| Ene 17_13 Estos son tiempos, Mis pequeños, de unir nuevamente al género humano. |
Rosario vespertino
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Mensaje de Dios Padre y Nuestro Señor Jesucristo a J. V.
Primer Misterio, Habla Dios Padre.
Sobre: Ser sinceros es ser verdaderos y especialmente en estos tiempos, en donde la mentira es de lo más común entre vuestros hermanos. Hijitos Míos, la sinceridad en vuestros corazones es una Virtud muy grande, Mis pequeños. Ser sinceros es ser verdaderos y especialmente en estos tiempos, en donde la mentira es de lo más común entre vuestros hermanos. Satanás se ha introducido a todos niveles y la mentira pasa de un lado a otros y vosotros lo podéis constatar continuamente.
Ya no hay sinceridad, ya no hay verdad en los corazones, ya no se vive para el Cielo, ya no se vive para agradarMe a Mí, vuestro Dios. La mentira no puede estar ante Mí y ahora veo, sobre la Tierra, mucha de ella.
Los que estáis Conmigo, ciertamente, os dais cuenta de ello, porque la Virtud está con vosotros y sufrís por ello porque, al estar Yo con vosotros, también vosotros estáis buscando la Verdad, estáis buscando el Bien de vuestros hermanos y ya no lo estáis viendo entre vosotros.
¡Cuánto sufrís!, tratáis de mejorar vuestro entorno, tratáis de mejorar vuestra persona, pero es tan fuerte ya la mentira a vuestro alrededor, que a ratos hasta os involucráis en ella. Estáis viviendo algo que no quisierais vivir, pero la maldad ha cubierto ya toda la Tierra y esto es lo que quería satanás, su reinado entre todos vosotros, su reinado de maldad, de mentira, de vicios, de muerte, de horror por todos lados. Estéis en donde estéis, escucháis continuamente de cómo la maldad se está dando por todos lados y va creciendo, pero recordad que está profetizado de que en el momento en que satanás se sienta seguro de que su reino ya es más poderoso que Mis Verdades, ése será el tiempo de su destrucción y de su caída.
Así que lejos de que estéis tristes por toda la maldad que estáis viendo a vuestro alrededor, de tanta mentira, de tanto ataque, de tanta muerte, alegraos, Mis pequeños, los que estáis Conmigo, porque el tiempo de vuestra liberación se acerca.
Confiad, Mis pequeños, en todo lo que Yo os he estado diciendo por años, porque os voy guiando. Vosotros mismos podéis constatar cómo habéis crecido espiritualmente. No os decepcionaré, Mis pequeños, porque Soy vuestro Padre, vuestro Dios y Salvador.
Que vuestra boca ya no diga palabras de mentira y de maldad, que vuestra mente se purifique, para que aún vuestros pensamientos no estén afectados por la mentira y la maldad y que todo vuestro ser quede iluminado por la Luz de Mi Santo Espíritu, para que empecéis a ayudarMe a renovar éste mundo que tanto lo necesita. Estáis Conmigo y permaneceréis Conmigo, os lo prometo, Mis pequeños.
Gracias, Mis pequeños.
Segundo Misterio, Habla Dios Padre.
Sobre: Los que estáis Conmigo, os pido oréis de todo corazón por vuestros hermanos que están en el error y que van a sufrir eternamente. (Lenguas…) Hijitos Míos, todos vosotros tenéis necesidades de diferente índole y estáis perfectamente conscientes de ello. Necesitáis de lo material, necesitáis de lo espiritual, necesitáis de vuestra salud, necesitáis de vuestro vestido, necesitáis de la amistad de los que os rodean, necesitáis de tantas y tantas cosas, Mis pequeños, que sería una lista inmensa la que Yo os tendría que decir para que la meditarais, Mis pequeños, y ni aún así volteáis a verMe. Todo lo queréis obtener con vuestras propias fuerzas y ¿dónde dejáis a Mi Providencia Divina?
Debéis entender perfectamente que vosotros dependéis de Mí, vuestro Dios, todo viene de Mí y Yo os lo doy con mucho gusto, porque sois Mis hijos y el hijo pequeño se acerca al padre y a la madre para pedirles por ésas necesidades que en su pequeñez saben que solamente sus padres se las pueden dar. ¿Por qué no conserváis vosotros ésa sencillez de niños?, os falta tanta humildad, Mis pequeños, os falta reconocerMe a Mí, vuestro Dios, como lo primero y único en vuestra vida.
Ciertamente, Soy un Padre que os provee de todo aquello de lo que necesitáis, pero no quiero que Me veáis solamente así, pidiéndoMe lo que necesitáis, pero con un corazón de roca, frío, duro, que ni siquiera sabe agradecer. Pedís con exigencia y aún así, Yo os doy lo que necesitáis.
Os he mandado a Mi Hijo, para que pudierais entender lo que significa Amor, Amor Celestial. Tarde o temprano dejaréis ésta Tierra, dejaréis vuestro mundo y regresaréis a Mí. Mi Mundo, el Cielo, es un Reino de Amor y muchos de vosotros no estáis preparados para entrar a vivir Mi Amor, porque no habéis hecho caso de todo lo que Mi Hijo os enseñó. Estáis demasiado alejados de lo que es vuestro Hogar, al que tarde o temprano regresaréis y ciertamente que quisiera que todos vosotros regresarais, pero hay tantos que se han involucrado con la maldad de satanás y los ha engañado a tal grado, que no quieren saber en lo absoluto de Mí, vuestro Dios, vuestro Dios Amor.
Han preferido, estos hermanos vuestros, el vivir en la maldad, en la destrucción, en el dolor, porque a ellos satanás los ha engañado y dentro de la maldad no les ha dejado ver lo que sufrirán eternamente por haberle seguido. Os ha pintado vuestro futuro espiritual eterno de una forma muy diferente de la que tendréis. Pero Yo os puedo decir, Mis pequeños, que satanás, por vengarse de Mí, por haberle quitado el Amor, porque se opuso a Mi Amor, os engaña para destruiros espiritualmente, para que sufráis eternamente y Me blasfeméis a Mí, haciéndoos creer que Yo fui el Autor de vuestra desgracia eterna cuando, realmente, él os ha engañado a tal grado, que ni siquiera os dais cuenta que, dónde os está llevando, sufriréis tremendamente por toda la eternidad.
Vosotros, los que estáis engañados, los que vivís en la maldad, los que estáis preparados ya por satanás para sufrir eternamente, sin que vosotros mismos lo sepáis, acudid a Mí, para que Yo os deje ver la realidad de vuestro futuro. Os quiero para el Bien, Mis pequeños y vosotros estáis engañados para vivir el mal y ése mal se os va a revertir hacia vosotros fuerte y eternamente.
Mis pequeños, los que estáis Conmigo, os pido oréis de todo corazón por vuestros hermanos que están en el error y que van a sufrir eternamente. Esta palabra, Mis pequeños, se dice fácil, pero el significado es horrible, vosotros mismos no podéis entender lo que significa eternamente, nunca más podrán vivir el Amor. Entended esto, y ayudadles, Mis pequeños, ayudadles a que regresen a Mí.
Gracias, Mis pequeños.
Tercer Misterio, Habla Nuestro Señor Jesucristo.
Sobre: El rebaño ahora está dispuesto ya, espera Mi Llamado, espera Mis deseos, os llevaré a pastizales exquisitos, gozaréis aires nuevos, tierra nueva, agua limpísima y clarísima. Hijitos Míos, Yo Soy el Buen Pastor y llamo a Mis ovejas. Las conozco perfectamente a cada una de ellas, las conozco por su nombre, las conozco desde lo más íntimo. Estoy llamando ya a Mis ovejas, vendrán de todos los pueblos de la Tierra, vendrán desde rincones de la Tierra que ni siquiera os imagináis muchos de vosotros, que ésas almas pudieran venir a Mí. Sois Mis ovejas, Soy el Pastor que os ha ido guiando y que vosotros, aceptasteis Mi Guía Sabia y Santa.
Ciertamente, la gran mayoría de vosotros, en varios momentos de vuestra vida, fuisteis por otros caminos, os quisisteis apartar del rebaño, pero Yo, conociendo vuestras intenciones, pero sobre todo, vuestro corazón, nuevamente salía a buscaros y vosotros respondíais, respondíais a Mi Llamado y os arrepentíais de haberos salido del rebaño.
El rebaño ahora está dispuesto ya, espera Mi Llamado, espera Mis deseos, os llevaré a pastizales exquisitos, gozaréis aires nuevos, tierra nueva, agua limpísima y clarísima. Gozaréis Mi Presencia de Pastor que os enseñará multitud de cosas más, para que crezcáis y os mantengáis siempre unidos a Mí, de tal forma, que ya nunca querréis apartaros del buen camino, de Mis Enseñanzas, y sobre todo de Mi Amor.
Os cuido del lobo feroz, malvado, que quiere destruir todas Mis Enseñanzas, que ya lleváis en vuestra mente y en vuestro corazón.
El ataque seguirá, pero Mi Presencia os ayudará a confiar en que no debéis temer al autor del mal, aunque se os presente de la peor forma que podáis imaginar.
Yo os protegeré, el Buen Pastor, lucha contra los animales salvajes que le quieran arrebatar las ovejas de Su rebaño. Vosotros sois Míos, Yo ya he Sufrido, he Muerto y Resucitado por vosotros, el lobo, satanás, sabe que no puede nada contra Mí ni contra aquellos que están Conmigo. Manteneos firmes en el camino, bien unidos en el rebaño y así satanás no podrá nada contra vosotros.
Gracias, Mis pequeños.
Cuarto Misterio, Habla Dios Padre.
Sobre: Os pido que siempre seáis sencillos, humildes, pequeños, hijos Míos, porque de esta forma, siempre gozaréis inmensamente de todo lo que Yo os dé. Hijitos Míos, os pido que siempre seáis sencillos, humildes, pequeños, hijos Míos, porque de esta forma, siempre gozaréis inmensamente de todo lo que Yo os dé. Si vosotros veis a los niños con lo que se divierten, vosotros, los que os decís adultos, pero que os falta ésa sencillez de niño, pensáis que están desperdiciando juguetes buenos, bellos, porque el niño se está entreteniendo, quizá con la tapa de una botella o con una cajita, porque es sencillo y su imaginación lo lleva a creer en cosas que vosotros, como adultos, ni siquiera imagináis, pero que a ellos les divierten.
Para el niño, todo es grande e inmenso, pero vais creciendo y os llenáis de soberbia y, es cuando desperdiciáis realmente más y de lo mejor que Yo os puedo dar. Porque cuando entráis en soberbia, todo se os hace pequeño, aún Mis grandiosidades. Aún para lo más bello que creo para vuestra vida y para vuestro entorno, os creéis grandes y creéis que os merecéis mucho más de lo que estáis teniendo y viviendo a vuestro alrededor y, ¡qué equivocados estáis!, Mis pequeños, ¡qué equivocados realmente estáis!
Os doy tantas cosas todos los días, vivís cosas tan bellas, estáis rodeados de Mis inmensidades y no las tomáis ni siquiera en cuenta.
El niño se puede divertir tanto como ver una hormiguita caminar, seguirla con su vista, empujarla con su dedito y así, tantas y tantas cosas pequeñitas les hacen gozar de lo que es Mi Creación.
Ciertamente que os voy a dar grandes cosas y estáis viviendo ya grandes cosas, estáis viviendo un cambio paulatino, apenas imperceptible, pero lo estáis viviendo ya, pero no os dais cuenta vosotros, los que os sentís adultos, porque estáis llenos de soberbia. Queréis ver un cambio tajante y muy bueno a vuestros ojos, pero no lo apreciáis, no apreciáis lo que ya estáis teniendo, porque no sois como niños.
Gracias, Mis pequeños.
Quinto Misterio, Habla Dios Padre.
Sobre: AgradecedMe pues, Mis pequeños, vosotros, el resto fiel que quedará después de la tribulación y que empezará el Mundo del Amor, agradecedMe todo lo que Yo os he consentido. Hijitos Míos, el hombre, dividió la Tierra, pusisteis fronteras por vuestro error y negligencia, vosotros mismos os dividisteis, por vuestro pecado contra Mí, al desconfiar en Mi Amor y en Mi Providencia. Construisteis la Torre de Babel, con la cual os estabais tratando de proteger de Mí, vuestro Dios, estabais viendo solamente Mi Ira, pero no estabais confiando en Mi Amor.
Estos son tiempos, Mis pequeños, de unir nuevamente al género humano, en un solo pensamiento, en una sola palabra, en un solo ser.
Se acabarán las fronteras, os uniréis todos como una verdadera familia, os dejareis mover por Mi Voluntad. Aprenderéis de vuestros errores del pasado y por un tiempo, os mantendréis en el Bien, respetando Mis Leyes, Mis Decretos, pero sobre todo Mi Voluntad.
Larga ha sido la travesía, vuestro destierro, pero por vuestro error, que en lugar de haber luchado contra él, lo manteníais y no os soltabais de él.
Sois un pueblo de cerviz dura, que no quiere entender que de Mí, vuestro Dios, solamente podéis obtener el Bien. Sois un pueblo de cerviz dura que desconfía de Mi Bondad, porque no entendéis que sois Mi Creación y que sois Mis hijos.
Soy el Mejor Padre que vosotros os podáis imaginar, Padre Amorosísimo, Padre Respetuoso, pero sobre todo, un Padre que os enseña a solamente hacer el Bien y que espera de vosotros que respondáis en ése Bien.
AgradecedMe pues, Mis pequeños, vosotros, el resto fiel que quedará después de la tribulación y que empezará el Mundo del Amor, agradecedMe todo lo que Yo os he consentido. Os he levantado cuando caísteis, pero que después de haber vivido en vuestro mundo y digo “vuestro mundo” porque hicisteis vuestras propias leyes, quisisteis hacer vuestra propia vida, sin hacer caso de lo que Yo os pedía, reconocisteis vuestro error y regresasteis a Mí.
Ciertamente, el aprender para muchos de vosotros, duele, por vuestra necedad, porque no actuasteis con Sabiduría, si hubierais tomado Mis Palabras y Mis Enseñanzas desde siempre, os hubierais ahorrado mucho dolor en vuestra vida y en la de los vuestros, pero ahora, que ya entraréis a ése cambio, gozaréis de lo que Yo os daré. Aprended pues, de vuestros errores pasados, para que os mantengáis Conmigo, bien unidos por muchos años por venir y, así os seguiré consintiendo, como el resto fiel, que se mantuvo Conmigo, aún a pesar de las pruebas fuertes que pasó.
Gracias, Mis pequeños.  |
