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lunes, 23 de mayo de 2016

Mayo 03_16 PedidMe que venga Mi Santo Espíritu, que os haga ver vuestro interior.


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Rosario vespertino


Temas:

  • Mi Santo Espíritu os irá transformando y empezaréis a tener experiencias bellísimas en el Amor y es cuando os daréis cuenta de lo que os estoy hablando.
  • AgradecedMe, Mis pequeños, el don de la vida, agradecedMe, Mis cuidados, todos los regalos, materiales y espirituales, con que os he consentido a lo largo de vuestra vida, pero, sobre todo, agradecedMe el que estéis Conmigo y os esté preparando para estos tiempos bellísimos que se acercan.
  • La transformación que quiero que tengáis, será una transformación profunda, pero lo lograrán aquellas almas que se dejen purificar y santificar, que se olviden de sí mismas, para que Yo las pueda cambiar en almas puras, en almas buenas, en almas santas, y ésas son las que Me van a dar reposo.
  • La rivalidad, siempre os va a llevar a la separación y a la destrucción como hermanos y además, en la rivalidad no buscáis el bien del hermano, buscáis su destrucción u opacarlo.
  • Lo que quiero hacer con vosotros, Mis pequeños, es haceros palpable la existencia real del Cielo, del Purgatorio, del Infierno; son una realidad y estaréis eternamente o en el Cielo o en el Infierno.


Mensaje de Dios Padre y Nuestro Señor Jesucristo a J. V.


Primer Misterio. Habla Nuestro Señor Jesucristo.
Sobre: Mi Santo Espíritu os irá transformando y empezaréis a tener experiencias bellísimas en el Amor y es cuando os daréis cuenta de lo que os estoy hablando.

Cuando sois pequeños y os empiezas a relacionar con otros niños, en la escuela o en el área en la que vivís, os vais acomodando con el carácter de algunos de ellos o de alguno de ellos y así vais haciendo vuestro grupo, para jugar, para estudiar. Vais creciendo y ésa amistad, también, va creciendo. Muchas veces os apoyáis en su opinión para llevar a cabo algo, en lo que dudáis, su opinión la consideráis valedera, porque os conocéis desde pequeños.

Ellos os van conociendo, ciertamente, pero conserváis algunas cosas, muy en lo particular y, ahí, es en donde entro Yo, Mis pequeños. Si vosotros tenéis amigos, que podríamos decir, íntimos, porque os conocéis desde pequeños, qué mejor Amigo, Yo, vuestro Dios, que os creé y vivo en vuestro interior.

Si vosotros los tenéis como amigos y les escondéis, todavía, alguna cosa de vuestra vida, a Mí, no Me podéis esconder nada, os conozco perfectamente y de una cosa deberéis estar ciertos, nunca os voy a traicionar, nunca voy a contarle a alguien sobre ésas cositas íntimas, que solamente Yo y vosotros, conoceMos, porque, llega a suceder que, aunque tengáis amigos de mucho tiempo o aún desde pequeños, en un enojo, en un pleito, que suelen suceder, os traicionan y hasta le cuentan a otras personas de ciertas intimidades que no debían conocer.

Soy vuestro Dios, Yo os creé y os amo así como sois, pero no os quedéis nada más con esa frase, porque, muchos de vosotros, de ahí os tomáis, para nunca querer cambiar; la soberbia os ciega y, así les decís a los que os quieren ayudar, “soy así y no voy a cambiar”. ¡No!, Mis pequeños, Yo, en las Escrituras, os dejé plasmada la frase: “Sed perfectos, como Mi Padre es Perfecto” y, aunque, ciertamente, os amo como sois, pero no en el pecado, siempre estoy buscando que vosotros mejoréis.

Habéis crecido en un cierto ambiente, que ha formado vuestro carácter y vuestra personalidad, pero, eso no quiere decir que, por ello seáis perfectos, la Perfección Soy Yo, y os dejé, en Mi Persona, en Mi forma de Ser, en Mi Vida sobre la Tierra, cómo os debéis comportar para ser perfectos, y eso es lo que quiero de cada uno de vosotros, que seáis como Yo, vuestro Dios, Jesucristo y no como vosotros queréis ser y que, además, les advertís, que no cambiaréis, porque así sois y los demás, tienen que padecer vuestra soberbia o vuestros gustos raros o vuestra problemática interna y, esto no debe de ser, Mis pequeños, porque, entonces, ya no es amistad, es una imposición, en la que vosotros estáis dañando a los demás, con vuestra mala forma de ser.

La perfección la debéis buscar todos, porque, en el Reino de los Cielos, solamente entran las almas perfectas y no estoy hablando de una perfección externa, en donde podéis ver claramente vuestros defectos, estoy hablando de una perfección espiritual, en donde todos debéis estar crecidos fuertemente en el Amor, porque, el Amor lo es todo.

Yo Soy el Amor, en Mi Santísima Trinidad, Somos el Amor Perfecto, Nos une el Amor, y vosotros debéis estar unidos también al Amor. Eso es lo que debéis vosotros buscar en todo momento, que esa sea vuestra meta, que os améis los unos a los otros, como Yo os he amado y, si sois los apóstoles de éstos tiempos, seréis llamados los apóstoles del Amor, porque, todo esto que se está dando, os va a llevar a una unión en el Amor, para que Yo pueda regresar en Mi Segunda Venida entre vosotros. Creceréis en el Amor y cuando Me veáis entre vosotros, con Mi Ejemplo, iréis creciendo más.

Sabéis que no Me gusta la mediocridad, sabéis que a los mediocres, los vomito, quiero que si vais a estar Conmigo y Me vais a dar vuestro “fiat”, debéis abandonaros a Mí, para que Yo os vaya transformando, os vaya enseñando, os vaya guiando, hasta que lleguéis a la perfección que necesito de vosotros.

Aquellos que no buscan la perfección, son almas difíciles, son almas conflictivas, son almas que no se dejan mover y llevar hacia donde Yo quiero y que ponen muchos pretextos. Cuando se vive en el Amor, no hay pretextos y, especialmente, porque saben que Yo, vuestro Dios, vuestro Maestro del Amor, os va a llevar hacia la perfección en el Amor.

Mi Santo Espíritu os irá transformando y empezaréis a tener experiencias bellísimas en el Amor y es cuando os daréis cuenta de lo que os estoy hablando. Las experiencias místicas, son regalos grandes, inmensos, que Yo les doy a las almas que Me buscan, que quieren estar Conmigo, que Me quieren alcanzar. Estos regalos de Amor, os los quiero dar a todos vosotros, poned de vuestra parte, Mis pequeños, luchad contra vosotros mismos,erradicad las dudas de vuestro ser, para que Yo os pueda enseñar a cómo vivir estas experiencias de Mi Amor, no os arrepentiréis, Mis pequeños, y, cuando las tengáis, os daréis cuenta de lo que Yo os hablaba y ya no os querréis apartar de Mi Presencia.

La experiencia mística, es un momento de Cielo, que os va enamorando, que os va ayudando a confiar más en Mí, vuestro Dios.

Venid, venid a Mí, con confianza de niño y tomad de Mi Amor, dejad que Mi Amor os invada y Me conoceréis, conoceréis lo que os está esperando, con todas las bellezas, que Nuestra Santísima Trinidad, os puede dar.
Gracias, Mis pequeños.

Segundo Misterio. Habla Dios Padre.
Sobre: AgradecedMe, Mis pequeños, el don de la vida, agradecedMe, Mis cuidados, todos los regalos, materiales y espirituales, con que os he consentido a lo largo de vuestra vida, pero, sobre todo, agradecedMe el que estéis Conmigo y os esté preparando para estos tiempos bellísimos que se acercan.

Hijitos Míos, aquilatad todo lo que os he dado, empezando con el don de la vida. Millones y millones de almas, están en el Reino de los Cielos y vosotros, los que estáis en la Tierra, fuisteis escogidos para servirMe en la Tierra y en otros planetas.

Os di el don de la vida para servirMe y, principalmente, para producir amor, el cual, satanás despreció. Vosotros fuisteis creados y se os dio la vida para contrarrestar la maldad de satanás, con el Amor que Yo os doy y que es Mi Esencia, Mis pequeños.

Si empezáis a aquilatar vuestra vida, desde ése momento, vosotros, postrados, debierais estar ya. El don de la vida es una Gracia muy grande, que concedo a almas a las que voy escogiendo, en las cuales, puedo confiar, pero, ciertamente, hay muchas almas que se dejan tentar por satanás y no dan el fruto que deben dar.

De las almas obedientes, de las almas que quieren mantenerse Conmigo, también voy escogiendo a aquellas que pueden dar más, para servirMe en misiones especiales, como os he escogido a vosotros, los que estáis formando grupos de oración, los que estáis siendo preparados para la Gran lucha, los que vais a hacer triunfar Mi Nombre y el Amor, por sobre todas las cosas.

Venceréis a satanás, junto con Mi Hija, la Siempre Virgen María, los Santos Ángeles y Arcángeles y todos los Coros Angelicales. Ciertamente, sois los más pequeños en ése escalafón, pero Yo voy a estar con vosotros, os he dicho, para que Yo pueda vencer, a satanás a través de vosotros y os pueda regalar infinidad de Bendiciones que gozaréis eternamente.

Yo Soy un Dios muy dadivoso, Soy vuestro Creador y Me gusta consentir a las almas, especialmente, si ellas están haciendo Mi Voluntad. La docilidad, Mis pequeños, es esencial para que Yo pueda trabajar en vosotros y esta docilidad, a donde os está llevando la humildad, Yo la premio grandemente.

Satanás está acostumbrado a ordenar, a estar por sobre las almas, no les da oportunidad de dar su opinión, él ordena, es todo soberbia y encadena a las almas.

Vosotros, los que estáis Conmigo, Me conocéis, conocéis Mi Amor, conocéis la libertad en la que os dejo actuar y, a pesar de que una o varias veces Me falláis, acepto vuestro arrepentimiento y os regreso al camino del Bien.

Vosotros, los que habéis sido escogidos para ayudar a vuestros hermanos y librarles de la opresión de satanás, os voy cuidando, os voy guiando, os voy alimentando con un Alimento especial y Divino, pero, sobre todo, os voy llevando a la pequeñez. Yo no quiero que seáis grandes ante los hombres, Yo quiero que hagáis Mi Voluntad y eso debe ser suficiente para vosotros, servir a vuestro Dios, servir a vuestro Creador, ¿qué más alegría puede tener un alma, que servir a Aquél que le dio la vida y más?

Sí, Soy vuestro Dios y os amo infinitamente, eso es lo que no comprenden muchos hermanos vuestros, que siendo Quien Soy, con el Poder y la Omnipotencia que tengo, Me crean un dictador, malhumorado, destructor, porque ésa es la imagen que tenéis vosotros, de aquellos que os oprimen en la Tierra, que han oprimido a vuestros antepasados y que os siguen oprimiendo ahora. No son almas buenas, son almas dominantes, muchas veces, destructivas, que no os dejan crecer y que os esclavizan.

Yo, en cambio, os amo, os cuido, es más, os persigo para que Me conozcáis y Me améis. Os respeto y no os obligo a amarMe, os busco, para que Me encontréis y Me conozcáis más profundamente y, al conocerMe en Mi Amor, Me améis de corazón; os doy libertad total para tomarMe o dejarMe.

A cada uno de vosotros os he creado con diferentes cualidades y diferentes formas de ser, y os amo a todos por igual. Yo no Soy como vosotros, que preferís a algunos por características externas o internas, vosotros no conocéis a las almas, Yo sí. Cuando regreséis a Mí y veáis a las almas, sabréis a qué Me refiero. Un alma, es muchísimo más bella que el exterior más bello que podáis ver en una persona. Vuestro cuerpo es envoltura, con defectos y cualidades, vuestra alma, cuando está Conmigo, tiene infinidad de cualidades y eso es, por mucho, lo que hace bello vuestro exterior. El Amor se emana, Mis pequeños y ésa emanación llega hasta el alma de vuestros hermanos. El cuerpo aprecia al cuerpo, el alma, aprecia el alma yvosotros os vais uniendo por ésa emanación de Amor de vuestras almas, os va uniendo lo íntimo, que Soy Yo en vosotros, y eso es lo que os va hermanando. Eso es lo que va a ser el nuevo pueblo, os amaréis por ésa emanación de Amor, sentiréis que os conocéis de toda la vida, pero, realmente, lo que estáis conociendo y lo que os está uniendo, es Mi Amor, que os está hermanando, muchos habéis sentido ya ésa sensación. Cuando conocéis a hermanos vuestros, de otros grupos de oración, que también Me buscan, os sentís, inmediatamente, hermanados y empezáis a conversar como si os conocierais de mucho tiempo.

Cuando llegáis al Reino de los Cielos, no os sentís como extraños, Mi Amor os hermana y os saludáis todos, como lo que sois, hermanos en Cristo Jesús, hermanos en el Amor.

Esto es lo que empezaréis a tener, después de la Gran Purificación, los que seáis escogidos para iniciar un nuevo pueblo, un Nuevo Mundo, estaréis hermanados y os sentiréis como en familia. Serán momentos muy bellos, intercambiaréis conocimientos, experiencias y os sentiréis en familia.

En estos momentos, sois pocos los que podéis lograr esto, más bien, lo que tenéis son ataques de vuestros hermanos a vuestro alrededor, ataques de ira, de maldad, de desprecio, de grosería. No hay virtud, no hay amor entre los hombres, Yo no os creé para que vivierais así, os creé, para que vivierais como hermanos, como lo que viviréis después de esta Purificación, que será bellísima para los que queden.

AgradecedMe, Mis pequeños, el don de la vida, agradecedMe, Mis cuidados, todos los regalos, materiales y espirituales, con que os he consentido a lo largo de vuestra vida, pero, sobre todo, agradecedMe, el que estéis Conmigo y os esté preparando para estos tiempos bellísimos que se acercan.
Gracias, Mis pequeños.

Tercer MisterioHabla Nuestro Señor Jesucristo.
Sobre: La transformación que quiero que tengáis, será una transformación profunda, pero lo lograrán aquellas almas que se dejen purificar y santificar, que se olviden de sí mismas, para que Yo las pueda cambiar en almas puras, en almas buenas, en almas santas, y ésas son las que Me van a dar reposo.

Hijitos, Me da tristeza decir esto, pero, actualmente, en muy pocas almas puedo reposar, como lo hacía Yo, en los corazones de vuestros Padres, Adán y Eva, antes de que cayeran en el Pecado.

Yo, vuestro Hermano Jesús, sigo vivo entre vosotros, para Mí no hay tiempo, Me podéis ver, en estos momentos, caminando en la Tierra, misionando, para servir a Mi Padre.

Vosotros podríais decir que fue una Gracia especial, para la gente de ése tiempo, el tenerMe, que honrados debieran estar y agradecidos, inmensamente, de Mi Presencia entre ellos, pero no, Mis pequeños, sufrí, como también vosotros sufrís cuando sois atacados por vuestros hermanos, cuando sois apartados de vuestros grupos, porque habláis de Mí,  porque Me amáis y porque queréis estar Conmigo.

Ciertamente, pocos, también, en este momento, podían darMe ese consuelo, el poderMe recargar en su corazón y, de esta forma, descansar un momento, aunque fuera para recuperar las fuerzas y seguir adelante.

Ciertamente, con Mi Madre, la Siempre Virgen María, podía hacer esto, Ella Me comprendía perfectamente. Podía, Yo, recostarMe en Su Corazón, descansar y olvidarMe un momento del Mundo, de los dolores que el Mundo Me causa. San Juan, también, Me daba descanso, un alma limpia, un alma sencilla, un alma que sabía amar a su Creador y Redentor.

Pero ahora, en estos tiempos, ¿cuántos, cuántos de vosotros podéis darMe ése reposo?, pocos, muy pocos y eso Me causa mucha tristeza, Mis pequeños, porque quisiera que fuerais más los que Me dierais ése reposo y, no tantos, como ahora, que Me producen mucho desconsuelo y horror.¡Hay tanto pecado en el Mundo, tanta maldad, y los habéis dejado entrar a vuestro corazón!, y por eso, no puedo tener ése reposo que Yo quisiera. Son tan pocas las almas puras, las almas sencillas, las almas infantiles que Me aman, que Me ofrecen su corazón, para que Yo pueda descansar sobre él.

Por eso, también, viene esta Purificación, Mis pequeños, porque, es más el dolor que Me causáis, en Mi Santísima Trinidad, que el gozo que Yo quisiera ya haber recogido, gracias a Mi Donación, en que Me di por completo por vuestra salvación.

No sabéis apreciar los regalos del Cielo, Mis pequeños. Yo, siendo Hombre entre vosotros, sufrí como Hombre, a pesar de Ser Dios y sigo sufriendo, porque, como os dije, Yo estoy fuera del tiempo y lo que recordáis de Mí, de aquél tiempo, hace un poco más de dos mil años, lo estoy viviendo en estos momentos y ¿cuántos de vosotros Me podéis dar reposo, cuando recordáis lo que padecí en ésos días?

La transformación que quiero que tengáis, será una transformación profunda, pero lo lograrán aquellas almas que se dejen purificar y santificar, que se olviden de sí mismas, para que Yo las pueda cambiar en almas puras, en almas buenas, en almas santas, y ésas son las que Me van a dar reposo.

Vosotros mismos, con la problemática que tenéis día a día, conocéis ésos momentos, en que quisierais descansar unos minutos, olvidados del Mundo y entrar en una paz profunda, que os dé reposo, sintiéndoos amados.

Como humanos necesitáis eso, Mis pequeños y Yo, también, lo necesito, como Humano. Soy vuestro Dios pero, como Humano, también, conozco vuestras necesidades, preocupaciones, dolores, cansancios, persecuciones y sé que necesitáis, también, momentos de reposo y que los hallaréis, Mis pequeños, si Me buscáis a Mí y empezáis a vivir más en lo profundo de vuestro corazón, que en el exterior. BuscadMe más a menudo en vuestro interior y hallaréis reposo Conmigo, con vuestro Dios, que Se dio por vosotros, pero, ojalá podáis darMe, también, a Mí, ésos momentos de reposo.Pensad en Mí, en los momentos de más tribulación que tuve en esos tres años de Predicación, como cuando tenía más ataques de parte del sanedrín, cuando tenía ataques del pueblo; ¡tantos pasajes, en los cuales, os podéis imaginar lo que sufrí!, Yo, Siendo Dios, Siendo Bondad Absoluta, que no tenía por qué sufrir, puesto que os traje puro Amor y, aun así, la gente de ése tiempo no Me entendía y no aprovecharon todos, Mi Presencia Divina ante ellos.

Os pregunto, ¿qué haríais vosotros, si Me presentara en estos momentos en el Mundo? Inmediatamente diríais que Me buscaríais y que aprovecharíais Mis Palabras, porque ahorita Me conocéis y sabéis Quién Soy, pero encontraríais hermanos vuestros, que harían exactamente lo mismo que hicieron aquellos, en aquél tiempo, que terminaron matándoMe en una Cruz.

Así es el mal, así es el pecado, así es satanás, os manipula, para que eliminéis, de vuestra vida, a vuestro Dios y Salvador.

Ciertamente, vosotros habéis tenido ésos mismos ataques de satanás, que ha querido que Me hagáis a un lado de vuestra vida, pero os habéis mantenido. Me buscáis, os seguís reuniendo, para saber de Mí y escuchar de Mí, por eso os digo, que el resto fiel es pequeño y que estaréis en Mi Nuevo Pueblo, porque sabéis apreciar el Amor, porque Lo buscáis, porque Me amáis, porque Me agradecéis.
Gracias, pequeños, por lo que hacéis por vuestro Dios, os amo, Mis pequeños.


Cuarto Misterio. Habla Nuestro Señor Jesucristo.
Sobre: La rivalidad, siempre os va a llevar a la separación y a la destrucción como hermanos y además, en la rivalidad no buscáis el bien del hermano, buscáis su destrucción u opacarlo.

Hijitos Míos, las rivalidades, son una de las causas que siempre os ha puesto satanás, con las que os ha ido separando desde generaciones anteriores.

Él, además, en su soberbia, os va contagiando ésa maldad, el ser soberbios y eso os lleva a la rivalidad. Igual pueden ser rivalidades tontas, infantiles, que rivalidades que os pueden conducir hasta el destruir a vuestro hermano con el asesinato.

La rivalidad, tiene mucho de soberbia y con eso os podéis dar perfectamente cuenta, de que satanás está atrás de ella.

Empezáis desde pequeñitos, empiezan las rivalidades, ya sea de fuerza, ya sea de capacidades, de juguetes, de calificaciones, ¡tantas cosas en las que podéis caer!, que, aparentemente, algunas de ellas, podríais decir, que no son malas, pero, os vuelvo a repetir, la soberbia, prácticamente, está atrás de todas ellas.

Todas las rivalidades os van a llevar a que vosotros busquéis a ser el mejor, y esto es soberbia. Buscáis estar sobre los demás, porque vosotros tenéis o creéis tener más que los demás.

No os ponéis a pensar esto, Mis pequeños, ¿acaso es tan importante?, porque la rivalidad os lleva a la destrucción del Amor que debe haber en cada uno de vosotros. La rivalidad os va a llevar al odio, a la separación entre hermanos, difícilmente, la rivalidad os va a unir y sí, generalmente, os va a separar.

Podréis hacer una supuesta amistad con hermanos vuestros para competencias en diferentes campos, que serán rivales de otro grupo. Ciertamente, os uniréis para combatir al otro grupo; como grupo, podréis decir que sois amigos y que os unís para vencer a vuestros hermanos del otro grupo, pero, después de que les vencisteis, empieza la rivalidad entre los vencedores, preguntándoos quién fue el mejor.

Como veis, la rivalidad, siempre os va a llevar a la separación y a la destrucción como hermanos y, además, en la rivalidad no buscáis el bien del hermano, buscáis su destrucción u opacarlo.

Debéis poner más empeño en vuestra vida y no buscar nada más ser el mejor, para quedar más arriba de vuestros hermanos y haciéndoles ver menos que vosotros.

Yo, vuestro Hermano Jesucristo, siendo Dios, vine a servir, pude ponerMe en ésa posición de rival, destruyendo la maldad y, presumiendo, al ser Dios, pero fui Servidor de todos y lo sigo siendo, para todas las almas actuales. Yo os sirvo, Yo busco por vuestro bien, no trato de destruiros, busco vuestro perfeccionamiento y, os he dicho, que el alumno, tiene la obligación de ser como el Maestro.

En el “amaos los unos a los otros”, está intrínseca la humildad, la donación, el Amor. Busco lo mejor para vosotros y aquél que se da por sus hermanos, recibe infinidad de Bendiciones, de parte Mía, en Mi Santísima Trinidad.

Servid a vuestros hermanos, como Yo, vuestro Hermano Jesucristo, os serví y os sigo sirviendo y, así, aseguraréis vuestra entrada al Reino de los Cielos, pero una entrada triunfal, porque aquél que busca al hermano y le ayuda, como Yo hice por vosotros, se vuelve otro Cristo, Mi Padre lo recibirá, como Me recibió a Mí, vuestro Dios, vuestro Salvador.
Gracias, Mis pequeños.

Quinto MisterioHabla Dios Padre.
Sobre: Lo que quiero hacer con vosotros, Mis pequeños, es haceros palpable la existencia real del Cielo, del Purgatorio, del Infierno; son una realidad y estaréis eternamente o en el Cielo o en el Infierno.

Hijitos Míos, pedidMe, con todo vuestro corazón, que venga Mi Santo Espíritu, que os haga ver vuestro interior, que os haga ver qué es lo que os mereceríais en este momento si estuvierais ante Mi Presencia, en el momento de vuestra muerte.

Lo que quiero hacer con vosotros, Mis pequeños, es haceros palpable la existencia real del Cielo, del Purgatorio, del Infierno; son una realidad y estaréis eternamente o en el Cielo o en el Infierno.

No habéis meditado, Mis pequeños, profundamente, lo que la palabra eternamente significa. PedidMe que Mi Santo Espíritu, os haga entender esta realidad, de los que estarán en el Reino de los Cielos, porque su vida fue de búsqueda del Amor y de la donación de sí mismos; de los que buscan Mis Enseñanzas, que os llevan a un crecimiento espiritual alto; de los que oran por las obras de Misericordia para sus hermanos; de los que buscan el Bien, para ayudar a sus hermanos que viven en el mal. Las almas buenas, tendrán su purificación y pasarán eternamente al Reino de los Cielos.

Pero lo que os pido, es que intercedáis, ante Mi Santo Espíritu, para que os haga vivir esta realidad, la eternidad en el Cielo, lo que significa y lo que viviréis, pero, también, la realidad que podréis vivir en el Infierno, en el lugar del castigo y, que, también,  será eterno. Eterno significa: no poder salir jamás, de un lugar donde seréis atormentados día y noche, si se puede decir así, sin descanso y, aun, entrando en la desesperación. No habrá momento de descanso y seguiréis siendo atacados por satanás y por sus demonios eternamente.

Poco meditáis en esta palabra y, por eso, os pido que Le pidáis a Mi Santo Espíritu que os haga vivir esta palabra, antes de que os presentéis ante Mí, vuestro Dios, para que, al entender lo que significa eterno, os arrepintáis y no sufráis, lo que Yo no quiero que sufráis eternamente, que es un dolor que no se acabará nunca y que no quiero que padezcáis. Amor es lo que quiero que viváis.

HacedMe caso, Mis pequeños, Soy vuestro Dios de Amor, no quiero vuestro sufrimiento, aún a pesar de vuestra maldad, arrepentíos y venid a Mí, os perdonaré y quiero que os la paséis gozando, Conmigo, eternamente.
Gracias, Mis pequeños.

www.diospadresemanifiesta.com

domingo, 22 de mayo de 2016

Abr 28_16 Creáis o no creáis, ya está sobre vosotros la Gran Lucha.

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Rosario vespertino


Temas:

  • La tentación como os he dicho, existe, pero, también, existe Mi Gracia y de ahí es donde os tomaréis para vencerle.
  • Mi Advenimiento está próximo, Mis pequeños, debéis estar preparados para este gran acontecimiento que se os ha venido anunciando desde hace mucho tiempo.
  • Os he dicho, Mis pequeños, que en la humildad reside vuestra fuerza, el soberbio ha perdido su poder y así será demostrado ante toda la Creación.
  • Os pido que oréis de todo corazón, por aquellas almas que han perdido la Fe, porque si han perdido la Fe, van a perder la vida eterna.
  • Confiad en Mí, confiad en Mis Potencias, confiad en el Milagro que Yo puedo hacer en vosotros para transformaros y para que Yo os pueda mover de un lado a otro y así salvéis las almas de vuestros hermanos.




Mensaje de Dios Padre y Nuestro Señor Jesucristo a J. V.


Primer Misterio. Habla Dios Padre.
Sobre: La tentación como os he dicho, existe, pero, también, existe Mi Gracia y de ahí es donde os tomaréis para vencerle.

Hijitos Míos, la tentación siempre existe, desde que tenéis uso de razón, desde que sois pequeñitos, satanás os va a empezar a atacar.

La tentación existe para separaros de Mí, satanás os va conociendo a lo largo de vuestra existencia y, como os he dicho, no conoce vuestro pensamiento, pero conoce cómo actuáis ante determinadas situaciones y, así es como os va conociendo y os va poniendo las tentaciones, con las cuales os va a hacer caer a lo largo de vuestra existencia.

La tentación como os he dicho, existe, pero, también, existe Mi Gracia y de ahí es donde os tomaréis para vencerle.

Si vosotros no contáis Conmigo en vuestra vida, fácilmente caeréis en sus tentaciones y con ello perderéis el estado de Gracia de vuestra alma. Si vosotros no ponéis el remedio, que es,yendo con un ministro Mío, pidiendo perdón de vuestros pecados, arrepintiéndoos de corazón y él dando Mi absolución, podrán pasar años y años, en que vosotros caminaréis sobre la Tierra, en pecado grave y, también, con la posibilidad de que podáis morir en pecado grave y os perderéis eternamente en el Infierno.

Mis pequeños, también Mi Hijo os lo dijo y os preparó a ello, cuando os explicó que no es lo malo lo que entra al hombre, sino lo que sale de él. Satanás os pone las tentaciones, ciertamente, las tentaciones están a vuestro alrededor, que eso, también dependerá de vuestro grado de espiritualidad; lo que para una persona es tentación, para la otra no, y eso depende de vuestra madurez espiritual y vuestro grado de acercamiento a Mi Amor.

Las Virtudes deben estar siempre en vosotros, activas, para que no caigáis en las tentaciones. Como os dijo Mi Hijo, si vosotros permitís que entre la tentación y la hacéis madurar en vuestro interior, la tentación va a engrandecerse dentro de vosotros y las va a nulificar y, así, vuestras acciones y pensamientos, son los que van a hacer que vosotros caigáis en el pecado que la tentación os llevó. Habrá otros hermanos vuestros o aún vosotros mismos, que la tentación entrará en vosotros, la veréis, pensaréis en ella y la eliminaréis de vuestra vida, y esto sucede cuando habéis cultivado un grado alto de espiritualidad y de perfección en la Virtud.

Esa es la diferencia del estar Conmigo y el estar en contra Mía, porque el que no está Conmigo, está en contra Mía y el resultado es que caeréis fácilmente en las tentaciones, luego en el pecado y con ello, a la muerte espiritual y posiblemente a la muerte eterna.

Tened cuidado, pues, Mis pequeños, con las tentaciones que os ponga satanás; os repito, existen a vuestro alrededor, pero si vosotros tenéis un alto grado de espiritualidad, porque estáis Conmigo, Me buscáis y cumplís con lo que Yo os mando para que estéis siempre Conmigo, nada podrá hacer satanás contra vosotros.

Creced, creced en el Amor y en las Virtudes y venceréis a satanás.
Gracias, Mis pequeños.

Segundo Misterio. Habla Nuestro Señor Jesucristo.
Sobre: Mi Advenimiento está próximo, Mis pequeños, debéis estar preparados para este gran acontecimiento que se os ha venido anunciando desde hace mucho tiempo.

(Lenguas…) Hijitos Míos, Mi Advenimiento está próximo, Mis pequeños, debéis estar preparados para este gran acontecimiento que se os ha venido anunciando desde hace mucho tiempo. Mis apóstoles lo esperaban pronto y, así, esta humanidad, en estos dos mil años, ha estado esperando este acontecimiento, del cual vosotros estaréis muy agradecidos Conmigo, con vuestro Hermano Jesús, y porque fuisteis escogidos para recibirMe en estos momentos de la historia.

Ciertamente, son momentos difíciles los que estáis padeciendo porque, satanás, también lo intuye y, así, como vosotros arregláis vuestra casa para recibir a un amigo muy querido y compráis todo lo necesario para hacer una fiesta y recibirlo de la mejor forma, así, están las almas que Me están esperando, que también intuyen Mi Regreso y que quieren recibirMe con lo mejor que tienen, que es un alma limpia, un alma llena de Mi Amor, un alma que ha dado mucho fruto en obras, en palabras, en pensamientos bellos, que han preparado Mi Camino de Regreso.

Satanás, al saber esto, obviamente, está causando toda esta tribulación que estáis viviendo, es el príncipe de este Mundo y no quiere Mi Regreso, porque Mi Regreso le estará marcando el fin de su poderío. Mi Retorno, en Mi Gloria, va a traer regalos inmensos a todos vosotros que cumplisteis con lo que Yo os pedí, que fuisteis buenos hijos, que habéis dejado estela, que habéis dejado Mi Amor entre vuestros hermanos.

Ciertamente, la gran mayoría de la humanidad ha fallado en esto y por eso, va a haber una Purificación, no solamente Mundial, sino Universal, para eliminar a las almas que no hicieron bien su trabajo, porque no creyeron en Mí, porque no buscaron Mi Amor para darlo a sus hermanos, porque no tuvieron Fe, porque prefirieron seguir a satanás y no a Mis Enseñanzas, que tanto Me costaron dároslas: di Mi Muerte, di Mi Sangre, di Mi Vida, Me di por completo por vosotros y Mi Padre Me regresó de la Muerte a la Vida y quiero gozar esta Vida Nueva con vosotros, los que estáis Conmigo que, ciertamente, la habéis venido gozando, porque Mi Resurrección os trajo Vida a vosotros también.

Serán momentos dramáticos, ciertamente, porque será una lucha espiritual, va a ser una lucha de dominios, una lucha en la cual, Nosotros, en Nuestra Santísima Trinidad, querreMos rescatar a todas las almas buenas, a todas las almas que son buena semilla para iniciar una nueva generación y, por otro lado, satanás, también querrá destruir a las almas buenas, a las almas nobles, a las almas que llevan Mi Amor porque, a la gran mayoría, ya las ha destrozado, las ha engañado, las ha llevado a apartarlas del Bien.

Os pido, Mis pequeños, que seáis ésos hijos Míos, ésos hermanos Míos que seguiréis salvando almas, como Mis apóstoles lo hacían, como Yo, también, lo hice. Son momentos bellos, son momentos santos y, así, como rescaté al pueblo judío del dominio egipcio, ahora rescataré a este nuevo pueblo de las garras de satanás e iniciaré un Nuevo Mundo, una Nueva Generación que iniciará con Mi Amor en pleno.

Lo habéis ganado, vosotros, los que estáis Conmigo, ciertamente, habréis fallado en múltiples ocasiones, pero, Mi Gracia, en vosotros, siempre os levantó, porque vosotros así lo queríais, porque Mi Gracia ha estado en todos los hombres, pero, la gran mayoría cayó con las mentiras de satanás y prefirieron quedarse ahí, caídos, gozando del pecado, destruyendo almas y no dando ningún fruto, para que pudieran salvarse, primeramente, ellos y luego poder salvar a otros.

Orad, orad, Mis pequeños, primero, para poder salvar, todavía, a múltiples almas que están dudando, que tienen todavía posibilidad de salvación y, también, orad mucho para que Mi Advenimiento sea, ya, inmediato, que no pase más tiempo, para que satanás, que está trabajando arduamente por destruir a las almas, no se pueda llevar a mas a sus dominios. No le dejéis ése poder ya, tomad de Mí, para destruir su poder y salvadMe almas, os lo pedí en la Cruz “tengo sed de almas” y la sigo teniendo.
Gracias, Mis pequeños.

Tercer MisterioHabla Dios Padre.
Sobre: Os he dicho, Mis pequeños, que en la humildad reside vuestra fuerza, el soberbio ha perdido su poder y así será demostrado ante toda la Creación.

Os he dicho, Mis pequeños, que la lucha actual va a ser espiritual, fuerzas espirituales de ambos lados. Por un lado, Yo, vuestro Dios, protegiéndoos de las fuerzas satánicas, que ya las estáis viendo cómo van creciendo, cada vez más fuertes, a vuestro alrededor. Por el otro lado, satanás, con sus ángeles demoniacos, también, tratará de destruir todo lo creado, no solamente lo que tenéis a vuestro alrededor, sino a vosotros mismos. Él quiere destruir toda Mi Creación, pero empezando con vuestras almas, ―lo ha logrado, en gran parte, desgraciadamente, no quisisteis seguirMe, no quisisteis creer en Mí, vuestro Dios, vuestro Creador, el que os ha dado todo, el que os da vuestro ser, el que os da todo con lo que vivís aquí en el Mundo.

Son luchas fuertes, angelicales, ciertamente, la lucha, también, será con los ángeles. Por un lado, Mis Ángeles buenos, toda la Cohorte Angelical protegiéndoos y luchando contra la maldad de satanás y él, con sus ángeles malos, también, tratando de destruir a Mis ángeles buenos.

Por otro lado, satanás, también afectó a infinidad de hermanos vuestros y lo estáis viendo alrededor del Mundo, a todos niveles, pero Yo, también, tengo a Mis hijos, que han sido preparados para esta gran lucha. Satanás quiere provocar guerras entre hermanos, Yo no lo voy a permitir, ciertamente, vosotros, y algunos hermanos vuestros, a los que he ido preparando a través de los años, protegerán lo que es Mío.

Como os he dicho, Yo, lucharé a través de vosotros, os transformaré, transformaré vuestro cuerpo, vuestra alma, porque Me habéis dado vuestro “fiat”, para que Yo lo haga así, ciertamente, protegeréis a vuestro nivel, a vuestros hermanos.

Si Yo os pongo a luchar contra seres satánicos poderosos, no temáis, Mi Poder Divino trabajará a través de vosotros. Lo que más le molesta a satanás, es ser vencido por creaturas pequeñas, como vosotros. Ciertamente será vencido por Mi Hija, la Siempre Virgen María,que él la considera como una Creatura pequeña, inferior, pero ya le ha demostrado el Poder que tiene, porque Se lo he dado Yo. Le aplastará la cabeza y quedará en ridículo ante todos los demás arcángeles, ángeles malos y ante todo el Universo, ante todo el Cielo, él será dominado por una Mujer.

Os he dicho, Mis pequeños, que en la humildad reside vuestra fuerza, el soberbio ha perdido su poder y así será demostrado ante toda la Creación, cómo una Humilde Creatura lo vencerá y cómo, también, Mis Santos Ángeles vencerán a su ejército, al que cree poderosísimo y vosotros, a los que prepararé y que he venido preparando, por vuestra humildad, pero, además, por vuestra nada, porque sois nada, venceréis a ésas fuerzas poderosas, maléficas.

Yo, de la nada, puedo hacer grandes cosas, os lo he dicho. Sois pequeñitos, sois polvo, sois partículas pequeñitas, que, sin Mí, no sois nada. Seréis grandes, porque Yo trabajaré a través de vosotros y, eso, molesta mucho a satanás y lo sabe, pero en su soberbia, él no quiere dar su brazo a torcer, siente que todavía vencerá en esta guerra espiritual, que ya se desató, que ya lo estáis viendo y que está preparando a la Purificación, que, ya, también, vosotros esperáis que se dé y, así será, y como os he dicho: creáis o no creáis, ya está sobre vosotros la Gran Lucha. Los que creéis, preparaos, los que no creéis, perderéis y tarde os daréis cuenta que, por no creer, no os preparasteis y por ello  perdisteis vuestra alma eternamente.
Gracias, Mis pequeños.

Cuarto Misterio. Habla Nuestro Señor Jesucristo.
Sobre: Os pido que oréis de todo corazón, por aquellas almas que han perdido la Fe, porque si han perdido la Fe, van a perder la vida eterna.

Hijitos Míos, en Mi Paso por la Tierra, hice muchos Milagros, para que os dierais plena cuenta de Mi Poder. Yo Soy vuestro Dios, Soy vuestro Dios, Hijo del Padre, pero el que Me ve a Mí, ve al Padre, Somos Uno, en Nuestra Santísima Trinidad, con el Espíritu Santo.

Si cuando estuve Yo de Paso, en la Tierra, hice infinidad de Milagros, ahora, os he dicho que, también, va a ser una época de grandes Milagros, porque Yo estoy entre vosotros, Vivo entre vosotros, Vivo en vuestro corazón, porque abristeis vuestro corazón para que Yo actúe y viva entre vosotros, para el bien vuestro y el de vuestros hermanos.

Pero quiero haceros reflexionar sobre la acción del Milagro, que viene de Mi parte, para que se produzca el Milagro. Es Mi Amor hacia vosotros,os amo infinitamente y quiero lo mejor para vosotros. Sois Mis hijos, sois Mis hermanos, sois Mis pequeños, Mis criaturitas, a las que amo inmensamente. Mi Amor actúa, pero para que Mi Amor produzca el Milagro, se necesita otro requisito muy importante: vuestra Fe. Si no hay Fe de parte vuestra, el Milagro no se realiza, porque, con la Fe, vosotros estáis aceptando que Yo Soy vuestro Dios y tengo todo el Poder para lograr lo imposible, porque eso es el Milagro, el lograr cosas imposibles, a vuestro entendimiento, que es pequeño.

Cuando vuestra Fe es grande, Mi Amor actúa inmensamente, el resultado, son Milagros portentosos, pero si vuestra Fe es débil, podréis obtener un bien de parte Mía, pero no se da tan portentoso como cuando vuestra Fe es inmensa, es absoluta.

Cuando Yo hacía el Milagro, os estaba haciendo vivir esta reflexión. Mi Amor siempre estuvo presente, durante todo Mi tiempo sobre la Tierra y, ciertamente se sigue dando, pero, nuevamente, hay que tener Fe, porque ya no Me veis. La gente de ése tiempo Me vio, Me escuchó, Me tocaba, y podréis decir “así es más fácil el Milagro” porque Me estaban viendo, porque estaban conscientes de que ése Poder Curativo salía de Mí, pero, ni aun así, muchos creyeron, Me tuvieron frente a ellos y no creían y esto, principalmente, sucedió con los escribas y fariseos.

El hombre es así, y aun teniendo todas las cosas palpables, tangibles, obvias, frente a ellos, cierran su mente, cierran su corazón y no quieren creer, ahí radica principalmente la salvación de las almas. Ciertamente, los que primero se salvan, son aquellos que sin verMe, creen, ésa es una Fe absoluta. Los de aquél tiempo Me vieron y no creyeron, ésa, ya es necedad y es maldad de satanás dentro de ellos. Así os manipula satanás, os va quitando la Fe y, un alma sin Fe, ya está destruida.

Mis pequeños, os pido que oréis de todo corazón, por aquellas almas que han perdido la Fe, porque si han perdido la Fe, van a perder la vida eterna. Milagros, todavía se darán, pero los milagros los recibirán aquellos que viven en Fe, aquellos que buscan Mi Amor, aquellos que son como niños, que confían plenamente en Mí, su Dios, sin haberMe visto, pero Me aman, porque Me viven en su corazón.
Gracias, Mis pequeños.

Quinto MisterioHabla Dios Padre.
Sobre: Confiad en Mí, confiad en Mis Potencias, confiad en el Milagro que Yo puedo hacer en vosotros para transformaros y para que Yo os pueda mover de un lado a otro y así salvéis las almas de vuestros hermanos.

Hijitos Míos, al pediros ser Mis apóstoles de estos tiempos, es para que, cuando se vayan dando los acontecimientos de la Purificación, cuando se vayan viendo los destrozos que se darán a vuestro alrededor, por terremotos, inundaciones, erupciones volcánicas, infinidad de destrozos que habrán, es ahí en donde entraréis en acción como apóstoles.

Los acontecimientos se irán dando poco a poco, para que, vosotros, como apóstoles, vayáis, también, explicando a vuestros hermanos lo que está sucediendo, para que los incrédulos crean, para que vean que era cierto lo que se os había anunciado desde años antes. Si no creen, los acontecimientos proseguirán cada vez más fuertes, más destructivos y también, será así vuestra predicación: iréis recordando a vuestros hermanos lo que ya os había Yo dicho, desde antiguo, cómo os había ya preparado. Se os darán dones y capacidades especiales y Divinas, para que vosotros actuéis y ayudéis a vuestros hermanos, para que podáis salvar a los más que podáis.

Os amo a todos, a todos, Mis pequeños, y los quiero recuperar y, por eso, quiero que pongáis todo de vuestra parte, para que Yo os lleve a todos aquellos lugares donde necesitaré que prediquéis, como lo hacía con Mis primeros discípulos. No os preocupéis de vuestras necesidades y obligaciones, trabajaréis para Mí, plenamente. Son tiempos de recuperación de almas. Son tiempos de Amor para salvar a aquellos que no están preparados. Son tiempos de dar vida a aquellas almas que están muertas en el pecado. Son tiempos de abrirles los ojos a aquellos que los tienen cerrados. Es tiempo de mostrar la Verdad a aquellos que son necios y se niegan a verla.

Dejaos, pues, mover, Mis pequeños, los que seréis escogidos, para que, siendo apóstoles de estos tiempos, podáis salvarMe a infinidad de almas que necesito recuperar para el Reino de los Cielos. Confiad en Mí, confiad en Mis Potencias, confiad en el Milagro que Yo puedo hacer en vosotros para transformaros y para que Yo os pueda mover de un lado a otro y así salvéis las almas de vuestros hermanos.

La mayoría de vuestros hermanos verán destrucción, vosotros, veréis Mi Amor en estos acontecimientos; ellos verán cómo se pierden todas vuestras cosas del Mundo, Yo y vosotros mismos, veréis cómo se recuperan las almas para el Reino de los Cielos.
Gracias, Mis pequeños.

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