Mostrando entradas con la etiqueta mensajes de Dios Padre a Javier Viesca. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta mensajes de Dios Padre a Javier Viesca. Mostrar todas las entradas

lunes, 3 de enero de 2011

Mensaje de Dios Padre y la Santísima Virgen María a J. V.

Dic 07_10 Estando Conmigo, Mis pequeños, ya no debéis temer a nada.
Rosario vespertino


Temas:
• Los ayudaréis a vivir Conmigo, les enseñaréis lo que os he enseñado a todos los grupos que he escogido, como el vuestro, alrededor del mundo.
• Si vosotros Me dierais vuestra libertad, avanzaríamos más rápido y empezaríais ya a gozar lo que os quiero dar.
• La finalidad de estos Mensajes que se os han dado alrededor del mundo, es para que conocierais Mi Amor.
• Vuestra mente no alcanza a imaginar lo que Yo, vuestro Dios, os daré y daré a los vuestros. Confiad y venid.
• Uníos de corazón cada uno de vosotros, con todos vuestros hermanos alrededor de la Tierra y todos unidos a Mí, vuestro Dios para vencer las fuerzas de satanás.
• Yo estoy con vosotros, Mis pequeños, para enseñaros el camino, para tomaros de la mano y llevaros hacia este Mundo Nuevo.


Mensaje de Dios Padre y la Santísima Virgen María a J. V.


Ofrecimiento, Habla Dios Padre,
Sobre: Los ayudaréis a vivir Conmigo, les enseñaréis lo que os he enseñado a todos los grupos que he escogido, como el vuestro, alrededor del mundo.
(Lenguas…) Hijitos Míos, Soy vuestro Dios, Soy vuestro Creador y todo lo que veis y tenéis, Me pertenece, Yo os lo he dado a todos vosotros, pero muchos de vuestros hermanos no agradecen lo que tienen y no aprecian Mi Obra en sus vidas.
Estoy con vosotros y Me Manifiesto a vosotros, porque vosotros sí apreciáis lo que os doy, apreciáis cada momento de vuestra vida, Me lo agradecéis y Me lo ofrecéis. Ciertamente tenéis olvidos y distracciones, pero también volvéis tan pronto podéis, y por eso os amo tanto, porque estáis continuamente recordándoMe, en vuestro corazón, en vuestra mente, en vuestras palabras, en el ejemplo que dais a vuestros hermanos. Os amo mucho, Mis pequeños, y así quiero que esté toda la humanidad, como vosotros, unidos en familia, Conmigo, con vuestro Padre y vuestro Dios, deseando siempre el Bien hacia los demás, sabiendo que este Bien se ha de regresar hacia vosotros.
Cuando un alma buena busca el Bien en su corazón, Yo Me regocijo y Me entrego a esa alma, esa alma Me recibe y se llena de más Amor, Sabiduría y Bendiciones y así esa alma se vuelve a dar, porque es tanto lo que Le doy al alma, que ella lo da a sus hermanos y así, también, el alma, llena de Mí, se regocija de poder dar a sus hermanos las cosas bellas que Yo le doy, que vive y que goza.
Así se va a ir formando la nueva familia sobre la Tierra, Mis pequeños, a partir de Mi Presencia en vuestra vida y sobre todo en vuestro corazón, aceptándoMe a Mí como lo más importante en vuestra vida.
Poco a poco vuestros hermanos irán entendiendo lo que ya os he explicado a vosotros, vosotros los ayudaréis a crecer, los ayudaréis a vivir Conmigo, les enseñaréis lo que os he enseñado a todos los grupos que he escogido, como el vuestro, alrededor del mundo. Os he dicho que sois Mis apóstoles de estos tiempos y será una tarea bellísima y que gozaréis inmensamente, que es la de transmitir Mi Vida a vuestros hermanos. Gozaréis Mi Amor en vuestra vida, gozaréis Mi Vida en vosotros y, sobre todo, no solo por tenerLa, sino por darLa.
Ante vosotros estoy, Mis pequeños y os Bendigo, Bendigo a los vuestros, Bendigo vuestra vida, os Bendigo con Mi Amor y la Sangre Preciosa de Mi Hijo, que Se dio por vosotros, os purifique y os fortifique para los momentos que vendrán, en donde necesitaréis una Fuerza especial, Divina, Celestial, para que vosotros salgáis airosos de la prueba y que también podáis ayudar a vuestros hermanos a salir victoriosos de ella. El Cielo entero está ayudándoos, no os preocupéis, dejad que Yo tome las riendas de vuestra vida y la de vuestros hermanos, para que todo salga de acuerdo a Mi Voluntad y veréis lo que Yo, vuestro Padre, puedo hacer para el futuro de la humanidad.
Cosas bellísimas y grandísimas os esperan, si estáis Conmigo, si dejáis que Yo actúe en vuestra vida y, sobre todo, si aceptáis en Fe lo que Yo haga en vosotros y en este Mundo Nuevo que os voy a dar.
AgradecedMe de corazón que esté Yo en vuestra vida y gozad de Mi Presencia en vosotros, porque hay tantos de vuestros hermanos que no toman en cuenta Mi Presencia y Mi ayuda en su vida. AgradecedMe en el nombre de ellos.
Yo os Bendigo, en Mi Santo Nombre, en el de Mi Hijo y en el de Mi Espíritu Santo, Amén, Mis pequeños.

Primer Misterio, Habla Dios Padre,
Sobre: Si vosotros Me dierais vuestra libertad, avanzaríamos más rápido y empezaríais ya a gozar lo que os quiero dar.
Hijitos Míos, he hecho mucho en vuestro corazón, lo he abierto a Mi Amor, vosotros mismos sentís que no sois los mismos de años pasados a como estáis ahora, con lo que os he enseñado. Tenéis una Sabiduría Santa, recibida directamente de Mí. Es Mi Sabiduría Santa, recibida directamente de Mí, vuestro Dios en Mi Santísima Trinidad y por parte también de Mi Hija, la Siempre Virgen María. Vuestra vida debe haber cambiado ya y ahora podéis estar seguros que estáis viviendo ya más en el Amor, en el Amor que Yo os he pedido que viváis, porque es el Amor que os encontraréis, en más alto grado, cuando os unáis a vuestros hermanos del Cielo.
Vosotros debéis todavía luchar contra las fuerzas del mal que os rodean, y que el mismo mal impide que vosotros crezcáis más, por eso deberéis pedirMe, continuamente, que os vaya apartando cada vez más de lo que es del mundo, para que viváis más íntimamente Conmigo y así vayáis entendiendo Mis Designios de Amor que se os han dado a lo largo de la historia.
Ciertamente con Mi Hijo tuvisteis esas Enseñanzas directamente de Él, ya fuera a través de Su Palabra, ya fuera a través de su Su actuación, pero tuvisteis estas Enseñanzas palpables en el mundo, no contadas por nadie, sino que vosotros las vivisteis, porque es lo que se os ha dado en las Sagradas Escrituras, es Palabra Viva, Divina y eficaz.
Mis pequeños, estáis llamados a ser grandes, pero esto solamente vosotros, con vuestra donación, lo podréis lograr, por eso os pido tanto que seáis dóciles a Mi Voluntad y Mi Voluntad es llevaros hacia la perfección en el Amor.
Todavía tenéis mucho, mucho en qué avanzar. Yo Soy vuestro Padre y Soy el gran Maestro del Amor y por eso deseo llevaros a niveles altísimos, primeramente, hacia donde estaban vuestros Padres y luego, todavía a ser superada esa etapa tan grande que les di a ellos, porque sois sus descendientes y porque Mi Bien es Infinito, nunca se acaba. Ellos tenían que ser llevados también cada vez más a niveles espirituales más altos de lo que ya estaban y os toca a vosotros, ahora, por ser sus descendientes, por ser sus hijos esta Gracia tan grande y así iréis creciendo cada vez más y más en Mis Misterios de Amor, en Bendiciones, en capacidades del alma y aún del cuerpo.
Con esto os podréis dar cuenta que os quiero llevar a regalos inimaginables, pero para ello, solamente requiero vuestra voluntad totalmente suelta a Mí y que seáis dóciles a Mis Inspiraciones Paternas.
Los padres siempre quieren lo mejor para los hijos y sois Mis hijos y quiero grandes cosas para vosotros. Entendedlo, dejadMe que Yo ya actúe en libertad para vosotros, porque sois grandes, porque sois hijos Míos, hijos de un Dios, hijos de un Dios Creador.
Así como Yo no escatimo en daros grandes cosas, vosotros ya no escatiméis en que os deis plenamente a Mi Voluntad.
Mi Voluntad tiene que volver a reinar sobre los hombres y sobre todo lo creado y hacia allá os estoy llevando. Si vosotros Me dierais vuestra libertad, avanzaríamos más rápido y empezaríais ya a gozar lo que os quiero dar. Realmente vosotros sois los que impedís Mi Paso, pero Yo respeto vuestro libre albedrío.
Iréis viendo poco a poco cómo se irá renovando todo y es cuando entenderéis todas Mis Palabras y todo lo que he hecho en el pasado para mejoraros. Por lo pronto, en Fe y en amor, agradecedMe lo que estoy haciendo con vosotros y lo que voy a hacer con toda la humanidad.
Os Bendigo, Mis pequeños, gracias por estar Conmigo, con vuestro Dios.

Segundo Misterio, Habla Dios Padre,
Sobre: La finalidad de estos Mensajes que se os han dado alrededor del mundo, es para que conocierais Mi Amor.
Hijitos Míos, la finalidad de estos Mensajes que se os han dado alrededor del mundo, es para que conocierais Mi Amor. El Amor de todo un Dios que os creó para amarMe y ser amados por Mí.
El hecho de que estéis ya Conmigo, os debe llenar de una paz infinita y de un Amor excelso. Estáis conociendo ya el Amor de vuestro Dios y Creador, cómo os he cuidado a lo largo de vuestra vida, desde la concepción.
Si vosotros os detenéis un momento, si os adentráis en vuestro corazón y repasáis vuestra vida, y realmente os ponéis a recordar cada momento de vuestra vida, en donde Yo he estado, veréis que nunca Me he apartado de vosotros. Aún en los momentos difíciles, ahí he estado Yo, acompañándoos, protegiéndoos, ayudándoos a resolver vuestros problemas, ayudándoos a crecer espiritualmente, ayudándoos y acompañándoos a ayudar a vuestros hermanos en sus necesidades. Compartiendo Mi Sabiduría con vosotros, tantas y tantas cosas con que Yo os he ayudado a cada uno de vosotros y, si realmente os dais cuenta de corazón, de Mi Presencia en vuestra vida, lo único que os queda a vosotros, es el agradecimiento de corazón hacia Mí, vuestro Dios, vuestro Padre, vuestro Creador. Soy el Amor, Soy el Verdadero Amor que vuestro ser debe seguir y buscar.
Estando Conmigo, Mis pequeños, ya no debéis temer a nada, aún a pesar de los acontecimientos que se os han anunciado que han de venir, que serán muy destructivos por un lado, pero constructivos por el otro. Vosotros, ya no debierais inmutaros ni temer ante lo que se os venga, puesto que ya estáis llenos de Mi Amor y, al estar llenos de Mi Amor, deberéis confiar plenamente en lo que Yo, vuestro Padre, vaya a hacer en la humanidad entera, en vuestro mundo y en el universo.
¿O qué acaso los niños pequeños cuestionan el actuar de sus padres? Cuando sois pequeñitos, simplemente os dejáis mover por lo que vuestros padres quieran de vosotros. Si vuestra madre quiere cambiar un mueble de un lugar a otro, vosotros no lo cuestionáis, simplemente lo aceptáis y así será en estos tiempos. Yo, vuestro Padre y vuestro Dios, haré cambios en la Tierra, haré cambios en los corazones de los hombres y no Me deberéis de cuestionar, y es Mi Mundo, es el Mundo que Yo he compartido con vosotros y que Me lo estáis destruyendo. Os lo di para que lo cuidarais y en lugar de cuidarlo, lo vais destruyendo poco a poco.
Con vuestra vida sucede lo mismo, ciertamente es vuestra, pero Yo os la concedí y es vuestra para que la cuidarais y que algún día Me la tendríais que devolver, pero poco a poco la habéis destruido y no habéis alcanzado esos niveles de espiritualidad que Yo quería que alcanzarais. No lograsteis hacer esa familia Celestial que Yo quería que hicierais aquí en la Tierra, puesto que si hubierais seguido las Enseñanzas de Mi Hijo y os hubierais unido todos en esas Enseñanzas y Amor que os dejó, ya debierais haber constituido esa familia Terrena y que se iba a unir perfectamente a vuestra Familia Celestial.
Tantas y tantas cosas que Yo le pedí al hombre que siguiera, pero el hombre se dejó llevar más por las insidias y consejos malos de satanás e hicisteis a un lado todo lo que Yo os pedí, pero sobre todo, lo que Yo os pedí que cuidarais más, era vuestra alma, vuestro cuerpo y todo lo creado en la naturaleza, en vuestro mundo, en el universo. Y por eso, Mis pequeños, tengo que detener ya todo el mal que os está rodeando, pero sobre todo que se ha introducido a vuestro corazón y que os impide llevar a cabo la tarea que se os encomendó. Ya no sois capaces de hacer lo que Yo os pedí, porque no estáis Conmigo, porque no dejáis que sea Mi Presencia en vosotros la que os aconseje. Queréis caminar como un niño crecido, soberbio, incapaz y así está la humanidad entera, queriendo caminar y hacer las cosas sin Mi Guía Paterna y Sabia y, como no quiero que sigáis echando a perder todo, empezando con vuestra alma, vengo a detener el poder de satanás, para que no os siga dañando a vosotros y siga dañando todo lo creado.
Ciertamente os va a doler un poco este cambio, y a otros mucho, pero será para vuestro bien y luego Me lo agradeceréis, Mis pequeños, cuando veáis todo lo que recuperaréis con Mi Poder y con Mi Gracia.
Vosotros no tenéis esas capacidades, Yo sí las tengo, porque Soy vuestro Dios y Creador. Os enseñaré cómo era todo en el Principio, cómo fue el Paraíso Terrenal, que les di a vuestros Primeros Padres. Conoceréis los Misterios pasados, os daréis cuenta de los errores tan graves y tan grandes a los que os llevó satanás a lo largo de los siglos, conoceréis el Misterio de la Redención y Me agradeceréis Infinitamente lo que se logró con ello.
Conoceréis vuestra vida, lo que Yo os di, el potencial Divino que tenéis en vuestro corazón, en vuestra alma, en todo vuestro ser pero que, por desgracia, quisisteis caminar solos, no aprovechasteis todo ese potencial. Conoceréis tantas cosas que se cerraron a vuestra mente y a vuestro corazón por causa del Pecado Original y cuando conozcáis todo ello y que se os devolverá, saltaréis de alegría y, espero ver el agradecimiento grande de vuestro corazón hacia Mí, por todo lo que os he dado y que todavía os daré.
Con todo esto os quiero dar a entender que Mi Bondad se ha derramado sobre vosotros a través de los siglos. Que Yo no Soy ese Padre malo y destructivo que muchos creéis que Soy. Conoceréis Mi Bondad Infinita y así, lo que pensabais de Mí, será borrado y alabaréis Mi Santo Nombre por todo lo que Yo os he dado, Mis pequeños, y sobre todo porque fuisteis cuidados desde vuestra concepción y Mis Brazos siempre se abrieron para estrecharos cerca de Mi Corazón, para perdonar vuestros pecados, para enjugar vuestras lágrimas, para compartir vuestras alegrías. Siempre estuve ahí junto a vosotros, pero no Me hacíais caso. Todo esto lo sabréis y os lo quiero dar, Mis pequeños, para que Me conozcáis en profundidad y conozcáis lo que es el Verdadero Amor de todo un Dios que os creó.
Gracias, Mis pequeños.

Tercer Misterio, Habla Dios Padre,
Sobre: Vuestra mente no alcanza a imaginar lo que Yo, vuestro Dios, os daré y daré a los vuestros. Confiad y venid.
Hijitos Míos, todos vosotros, los que estáis viviendo actualmente sobre la Tierra, venís sufriendo el proceder de vuestros parientes, de vuestros hermanos que os antecedieron y que su pecado os sigue afectando.
Ahora vosotros estáis recibiendo en pleno, Mis cuidados y Mi Amor, porque así, vosotros podréis detener toda esta ola de maldad que se desarrolló a través de los siglos y que no quisieron detener vuestros ancestros.
Es el tiempo, Mis pequeños, en que Mi Gracia os tocará, en que viviréis momentos bellísimos de Mi Amor y gozaréis el que os haya tocado estos momentos de la historia de la humanidad, para que pudierais vosotros detener la maldad de siglos al volveros hacia Mí, hacia Mi Amor.
El solo deseo vuestro del cambio, eso os da una Gracia muy grande y, además, ese deseo cae sobre toda la humanidad. Por eso os pido, Mis pequeños, que os llenéis de buenos deseos y estos, os aseguro, se van a materializar para el bien vuestro y para el de todos vuestros hermanos.
Recordad que para hacer un bien, éste siempre nace primero en vuestro corazón y luego lo realizáis, lo mismo sucede cuando hacéis un mal, lo meditáis en vuestro corazón y luego lo realizáis.
Si os he dicho que ahora viviréis en un Bien, ya desde ahora, Mis pequeños, empezad pues a llenar vuestro corazón de todas las cosas bellas que Mi Santo Espíritu os dé en vuestra mente y en vuestro corazón, para que vosotros la vayáis potencializando y estas se realicen en vuestra vida y en la de vuestros hermanos.
Dejad ya a un lado todo aquello que os pueda dañar y que pueda dañar a vuestros hermanos. Todas las malas acciones, todos los malos pensamientos, todos los malos tratos con que os habéis venido atacando mutuamente, dejadlo ya a un lado. Si sois Mi familia de la Tierra, que os uniréis a la del Cielo, deberéis ser como Mi Hijo os enseñó.
Cada uno de vosotros meditad esto y pedid Mi ayuda, Mi Gracia, para que vosotros vayáis cambiando hacia lo bello y santo que quiero de cada uno de vosotros.
El vivir en el amor es lo más grande que pueda tener un alma. Si el alma Me busca, si el alma se llena de Mí, entonces vuestro ser, tenderá hacia la santificación, hacia la Verdad, hacia llenarse de Mi Amor.
Amor os vino a dar Mi Hijo, por Amor Yo os creé, el Amor todo lo contiene, vosotros deberéis de volver a vivir en el Amor. No podéis vosotros solos lograr esto, necesitáis forzosamente acudir a Mí, porque Yo Soy la Fuente del Amor y si no venís a Mí, y Me lo pedís, no lo podréis conseguir por otro lado.
Estoy Yo aquí esperando, Mis pequeños, a que vengáis a beber de la Fuente del Amor y os llenéis de Mí, para que ya cambiéis, primeramente vosotros, para que os llenéis de Mi Vida, y la podáis dar a vuestros hermanos y los atraigáis a ellos también hacia la Fuente de Mi Amor.
Vosotros fuisteis escogidos, desde antes de que nacierais, para estos momentos de la humanidad. Disteis vuestro “fiat”, disteis vuestro “sí” para que Yo pudiera actuar en vosotros, en vuestra vida, para el bien de vuestros hermanos, para el bien de Mi Reino. Os lo agradezco, Mis pequeños, y vuestra recompensa será grande. Poco tiempo falta ya para que se una plenamente el Cielo con la Tierra y gocéis, Mis pequeños, las Gracias y Bendiciones que Yo os quiero dar, pero os pido que os soltéis a Mí y a Mis Deseos.
Esto os lo repito tanto, Mis pequeños, porque teméis vosotros soltaros a Mí, teméis a lo desconocido, pero os he dado toda una Evangelización de Amor para que Me conocierais. Vosotros ya no podéis temer el que os soltéis plenamente a Mí, debierais desear ya ese momento y a ojos cerrados venir a Mí y a ojos cerrados aceptar Mis indicaciones, porque debéis ya confiar plenamente en Mí, vuestro Dios, como niños pequeñitos, como niños confiados al amor de sus padres, sabiendo que ningún mal vendrá sobre vosotros. No soportaría, Mis pequeños, que de vosotros saliera duda, que de vosotros no hubiera una confianza plena hacia Mí, porque os he dado tanto y por tanto tiempo, que ya no debe haber ni en vuestra mente ni en vuestro corazón, ningún tipo de duda.
Venid a Mí, os lo pido, Mis pequeños, y veréis hasta dónde os puedo llevar. Vuestra mente no alcanza a imaginar lo que Yo, vuestro Dios, os daré y daré a los vuestros. Confiad y venid.
Gracias, Mis pequeños.

Cuarto Misterio, Habla Dios Padre,
Sobre: Uníos de corazón cada uno de vosotros, con todos vuestros hermanos alrededor de la Tierra y todos unidos a Mí, vuestro Dios para vencer las fuerzas de satanás.
Hijitos Míos, os prevengo, no os dejéis intimidar por todo lo que satanás provocará en vuestro mundo, porque quiere vuestra destrucción y no quiere el Bien Supremo que os voy a conceder. Actuará como fiera herida, tratando de destruir todo aquello que se le ponga enfrente (Lenguas…) Tratará de destruir todo aquello y aquellos que se interpongan entre su maldad y Mi Amor.
Será una lucha tremenda, Mis pequeños, en donde él luchará nuevamente contra Mi Amor, pero Mi Amor que está ya en vuestros corazones.
Si primeramente, antes del Tiempo, él atacó Mi Amor, vosotros después, en Mi Creación, recibisteis Mi Amor, para que Lo cuidarais en vuestro corazón y ahora él tratará de destruir esa parte de Mí, que tenéis cada uno de vosotros, porque habéis abierto vuestro corazón para recibir Mi Amor Divino.
Tratará de destruir todo lo creado que Yo os di para vuestra recreación y para vuestra vida humana. No quiere saber nada de lo que el Amor hace, quiere destruir todo, porque él Lo perdió. Así que, todo lo visible e invisible, tratará de destruirlo y esa es la gran lucha en la que estáis ya ahora, Mis pequeños, pero si vosotros os llenáis de Mi Amor y os mantenéis en Él, pase lo que pase, lo podréis vencer.
Os he dicho que vosotros tenéis una partecita Mía, de Mi Amor. Sabéis que a Mí no Me puede vencer porque Soy su Dios y Creador. Si vosotros os mantenéis aislados, en la forma individualista en la que habéis vivido, no tendréis una gran fuerza para atacarlo, pero si vosotros os unís y unís ese Amor, ese pequeño Amor que tenéis Mío, cada uno de vosotros, entonces os uniréis en un Amor grande y Poderoso que lo vencerá fácilmente, por eso os he pedido tanto la unión, la unión de voluntades, la unión de corazón, la unión en Mí, vuestro Dios, y así es como la humanidad, el resto fiel, vencerá, porque os uniréis en Mi Amor, en Mis Potencias Amorosas y satanás no podrá contra ellas.
Por eso os pido nuevamente la unión, Mis pequeños, que os unáis de corazón con vuestros hermanos alrededor de la Tierra, que os unáis con vuestros hermanos del Cielo, con vuestros hermanos en el Purgatorio, que os unáis fuertemente en Mi Amor, para que podáis vencer a satanás. Mientras más os vayáis uniendo, él irá perdiendo su poder, porque el Amor, Mi Amor, el Verdadero Amor lo irá debilitando y así es como será vencido al final por un Soplo, sí, un Soplo.
Espero pues, Mis pequeños, que entendáis esto y que ya no os mantengáis en forma individual, uníos de corazón cada uno de vosotros, con todos vuestros hermanos alrededor de la Tierra y todos unidos a Mí, vuestro Dios para vencer las fuerzas de satanás y disminuir los acontecimientos de la Purificación. El Amor lo puede todo, porque Mi Amor es Infinito.
Gracias, Mis pequeños.

Quinto Misterio, Habla La Santísima Virgen María,
Sobre: Yo estoy con vosotros, Mis pequeños, para enseñaros el camino, para tomaros de la mano y llevaros hacia este Mundo Nuevo.
Hijitos Míos, Soy vuestra Madre, la Siempre Virgen María, que os cuido y sobre todo en estos tiempos de cambio.
Satanás Me teme, satanás no se acerca a Mí, satanás quiere destruir a aquellos hijos Míos, a aquellos que están junto a Mí, que Me buscan, pero sobre todo, que Me invocan.
Para eso han sido tantas apariciones, Mis pequeños, alrededor del mundo, para que vosotros os acordarais que tenéis una Madre, que cuidándoos está. Una Madre que os está protegiendo contra las garras de satanás, contra la fiera hambrienta, contra aquella fiera que quiere destruir vuestra vida y la de los vuestros.
Estos son tiempos en que os estoy cuidando, Mis pequeños, tiempos, en los cuales la Mujer vestida de Sol con la Luna bajo Sus Pies, arrollará a satanás y a sus secuaces. He de destruir la maldad de satanás y sus ataques contra vosotros.
Por eso os pido, Mis pequeños, que os acerquéis a Mí, que estéis Conmigo, que busquéis Mi Gracia, que busquéis Mi Amor, que busquéis Mi Protección, porque todo lo que Yo hago y haré por vosotros, es la Voluntad de Nuestro Padre y Nuestro Dios.
Debéis volver, Mis pequeños a los momentos bellos de vivir en familia, del vivir bajo la Voluntad de Nuestro Padre Dios, que Yo acepté con Mi “Fiat”. Se hizo en Mí, Su Santa Voluntad y tuvisteis, Mis pequeños, la Redención.
Quiero de cada uno de vosotros, también ese “fiat”. Los hijos aprenden de los padres, vosotros sois Mis hijos, vosotros debéis dar ese “fiat”, porque Yo, vuestra Madre lo di y si Yo os llevé en momentos grandísimos y bellísimos de la humanidad al traeros a Mi Hijo, con vuestro “fiat”, también os uniréis a momentos grandísimos y bellísimos en la vida por venir de todo el género humano, del resto fiel que quedará, porque abrieron también su corazón hacia el Amor de Mi Hijo.
Son momentos de historia, Mis pequeños, que recordarán vuestros descendientes, son momentos de cambio, en donde vosotros sois protagonistas de este cambio y que venceréis porque vivís en el Amor, en el Amor que os dio Mi Hijo, el Amor que obró en Mí para que Yo fuera la Madre del Salvador, el Amor que va a cambiar a este mundo por el mundo bello que se les dio a vuestros Primeros Padres y que volverá ahora.
Estáis a momentos, Mis hijitos, del gran cambio, del cambio benéfico que tendrá el resto fiel. Es la Promesa de Nuestro Dios que se hará patente en vuestras vidas y Yo estoy con vosotros, Mis pequeños, para enseñaros el camino, para tomaros de la mano y llevaros hacia este Mundo Nuevo, al Mundo del Amor, porque el Amor habitará entre vosotros. Mi Hijo vivirá con vosotros, Mis pequeños, el resto fiel se ganará este gran regalo por Fe, por confianza y sobre todo, por un Amor muy especial que nació y ha crecido y se ha aumentado en vosotros por haber buscado la Fuente del Amor.
Venid a Mí, Mis pequeños, para que Yo os siga alentando, os siga cuidando, os siga aliviando de los dolores y heridas que os causa satanás por defender la Obra de Mi Hijo. Y os vuelvo a repetir, satanás no puede contra Mí ni contra Mis hijos, por eso os pido os mantengáis junto a Mí, junto a Mi Hijo y os llevaré a todos hacia la vida que Nuestro Padre ha escogido para vosotros.
Gracias, Mis pequeños.

sábado, 1 de enero de 2011

Seréis purificados para que pronto estéis ante Mi Presencia.

Dic 01_10



Seréis purificados para que pronto estéis ante Mi Presencia.


Rosario vespertino
Temas:

• Ayudad a vuestros hermanos, os lo repito, porque la gran mayoría de ellos no tienen ni idea de lo que se les espera en éstos pocos días por venir.


• Orad todo el tiempo, rezad tanto como podáis, vivid unidos a Mí en plenitud, día y noche, dejad que Mi Vida, todo Mi Ser, se una al vuestro.


• Tendréis ésta oportunidad, que Yo os doy, de reparar con el sufrimiento que padeceréis, por vuestros pecados y ofensas que hicisteis a Mi Sacratísimo Corazón.


• Os pido que dejéis que Mi Amor os posea plenamente, que tome posesión en vosotros, que Mi Amor tenga Su descanso en vuestro ser, así como lo tenían vuestros Primeros Padres.


• Mis imágenes lloran alrededor del mundo y lloran por vuestra negligencia, por vuestro pecado, por vuestro olvido, por el dolor que Le causáis a Mi Hijo Jesucristo.


• Yo quiero que veáis esto, Mis pequeños, para que vuestro corazón se llene de alegría y no os quedéis con vuestro corazón preocupado por lo que vaya a suceder.


Mensaje de Dios Padre a J. V.

Ofrecimiento, Habla Dios Padre,
Sobre: Ayudad a vuestros hermanos, os lo repito, porque la gran mayoría de ellos no tienen ni idea de lo que se les espera en éstos pocos días por venir.
(Lenguas…) Hijitos Míos, Yo quiero que mantengáis muy firmemente en vuestro corazón ésa frase que os he dicho y es verdadera, que os amo infinitamente y que lo que permita en vuestra vida, siempre va a ser para vuestro bien. A pesar de que todo lo que veáis a vuestro alrededor sea negativo, doloroso, cambiante, deberéis estar seguros que si lo he permitido, y que así es, es porque de ahí surgirá un Bien. Alguna vez os he dicho que cuando veis que un bosque se incendia, que el fuego ha arrasado todo, nueva vida surgirá de ahí y será más bella, porque ésas cenizas sirven para que surja una nueva planta, un nuevo árbol, una nueva vegetación que adornará mejor ése bosque que antes.
Ahora os pido, Mis pequeños, que oréis desde lo más profundo de vuestro corazón, porque los acontecimientos que se han de venir ya, éstos servirán para que ésa nueva vegetación en Mi Iglesia, surja, que se dé una nueva generación en el Amor, porque Mi Amor ya no vive en una gran cantidad de hermanos vuestros. Ya no hay vida, vida verdadera en los corazones, ya no hay vida verdadera de Amor entre vosotros.
Os pido, Mis pequeños, que ayudéis también a vuestros hermanos a que abran su corazón, Mi Amor se ha dado para todos vosotros, Mi Amor es eterno y vosotros estáis llamados a ésa eternidad.
Ciertamente, deberéis pasar momentos dolorosos, pero benéficos, Mis pequeños, será bueno para todos vosotros, porque os purificaréis y quedaréis limpios ante Mí, vuestro Dios. Os he ido preparando para estos momentos, sois parte del resto fiel y por eso Me he dado completamente a vosotros. Os he escogido para algo muy especial a vosotros y a hermanos vuestros, como vosotros, alrededor del mundo, pero también tenéis una tarea fuerte para estos momentos de la humanidad, en donde deberéis mostrar a vuestros hermanos que Me pertenecéis y que les ayudaréis a recuperar lo que ellos no han podido ganar.
Yo estaré con vosotros, no os preocupéis, Mis pequeños, Mi Santo Espíritu os irá instruyendo en lo que deberéis hacer y decir. No toméis todo esto con tristeza, con preocupación o con dolor, no, Mis pequeños, al contrario, estad alegres, porque ya vuestra liberación y la liberación de éste mundo está muy cerca y el gran regalo pronto lo veréis.
¿Qué acaso vosotros podéis estar tristes cuando se acerca vuestro cumpleaños o algún aniversario en el que tanto anheláis que se os haga fiesta y que se recuerde entre vuestros amigos?, ¿verdad que no, Mis pequeños? Este va a ser un momento memorable en la historia de la humanidad y vosotros estáis invitados a él. Es un momento grandísimo, un momento bellísimo y os he escogido a todos vosotros, como invitados principales de éste acontecimiento. Por eso os pido que viváis felices ya desde ahora que, aún a pesar de lo que veáis, y lo que pase en vuestra vida y alrededor de ella, no os preocupe, ayudadMe, eso sí, en la salvación de vuestros hermanos y ayudadles a ellos a que lleguen a Mí.
Solamente os pido seáis instrumentos dóciles para que Yo Me muestre plenamente a través de vosotros.
DejadMe, Mis pequeños, que Yo os transforme plenamente, os lo he venido pidiendo por mucho tiempo y ya éste es el momento en que os deberéis soltar plenamente a Mi Voluntad, para que Yo os tome para el Bien de vuestros hermanos y también para el vuestro.
Estáis Conmigo, os he prometido tantas cosas y ya el momento de la Promesa está sobre vosotros, pero ayudad a vuestros hermanos, os lo repito, porque la gran mayoría de ellos no tienen ni idea de lo que se les espera en éstos pocos días por venir.
Gozad Conmigo, Mis pequeños, porque estaréis pronto, frente a frente con vuestro Dios y Me gozaréis inmensamente, como no os lo imagináis.
Os amo tanto, Mis pequeños, veo que vuestros corazones se han abierto, veo que vuestra alma anhela ya estar con su Creador y así será, Mis pequeños, os daré un regalo inmenso.
El Cielo entero se estremece por lo que ha de suceder, pero también goza con las bellas cosas que les daré a Mis hijos predilectos.
Los hijos siempre confían en los padres, se sueltan completamente a lo que ellos desean y, este es el momento, Mis pequeños, que Yo quiero ver de parte vuestra, que vosotros estáis confiando plenamente en Mí. No veáis para otro lado, vedMe a Mis Ojos, sentid Mi Corazón, sentid Mi Compañía, sentid Mi protección y veréis que ésta prueba será sencilla para vosotros, no así para aquellos que no han querido estar Conmigo, pero ayudadles, ayudadles, no despreciéis a vuestros hermanos pecadores que no quieren estar Conmigo y que mucho daño han hecho a la humanidad, los amo y quiero que regresen a Mí.
Os Bendigo, Mis pequeños, os Bendigo y no temáis, que vuestro Dios está con vosotros.


Gracias, Mis pequeños.


Primer Misterio, Habla Dios Padre,


Sobre: Orad todo el tiempo, rezad tanto como podáis, vivid unidos a Mí en plenitud, día y noche, dejad que Mi Vida, todo Mi Ser, se una al vuestro.
Hijitos Míos, Mi Gracia se ha de derramar sobre todos vosotros, los que están Conmigo, en breve, para protegeros de los ataques del mal.
Veréis pasar el mal a vuestro lado y no os dañará. Muchos querrán enloquecer de ver lo que pronto se verá, pero no quiero, Mis pequeños, que se queden con ésta idea negativa y que sea Yo quien os la diga. Yo quiero que estéis vosotros fundidos a Mi Amor, porque así os lo dije, que os he dado toda una preparación para vivir en el Amor y deberéis estar ya firmemente asentados en Mi Amor y de ahí nadie os debe sacar, si realmente habéis entendido y vivido lo que Yo os he dicho.
Aunque sea el mal el que veáis que camine a vuestro alrededor, no le temáis, porque el mal no os puede hacer daño, porque estáis Conmigo. Hará daño a aquellos que no están protegidos y a ellos son a los que quiero que vosotros ayudéis con vuestra oración, porque también hay, ciertamente, otros de vuestros hermanos que están desprotegidos y, en su necedad, aún sabiendo de esto que os va a suceder, se sienten muy valientes y creen que en su humanidad, y su valentía, los va a proteger contra las fuerzas satánicas, fuerzas muy superiores a ellos.
Sois pequeños, sois débiles ante estas potencias malignas que se desatarán en pleno contra vosotros y, por eso, desde que un alma llega a la Tierra, Yo la protejo. Mi Gracia está sobre las almas, Mis santos ángeles los protegen, tenéis protección de parte de Mi Hija, la Siempre Virgen María y mucha protección de parte de las oraciones de la Comunión de los Santos y esto os lo repito, Mis pequeños, para que os deis cuenta de que si no tuvierais toda esta protección, os aplastaría fácilmente satanás y todavía se atreven, ingenuamente o soberbiamente, hermanos vuestros a quererse poner al “tú por tú” contra las fuerzas de satanás, no tienen ni idea a qué se están enfrentando.
Por eso deseo que vuestra oración les proteja, para que, cuando empiecen a darse cuenta de que sus capacidades humanas no pueden contra esta fuerza de satanás, ellos se arrepientan y vuelvan a Mí y así, tendrán Mi Protección fuerte y segura contra todo lo que se vendrá.
Por lo pronto, Mis pequeños, necesito lo que tanto os he estado pidiendo, mucha oración, donación, todo lo que podáis darMe, Mis pequeños, para vuestra propia protección y para la de los vuestros.
Será breve la prueba, pero difícil, sobre todo, difícil para aquellos que se empecinan en mantenerse en el mal.
Venid a Mí, Mis pequeños, y pedidMe Mi ayuda, tanto como la necesitéis, que Yo os la daré de inmediato, porque estaréis actuando junto con Mis santos ángeles en la Tierra para ayudar a los escogidos.
Orad y daos plenamente a Mí, para que, aún aquellas almas que pudieran condenarse, no se condenen, porque si os unís a los Méritos de Mi Hijo Jesucristo, podréis salvar a muchas almas, que son necias, que son sordas a Mi llamamiento y a su conversión.
Orad todo el tiempo, rezad tanto como podáis, vivid unidos a Mí en plenitud, día y noche, dejad que Mi Vida, todo Mi Ser, se una al vuestro y así Me acompañaréis en ésta purificación mundial para el Bien de todos vosotros.
Gracias, Mis pequeños.


Segundo Misterio, Habla Dios Padre,
Sobre: Tendréis ésta oportunidad, que Yo os doy, de reparar con el sufrimiento que padeceréis, por vuestros pecados y ofensas que hicisteis a Mi Sacratísimo Corazón.
(Lenguas…) Hijitos Míos, porque os amo y os amo infinitamente, este tiempo que tendréis, será un tiempo de purificación hacia vuestros pecados pasados. Tendréis ésta oportunidad, que Yo os doy, de reparar con el sufrimiento que padeceréis, por vuestros pecados y ofensas que hicisteis a Mi Sacratísimo Corazón. Yo, vuestro Padre, a Mí, no Me disteis el lugar que debisteis haberMe dado y ahora tendréis la oportunidad de reparar y de conocer el por qué vais a tener ésta reparación y penitencia de vuestros pecados.
Os voy a dar esta oportunidad, Mis pequeños, para que podáis estar a gusto ante Mí, ante vuestro Dios, porque tenéis pecados escondidos, pecados pasados, pero sobre todo, omisiones, porque pudisteis haber dado mucho más de lo que habéis dado y no lo disteis. Vuestra alma no brilla ante Mí, como Yo quisiera que brillara y, por eso, ésta oportunidad que os voy a dar, de purificación y de arrepentimiento de vuestros pecados, hará que vuestra alma brille, porque se purificará de todas las faltas que habéis cometido y que no os arrepentisteis, de corazón, de ellas. Ciertamente, estabais perdonados, pero muchas veces vuestro arrepentimiento no fue de corazón y caíais y caíais en lo mismo continuamente, porque no poníais de vuestra parte. Si hubiera habido arrepentimiento de corazón, alguna vez, no habríais caído tantas veces en el mismo mal.
Por eso, agradecedMe, Mis pequeños, que Yo permita en vuestra vida lo que permitiré, para que vosotros podáis estar ante Mí, como niños pequeños con traje nuevo, felices, felices de que estáis con vuestro Padre, con vuestro Dios y que Le estáis enseñando vuestro trajecito nuevo, y gozaréis, y Yo gozaré con vosotros, el que tengáis otra presencia bella, ante Mí, ante vuestro Dios, pero sobre todo, ante vuestro Padre, que tanto os ama.


Gracias, Mis pequeños.


Tercer Misterio, Habla Dios Padre,


Sobre: Os pido que dejéis que Mi Amor os posea plenamente, que tome posesión en vosotros, que Mi Amor tenga Su descanso en vuestro ser, así como lo tenían vuestros Primeros Padres.
Hijitos Míos, os pido que dejéis que Mi Amor os posea plenamente, que tome posesión en vosotros, que Mi Amor tenga Su descanso en vuestro ser, así como lo tenían vuestros Primeros Padres, que ellos dejaban que Mi Amor reposara en todo su ser y ellos, transformados estaban cuando Yo entraba a ellos, y vivía plenamente en ellos.
Ciertamente, Mi Presencia Divina, siempre está en vosotros pero, cuando vosotros Me invitáis, se manifiesta más fuertemente y así vivían vuestros Primeros Padres, gozándoMe infinitamente, dejando que Yo gobernara todo su ser y ellos sabían, con todos los dones que Yo les había dado, que Mi Bien, siempre los iba a hacer crecer y a gozar infinitamente.
Cuando Mi Amor posee un alma y ésta alma se deja transformar, goza infinitamente. Ése es el primer sentimiento de un alma que se deja mover por Mí, que se olvida de sí misma, para que Yo sea el Dueño total y absoluto de ella y de su voluntad. Os he dicho que tenéis el libre albedrío y con esto os estoy dando a entender que podéis actuar libremente, que si queréis, podéis hacer lo que queráis, sin ni siquiera tomarMe en cuenta a Mí, vuestro Dios, en vuestra vida. Pero las almas sabias las que han sabido apreciar Mis Enseñanzas, Mi Amor, Mi Vida, Mis Bendiciones, éstas almas ya no viven bajo su voluntad, sino que se donan a Mí, plenamente, para que sea Mi Voluntad las que las mueva, las aconseje y les dé una nueva vida.
Éstas almas pueden alcanzar la santidad fácilmente, porque el Santo de los Santos está habitando en ellas. Y cuando os pido que os dejéis soltar plenamente a Mi Voluntad, es que os quiero llevar a la santidad. Pero, una gran mayoría de vosotros, todavía no aprecia éste pedimento que os hago y Yo no Soy cualquier Persona que os está pidiendo algo, Soy vuestro Dios, el Creador del universo, que se está haciendo Pequeño y casi viene a imploraros que os dejéis mover por Mí y que sea Mi Amor el que os nutra, el que os posea, el que os guíe, el que os lleve por caminos seguros.
PedidMe Sabiduría Santa, para que vosotros podáis apreciar lo que os estoy pidiendo, que es grandísimo, que algún día entenderéis y os postraréis ante Mí, agradeciendo por lo que Yo os pedía en estos momentos y no entendíais. Cómo todo un Dios, abajándose a Su creatura y pidiéndoos, hasta por favor, lo que vosotros debierais implorarMe y que debierais perseguirMe constantemente para que os lo concediera. Os estoy dando regalos inimaginables.
Por eso os pido, Mis pequeños, que Me pidáis Sabiduría Santa, para que comprendáis, aunque sea un poco, lo que Yo, vuestro Dios, en Mi Omnipotencia, en Mi Inmensidad, os estoy pidiendo a vosotros, pequeñitos, piedrecitas, que no valéis nada y que, lo que hace que valgáis, es Mi Presencia en vosotros y todos los regalos que Yo derramo en vosotros, para vuestro Bien y el de vuestros hermanos.
Aún a pesar de que no Me entendéis, os amo. Os pido seáis sencillos, como niños y que Me pidáis, lo que sintáis en vuestro corazón, que es lo que os estará indicando Mi Santo Espíritu que Me pidáis y pedidMelo, para que Yo os lo conceda, porque os quiero hacer felices, como los padres hacen felices a los hijos.
Os Bendigo, Mis pequeños y os pido abráis vuestro corazón a Mis intenciones Divinas, porque vosotros sois los que saldréis ganando de todo éste derrame de Bendiciones que os quiero dar.


Gracias, Mis pequeños.


Cuarto Misterio, Habla La Santísima Virgen María,
Sobre: Mis imágenes lloran alrededor del mundo y lloran por vuestra negligencia, por vuestro pecado, por vuestro olvido, por el dolor que Le causáis a Mi Hijo Jesucristo.


Hijitos Míos, ciertamente éstos son Mis tiempos, son los tiempos de la Mujer luchando contra la serpiente, son los tiempos en que la Madre os va a defender contra los ataques de satanás. (Lenguas…)
Imaginad, Mis pequeños, cuánto dolor he tenido en Mi Corazón, al ver cómo satanás os ha arrancado el Amor, que Le debéis a Mi Hijo, de vuestro corazón y ha puesto en vuestro corazón, pura suciedad, pecado, maldad.
No os imagináis, Mis pequeños, Mi dolor de Madre. Estáis afectando con vuestro pecado y vuestra maldad, a Mi Hijo, Jesucristo, vuestro Salvador. Tanto que hizo por vosotros y que sigue haciendo cada día, en cada Misa que se ofrece alrededor del mundo.
Vosotros os habéis apartado de Él y de Su Amor, de Sus Enseñanzas, de Su Ejemplo. Me causáis dolor en la forma en la que Lo tratáis, y Me causáis también dolor por vuestra forma de ser, que no apreciáis las grandezas de vuestro Dios, que fueron regaladas para vuestra Salvación, que ni siquiera agradecéis, que ni siquiera buscáis entenderlas, para que os postréis en agradecimiento ante vuestro Dios y Salvador.
Por eso veis cómo Mis imágenes lloran alrededor del mundo y lloran por vuestra negligencia, por vuestro pecado, por vuestro olvido, por el dolor que Le causáis a Mi Hijo Jesucristo, vuestro Hermano, vuestro Dios.
Mi Corazón de Madre se duele por toda ésta maldad que habéis dejado entrar en vuestro corazón, porque si hubierais seguido lo que Mi Hijo os vino a dar, si ya vivierais Sus Enseñanzas, seríais el pueblo santo, el pueblo bello, en el cual Mi Hijo se debiera recrear.
Nuestro Padre y Nuestro Dios, mandó a Su Hijo, a vuestro Hermano, a que Se diera por vosotros, para que os abrieran nuevamente las Puertas del Reino de los Cielos y que os enseñara la forma para que os ganarais ésa salvación eterna.
Tenéis todo desde hace dos mil años y, si la humanidad hubiera hecho caso a todo esto, santos debierais ser ya, Mis pequeños. Veos ahora, sed vuestros propios jueces, ved vuestro interior, ved vuestras obras, ved vuestro alrededor, ¿en dónde están las Enseñanzas de Mi Hijo?, ¿en dónde están Sus deseos para vuestro cambio, para el de la humanidad entera? Esa es la tristeza de Mi Corazón.
Yo, la Madre del Salvador, Le ofrecí a Nuestro Padre Dios, la Vida de Mi Hijo, la Vida de Mi Dios para vuestra salvación y de nada ha servido para una gran cantidad de hijos Míos. Toda esa Evangelización era para que las almas no se perdieran, era para que todos gozarais y vivierais en plenitud.
Pero ¡qué desperdicio, Mis pequeños!, Evangelización de todo un Dios entre los hombres, la Vida del Cielo aquí en la Tierra, dada por el Maestro de Maestro, dada por el Maestro Dios, Mi Hijo Jesucristo y, vosotros, no apreciasteis todas estas Enseñanzas. Es más, les disteis la espalda, las apartasteis de vuestra vida, las despreciasteis y regresasteis a vivir como satanás quería que vivierais y a él sí le abristeis vuestro corazón, sí le abristeis vuestra vida y ahora estáis viendo las consecuencias del haber escogido erróneamente a vuestro guía. Teníais la Perfección en Mi Hijo para seguir y preferisteis la maldad y el error de satanás en vuestra vida, por eso viene la penitencia. Permitisteis el error en vuestra vida y ahora se os va a dar la oportunidad de apreciar vuestro error. Podréis comparar lo que se os daba y que no aceptasteis y podréis apreciar, plenamente, el error en el que estáis y a dónde os llevaría si Nuestro Dios no hubiera puesto un “hasta aquí” a vuestra vida de pecado y maldad.
Por eso lejos de oponeros a la Voluntad de Nuestro Dios, con todo lo que va a suceder, agradecedLe que detenga ya la vida de éste mundo como va, porque si siguiera así como va, Mis pequeños, prácticamente ninguno de vosotros se salvaría, porque satanás sabe hacer su obra de destrucción y, especialmente, porque no os opusisteis a su acción negativa sobre vosotros. Os inventaba formas de maldad y vosotros las seguíais aceptando en vuestra vida, en lugar de despreciar y luchar contra su maldad.
Esto lo entenderéis en breve, Mis pequeños, cuando la Luz de Mi Esposo, el Santo Espíritu de Amor os haga entender lo que pudisteis haber tenido en pleno, que es el Amor de todo un Dios en vosotros y que lo despreciasteis y que escogisteis, en lugar de ello, a vuestro enemigo, al enemigo de Nuestro Dios, vuestro Creador.
Si aún hay algo de humildad en vuestro corazón, arrodillaos y pedid perdón por lo que Le habéis hecho a Mi Hijo, a vuestro Hermano, a vuestro Dios. Todo el Bien que Él os daba y que vosotros no supisteis apreciar.


Gracias, Mis pequeños.


Quinto Misterio, Habla Dios Padre,
Sobre: Yo quiero que veáis esto, Mis pequeños, para que vuestro corazón se llene de alegría y no os quedéis con vuestro corazón preocupado por lo que vaya a suceder.


Hijitos Míos, Las Sagradas Escrituras, no os hablan sobre todas las veces que Mi Hijo derramó lágrimas por vuestra salvación, por el perdón de vuestros pecados. Muchas lágrimas derramó por la humanidad, muchas lágrimas derramó por el dolor que Le causabais a Su Corazón, muchas lágrimas derramó del ver vuestra necedad y vuestro corazón duro como roca, muchas lágrimas derramó porque, a pesar de todo lo que estaba haciendo por vosotros, la gran mayoría no iba a entender ni a desear su salvación.
Este es el tiempo en que ahora derramaréis vosotros vuestras lágrimas, arrepintiéndoos de lo que no supisteis apreciar en la obra de Mi Hijo. Todo un Dios, orando por vosotros, luchando contra el mal que Le rodeaba y que os iba a rodear también a vosotros al seguirLe y ése dolor no es apreciado por vosotros.
Vuestras lágrimas se van a unir a las de Él y es cuando alcanzaréis vuestra salvación. No quisisteis entender por las buenas, por el Amor que se os ofrecía, pudisteis haber cambiado con vida de paz y de amor, como Él os enseñó y no quisisteis apreciar todo esto que se os daba y, desgraciadamente, sois ésos niños necios, groseros, mal educados, que necesitan el castigo para entender.
Este es el tiempo, Mis pequeños, en que os daréis cuenta de todo el Amor que se derramó por cada uno de vosotros, por vuestra salvación eterna. Viviréis el dolor, viviréis los ataques de satanás, viviréis el ataque de hermanos vuestros, que os verán buscando el Amor y que os querrán distraer de ése Amor y os querrán llevar hacia la maldad. Muchos ataques tuvo Mi Hijo durante Su Vida y, vosotros, los que queréis estar en Mi Amor, también los tendréis en éste tiempo y hasta vuestros mismos hermanos y aún aquellos que dicen estar Conmigo, os atacarán, por envidia, por la maldad de satanás que habita en sus corazones.
Serán tiempos similares a los que vivió Mi Hijo y, por eso, apreciaréis Su Obra, por eso apreciaréis Su Sacrificio y por eso agradeceréis todo lo que Él Se dio por vosotros, por vuestra salvación y por la de todos, pero que no todos la han querido aceptar ni agradecer.
Os repito, Mis pequeños, agradecedMe ésta oportunidad que os doy, en donde os arrepentiréis de corazón de vuestros pecados y eso hará que os ganéis el Reino de los Cielos y que se os abran las Puertas de las Nuevas Tierras, en donde Mi Amor habitará entre los hombres.
Son tiempos de purificación para un Bien inmenso que se os dará, para que vuestras vestiduras se purifiquen, para que podáis entrar a la Fiesta bien vestidos, bien arreglados, para que podáis gozar en pleno lo que Yo he preparado para Mis verdaderos hijos, que seréis llamados los hijos del Amor.
Algunas almas querrán aprovecharse aún en éstos tiempos y querrán entrar a la Fiesta, pero no irán bien vestidos, porque no habrán purificado su ser y sus vestiduras. Sucias estarán, pero querrán aprovecharse, como se han aprovechado toda su vida, de la gente buena y por eso serán sacadas éstas almas de la Fiesta y arrojadas al lugar del castigo, porque ya no será el tiempo de la injusticia ni del mal entre los hombres. Estáis ya en el tiempo de la separación del trigo y la cizaña, de la separación del Bien y el mal.
Yo quiero que veáis esto, Mis pequeños, para que vuestro corazón se llene de alegría y no os quedéis con vuestro corazón preocupado por lo que vaya a suceder, porque así es el hombre, se preocupa por lo que se os va a quitar y quiero que entendáis que lo que se os va a quitar, es lo que os está separando de Mí.
Vuestro corazón es pecador, vuestra mente, sucia está, vuestro ser no está de acuerdo a lo que Yo quiero, porque no fuisteis creados para lo que estáis viviendo y lo que sois ahora. Ciertamente os voy a quitar muchas cosas, pero será todo aquello que os daña, que os está dañando interna y externamente. Yo no puedo aceptar en éstas Nuevas Tierras, en éste Nuevo Mundo que os daré, almas que tengan en su interior impurezas, graves impurezas que puedan dañar a vuestro ser y que puedan dañar a otros hermanos vuestros.
Seréis purificados y embellecidos, para que podáis estar junto a Mí. Solamente las almas transformadas, las almas purificadas, podrán estar frente a Mí, podrán vivir unas con otras podrán gozar de todos los bienes que os voy a dar. Os sentiríais mal, Mis pequeños, si Yo no os purificara y que os presentarais ante Mí. Os sentiríais avergonzados de no estar limpios, interna y externamente y, por eso, por vuestro bien, voy a permitir lo que se va a dar sobre la Tierra y de eso debéis estar gozosos, que seréis purificados para que pronto estéis ante Mi Presencia y que gocéis plenamente de los regalos inmensos que os voy a dar, de la nueva vida que viviréis, que no tenéis ni idea de las bellezas que están preparadas para cada uno de vosotros, Mis hijos fieles, Mis hijos buenos, Mis hijos del Amor.
Por eso os pido, que mantengáis alegría santa dentro de vuestro ser y que esperéis con ansia que lleguen ésos momentos, y que no importa lo que pase en vuestra vida, que el dolor será pasajero, que el dolor será soportable, porque será un dolor purificador, un dolor que también pasó Mi Hijo por vosotros y que fue un Dolor Redentor.
AgradecedLe a Mi Hijo lo que hizo por vosotros, agradecedMe a Mí, vuestro Padre y vuestro Dios, que mandé a Mi Hijo para que os liberara. AgradecedLe a Mi Santo Espíritu, que grandes Dones ha derramado sobre vosotros y que todavía derramará, para que gocéis plenamente el regalo que pronto se os dará, por haber perseverado, por haber amado.


Gracias, Mis pequeños.

lunes, 13 de diciembre de 2010

Mensaje de Dios Padre a J. V.

Nov 14_10 Mi Amor descenderá a la Tierra y conoceréis lo que es Mi Amor.



Mensaje.

Habla Dios Padre,
Sobre:
Estad alegres, estad alegres porque el tiempo ya es breve para que empecéis a gozar de Mis Delicias.
Hijitos Míos, Soy vuestro Padre Dios. Yo he creado lo que veis y lo que no veis y vuestra posición, Mis pequeños, es la del Amor, porque Soy Amor, porque sois extensión Mía  como lo fue Mi Hijo cuando estuvo entre vosotros.
Mi Amor tiene que purificar la Tierra, pero no todos los hombres dejan entrar el Amor en sus corazones, pero por el Amor que os tengo Mis pequeños y por las oraciones de unos cuantos, Mi Amor descenderá a la Tierra y conoceréis lo que es Mi Amor, porque habláis mucho de Él y elucubráis sin sentido con palabras huecas, con ideas erróneas, pero aún no alcanzáis a entender lo que es el Verdadero Amor de vuestro Dios, por eso le daré la oportunidad a ésta humanidad, del conocer y el vivir, aunque sea por unos segundos, Mi Amor y así tendréis una realidad en vuestra vida, en qué basaros, para hablar de Mi Amor.
Pocos muy pocos de Mis hijos, alrededor de la Tierra, les he permitido gozar de Mi Amor, ellos lo entienden porque lo han vivido y transmiten su experiencia, pero nunca es igual a lo que podéis vivir, por eso la humanidad entera tendrá la oportunidad de vivir ésta experiencia. Después de ésta experiencia Divina, los que quieran traicionar Mi Amor, Mis Enseñanzas, tendréis que padecer las consecuencias de vuestra decisión, pero aquellos de Mis hijos, que por ésta experiencia Divina, vengan a Mí, Mis brazos abiertos estarán para recibirles, Mi Amor de Padre los abrazará y no los dejará ir nunca más.
Yo Soy un Dios de Amor y por muchas formas he tratado de deciros que regreséis a Mí y que os améis los unos a los otros y así viviréis ya en la Tierra como en el Cielo, pero vuestros corazones duros están y no entendéis lo que es Mi Amor, es ya no ver la Tierra, es convivir Alma con alma.
Mi Hijo vino a enseñaros esto, que ya no vivierais como satanás quiere que viváis, en amoríos carnales que no llevan a la Verdadera Vida sino que os destruyen y os llevan a morir eternamente con él.
Vosotros habéis sido llamados al Verdadero Amor Espiritual, Puro, Santo, esto es lo que viviréis en el verdadero Mundo, por eso os estoy preparando.
Debéis dejar el mundo, debéis vivir Alma con alma, donde Yo Soy el verdadero centro de vuestra vida. Yo Soy el horizonte, Yo Soy el medio para llegar a ese verdadero Amor, como el que Yo vivo en el Reino de los Cielos.
Sois parte del Cielo, salisteis de aquí, del Cielo a la Tierra, donde vivís ayudando a vuestros hermanos, no quiero que os contaminéis, por eso os quiero, por eso os guío y por eso os amo tanto.
Debéis vivir plenamente para los bienes del Cielo, como Mi Hijo os enseñó. Él dio la pauta a seguir, ya no son momentos de duda, habéis sido formados de tiempo atrás, habéis sido apartados desde tiempo atrás, os he escogido, agradecedMe, Mis pequeños, que estáis Conmigo. Aún así os respeto, al grado de que si queréis apartaros lo podréis hacer, pero Me daríais un gran dolor.
¡Os he dado tanto, tanto!, pero no todos lo aprecian, por eso os daré ésa Gracia para que os deis cuenta de que Mi Amor está presente entre vosotros.
Así, como van Mis pequeños, muchos van a la condenación eterna. Orad Mis pequeños. Orad por esos hermanos, no lo critiquéis, no les hagáis más daño. Un verdadero hijo Mío, ama al pecador, lo quiere levantar porque ése es Mi Amor.
El amor pecaminoso tira, cae, mata y no debe ser así. Yo os he dado vida, os levanté de la muerte, estabais perdidos y Yo os levanté de eso, Mi Gracia fue tras vosotros, Mis pequeños.
Mi Amor os dio nueva vida y es la que quiero que conservéis y así apreciaréis grandemente el Amorque os daré pronto, en esta Nueva Tierra que habitaréis, donde será Mi Amor que os alimente y os dé Nueva Vida.
Si vuestro corazón ciertamente ama, agradecedme desde ahora que haya puesto Mis Ojos en vosotros para el regalo que daré a los que han luchado por mantener su amor en Mi Corazón.
¡Cuántas cosas bellas os daré!, soy un Padre amorosísimo, consiento a Mis pequeños que Me aman de corazón.
Estad alegres, estad alegres porque el tiempo ya es breve para que empecéis a gozar de Mis Delicias.
Saltad como aquellos niños que reciben el regalo que tanto deseaban, ya tienen Mi regalo, está prácticamente en sus manos, solo pido que perseveréis para que estéis limpios y no se sientan mal ante Mi Presencia.
Os quiero limpios, gozosos, gozando de Mis Bendiciones, de Mi Amor.
Os Bendigo, Mis pequeños, Mi Amor queda entre vosotros y con los vuestros.
Gracias, Mis pequeños.