaso no os merecéis un segundo Diluvio?
Gracias, Mis pequeños.

Cuarto Misterio. Habla Dios Padre.
Sobre: El libre albedrío que os di, os lleva a un Bien eterno o a un mal eterno, la decisión es vuestra, ¿qué escogéis? Es vuestra decisión y la respeto.
Hijitos Míos, Mi Hijo os dice “ya no sois esclavos, sois libres”, así como el pueblo de Israel, esclavo del pueblo de Egipto, quedó liberado, por Mi Orden, a través de Moisés, todos vosotros habéis sido liberados del pecado por Mi Hijo, que se dio por cada uno de vosotros.

Mis pequeños, cuando vosotros sois esclavos, estáis presos, se os ha coartado vuestra libertad y la recuperáis, quizá, os pasáis todo el tiempo de vuestra libertad gozando y agradeciendo en que ya no estáis presos o bajo el dominio de alguien o de algo, que os quitó ésa libertad.

Muchos de vosotros tenéis coartada vuestra libertad, pero por vuestra propia culpa, porque satanás se mete en vuestra vida. Ciertamente, algunos de vosotros tenéis coartada vuestra libertad por errores cometidos y la ley os lleva al calabozo y tenéis que cumplir con ése castigo pero, en la mayoría de los casos, tenéis coartada vuestra libertad espiritual, porque vivís en pecado y vosotros mismos os sentís que no tenéis derecho a Mis Bendiciones, porque, al vivir en pecado, vosotros mismos Me estáis dando la espalda y no queréis recibirlas.

Ciertamente, porque os amo, os voy protegiendo y os sigo cuidando, aún a pesar de vuestra forma de ser, de vuestra traición, a pesar de vuestra maldad, también.

Sois vosotros los que os apartáis de Mí, no queréis aceptar Mi Gracia, Mis cuidados, Mis Bendiciones.

El padre que ama, sigue cuidando al hijo, a pesar de sus tonterías, porque sabe que son pequeños o porque sabe que todavía no llegan a un grado de madurez, en que puedan entender sus errores, sus tonterías y, así estáis la gran mayoría de vosotros. No habéis madurado en el Amor, no habéis madurado en todas las Enseñanzas que os vino a dar Mi Hijo, no habéis madurado en el valor de los Mandamientos que os apartan del mal y que os llevan a un Bien Supremo.

Con tanto que os he dado, a lo largo de vuestra propia historia y de la historia de todos los pueblos, no podéis recriminarMe a Mí que no os haya cuidado, protegido, consentido, de eso, habéis tenido todos vosotros en exceso. Todas las almas son Mis consentidas, a todas las cuido, a todas las protejo, a todas les sigo regalando Mi Vida, que es la Vida de Mi Hijo, que es Su Donación por cada uno de vosotros.

Solamente entenderéis Mi Amor, al final de vuestra historia en la Tierra, cuando regreséis a Mí. Aún a pesar de que no os salvéis, por vuestros pecados, por vuestros errores, conoceréis Mis Verdades y conoceréis cómo se os cuidó y, hasta podría decir, en exceso, pero no respondisteis. El libre albedrío que os di, os lleva a un Bien eterno o a un mal eterno, la decisión es vuestra, ¿qué escogéis? Es vuestra decisión y la respeto, aún a pesar del mal que os hacéis, pero sobre todo, aún a pesar del mal que Me hacéis, porque sois Míos, sois Mis creaturas, sois lo más grande que creé en la Creación y os respeto.

Comprenderéis todos éstos misterios en el momento de vuestra muerte terrena, de vuestra muerte corporal, porque vuestra alma, que seguirá viva eternamente, para un Bien o para un mal, comprenderá todos los misterios, todo Mi Amor, todos Mis Cuidados para con vosotros, pero ya no habrá tiempo de arrepentimiento. Vuestros actos y decisiones son libres. Trato de, alguna forma, de manejar vuestra vida hacia el Bien, pero siempre respetando vuestra libertad. Os pongo muchas ocasiones de arrepentimiento a lo largo de vuestra existencia, esperando que, en algún momento, recapacitéis y os olvidéis de vuestra mala vida. Hay almas que responden pero, a la gran mayoría, la soberbia les vence, satanás, les vence.

¿Por qué le seguís? ¿Acaso de él recibís bienes?, cuando el Bien solamente puede venir de Mí. ¿Os dais cuenta de vuestra ceguera?, de vuestra falta de Sabiduría, que, aún a pesar de que estáis viendo y viviendo el bien, en algún momento de vuestra existencia y que, además, lo gozáis, tontamente hacéis a un lado todo aquello que viene de Mí y escogéis a aquél que solamente os va a causar, no un mal, sino infinidad de males. Os hace sufrir, os desvía del buen camino, hace que vuestros hermanos os rechacen, que no os amen, porque vivís apartados del Bien y haciendo un mal a todos vuestros hermanos pero, especialmente a Mí, vuestro Padre Dios y Creador. Y, sabiendo todo esto, le seguís, lo aceptáis en vuestra existencia y hasta lucháis por manteneros con él. ¿Os dais cuenta de vuestra tontería? Os condenáis porque os queréis condenar, no os queréis salvar, no queréis vivir en plenitud Conmigo, ¿dónde tenéis la cabeza, Mis pequeños? Buscáis el bien, queréis el bien pero lo apartáis de vuestra vida, es una incongruencia.

Es como querer ir a un banquete, están ahí las viandas excelsas, manjares exquisitos, solamente tenéis que alcanzarlos con vuestras manos y tomarlos, gozarlos, compartirlos y, en lugar de tomar todas éstas viandas que os van a hacer gozar, preferís ir al bote de la basura y comer alimentos putrefactos, malolientes, llenos de gusanos y moscas. Situación que asquea, no más de pensarla y así estáis viviendo la gran mayoría de vosotros.

Me tenéis a Mí, tenéis el Universo entero a vuestra disposición, tenéis dones, virtudes, bendiciones, Gracias excelsas, un Bien Infinito. Tenéis Conmigo, Paz, Amor, respeto, Sabiduría, todo lo que el alma añora y, ¿qué hacéis la gran mayoría de vosotros? Ir a buscar a satanás, al enemigo, al que quiere solamente vuestra destrucción, el que os produce dolor, el que os quita todas las cosas bellas que podríais tener, que añoráis, pero tontamente escogéis lo que viene de él, para sufrir.

Es vuestro libre albedrío el que deja lo bueno para buscar lo malo, ¿entendéis que ha sido vuestro error, a lo largo de la historia, lo que os ha llevado hacia el mal y al sufrimiento? ¿Entendéis ahora, que todo ése mal en el que termináis todos vosotros, viene, principalmente de vuestro interior?

Ciertamente, satanás es el príncipe de éste Mundo, él quiere vuestra destrucción, quiere vuestro sufrimiento, porque él lo perdió por una mala decisión y vosotros, también, por una mala decisión, caéis en su juego, y os lleva hacia la maldad, al sufrimiento, a las guerras fraternas, a los errores inmensos que os llevan a la desesperación y a la muerte eterna. Os digo y os repito, el mal está ahí y el Bien, también­; la decisión es vuestra, es libre, vosotros mismos creáis vuestro destino, nadie os presiona para ello.

¡Cuánto error habéis cometido a lo largo de la historia!, podríais ya estar gozando el Cielo entre vosotros, aquí en la Tierra y os empecináis en seguir buscando el mal, tanto para vosotros como para vuestros hermanos.

Si vierais vuestra vida, desde una butaca, y que vuestra vida pasara por el escenario, vosotros mismos podríais decir “qué tonto es aquél que está así actuando” y sois vosotros mismos los que estáis así actuando. ¿Cómo es posible que despreciéis el Bien que añoráis y aceptéis el mal que os destroza, que os hace sufrir, que os quita la paz, que os lleva a vuestra propia destrucción y a todo lo que os rodea? Sois vosotros los que habéis dejado crecer ése mal en vuestro interior, satanás puso su semilla y vosotros mismos la regasteis que creciera.

Las almas que actúan en Sabiduría, toman de la semilla que también he puesto en su interior y la han cuidado y la han hecho crecer, estas almas, actuaron con Sabiduría y buscaron el Bien, lo viven y lo gozan. Las otras almas, se dejaron engañar y, a pesar de que pudieron haber tomado de Mi Sabiduría y pudieron haber discernido, no lo permitieron, decisión errónea, para la gran mayoría de las almas creadas desde un Principio y que os han llevado a sufrir y sufrir y sufrir a lo largo del tiempo. Estáis en el momento culmen de la historia de la humanidad y se sigue repitiendo esto.

La purificación la tenéis a las puertas. Seréis juzgados por lo que cada uno de vosotros dejó entrar en su ser, en su mente, en su corazón. Seréis juzgados por lo que vuestra alma os aconsejó para que actuarais con vuestros hermanos. La decisión fue vuestra, tuvisteis Mis regalos Paternales, os cuidé como un Padre Amorosísimo que Soy, pero la decisión, fue vuestra. Son tiempos de enfrentar la realidad de vuestros actos.

Tiempo hay todavía para que os arrepintáis, pero vuestra necedad, vuestra soberbia, vuestra falta de Sabiduría, os seguirá llevando al error, lo sé y Me duele. Oportunidades, en exceso tuvisteis para regresar a Mí y para que os consintiera eternamente, pero seguís buscando el mal y el mal tendréis eternamente. Me duele mucho vuestra actuación y la decisión, es vuestra, la respeto, pero os ganaréis lo que vosotros escogisteis. Mal buscasteis y mal tendréis eternamente.

Los Míos, las almas que buscaron el Bien, Conmigo estarán. Actuaron sabiamente y ésa Sabiduría os llevará a un regalo eterno, una Bendición eterna y con ellos gozaré.
Gracias, Mis pequeños.

Quinto MisterioHabla Dios Padre.
Sobre: Buscad Mi Sabiduría, porque es un gran Tesoro que puede tener el alma, teniendo Mi Sabiduría, nunca caeréis en el mal, Mi Sabiduría siempre os protegerá y, con ella, también protegeréis a los vuestros.
Hijitos Míos, os pido Me pidáis que la Luz del Espíritu Santo, actúe sobre vosotros. Os lo he venido pidiendo desde hace mucho tiempo, para que, Mi Santo Espíritu, os transfigure, os transforme en cuerpo y alma, para que podáis vivir contentos, felices y seguros de estar en Mí por la Sabiduría que obtengáis de Mi Santo Espíritu.

Estos son momentos de la historia en que os debéis dejar mover plenamente por Mi Santo Espíritu, Él os llevará a comprender qué es el vivir en Mi Santísima Voluntad.

Sí, Mis pequeños, necesitáis la ayuda de Mi Santo Espíritu, son momentos decisivos para todas las almas creadas que están militando sobre la Tierra y en el Universo entero. Son momentos decisivos en los cuales vosotros deberéis escoger, en el servirMe, estar Conmigo y aceptar Mi Voluntad en vosotros o, si preferís, podréis estar en contra Mía, atacando y tratando de destruir el Amor, Mi Amor, que he puesto en vuestros corazones y así, estar en contra Mía, vivir en el error, destruir la mente y el corazón que Me han dado hermanos vuestros pero, al tener una Fe débil, y al no vivir cerca de Mi Corazón, se dejan guiar por el error.

Los que no vivís buscando Mi Sabiduría, aceptando Mi Voluntad en vuestra vida, aquellos que no queréis seguir el Ejemplo que Mi Hijo os dio, para que llevaran a Mi Amor en plenitud, éstas almas, no merecen llegar a la perfección. Las almas soberbias y traicioneras, no merecen vivir en Mi Amor.

Tenéis infinidad de errores, defectos y maldades a vuestro alrededor, pero si vivís Conmigo y actuáis en Sabiduría, Yo os protejo, pero además, os enseño, os instruyo, os protejo.

Los que están Conmigo, los que aprecian Mi Obra en su ser, prefieren estar Conmigo, Me buscan y gozan de lo que Yo les doy. Sed pues, sabios, Mis pequeños, actuad en Sabiduría, buscad Mi Sabiduría, porque es un gran Tesoro que puede tener el alma, teniendo Mi Sabiduría, nunca caeréis en el mal, Mi Sabiduría siempre os protegerá y, con ella, también protegeréis a los vuestros.
Gracias, Mis pequeños.


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