3,297-Mensaje de nuestra Señora reina de la paz,
Mensaje que se transmitió el 23/03/2010
Queridos niños, todo lo que hacen en esta vida por amor de Dios y el prójimo no quedará sin recompensa. Abran sus corazones a obras de caridad en este tiempo de Cuaresma. Rezo y penitencia. Dedicad parte de su tiempo a la oración silenciosa y escucha la voz del Señor que les llama a la santidad. Dad todo buen ejemplo. Con su actos y palabras mostrad a todo el mundo que son exclusivamente de Cristo. Pase lo que pase, confiad en mi hijo Jesús. Sólo él es su todo y nada se puede hacer sin él. Buscad las fuerzas en la Eucaristía y en las palabras de mi hijo Jesús. La humanidad está condenada a un futuro doloroso. La tierra si agitará y abismos surgirán. Os aliento mis niños a cargar su pesada Cruz. La tierra perderá su equilibrio y emergerán de fenómenos espantosos. Sufro por lo que a ustedes espera. Sean firmes en la oración. Sólo a través de la oración tendrán fuerzas para soportar el peso de las provocaciones. Coraje. Yo soy tu madre y me encanta. Este es el mensaje que hoy que deseo expresar en nombre de la Santísima Trinidad. Gracias por haberme permitido reunirme con ustedes una vez más. Les bendigo, en nombre del padre, el hijo y el Espíritu Santo. Ahombres. Quedad en paz.
Mensaje que se transmitió el 23/03/2010
Queridos niños, todo lo que hacen en esta vida por amor de Dios y el prójimo no quedará sin recompensa. Abran sus corazones a obras de caridad en este tiempo de Cuaresma. Rezo y penitencia. Dedicad parte de su tiempo a la oración silenciosa y escucha la voz del Señor que les llama a la santidad. Dad todo buen ejemplo. Con su actos y palabras mostrad a todo el mundo que son exclusivamente de Cristo. Pase lo que pase, confiad en mi hijo Jesús. Sólo él es su todo y nada se puede hacer sin él. Buscad las fuerzas en la Eucaristía y en las palabras de mi hijo Jesús. La humanidad está condenada a un futuro doloroso. La tierra si agitará y abismos surgirán. Os aliento mis niños a cargar su pesada Cruz. La tierra perderá su equilibrio y emergerán de fenómenos espantosos. Sufro por lo que a ustedes espera. Sean firmes en la oración. Sólo a través de la oración tendrán fuerzas para soportar el peso de las provocaciones. Coraje. Yo soy tu madre y me encanta. Este es el mensaje que hoy que deseo expresar en nombre de la Santísima Trinidad. Gracias por haberme permitido reunirme con ustedes una vez más. Les bendigo, en nombre del padre, el hijo y el Espíritu Santo. Ahombres. Quedad en paz.