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miércoles, 20 de agosto de 2014

15 de Julio del 2014 - ¡Daos cuenta que estáis en momentos trascendentales, importantísimos!.

Jul 15_14 ¡Daos cuenta que estáis en momentos trascendentales, importantísimos!ImprimirE-Mail
Rosario vespertino.

Temas:
  • En algún momento, si se os ataca, no ataquéis vosotros, porque, si no, de eso seréis juzgados.
  • Cuidad el Amor de Mi Hija la Siempre Virgen María en vuestro corazón, respetadla y haced que otros la respeten, pero no obligando, sino haciendo que la amen por el amor que vean que vosotros le tenéis.
  • Hay mucha necesidad de salvar almas y vosotros no podéis estar de parte de aquellos que las están condenando en lugar de salvarlas.
  • Necesito que vosotros, en ningún momento, os separéis de Mí, para que actuéis en Sabiduría, con Mi Sabiduría, Mis pequeños, sin temor, como os dije antes, para que podáis vivir plenamente en Mí.
  • Os dije que Yo vine a la Tierra por los enfermos, no por los sanos. ¿Cómo os consideráis cada uno de vosotros, enfermos o sanos? Si vosotros decís que estáis sanos, la soberbia está con vosotros.

Mensaje de Dios Padre y Nuestro Señor Jesucristo a J. V.

Primer Misterio. Habla Dios Padre
Sobre: En algún momento, si se os ataca, no ataquéis vosotros, porque, si no, de eso seréis juzgados.
Hijitos Míos, cuando os hablo de Mensajes fuertes, estos son para vuestros hermanos, que no quieren estar Conmigo. A vosotros, os hablo con Amor, porque Soy Todo Amor. Mi Amor os rodea, Mi Amor os cubre, Mi Amor os alimenta. Estoy aquí entre vosotros. Lleno éste lugar de Mi Amor.
Mis pequeños, Mis consentidos, los que habéis dejado el Mundo por estar Conmigo, por vivir Mi Amor y transmitirlo, vuestra purificación os va a llevar a un grado de excelsitud, bellísimo. Vosotros, de alguna forma, os he permitido ir gozando de Mis Bienes, de Mi Amor y vuestro regalo será ése, poder vivirlo en mayor potencia. Escogisteis la mejor parte y eso Me agrada, fuisteis como María, la hermana de Martha, que escogió estar Conmigo y, aunque, ciertamente, debéis cumplir con las cosas del Mundo, ella escogió en ése momento estar Conmigo. Esa es la perfección de las almas que están Conmigo, llenarse de Mi Amor.
La verdadera felicidad es el estar Conmigo, Mis pequeños. Se habla de felicidad y de amoríos, pero son pecaminosos, a donde os lleva satanás y, os hace creer que ésas palabras también vienen de Mí, completamente, y no, Mis pequeños. Mi Amor es virtuoso, Mi Amor os da excelsitud porque, hay hermanos vuestros que pecando, son felices y están buscando amores que son pecaminosos, entonces la palabra “felicidad y amor”, si no están llenos de virtud, si no están llenos de Mi Presencia, no vienen de Mí. Tened cuidado Mis pequeños, que no os engañe satanás.
Por eso en las Sagradas Escrituras se os habla de que “aquí está el Mesías o está allá” y no, Yo estoy en donde se vive el Amor Virtuoso, el Amor Santo, el Amor que os va a hacer crecer espiritualmente y que va a producir frutos, frutos de amor, de unión, de respeto, de cariño, de vida, de crecimiento espiritual, de unión íntima Conmigo, eso es el Amor Virtuoso, ésa es la felicidad virtuosaNo os dejéis engañar con palabras parecidas a donde os lleva satanás y os hace creer que vienen de Mí. Tened cuidado.
Mis pequeños, estoy con vosotros, no os separéis de Mí, las pruebas que vais a tener, también, os dolerán, pero serán diferentes a las que tendrán vuestros hermanos. Vuestro dolor será como el de Mi Hijo, el de ver la injusticia, ver la maldad, ver el error que escogen, y han escogido hermanos vuestros, dejándose llevar por la maldad de satanás, atacando Mi Santo Nombre, destruyendo lo que es Mío y lo que viene de Mí.
Vuestros dolores serán en vuestro corazón, en vuestra alma, que ya está Conmigo. En ningún momento, si se os ataca, no ataquéis vosotros, porque, si no, de eso seréis juzgados. La Enseñanza que os dejó Mi Hijo, durante Su Pasión dolorosísima, la debéis tener en todo momento presente en vuestra vida. Se Le atacó a Él, en lo Personal, a todo un Dios, un Dios de Amor y Él, en ningún momento hizo uso de Sus Poderes Divinos para destruir la vida de alguno de los verdugos o de la gente del pueblo que Lo atacaba. No hubiera sido Ejemplo de lo que había enseñado.
Él contratacó con Amor, con disculpas, con oración. Mi Hijo vio cómo Le faltaban al respeto a Su Madre, Mi Hija, la Siempre Virgen María, pudo haber también contratacado y eliminado a aquellos que Le blasfemaban horriblemente y de Él no salió ningún mal, sino oración, intercesión, compasión y, vosotros deberéis actuar de la misma forma en estos tiempos venideros, aunque se os esté atacando injustamente o que se le ataque a alguno de vuestros hijos o seres queridos, no mováis ningún dedo para destruir la vida de algún hermano vuestro o causarle algún dolor, porque, si no, seréis juzgados del mal que le hagáis a vuestro hermano y, si estáis Conmigo, es amor lo que debe salir de vosotros, amor en todo momento, Mis pequeños. Amor de salvación hacia ésos hermanos vuestros que están obrando en el mal y, traédmelos a Mi Corazón, con las Palabras de Mi Hijo: “Perdónalos Padre, porque no saben lo que hacen”, porque, ellos están actuando en el mal y serán juzgados por su mal, pero Yo no quiero que vosotros, que estáis ya Conmigo, deis mal ejemplo y actuéis en el mal, cuando debéis responder con las Enseñanzas que os dio Mi Hijo: Amor, cariño, respeto, integridad hacia vuestros hermanos. No deseéis ningún mal, deseadles su salvación, deseadles Mi Reino, porque es a donde vosotros llegaréis y no podréis llegar hasta Mí, deseando u obrando en el mal. Os amo, Mis pequeños.
Gracias, Mis pequeños.

Segundo Misterio. Habla Dios Padre.
Sobre: Cuidad el Amor de Mi Hija la Siempre Virgen María en vuestro corazón, respetadla y haced que otros la respeten, pero no obligando, sino haciendo que la amen por el amor que vean que vosotros le tenéis.  
Hijitos Míos, vosotros tenéis en las Sagradas Escrituras cómo se desarrollarán más o menos los acontecimientos de la purificación, pero no quiero que vosotros viváis en el temor, porque, Mis hijos, Mis verdaderos hijos, no deben vivir en el temor, sino en el Amor.
Si vosotros sois representantes del Cielo en la Tierra, porque habéis tomado las Enseñanzas de Mi Hijo como forma de vida para vosotros aquí en la Tierra, debéis ser ejemplo de paz, de amor, de una armonía interna, porque estáis dejando que Mi Hijo viva en vosotros.
Os he dicho que en el Amor no debe haber temor, ciertamente, vuestra naturaleza humana, se atemoriza y duda ante los acontecimientos que no conoce o ante todo aquello que se sale de vuestras capacidades, pero dejadMe a Mí todo eso en Mis Manos, así como Mi Hijo Me dejó llevar  Su Vida. Él respetó Mi Voluntad en Él y ésa es vuestra posición ahora, Mis pequeños, si vais a ser otros Cristos, que es una Gracia muy grande, que estoy concediendo a muy pocas almas, como vosotros, entonces os debéis dejar mover por Mi, por Mi Voluntad y Mi Voluntad es Perfección, Mis pequeños.
Estos son Mis tiempos, tiempos de cambio, tiempos de conversión, tiempos de salvación, tiempos de Justicia. Mi Hija, la Siempre Virgen María, tomará de Mi Poder para vencer a satanás, será vencido por una Creatura, pero ¡qué Creatura tan excelsa!, por eso, hoy la ataca tanto y satanás se ha encargado de que en sectas o grupos no la tomen en cuenta, la ataquen y hasta la blasfemen.
Mis pequeños, cuidad el Amor de Mi Hija la Siempre Virgen María en vuestro corazón, respetadla y haced que otros la respeten, pero no obligando, sino haciendo que la amen por el amor que vean que vosotros le tenéis. El amor vivido, mueve corazones.
Ciertamente, cuando vosotros habláis de Mí, podréis mover corazones, pero por eso os mandé a Mi Hijo, para que vierais cómo Él Vivía lo que ya estaba profetizado y lo que es Él en el Cielo, en la Tierra, en lo visible y en lo invisible. Un Dios entre vosotros dándoos una lección vivida de Mi Amor.
Esa es vuestra posición ahora, Mis pequeños y os estoy dando ésta Gracia especial de ser otros Cristos en éstos momentos. Quizá, en éste momento, no os dais cuenta de lo grande de la misión que os estoy encomendado de ser otros Cristos. Ciertamente no seréis otros dioses, pero estaréis transmitiendo lo que todo un Dios dio a los hombres.
No os separéis de Mí en ningún momento, Mis pequeños, mientras más cerca estéis de Mí, más Me manifestaré a los hombres a través de vosotros.
Gracias, Mis pequeños.

Tercer MisterioHabla Dios Padre.
Sobre: Hay mucha necesidad de salvar almas y vosotros no podéis estar de parte de aquellos que las están condenando en lugar de salvarlas.
Hijitos Míos, lejos de sentir, en vuestro corazón, alegría por aquellos hermanos vuestros que se vayan a perder, en éstos tiempos de purificación, por su mal proceder, por su mala vida, debéis tener compasión de ellos. Son Mis hijos, son vuestros hermanos y si realmente queréis vivir en el Amor o vivís ya en el Amor, no os debe de alegrar esto, ni siquiera debe llegar a vosotros ésa idea de “se lo merecían”, eso está en Mi Juicio, no en el vuestro. Vosotros debéis tener compasión por vuestros hermanos que estáis viendo que viven en el error, que viven en el pecado, que están dando un mal ejemplo ante el mundo. No importa a qué nivel estén, el que vive en el mal, lo transmite, lo refleja y vosotros, ciertamente, juzgáis por su mal proceder, porque sabéis que de lo que está lleno el corazón, también sus palabras y sus obras estarán llenos de eso, de ésa maldad, de ésos errores, pero al ver eso, Mis pequeños, en lugar de juzgarles o desearle un mal eterno, vuestro corazón es el que debe de triunfar sobre el odio que podáis tener hacia ellos. Debéis ayudarles con vuestra oración y no ayudarles en su condenación por vuestros malos deseos y por vuestra falta de oración y de intercesión hacia ellos.
Esa es la forma de actuar de Mis verdaderos hijos y hermanos en Cristo Jesús. Vosotros veis los actos de vuestros hermanos o la lejanía que, aparentemente, tienen hacia Mí, vuestro Dios, pero muchas veces estáis en un error, vivís en un error, creyendo que son muy malos y es todo lo contrario. A veces, Mis pequeños, internamente pueden estar mejor que vosotros, ellos, quizá, hasta puedan darMe más alegrías que las que podáis darMe vosotros rezando sin devoción, sin amor, sin respeto.
Hay mucha necesidad de salvar almas y vosotros no podéis estar de parte de aquellos que las están condenando en lugar de salvarlas porque, ciertamente, antes vivíais así, condenando almas al ver cómo se comportaban, deseándoles su condenación eterna, tomando una posición que no os corresponde, porque Yo Soy el Único Juez. SalvadMe almas, tengo sed de almas, quiero dar Vida a infinidad de almas que viven en la obscuridad, que viven en el error. Amadles con todo vuestro corazón y seréis amados con todo Mi Corazón.
Gracias, Mis pequeños.

Cuarto Misterio. Habla Dios Padre.
Sobre: Necesito que vosotros, en ningún momento, os separéis de Mí, para que actuéis en Sabiduría, con Mi Sabiduría, Mis pequeños, sin temor, como os dije antes, para que podáis vivir plenamente en Mí. 
Hijitos Míos, no os dejéis contagiar de las decisiones de los gobernantes de la Tierra, sabiendo que éstas decisiones o sus acciones, están movidas por satanás. Os tratarán de llevar a situaciones graves, guerras, acaparamiento de alimentos, pero no os preocupéis, Mis pequeños, de la forma en que satanás os quiera atacar, vosotros estáis Conmigo y muchos de vuestros hermanos también lo estarán, por vuestra oración, por vuestra intercesión. Por eso, necesito que vosotros, en ningún momento, os separéis de Mí, para que actuéis en Sabiduría, con Mi Sabiduría, Mis pequeños, sin temor, como os dije antes, para que podáis vivir plenamente en Mí.
Si os dejáis vencer y empezáis a actuar según vuestra voluntad, todo lo echaréis a perder, porque vosotros actuaréis y pensaréis humanamente y no como Yo, vuestro Dios, actuaría y pensaría.
Daos cuenta, Mis pequeños, la Gracia tan grande que os estoy concediendo, de ser Mis instrumentos en la Tierra. Ya no serán unos cuantos, seréis bastantes los que estaréis actuando y dejándoos mover por Mí y dando ejemplo a vuestros hermanos de salvación y de santificación de almas. Ciertamente será el momento de purificación, de eliminación de almas que no quieran estar Conmigo, pero también serán momentos de santificación de muchas otras y de gran ejemplo hacia vuestros hermanos y vosotros seréis de ellos, Mis pequeños. Dad ejemplo para que podáis mover corazones, como Mi Hijo los movió con Su Presencia, con Su Palabra con Sus Acciones, con Sus Milagros. Muchos de vosotros también podréis hacer milagros en estos tiempos, en Nombre de Mi Hijo Jesucristo, porque sois Mis apóstoles de éstos tiempos y ved todo el poder que Yo les concedí a Mis apóstoles. Los doce primeros, tenían a Mi Santo Espíritu en su interior y actuarán según Su Moción.
Esa es vuestra misión ahora Mis pequeños, actuar bajo la Moción de Mi Santo Espíritu y haciendo lo que hicieron Mis primeros apóstoles. Mi Hijo os dijo que podríais llegar a ser las mismas cosas que Él hizo y aún mayores y lo haréis, Mis pequeños, en humildad, en amor y sobre todo, bajo la acción de Mi Voluntad de Mi Santísima Trinidad en vosotros.
Os vuelvo a repetir, no serán momentos feos ni difíciles para todos vosotros, Mis escogidos, también gozaréis éstos momentos de la purificación, aún a pesar del dolor que se vea a vuestro alrededor, porque podréis estar salvando almas y gozando de Mi Gracia en vosotros y eso os dará una gran alegría, vivir para Mí, vuestro Dios y salvar almas, como lo hizo Mi Hijo Jesucristo, ¿qué más puede pedir una creatura, como sois vosotros?
Gracias, Mis pequeños.

Quinto MisterioHabla Nuestro Señor Jesucristo.
Sobre: Os dije que Yo vine a la Tierra por los enfermos, no por los sanos. ¿Cómo os consideráis cada uno de vosotros, enfermos o sanos? Si vosotros decís que estáis sanos, la soberbia está con vosotros.
Hijitos Míos, os dije que Yo vine a la Tierra por los enfermos, no por los sanos. ¿Cómo os consideráis cada uno de vosotros, enfermos o sanos? Si vosotros decís que estáis sanos, la soberbia está con vosotros. Vivís afectados por el pecado en múltiples formas, el pecado os rodea, en todo momento pecáis, por pensamiento, palabra, obra y omisión y ¿todavía así, con soberbia, decís que estáis sanos? No, Mis pequeños, no estáis sanos, ninguno de vosotros y todos necesitáis de Mí, que Soy el Médico de cuerpos y almas. Soy vuestro Dios, Jesucristo, vuestro Salvador y estuve entre los hombre y los conozco perfectamente, primeramente como Dios y luego como Hombre.
Conviví entre vosotros, para que aprendierais de Mí y pudierais comparar, con Mi Ejemplo, vuestro actuar en la Tierra.
Tenéis en las Escrituras cómo actué entre los hombres, ¿actuáis así cada uno de vosotros?, ¿realmente, aprendisteis de Mí y estáis haciendo vida lo que Yo os enseñé?
Mis pequeños, os vine a traer el Cielo a la Tierra. Cuando vosotros estáis aprendiendo en la escuela, se os va dando conocimiento de acuerdo a vuestra edad, vais creciendo y os vais llenando de inteligencia por lo aprendido y de Sabiduría si estáis Conmigo y así, como vais creciendo, vais dando ejemplo y vais ayudando a otros a perfeccionarse y a aprender de lo que vosotros tenéis.
Vosotros estabais en párvulos antes de Mi llegada a la Tierra, prácticamente no sabíais nada, pero os traje el Cielo a la Tierra para que os llenarais de Mí y para que dierais buen ejemplo y, con ello, ir destruyendo toda la maldad de satanás que os rodea. ¡Cuánto habéis desperdiciado!
Ciertamente, Mi Redención fue personal, fue por cada uno de vosotros y os he dicho que si fuera nada más por uno, volvería a pasar todo ése horror, todo ése dolor, vivir toda ésa maldad que viví y no solamente de Mis verdugos, sino de la misma gente, de gente semejante a vosotros y que quizá se repetiría igual si bajara en éstos momentos de vuestra historia, se Me vería también raro. Yo, todo un Dios, predicando en estos tiempos el volver al Amor, respetar Mis Mandamientos, dándoles una doctrina de perfecciónposiblemente Me volverían a crucificar para deshacerse de Mí, ya que les iría recomendado el apartarse del pecado y de la maldad.
Meditadlo, Mis pequeños y veréis que hablo con la Verdad, porque la gente, en general, no quiere saber de Mí, no quiere echarse el compromiso de vivir rectamente, de vivir de acuerdo a lo que Yo os enseñé y que Morí por vuestra salvación.
Cuánto dolor Me causáis cada uno de vosotros en mayor o en menor grado. Me duelen vuestros pecados, Me duele vuestra inconsistencia, vuestros errores, vuestro deprecio, el no querer vivir de acuerdo a vuestra posición tan importante que tenéis cada uno de vosotros con vuestra misión, cada uno de vosotros, en vuestra historia.
¡Daos cuenta que estáis en momentos trascendentales, importantísimos! Son un parteaguas éstos momentos que estáis viviendo. Daos cuenta de ello, meditadlo, vividlo ya que vosotros lo estáis viviendo en éstos momentos, se os permitió el don de la vida para éstos momentos de cambio de este parteaguas, del cual se hablará en lo futuro y vosotros estáis participando en él. ¿Cómo se hablará de vosotros, de cada uno de vosotros en el futuro, en el bien o en el mal? ¿Servisteis para Mis planes de salvación o fuisteis instrumentos para que otras muchas almas se perdieran?
Meditadlo, Mis pequeños, Yo Morí por vosotros, Me di por vuestra salvación y por vuestro crecimiento para que llegarais a vuestra perfección, ¿vais a desperdiciar todo lo que Yo hice por vosotros o Me vais a dar alegría, viviendo como Yo os enseñé?
Gracias, Mis pequeños.


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viernes, 22 de febrero de 2013

Mensaje a J.V. - 13 Febrero 2013


Feb 13_13 El hombre de la perdición, en breve aparecerá ante el mundo entero.
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Rosario vespertino - (Miércoles de Ceniza)

Temas:
  • Son tiempos de prueba, Mis pequeños en donde realmente veréis si pertenecéis a Mí, vuestro Dios o podréis ser aniquilados por las garras de satanás.
  • Mis ministros deben ser también ejemplo ante el mundo, pero con muchas más responsabilidades, porque tienen el Sacramento del Sacerdocio y eso les confiere una Gracia muy grande que no han querido aprovechar en pleno.
  • La santidad se da en un alto grado de humildad, así que pedídmela y no creáis que esto os llevará a una soberbia inmensa, al contrario, os repito, la santidad necesita un alto grado de humildad.
  • El hombre de la perdición, en breve aparecerá ante el mundo entero. ¿Qué haréis, Mis pequeños? ¿Qué haréis si no estáis Conmigo?
  • BuscadMe en todo momento, no Me abandonéis porque, ciertamente, es el hombre el que Me abandona, Yo, vuestro Dios, nunca os abandono.


Mensaje de Dios Padre y Nuestro Señor Jesucristo a J. V.

Primer Misterio, Habla Dios Padre.
Sobre: Son tiempos de prueba, Mis pequeños en donde realmente veréis si pertenecéis a Mí, vuestro Dios o podréis ser aniquilados por las garras de satanás.
Hijitos Míos, dejad al hombre que haga las cosas del hombre, especialmente cuando se han dejado llevar por satanás. Vosotros sois Míos, vosotros, los que habéis escogido el mejor camino, no os debéis preocupar. Os he venido preparando por mucho tiempo para estos momentos que padeceréis, son tiempos de purificación, son tiempos de prueba, son tiempos de acrisolamiento, de aquí saldrán las almas que serán escogidas para los Nuevos Tiempos.
Recordad cómo Me he preocupado Yo, vuestro Dios, vuestro Padre, de ir escogiendo el redil, Mi Hijo Me los ha traído, Mi Hija, la Siempre Virgen María, va cuidando de que no salgan del redil y especialmente cuida a aquellos que puedan ser más atacados por las garras de satanás.
Son tiempos de prueba, Mis pequeños en donde realmente veréis si pertenecéis a Mí, vuestro Dios o podréis ser aniquilados por las garras de satanás.
Es tiempo en que la Fe os pondrá a salvo y vosotros habéis sido preparados para estos momentos. Os he dicho que éstos tiempos de tribulación os van a traer directamente a Mi Corazón, porque aquellos que confían en Mí, siguen Mi Santa Voluntad. Aquellos que dudan, fácilmente podrán caer y por eso os he pedido que oréis fuertemente por aquellos que no tienen una Fe a prueba de todo lo que vendrá pero, sobre todo por aquellos que no tienen amor a Mí, porque cuando alguien ama, se da totalmente por el que ama y vosotros, que estáis Conmigo, sé que os daréis por Mí. No necesariamente esto quiere decir una donación de muerte o de gran dolor, sino de defensa de lo que es Mío.
Recordad cómo Mi Hijo escogió como apóstoles a unos pocos de tantos que estuvieron a Su alrededor. En este tiempo, son también pocos los que Me aman, los que están Conmigo, los que quieren mantener Mi Amor sobre la Tierra, pero sobre todo, que quieren mantener Mi Amor en su corazón.
¿A qué bando pertenecéis, Mis pequeños?, vosotros os podréis contestar, Yo ya conozco la respuesta.
Deseo, Mis pequeños, que luchéis, pero con amor, contra todo lo que vaya a pasar a vuestro alrededor. Ciertamente, satanás, dará sus coletazos para tratar de destruir la Fe, que es la que Yo estoy manteniendo sobre la Tierra pero, ya os he dicho que, al resto fiel, Yo lo he de mantener junto Conmigo, protegido, contra satanás. Y recordad nuevamente, que satanás no tiene la fuerza, el poder, las capacidades que tengo Yo, como Dios, así que no le temáis, si estáis Conmigo, lo venceréis fácilmente.
Gracias, Mis pequeños.

Segundo Misterio, Habla Nuestro Señor Jesucristo.
Sobre: Mis ministros deben ser también ejemplo ante el mundo, pero con muchas más responsabilidades, porque tienen el Sacramento del Sacerdocio y eso les confiere una Gracia muy grande que no han querido aprovechar en pleno.
Hijitos Míos, Soy vuestro Hermano Jesucristo y lloro, junto con vosotros, al ver cómo el hombre, que se ha satanizado, al ver cómo el hombre que se ha vuelto del mundo, no quiere seguir lo que a Mí tanto Me costó y Me sigue costando y Me duele ver lo que se ha hecho con Mi Iglesia, que deja mucho qué desear.
Ciertamente, hay muy buenos elementos dentro de ella que están manteniendo su vitalidad, pero se está viendo también cómo la maldad se ha introducido y ya no se está dando lo que se debiera dar.
Se ha tomado la Iglesia una posición muy comodina, ya no se lucha por llevarMe a Mí a los pueblos necesitados, a aquellos hermanos vuestros que necesitan conocerMe y amarMe. No se busca el sufrir ya hasta el cansancio o muerte, por tomar una posición cómoda de muchos de Mis sacerdotes y religiosos, siendo que, el mismo pueblo necesita de los Sacramentos y ésa posición cómoda, hace que muchos mueran sin ellos, los cuales debieran ser administrados por Mis ministros y sacerdotes.
Mucha maldad se ha introducido dentro de ella y ya no se busca vivir en el respeto a Mis Leyes y a Mi Amor, por eso, tiene que ser purificada y santificada.
Ciertamente, esto causará una gran expectación mundial, causará muchas dudas, causará mucho dolor pero, al final, Mi Amor se hará sentir entre los hombres, especialmente cuando quede purificada y regresen a ella.
La Iglesia, el Templo en sí, es Casa de Oración y Yo estoy presente ahí, Mis pequeños y así debiera ser, que todo aquel que Me quisiera encontrar, llegara a orar, llegara a arrepentirse de su mal proceder, llegara a convivir un rato con su Dios. Vosotros sois Iglesia, vosotros sois templo vivo de Mi Presencia en vuestro ser, vosotros debéis ser ejemplo ante los hombres, simplemente por el hecho de vivir lo que Yo os he enseñado, y eso os debe dar un carácter muy especial entre vuestros hermanos, a tal grado de que se os reconozca como seguidores Míos. Los que Me viven, realmente, Me transmiten sin darse cuenta y ahora no lo estáis viendo con muchos de Mis ministros o sacerdotes. Os acercáis a ellos y viven bien más del mundo, no viven ésa intimidad Conmigo, buscan cosas muy diferentes para la que fueron ellos escogidos. Mis ministros deben ser también ejemplo ante el mundo, pero con muchas más responsabilidades, porque tienen el Sacramento del Sacerdocio y eso les confiere una Gracia muy grande que no han querido aprovechar en pleno.
Me duele ver, Mis pequeños, tanta confusión, maldad, lucha de intereses mundanos y ataques satánicos por parte de ellos, porque muchos de mis ministros se han vuelto instrumentos de satanás y ofrecen sacrificios y ofrendas a Mi enemigo, aún en Mi Templo Santo. ¡Cuánta traición por parte de ellos!, ¡Me duele tanto, Mis pequeños! Ciertamente, desde un principio, aquí sobre la Tierra, Mi Iglesia tuvo un traidor, no escogí lo mejor que había entre los hombres. Sé y reconozco las debilidades que existen en la humanidad, pero cuando son escogidas estas almas, para el Sacramento Sacerdotal, Mi Gracia se derrama sobre éstas almas importantes para todos vosotros y hay un cambio grande en su ser. Pero muchos, que han obtenido ésta Gracia, la han hecho a un lado, han traicionado Mis regalos, Mis Bendiciones y no han querido seguirMe. Han regresado al mundo, buscando sus placeres y riquezas, al grado de ser escándalo entre sus mismos hermanos sacerdotes y aún más, para Mi Iglesia Mundial, que sois vosotros. ¡Cuánto dolor Me causáis, Mis pequeños, ministros que habéis traicionado Mi Amor, pero sobre todo, que traicionasteis el que Yo os hubiera escogido para ésta misión grande sobre la Tierra, que es la más grande que un hombre pueda tener, la de ser sacerdote entre los hombres.
No sabéis apreciar la grandiosidad de vuestra posición ante los hombres y ante el Cielo. Habéis desperdiciado Mis regalos pero, sobre todo, el que Yo haya puesto toda Mi Confianza sobre vosotros, Me traicionasteis.
Arrepentíos, ahora que tenéis todavía tiempo para hacerlo, porque, ciertamente, Mi Juicio sobre vosotros será tremendo, porque Me fallasteis a Mí, vuestro Dios, fallasteis y engañasteis a vuestros hermanos en el mundo y causasteis escándalo, a tal grado, de que muchos perdieron la Fe por vuestro mal proceder. Seréis juzgados severamente, ministros de Mi Iglesia que fallasteis porque Me disteis la espalda y quisisteis seguir a Mi enemigo.
De cualquier manera, recibid Mis Bendiciones, para que ellas toquen vuestro corazón y venga vuestro arrepentimiento antes de vuestro Juicio severo.
Gracias, Mis pequeños.

Tercer MisterioHabla Dios Padre.
Sobre: La santidad se da en un alto grado de humildad, así que pedídmela y no creáis que esto os llevará a una soberbia inmensa, al contrario, os repito, la santidad necesita un alto grado de humildad.
Hijitos Míos, a la Luz de Mi Santo Espíritu, vosotros debéis entrar en vuestro corazón, solos y unidos perfectamente a Mí, sabiendo que os veo, que escucho vuestro corazón, que os conozco perfectamente. Quiero que seáis sinceros, honestos con vosotros mismos, ante Mi Presencia, que os juzguéis ante Mí y, humildemente, caigáis de rodillas,presentándoMe todo vuestro ser, con vuestras cualidades y defectos, con vuestros errores, con vuestras necesidades espirituales, con vuestras fallas que, a pesar de que Yo os di todo para que cumplierais con lo que Yo necesitaba que cumplierais con vuestra misión, no lo quisisteis aprovechar.
Mis pequeños, así solos, ante Mí, sabiendo que Yo Soy todo un Dios de Amor y de Perdón, mostraos enteramente a Mí, para que Yo purifique todo aquello en lo cual habéis fallado, porque os quiero perfectos, porque os quiero santos y no podréis llegar a ése grado de belleza espiritual si, primeramente, no sois humildes y, segundo, si no queréis contar Conmigo, con Mi ayuda que transforma todo, aún lo más malo, aún aquello que es abominable a Mis Ojos.
Mis pequeños, fuisteis creados a Imagen y Semejanza Mía y así os quiero y así os necesito pero, vosotros, en éstos momentos, cuando el pecado ya ha tomado grados muy altos dentro de vosotros y a vuestro alrededor, no tenéis idea lo que éstas Palabras significan, de que debéis ser a Imagen y Semejanza Mía. Por eso necesitáis de Mi ayuda y la debéis pedir de todo corazón, para que Yo pueda cambiar todo aquello que os está llevando hacia el mal, que está destruyendo vuestra misión, para que podáis volver al camino que Yo os tracé  y podáis cumplirlo como debéis hacerlo.
Mi Amor está con vosotros, Mi Gracia os cubre y así, como le dije al apóstol, “Mi Gracia te basta”, y la tenéis, Mis pequeños, pero debéis pedírMela y con eso mostraréis vuestra pequeñez que os la va a dar vuestra humildad. AprovechadMe, Mis pequeños, aprovechadMe a Mí, vuestro Dios, que os regalo tanto de lo Mío y que además, desperdiciáis y tantas oportunidades para vuestra santificación.
Mis pequeños, siendo santos, podréis halagarMe mucho a Mí y podréis ayudar muchísimo a vuestros hermanos a que lleguen a Mí, la santidad se da en un alto grado de humildad, así que pedídMela y no creáis que esto os llevará a una soberbia inmensa, al contrario, os repito, la santidad necesita un alto grado de humildad. 
Gracias, Mis pequeños.

Cuarto Misterio, Habla Nuestro Señor Jesucristo.
Sobre: El hombre de la perdición, en breve aparecerá ante el mundo entero. ¿Qué haréis, Mis pequeños? ¿Qué haréis si no estáis Conmigo?
Hijitos Míos, vuestra oración es importantísima, os la he venido pidiendo ya de tiempo acá, porque estáis en momentos críticos de la humanidad. El hombre de la perdición, en breve aparecerá ante el mundo entero. ¿Qué haréis, Mis pequeños? ¿Qué haréis si no estáis Conmigo?
Ciertamente será la presencia de satanás en pleno y ha venido preparando el terreno de mucho tiempo para acá y vosotros, en lugar de haber luchado contra todo lo malo con que os iba preparando, lo tomasteis como forma de vida y aceptasteis la maldad en vosotros, en vuestros actos y alrededor vuestro. Con esto, vosotros preparasteis su trono, ahora viene a sentarse en su trono de maldad, para que todos vosotros seáis sus súbditos. No quisisteis luchar contra su maldad y, ahora, su maldad os querrá aplastar y lo logrará con una gran cantidad de hermanos vuestros.
Mis pequeños, son tiempos críticos para vuestra salvación o perdición eternas, no es tiempo de duda, no es tiempo de juego, no es tiempo de diversión, no es tiempo el que debéis perder, lo que Yo os he dado en Enseñanzas. Yo os he ido preparando para éstos momentos, que tarde o temprano tenían que darse y una gran mayoría de vosotros no los aprovechasteis, ahora os atacará con vuestras mismas flaquezas. Os fuisteis debilitando, no os esforzasteis en hacer crecer las Virtudes y Mi Amor en vosotros mismos, con lo cual, fácilmente lo podríais vencer. Él se ríe ante Mi Presencia, al mostrarMe el Mundo caído y a sus pies. Son tan pocos los que ciertamente están Conmigo de corazón pero, ésos pocos, con Mi Gracia, le vencerán, pero ¿cuántos hermanos vuestros sufrirán eternamente por su engaño y por vuestra falta de intercesión por su salvación?
Desgraciadamente, también, muchos de los que están Conmigo, no se pueden decir verdaderos hermanos de aquellos que están viviendo en el mal, porque os falta mucha oración y donación por ellos, no les tomáis de la mano, no les ayudáis a levantarse, no les tratáis de comprender y, de ésta forma, entenderles para ayudarlos mejor.
Habéis pasado junto a ellos y los dejasteis maltrechos en el camino, no os detuvisteis ni les preguntasteis qué necesitaban. Ya no sois el buen samaritano del que os hablé en las Sagradas Escrituras, para que aprendierais a tratar a vuestro hermano caído y enfermo, enfermo de mal, enfermo de pecado, destruido por satanás.
Ciertamente sabéis que Yo no busco la salvación de vuestro cuerpo, busco la salvación eterna de vuestra alma. ¿Cuánto habéis hecho por vuestros hermanos necesitados? Escogéis con quién estar y no os dais en general por todos. Aún os falta Caridad para tratar a todos por igual.
Este tiempo que padeceréis todos vosotros, será para que entendáis Mi Ser, para que no veáis solo lo que Yo hice, sino más bien, el Amor que Yo le daba a cada uno de ellos y que, ahora, también os doy a cada uno de vosotros. En este tiempo Me conoceréis en lo profundo. Cómo oraba Yo a Mi Padre, cómo vivía para cada uno de vosotros, cómo, a pesar de vuestra necedad y del dolor que Me causabais, Yo seguía pendiente de vuestras necesidades y Me seguía dando por vosotros, para que, llegar el momento de vuestro arrepentimiento, de ése dolor interno, del saber cómo Me dañabais, al final regresarais a Mí.
Agradeced pues éste tiempo de purificación que tendréis todos vosotros, porque va a ser bueno y necesario para que alcancéis vuestra santidad de vida. En estos momentos no estáis preparados para recibirMe en Mi Segunda Venida a la Tierra. Hay demasiada maldad, error, pecado en vuestro ser y, lo más doloroso para Mí, vuestro Hermano y vuestro Dios, es que os dejé toda una escuela, una forma de vida espiritual para que, al tomarla, viniera ésa transfiguración, que eso os iba a llevar a ser perfectos para que pudierais convivir Conmigo fácilmente en Mi Segunda Venida, sin tener que padecer lo que tendréis que padecer.
La gran mayoría de vosotros escogisteis el camino errado y, ahora, vuestra enseñanza, tendrá que ir unida al dolor. Si hubierais entendido cómo os amo, y Me hubierais regresado Mi Amor como Yo os lo di, éstos momentos serían de gozo, estaríais venciendo fácilmente a satanás y estaríais esperando impacientes, con gran alegría, Mi Regreso Triunfal, pero no pensasteis en ello y ahora tendréis que sufrir, pero que éste sufrimiento también esté envuelto de gozo, sabiendo que al final de la prueba Me tendréis y gozaréis inmensamente, cosas bellísimas, salidas de Nuestra Trinidad, se os darán. Que ésta Promesa se mantenga en vuestro corazón para que vosotros podáis pasar por la prueba fácilmente, sabiendo que Me tendréis al final del camino. Que sea para vosotros una gran esperanza y que el gozo ya os invada, porque, ciertamente Me tendréis si triunfáis junto Conmigo en ésta purificación que todos deberéis padecer.
Os amo, Mis pequeños, os amo con todo Mi Corazón.
Gracias, Mis pequeños.

Quinto MisterioHabla Dios Padre.
Sobre: BuscadMe en todo momento, no Me abandonéis porque, ciertamente, es el hombre el que Me abandona, Yo, vuestro Dios, nunca os abandono.
Hijitos Míos, vosotros podéis leer en las Escrituras que, aunque una madre se olvidara de sus hijos, Yo nunca lo haría, Mis pequeños y esto os lo digo, porque en muchos de vosotros existe el temor de que Yo os vaya a abandonar en estos momentos de prueba y ya os he repetido varias veces que no os voy a abandonar. Como un Padre que Soy, Yo no puedo abandonar a Mi creatura en éstos momentos de obscuridad espiritual. Yo os creé, no os quiero destruidos y menos por Mi enemigo, satanás. Yo voy a estar junto con vosotros.
Vosotros podéis, en cualquier momento, pedir Mi ayuda, Mi Presencia, Mi Amor, Mis Dones, Mis Bendiciones, Mis Gracias, todo lo que necesitéis de Mí, Mis pequeños. Un padre, una buena madre, siempre están atentos por la salud de sus hijos, Quién mejor que Yo, que Soy vuestro Dios. Si un buen padre o una buena madre están dando buen ejemplo Yo, que Soy el Perfecto, y con mayor razón tengo que dar ése ejemplo de Amor hacia Mis hijos.
Abandonad pues ésa idea, Mis pequeños, que Yo estaré con vosotros en vuestros momentos de tribulación. No estaría cumpliendo con lo que Soy, vuestro Dios y Creador y sobre todo, el Amor, el Amor en pleno. No dudéis, Mis pequeños, en ningún momento, del que no vaya a estar Yo con vosotros. Iréis corroborando todo esto, que Yo os he dado en vuestros momentos de tribulación, tened confianza plena en Mí, confianza de niño chiquito y veréis que no os fallaré, os quiero vivos y, con esto, estoy diciéndoos que os quiero en Mí, vivos en Mi Gracia, vivos en Mis Enseñanzas, vivos para servirMe, no solamente aquí en la Tierra, sino eternamente y que Yo os pueda consentir por haber permanecido en Mí. BuscadMe en todo momento, no Me abandonéis porque, ciertamente, es el hombre el que Me abandona, Yo, vuestro Dios, nunca os abandono. Aún a pesar de que veáis que todo se os pone obscuro, que se os cierra el camino, que no veáis luz de salvación, para Mí, no hay imposibles, Mis pequeños, Yo os puedo ayudar en lo que vosotros ni siquiera os podéis imaginar, simplemente necesito vuestra confianza plena en Mí y obtendréis Mi ayuda, Mi Compañía, Mi Amor en todo momento.
Gracias, Mis pequeños.

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sábado, 21 de julio de 2012

12 Julio 2012 - Mensaje de Dios Padre, Nuestro Señor Jesucristo y la Santísima Virgen María a J.V.


Jul 12_12 Esa es la finalidad de ésta purificación, que satanás sea encadenado.
Rosario vespertino
Temas:
  • Vosotros podéis lograr grandes milagros, no desperdiciéis ésta oportunidad, porque podéis salvar a muchas almas y os aseguro que os lo premiaré eternamente.
  • En las Escrituras se os dice que aquél que Me niegue en la Tierra, también lo negaré en el Cielo y son Palabras difíciles, Mis pequeños, ciertamente son muy duras.
  • Gozaréis el haber cargado vuestra cruz, el haberla unido a la de Mi Hijo y, sobre todo gozaréis por la  salvación de muchas almas que vosotros ganasteis.
  • Conoceréis lo que es el Verdadero Amor, lo sentiréis por unos momentos, muchos de vosotros quedaréis prendados por el Amor Divino y Le seguiréis.
  • Muchos de vosotros no tenéis conciencia de esta Bendición tan grande, que es el don de la vida, que es Mi prolongación Divina en vosotros para vuestros hermanos.

Mensaje de Dios Padre, Nuestro Señor Jesucristo y la Santísima Virgen María a J. V.

Primer Misterio, Habla Dios Padre.
Sobre: Vosotros podéis lograr grandes milagros, no desperdiciéis ésta oportunidad, porque podéis salvar a muchas almas y os aseguro que os lo premiaré eternamente.
Hijitos Míos, no todo lo que vendrá en estos tiempos de purificación va a ser difícil para vosotros. Para aquellos que están Conmigo, que Me han buscado y aquellos que se arrepentirán también en ésos momentos, para todos vosotros, hay grandes Bendiciones.
Yo derramaré Mi Santo Espíritu sobre todos vosotros y vosotros comprenderéis Mi Amor y Mi Donación.
Habrá una vida especial para vosotros, una vida en la cual habrá amor, pero el Verdadero Amor, que es el Mío.
Ciertamente, el hombre ha fallado mucho, pero os sigo amando y deberéis tener ésta purificación para que comprendáis vuestros errores y no los volváis a cometer. Esta purificación os preparará para que tengáis el regalo que os tengo preparado desde antiguo, porque si no estáis preparados por Mi Santo Espíritu, no lo podréis apreciar, no lo entenderíais y no soportaríais tanta belleza, tanta Gracia, todavía, en vuestro cuerpo y vuestra alma, por estar afectados fuertemente por el Pecado Original y por vuestros pecados subsecuentes.
Mis Bendiciones serán grandes para aquellos que Me han buscado, porque Yo tengo que consentir a los Míos, Yo os lo he dicho, tengo que cuidar a los que han cuidado Mi Santo Nombre sobre la Tierra y lo han transmitido.
Si vosotros supierais, Mis pequeños, cuánto os amo, lloraríais de alegría, pero también de arrepentimiento, al saber y sentir cómo habéis pecado contra Mí, contra Mi Amor, durante vuestra vida y que, aún, a pesar de eso, os sigo Yo cuidando y amando.
Mis pequeños, estos son tiempos de oración, y debe aumentar vuestra oración, porque son tiempos difíciles, en que muchas almas podrán condenarse si no tienen vuestro apoyo. Esto es muy serio, Mis pequeños y Yo Me entristezco grandemente por cada alma que se pierde. Yo os podría salvar a todos vosotros, y os he dicho que respeto vuestro libre albedrío, pero Me ayudo con las oraciones, con la intercesión de vosotros, Mis hijos que saben amar y que se cuidan unos a otros, como verdaderos hermanos.
Tan pronto como vosotros oráis por algún hermano vuestro, Yo gozo ése momento, porque Me dais la oportunidad de salvarle eternamente, por eso insisto en vuestra intercesión amorosa hacia vuestros hermanos que necesitan Mi Perdón.
Cuando vosotros actuáis así, es cuando empieza la vida que todos debéis tener, que es vida en familia, os estáis cuidando los unos a los otros y eso Me alegra mucho. Hay tantas, tantas almas alrededor del mundo que necesitan ser salvadas y, gracias a vuestra oración, gracias a vuestra donación, en sacrificios, penitencias, ayunos, Yo puedo salvar a muchas almas de éstos hermanos vuestros. Hay corazones que se han vuelto de piedra, que ya ni siquiera ellos se aman a sí mismos, pero la oración, junto con el sacrificio tiene un poder inmenso y vosotros podéis lograr que ése corazón de piedra cambie y empiece a latir y empiece a ser un corazón que ame y que se arrepienta de sus pecados.
Vosotros podéis lograr grandes milagros, no desperdiciéis ésta oportunidad, porque podéis salvar a muchas almas y os aseguro que os lo premiaré eternamente.
Gracias, Mis pequeños.

Segundo Misterio, Habla Nuestro Señor Jesucristo.
Sobre: En las Escrituras se os dice que aquél que Me niegue en la Tierra, también lo negaré en el Cielo y son Palabras difíciles, Mis pequeños, ciertamente son muy duras.
Hijitos Míos, Soy vuestro Hermano Jesucristo. Yo vine a salvaros, a dejar la Vida que Nuestro Padre Me dio para vosotros, Mi Vida, que debe ser vuestra Vida.
Satanás, en estos momentos de la humanidad, en estos tiempos de tribulación, quiere borrar Mi Santo Nombre de todos los corazones, de todas las mentes y lo ha ido haciendo y vosotros, muchos de vosotros, os habéis percatado de ello, cómo se ha ido introduciendo en la sociedad, en las familias y aún en Mi Iglesia y cómo poco a poco ha ido destruyendo todo lo que viene de Mí y os ha dado otras opciones a seguir, quitandoMe a Mí y haciéndoMe a un lado para que no acudáis a Mí.
Vosotros, los que estáis Conmigo, si Me amáis, luchad, luchad contra todo esto que cada vez más se va volviendo como una ola inmensa y va destruyendo lo bueno que queda en los corazones.
Hay tantos hermanos vuestros que les da vergüenza hablar de Mí o nombrarMe en reuniones sociales. Os da vergüenza que sepan otros que aún asistís a la Santa Misa, que recibís los Sacramentos, que rezáis.
¡Oh!, Mis pequeños, cuánto ha trabajado satanás para sacarMe del corazón de muchos de vosotros y de vuestros hermanos y vosotros no hacéis gran cosa ni en vuestra familia ni con vuestros amigos ni en la sociedad. Vais dejando que se siga proyectando toda esta maldad y no la detenéis, cuando menos con vuestra oración, pidiendo que Mi Amor, Mi Sangre Preciosa cubra a aquellas almas que son atacadas y que no les arranque satanás todas las bellezas que traje para vosotros.
En las Escrituras se os dice que aquél que Me niegue en la Tierra, también lo negaré en el Cielo y son Palabras difíciles, Mis pequeños, ciertamente son muy duras, pero vosotros no estáis cuidando los bienes de todo un Dios que se dio por vosotros. Ahí se nota que no Me amáis como debierais amarMe, porque no Me estáis defendiendo ante los hombres y aquél que no Me defienda ante los hombres, Yo no le puedo dar cabida en el Reino de los Cielos, puesto que si no Me estáis amando, ¿para qué vais a entrar al Reino de los Cielos, donde se Me ama plenamente?
Cuidad, pues, Mi Santo Nombre en vuestro corazón y en el corazón de vuestros hermanos, para que las Puertas del Cielo estén abiertas para vosotros y para todos aquellos por los cuales vosotros oráis o convertís.
Tened cuidado, Mis pequeños, porque si no hay amor en vuestro corazón, no podréis entrar en el Reino del Amor.
Gracias, Mis pequeños.

Tercer MisterioHabla La Santísima Virgen María.
Sobre: Gozaréis el haber cargado vuestra cruz, el haberla unido a la de Mi Hijo y, sobre todo gozaréis por la  salvación de muchas almas que vosotros ganasteis.
Hijitos Míos, Yo, como Madre vuestra, vengo a acompañaros en estos momentos de la humanidad, como Yo acompañé a Mi Hijo, cuando llevaba Su Cruz y se iba a Inmolar por todos vosotros. Es tiempo también de que vosotros toméis vuestra cruz, ciertamente no tendréis los dolores que tuvo Mi Hijo, pero os podréis unir a Él, a Sus intenciones y a Su Amor.
Sí, Mis pequeños, cada uno de vosotros carga una cruz y dependiendo de cuánto amor tengáis para con vuestra cruz, también ésta será para salvación de vuestros hermanos. Cuando vosotros aceptáis vuestra cruz, aún a pesar de vuestros dolores, aún a pesar de que ya no soportéis la prueba, pero la aceptáis con amor, como Mi Hijo, estaréis haciendo un papel grandísimo en la salvación de la humanidad, porque vuestra cruz está unida a la Cruz de Mi Hijo.
Como veis, Mis pequeños, estos son tiempos en que vosotros también estaréis salvando a infinidad de almas con vuestra donación, con vuestra aceptación a la Voluntad de Nuestro Padre, con vuestra donación en el Amor.
Se os ha permitido a muchos de vosotros padecer y quizá, fuera de lo normal en estos momentos, porque hay infinidad de almas que necesitan de vuestra donación y, aunque ya Mi Hijo se donó por vosotros, vosotros Lo estáis ayudando con vuestros hermanos en una unión fraterna.
Mi Hijo, como Hermano vuestro, ciertamente se dio por todos vosotros, éstos son tiempos en que vosotros estaréis viviendo ésa fraternidad, estaréis sintiendo como os estáis dando por vuestros hermanos y esto lo ha permitido Nuestro Padre para que vosotros os unáis más a la donación de Mi Hijo, viviendo lo que Él vivió, y ha venido viviendo, con todos vosotros. De esta forma, no os apartaréis de Él, y gozaréis también los bienes que se derramarán sobre vosotros, ahora y eternamente. Gozaréis el haber cargado vuestra cruz, el haberla unido a la de Mi Hijo y, sobre todo gozaréis por la  salvación de muchas almas que vosotros ganasteis por vuestra donación sencilla, humilde, absoluta, dándoos perfectamente con amor, sin resentimientos, simplemente, como Mi Hijo.
Gracias, Mis pequeños.

Cuarto Misterio, Habla La Santísima Virgen María.
Sobre: Conoceréis lo que es el Verdadero Amor, lo sentiréis por unos momentos, muchos de vosotros quedaréis prendados por el Amor Divino y Le seguiréis.
Hijitos Míos, vengo a protegeros. Los jefes de los pueblos se han confabulado para destruiros, se han dejado convencer por satanás, han aceptado el tener poder y riquezas de la Tierra a cambio de su donación, que los llevará a su perdición eterna y, aún sabiéndolo, siguen adelante.
Yo, como Madre vuestra, os estaré protegiendo contra los ataques de satanás, Yo, como Madre vuestra, al pedirMelo, imploraré ante Nuestro Dios, en Su Santísima Trinidad, para que la Gracia de Mi Esposo, El Santo Espíritu de Amor caiga sobre vosotros, para que derrame Su Luz y tengáis entendimiento sobre la realidad que estáis viviendo en estos momentos y en la forma en que estáis destruyendo vuestra alma y todo lo que se os ha dado de bueno, para que vuestra misión en la Tierra fructificara, salvando almas y cambiando a este mundo de la maldad que satanás ha sembrado por todos lados, a hacer un mundo habitable en el Amor.
Esa es la finalidad de ésta purificación, que satanás sea encadenado y que aquellas almas que queden, aquellas almas escogidas, puedan empezar un Nuevo Mundo, en donde se alabará el Santo Nombre de Nuestro Dios, en Su Santísima Trinidad, como debe ser y como debió haber sido siempre.
Nuestro Dios, en Su Santísima Trinidad, se merece todo el honor y toda la Gloria. Los ángeles, día y noche Le cantan, Le bendicen, Le agradecen, Le adoran y vosotros debierais hacer lo mismo, pero no hay suficiente amor en vuestro corazón, no hay suficiente agradecimiento. Todavía hay mucha soberbia en vuestro corazón y mucha distracción, y vosotros, que sois más pequeños, infinitamente más pequeños que los ángeles y que debierais estar haciendo lo mismo que ellos, no lo hacéis, estáis tan metidos en lo vuestro, engañados por satanás, que no estáis llevando a cabo vuestra verdadera misión aquí en la Tierra, que es la de amar y, el amar, quiere decir, luchar contra todo aquello que os esté quitando el amor a vosotros y a vuestros hermanos, pero amar es una donación total de salvación, amor es salvación para vosotros y para vuestros hermanos, amor es unión de todos vosotros, como unión es la Santísima Trinidad. Amar es respetarse a uno mismo y respetar a vuestros hermanos, porque todos sois hijos de Dios. Amar es agradecer infinitamente tantos bienes que recibís en todo momento, porque vosotros, como no estáis consientes y no queréis adentraros en el Corazón de Nuestro Dios, no os dais cuenta de todos los bienes que recibís y por eso no agradecéis.
Insisto, Mis pequeños, estáis demasiado distraídos con los engaños de satanás y no estáis llevando a cabo vuestra misión correctamente.
Mi Esposo, El Santo Espíritu de Amor, se derramará sobre toda la humanidad y conoceréis todo esto que vosotros habéis hecho a un lado de vuestra vida. Conoceréis lo que es el Verdadero Amor, lo sentiréis por unos momentos, muchos de vosotros quedaréis prendados por el Amor Divino y Le seguiréis. Conoceréis éste Amor, que va mucho más allá de lo que vosotros imagináis.
Dejad pues que Mi Santo Espíritu se proyecte perfectamente sobre vosotros, para que seáis enamorados del Amor de la Santísima Trinidad y ya nunca más os apartéis de vuestra misión, que es la de ser amor, con el Amor de Nuestro Dios, en Su Santísima Trinidad.
Gracias, Mis pequeños.

Quinto MisterioHabla Dios Padre.
Sobre: Muchos de vosotros no tenéis conciencia de esta Bendición tan grande, que es el don de la vida, que es Mi prolongación Divina en vosotros para vuestros hermanos.
Hijitos Míos, vosotros no os dais cuenta todavía de la excelsitud que se os ha concedido a cada uno de vosotros, la Gracia que ha caído sobre vosotros al tener el don de la vida.
Vuestra alma está unida a Mí, Yo Soy vuestro Dios y vosotros estáis recibiendo de Mí, a través de vuestra alma, vida, pero es una vida espiritual inmensa, para que os alegréis y meditéis. Vosotros sois prolongación de Mi Vida, como lo fue Mi Hijo Jesucristo.
Vuestra alma, al estar unida a Mí, os debe transfigurar, debéis ser vosotros ésos Cristos que necesito seáis en estos momentos de la humanidad, y lo que quiero que meditéis es ésa grandiosidad para vuestra alma, que es la oportunidad que se os ha dado con el don de la vida.
Imaginad que vuestra alma lleva como una manguera que está unida a Mi Gracia, estáis recibiendo directamente de Mí, vuestro Dios, Vida, Gracias y Bendiciones especiales, según vuestra misión. No habéis sido apartados ninguno de vosotros de Mí, y si decís que Yo Me aparto de vosotros y que no hago caso de vuestra vida y de vuestras necesidades, estáis muy equivocados. Mi Gracia, Mi Luz Divina a todos alcanza, ciertamente, llega, pero no de todos sale, porque muchos de vosotros no dejáis que Mi Vida, que es vuestra vida, salga y os deis a vuestros hermanos, como Mi Hijo se dio por todos vosotros. Vosotros detenéis o limitáis, con vuestra actuación, con vuestro olvido, con vuestra necedad, con vuestro pecado, toda la Gracia que debiera salir a vuestros hermanos.
Ciertamente, se os ha dado el libre albedrío, pero muchos de vosotros no tenéis conciencia de esta Bendición tan grande, que es el don de la vida, que es Mi prolongación Divina en vosotros para vuestros hermanos. Tanto es así, Mis pequeños, que Mi Hijo os dijo que podríais llegar a hacer las mismas cosas que Él hizo o aún mayores, si os donabais completamente a Mi Voluntad y es que vosotros tenéis, también ésa prolongación Divina, que tiene Mi Hijo Conmigo.
Meditad, Mis pequeños, esta realidad, que quizá no habíais meditado o no sabíais, pero que es una realidad que cada uno de vosotros posee.
Vosotros, con la oración, vosotros, con vuestra vida espiritual en aumento, os vais volviendo transparentes a Mi Gracia. Cuando estáis en pecado, cuando estáis alejados de vuestras obligaciones espirituales, sois opacos, no dejáis que Mi Luz Divina pase a través de vosotros, pero cuando vosotros os empezáis a purificar, empezáis a buscar vuestra perfección, que es la que os enseñó Mi Hijo con Su Ejemplo, empezáis a volveros transparentes, limpios, os volvéis verdaderos canales de vida y, así, Mi Gracia fluye a través de vosotros hacia vuestros hermanos. Brilláis ante Mis Ojos, brilláis ante los ojos de las almas que están en el Cielo y así se conoce a cada alma que está caminando sobre la Tierra, mientras más brilláis, más dais a vuestros hermanos, más Me puedo Yo manifestar sobre la Tierra a través vuestro.
También, desde los Cielos, se pueden ver las almas obscuras. Ciertamente Mi Luz llega a ésas almas, pero no puede salir, porque sois almas obscuras, vivís en pecado, no estáis a la par con Mis necesidades de amor, estáis ocupados en otras cosas y quizá, hasta os hayáis donado a satanás y por eso se ven tantas almas obscuras, que no permiten el paso de Mi Gracia, porque así es satanás, y eso es lo que ha logrado sobre la Tierra, que haya muchas almas obscuras, para que Mi Gracia, Mis Bendiciones, Mi Amor, no fluyan hacia la Tierra.
Venid a Mí, Mis pequeños, pedidLe ayuda a Mi Santo Espíritu, para que vosotros os vayáis purificando, os vayáis haciendo transparentes, y así Me ayudaréis para que Mi Gracia, Mis Bendiciones y Mi Amor lleguen a toda la Tierra.
Gracias, Mis pequeños.



viernes, 16 de diciembre de 2011

VENDRÉ YO, VUESTRO DIOS, JESUCRISTO, COMO LADRÓN, COMO EL RAYO, COMO EL TRUENO...

Nov 23_11

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Rosario vespertino
Temas:
  • Queráis o no queráis, lo entendáis o no lo entendáis, Yo regresaré, Mis pequeños, así está profetizado y así será, pero para cuando Yo regrese, ¿cómo estaréis cada uno de vosotros en vuestra alma?
  • Vosotros, los que Me amáis y os mantenéis buscándoMe en todo momento, pedidMe lo que deseéis, porque nunca pediréis algo fuera de Mis Leyes ni de Mi Amor, y por eso os concedo todo.
  • Ya os he explicado que, especialmente en estos momentos de la humanidad, voy a estar con vosotros y que, de hecho, ya estoy entre vosotros y en vosotros.
  • Os pido que no menospreciéis a éstos hermanos vuestros, a los que llamáis discapacitados, pero discapacitados de cuerpo, cuando la gran mayoría de ellos están en un estado espiritual mucho más alto que el vuestro.
  • Sabiendo todo esto, encaminad vuestros pasos hacia vuestra perfección y pedidMe que os ayude a alcanzarla, porque no os arrepentiréis, os lo aseguro, no os arrepentiréis de buscarMe y de encontrarMe.
Mensaje de Dios Padre a J. V.
Primer Misterio, Habla Nuestro Señor Jesucristo.
Sobre: Queráis o no queráis, lo entendáis o no lo entendáis, Yo regresaré, Mis pequeños, así está profetizado y así será, pero para cuando Yo regrese, ¿cómo estaréis cada uno de vosotros en vuestra alma?
Hijitos Míos, en las Escrituras leéis que vendré Yo, vuestro Dios, Jesucristo, como el ladrón, como el rayo, como el trueno, todo será de repente y, es por eso que tanto se os ha avisado que estéis preparados, en lo espiritual, para que vosotros podáis pasar la prueba que todos los seres humanos tendrán que pasar al final de su misión.
Tantos se os ha dicho, tanto se os ha preparado para estos momentos, pero estáis como en el momento de Noé, antes del Diluvio. Avisaba y avisaba, pero se burlaban de él, ciertamente, había pasado mucho tiempo en la construcción del Arca y el pueblo en el que él vivía y aquellos que convivían con él, se burlaban, pero una cosa lo mantenía a él, y era la Fe, la Fe en lo que Yo le había profetizado y así quiero que estéis, Mis pequeños, llenos de ésa Fe, que ha pesar de que las cosas no sucedan como vosotros creéis que deben suceder, os mantengáis en Fe absoluta, esperando los acontecimientos, la purificación y Mi Venida a la Tierra, porque queráis o no queráis, lo entendáis o no lo entendáis, Yo regresaré, Mis pequeños, así está profetizado y así será, pero para cuando Yo regrese, ¿cómo estaréis cada uno de vosotros en vuestra alma? ¿Cómo os sentiríais para que en ése momento fuerais juzgados? ¿Podríais levantar vuestra cara y verMe a los ojos, porque vuestra alma estará limpia en ésos momentos, o tendréis que bajar la cabeza, para no querer verMe porque, ciertamente, Mi Juicio hacia vosotros será Justo, pero para muchos, doloroso, porque no quisisteis llevar a cabo todo lo que os pedí que cumplierais y quisisteis hacer vuestra voluntad y no la Mía, y es cuando lloraréis vuestros errores, vuestras faltas, vuestra indolencia hacia todo lo que os ordené, porque era para vuestro bien.
Si Yo os pido algo, Mis pequeños, es para que vosotros gocéis de los bienes eternos y espirituales en éste momento que estáis viviendo.
Si vosotros leéis en las Escrituras cómo fue Mi Vida sobre la Tierra, veréis que Yo no hablaba demasiado, decía lo que tenía qué decir, y así estoy ahora, Mis pequeños, digo lo que tengo qué decir para que vosotros entendáis la situación actual en el mundo y en vuestra vida, cómo está realmente el mundo y cómo está vuestro corazón.
Debéis entender, Mis pequeños, que la situación se agravará para cada alma si no está en estado de Gracia al momento en que Yo llegue. Si os he pedido que os mantengáis en estado de Gracia, primeramente, es para vuestro bien, en el momento de vuestro Juicio personal y, segundo, que al estar en estado de Gracia Yo pueda habitar tranquilamente en vosotros. No es lo mismo entrar en un cuarto perfumado, que en un cuarto con olores nauseabundos.
Yo voy a las almas en las que los aromas de su pureza, de su santidad, de su deseo de superación, son bellos y Me quedo en ésas almas, porque Me invitan, porque Me procuran, porque Me necesitan. En cambio aquellos, que su alma está sucia, nauseabunda, son las almas distraídas, muy pecadoras y, sobre todo, que no Me buscan y creen no necesitarMe. Y así, al ir perdiendo vida espiritual, se van llenando más de lo de satanás, es por eso que su alma se vuelve nauseabunda y Yo no puedo habitar en ésas almas.
Entended todo esto, Mis pequeños, para que Mi llegada no os tome de sorpresa, sino que, al contrario, que Mi llegada para vosotros sea de gran alegría y, sobre todo, de la realización a la esperanza que pusisteis en vuestra vida. Es el gozar Mi Presencia por Mis Promesas anteriores, vosotros creísteis en ésas Promesas, las mantuvisteis en vuestro corazón y veréis realizada Mi Promesa en vuestra vida y lo gozaréis, Mis pequeños, sobre todo, porque estaréis preparados, porque hicisteis caso de manteneros puros, como las vírgenes con sus lámparas.
La luz representa ésa pureza, ésa necesidad de unión de vuestra alma pequeñita, ésa luz pequeñita, que es vuestra alma, con el Sol Inmenso que Soy Yo. Quiero que os perdáis plenamente en Mí, en Mi Luz, porque así pasaréis de ésa pequeñez a Mi Omnipotencia, ya no estaréis aislados, estaréis Conmigo y todo esto, Mis pequeños, es regalo a vuestra perseverancia, a vuestra Fe, a vuestra Esperanza y a vuestro Amor.
Gracias, Mis pequeños.
Segundo Misterio, Habla Dios Padre.
Sobre: Vosotros, los que Me amáis y os mantenéis buscándoMe en todo momento, pedidMe lo que deseéis, porque nunca pediréis algo fuera de Mis Leyes ni de Mi Amor, y por eso os concedo todo.
Hijitos Míos, vuestra vida espiritual empieza desde pequeñitos, la tenéis primeramente en vuestro hogar y ahí, vuestra vida de Fe se va afianzando. Van transcurriendo los años, vais creciendo y vuestros padres deben afianzar vuestra Fe, vuestras creencias en Mí, vuestro Dios y sobre todo, vuestro amor hacia Mí.
Cuando vosotros habéis sido criados de ésta forma, y déjenMe decirlo así, una crianza espiritual, vosotros estaréis afianzados, en lo futuro, contra los embates de satanás. Ciertamente tuvisteis una guía paterna y materna dentro de vuestro hogar y al pasar de los años, vosotros debéis buscar un crecimiento espiritual que os vaya afianzando cada vez más, porque así como vayáis creciendo, las tentaciones también lo harán. Muchos hermanos vuestros van sucumbiendo en el camino, satanás Me va quitando muchas almas, porque no tuvisteis ésa fuerza espiritual en familia. Otros de vuestros hermanos, ciertamente tuvieron ésa preparación y ése apoyo de sus padres, pero no lo siguieron y también sucumben en el camino, porque al no tener fuerza espiritual, satanás os aplasta, llevándoos a las tentaciones y al pecado y pecados graves, para que os sintáis mal y creáis que no tenéis perdón de vuestros pecados, pero los que sí llevaron una vida espiritual de pequeñitos, crecen, y el amor pequeñito de vuestro corazón se une a Mi Amor, mantenéis ésa luz encendida y buscáis de alguna forma engrandecer ésa luz. Y así, vosotros mismos os vais educando para crecer espiritualmente, buscáis, ya sea, ayuda personal son algún ministro de Mi Iglesia, alguna persona que esté muy adentrada en la religión y le dé buenos consejos, en libros espirituales que os van afianzando y haciendo crecer en vuestra Fe y en vuestro Amor.
Desgraciadamente son pocas éstas almas, las que existen actualmente, que se han abocado a buscar lo que viene de Mí y a tratar de crecer espiritualmente. Estas son las almas que serán escogidas para mantenerse en los Nuevos Cielos y en las Nuevas Tierras. Todos tuvisteis la oportunidad, pero pocas fueron las almas que se mantuvieron en ése deseo de crecer en vida espiritual y en el Amor Perfecto que viene de Mí, vuestro Dios.
Aquél que Me busca, Me encuentra, aquél que quiere perfeccionarse, Yo le ayudo, aquel que quiere perfeccionarse, ahí estoy Yo, para que su camino sea más fácil, porque Yo busco almas santas, almas unidas perfectamente a Mí, vuestro Dios, cómo no voy a consentir a ésas almas, que ha pesar de los ataques de satanás a lo largo de su vida, se mantuvieron fieles que, aunque cayeron en algún momento, se levantaron, pidiendo perdón y poniendo más ahínco en su crecimiento espiritual. El ganarse el Cielo, el ganarse la estancia para los Cielos Nuevos y Tierras Nuevas, es un regalo, Mis pequeños y Yo, como Justo Juez, conozco vuestro corazón, vuestros deseos y, de ésta forma, Yo voy guiando a Mi Pueblo y voy buscando a ésas almas, a ésas ovejas que escuchan Mi Voz, Me siguen y desean vivir eternamente Conmigo.
Os amo, Mis pequeños, vosotros, los que Me amáis y os mantenéis buscándoMe en todo momento, pedidMe lo que deseéis, porque nunca pediréis algo fuera de Mis Leyes ni de Mi Amor, y por eso os concedo todo, porque os conozco y sé que lo que Me pidáis será para el bien de vuestros demás hermanos. Mi Amor queda con éstas almas, Mi Amor os santificará.
Gracias, Mis pequeños.
Tercer Misterio, Habla Dios Padre.
Sobre: Ya os he explicado que, especialmente en estos momentos de la humanidad, voy a estar con vosotros y que, de hecho, ya estoy entre vosotros y en vosotros.
Hijitos Míos, Yo no Soy ése Dios alejado que muchos creen que Soy, porque vosotros camináis sobre la Tierra y Yo estoy en el Cielo, muy lejos de vosotros, que volteo muy de vez en cuando para ver qué pasa en la Tierra y que poco os ayudo. No es cierto esto, Mis pequeños, ya os he explicado que, especialmente en estos momentos de la humanidad, voy a estar con vosotros y que, de hecho, ya estoy entre vosotros y en vosotros.
Vosotros sois muy pequeñitos, os he dicho que sois como niños de párvulos. Cuando los padres apenas llevan a sus pequeños hijitos a la escuela, van los dos y dejan encargado su casi bebé, todavía, a ésa escuelita, en cierta forma se les rompe el corazón al sentir ésa separación y lo mismo sucede con su hijito. Estos son momentos de gran cambio, en donde os daré una nueva patria Terrena. Si os he dicho que sois muy pequeñitos, quiere decir que necesitaréis de Mi Compañía para que no lloréis, para que no os sintáis desamparados al ver todo a vuestro alrededor diferente, extraño o quizá, hasta doloroso.
Yo no Me puedo apartar de vosotros y, sobre todo, por eso, porque sois muy pequeñitos. Algunos de vosotros os creéis muy sabios, muy inteligentes, muy poderosos, pero cuando Mi Santo Espíritu os dé la Luz, que os dará, es cuando vosotros mismos os mediréis con la realidad espiritual, en la que ya debierais estar, pero que no estáis por causa del pecado, y es cuando veréis que no sois nada, que aquellos que se sentían mucho, son los que menos serán, porque al sentirse mucho, se han apartado de Mí y su soberbia los hace caer en lugar de que avancen. Mucho bien se ha de derramar entre vosotros, pero esto también os causará sorpresa, porque no lo conocéis y también por eso estareMos junto a vosotros, para llevaros a entender éstos Nuevos Cielos y Tierras Nuevas, éste Cielo Terreno que tendréis que, siendo bellísimo, sí os causará gran expectación y no sabréis qué hacer y por eso estareMos junto a vosotros. Es como cuando llegáis a nuevas tierras, a países que no conocéis, se os hace más fácil tener un guía que os vaya explicando, un amigo vuestro que habite ésas regiones, vosotros le tenéis confianza, porque es vuestro amigo y sabéis que ése amigo vuestro os llevará por caminos seguros y os enseñará lo más bello que tiene en su país y en la región en la que vive.
¿Qué más que Yo, que Soy vuestro Padre y vuestro Dios, que os voy a enseñar vuestro nuevo hogar? Confiados debéis estar pues, Mis pequeños, en esperar con gusto éste cambio que se vendrá y Yo seré vuestro Guía y os enseñaré las bellezas que he preparado para las almas, que realmente se han de ganar ésta posición futura. ¡Cómo quisiera que estuvierais todos, todos vosotros, todas las almas creadas!, pero todos tuvisteis la oportunidad, pero pocos, realmente pocos, aprovecharon ésa oportunidad como debían.
Os amo, Mis pequeños y Yo también espero ya ése momento, porque veré en vuestros ojos, en vuestra sonrisa, en vuestro corazón, ése gozo grande de recibir vuestro regalo por haberos mantenido Conmigo y por haber buscado, para vuestro bien y el de vuestros hermanos Mi Bien, que os guía, os precede, os alimenta, os da vida.
Gracias, Mis pequeños.
Cuarto Misterio, Habla Dios Padre.
Sobre: Os pido que no menospreciéis a éstos hermanos vuestros, a los que llamáis discapacitados, pero discapacitados de cuerpo, cuando la gran mayoría de ellos están en un estado espiritual mucho más alto que el vuestro.
Hijitos Míos, la gran mayoría de vosotros tendéis a minimizar a hermanos vuestros que los veis con algún problema físico o psicológico, los veis menos y también los tratáis mal muchas veces. No os imagináis, Mis pequeños, lo que hay en el alma de estos hermanos vuestros.
Ya os he dicho que cada uno de vosotros bajáis con una misión determinada y que, además, vosotros, en vuestro libre albedrío y en total libertad, Me pedisteis bajar a servirMe. Estas almitas con alguna discapacidad o con dolores muy fuertes desde pequeños o con algún problema que vosotros veis en ellos y que los hacéis a un lado, porque sentís que no son como vosotros y no merecen estar en donde vosotros estáis, éstas almitas sabían que iban a estar en ésta situación y se ofrecieron así, para unir sus dolores, su vida, su misión, a la de Mi Hijo, Jesucristo.
Ciertamente, mientras están sobre la Tierra, no se dan cuenta del propósito que hicieron antes de bajar, ése ofrecimiento del alma hacia su Dios. Estas almas, que vosotros catalogáis, quizá hasta como inservibles, porque no son como vosotros, porque no tienen las capacidades como vosotros, o porque parte de su cuerpo les falte, piernas, brazos, todos estos hermanos vuestros están cumpliendo también una misión y se están uniendo, y os puedo decir, que hasta con mayor facilidad, a Mí, vuestro Dios, en Mi Hijo Jesucristo. En cambio, vosotros, los que os creéis muy sabios e inteligentes, que os sentís “completos”, empezáis a buscar más cosas del mundo y os desviáis y podéis caer en faltas graves, que os evitarán el regreso al Reino de los Cielos.
En cambio, a éstas almas, a las que vosotros catalogáis como inservibles, éstas almitas son las que más gozo Me dan, por su inocencia, por su sencillez, por su alegría, por un amor íntimo Conmigo, inmenso. Hasta debierais vosotros mismos envidiarlas, en cierta forma, por esto, porque están más cerca de Mí y porque Yo también estoy más cerca de ellas, porque están ofreciendo un sacrificio y su unión total con Mi Hijo, desde su nacimiento hasta su muerte. Son almas que aceptan su situación y le sacan provecho. Por eso os pido que no menospreciéis a éstos hermanos vuestros a los que llamáis discapacitados, pero discapacitados de cuerpo, cuando la gran mayoría de ellos están en un estado espiritual mucho más alto que el vuestro.
Tened cuidado, pues, con vuestra manera de actuar y de catalogar a éstos hermanos vuestros porque, quizá, en el Reino delos Cielos, estarán en posición más alta que vosotros que os creíais completos, sabios e inteligentes.
Gracias, Mis pequeños.
Quinto Misterio, Habla Dios Padre.
Sobre: Sabiendo todo esto, encaminad vuestros pasos hacia vuestra perfección y pedidMe que os ayude a alcanzarla, porque no os arrepentiréis, os lo aseguro, no os arrepentiréis de buscarMe y de encntrarMe.
Hijitos Míos, así como os he anunciado los cambios que tendréis en vuestro mundo y en el Universo entero y eso os lleva a la preocupación, y ojalá ésa preocupación os lleve a que cuidéis más el estado de vuestra alma, así también, por otro lado, os llevo a la alegría, ésa alegría santa del esperar Mis Promesas que tanto os he anunciado a lo largo del tiempo.
Quiero que entendáis que Yo no Soy un Dios castigador, un Dios cruel que gozo con el sufrimiento, no, Mis pequeños, si os aviso que sucederán éstas cosas, son para que vosotros os preparéis a recibirlas. Las mismas Escrituras os lo dicen, que si el padre de familia, el dueño de la casa, supiera a qué hora va a entrar el ladrón, no lo permitiría, porque estaría cuidando su hogar.
Y así como os aviso que también llegará de repente el cambio a vuestro mundo, los que estén preparados para salir airosos de éste cambio, son los que tendrán Mi Gracia, los que tienen Mi Amor porque Yo se los he concedido, porque Me han buscado y han querido crecer en el Amor y en las Enseñanzas que se os han dado.
No cabrá la posibilidad de que algunos puedan decir “envidio lo que tú, hermano mío tienes”. No, Mis pequeños, ya no existirán ésas situaciones que antes vivíais, de querer tener lo que tiene el hermano o que tendrá el hermano en ésos momentos, todos os alegraréis de Mi Presencia ante vosotros en la Divinidad de la Santísima Trinidad, al ver patentes todas las Promesas dadas desde antiguo y que os ha tocado a vosotros recibir en vuestra vida, estas promesas realizadas para consentiros.
Vosotros gozaréis inmensamente así como os he anunciado un cambio con desastres físicos, también os anuncio un cambio con bellezas inigualables, tanto a vuestro alrededor como dentro de vosotros. No habéis sentido, Mis pequeños, dentro de vuestro ser los goces espirituales que se os darán en ésos momentos, y eso solamente será el principio.
Así como se les quitaron, a vuestros Primeros Padres, grandes dones, grandes Bendiciones por su mal comportamiento, ahora, por vuestro buen comportamiento, como de descendientes de ellos, recuperaréis de lo que ellos tenían y una gran alegría tendréis, con un gran agradecimiento hacia Mí, vuestro Dios.
¡Cómo espero, Mis pequeños, éstos momentos!, solamente para ver vuestras sonrisas, vuestra alegría, escuchar vuestros agradecimientos y, sobre todo, vuestra donación y consagración eterna a Mí, vuestro Dios. Os prometo que serán momentos bellísimos, que ni siquiera os imagináis. Yo Soy un Dios de sorpresas, sí, Mis pequeños, porque voy asombrando a los hombres con Mis bellezas y así será toda una eternidad, porque Yo Soy el Eterno, Soy el Omnipotente y siempre habrá algo nuevo con qué consentiros, porque Mi Amor es así.
Ahora, Mis pequeños, sabiendo todo esto, encaminad vuestros pasos hacia vuestra perfección y pedidMe que os ayude a alcanzarla, porque no os arrepentiréis, os lo aseguro, no os arrepentiréis de buscarMe y de encontrarMe.
Gracias, Mis pequeños.