domingo, 10 de febrero de 2013

Mensaje a J.V. - 31 de Enero del 2013

Ene31_13 PedidMe ésa sed, ésa hambre de Amor.ImprimirE-Mail
Rosario vespertino

Temas:

  • Sabiduría Santa tenéis que pedirMe, para que podáis alcanzar a entender que, mientras más pequeños seáis, más fuertes podréis estar ante los ataques de satanás, porque contaréis completamente con Mi Poder Divino contra las fuerzas de satanás.
  • Seguiré hablando a través de Mis pequeños, no Me apartaré de ésta humanidad, aún a pesar de que muchos de vosotros no queréis saber nada de Mí.
  • Yo os puedo transformar en un momento, pero necesito que os volquéis totalmente a Mi Voluntad, que es la Voluntad del Padre.
  • Pocas veces oráis o apoyáis a aquellos a los que no conocéis bien y que no consideráis vuestros hermanos o amigos íntimos y Me estoy refiriendo a aquellos que os hacen daño.
  • Vida os di, Mis pequeños, Vida Mía tenéis y os pido viváis Mi Vida, porque es necesaria para vuestra alma y para la de vuestros hermanos.

Mensaje de Dios Padre, Nuestro Señor Jesucristo y Dios Espíritu Santo a J. V.

Primer Misterio, Habla Dios Padre.
Sobre: Sabiduría Santa tenéis que pedirMe, para que podáis alcanzar a entender que, mientras más pequeños seáis, más fuertes podréis estar ante los ataques de satanás, porque contaréis completamente con Mi Poder Divino contra las fuerzas de satanás. 
Hijitos Míos, la principal finalidad de ésta purificación que vosotros padeceréis, es llevaros hacia la humildad, que veáis vuestra pequeñez, que hagáis a un lado la soberbia, en la cual, muchos, muchos de vosotros habéis caído.
Todos vosotros tenéis soberbia en diferentes grados y os lo digo porque muy pocos os acercáis a Mí.
Yo, que Soy vuestro Dios, y que Yo puedo daros todo, os puedo llevar a la perfección, os puedo aconsejar de la mejor forma, os puedo evitar tantos problemas en los que vosotros caéis, porque contáis con vosotros mismos, no os acercáis a Mí y el hecho de que digáis que estáis Conmigo y no Me busquéis, eso ya es un acto de soberbia, porque seguís creyendo en vosotros mismos. Si fuerais sencillos, como niños, como lo que realmente es un niño pequeño, que siempre acudirá con sus padres, que son sus mayores, porque así los ven y así los reconocen, aunque no lo mediten, porque simplemente lo sienten, saben que están desprotegidos y que necesitan ser protegidos por sus mayores.
Ciertamente, van creciendo y van tomando su personalidad, van conociendo el mundo, se van separando de los padres, pero aquellos que reconocen siempre la autoridad de los padres, regresarán a ellos, por un consejo sano, un consejo de crecimiento y siempre los tendrán en cuenta, porque reconocen en ellos que sus años, su vejez, su edad, que ha sido de trabajo de muchos años y que los ha llevado a la  madurez, les puede ayudar a ellos también a crecer y a evitarse muchos problemas.
Os vuelvo a repetir, vosotros, estáis viviendo soberbia y en estos tiempos no os podéis ya dar ése lujo, Mis pequeños, estáis a punto de lidiar directamente con satanás y prácticamente con su poder, y su fuerza mucho más grande de lo que vosotros os imagináis. Si vosotros no os acercáis a Mí, fácilmente podréis sucumbir, porque os puede, primeramente, engañar fácilmente y luego os puede llevar todavía a una soberbia mayor, en la cual también vais a sucumbir.
Preparaos pues, Mis pequeños, así, acercándoos a Mí y siendo cada vez más pequeños, más necesitados de Mí, pero deberéis estar bien convencidos de esto, Mis pequeños, porque si vosotros en algún momento tratáis de salir delante de los problemas que tengáis que enfrentar y queráis resolver vosotros mismos, difícilmente saldréis de la prueba.
Sabiduría, Sabiduría Santa tenéis que pedirMe, Mis pequeños, para que podáis alcanzar a entender que, mientras más pequeños seáis, más fuertes podréis estar ante los ataques de satanás, porque contaréis completamente con Mi Poder Divino contra las fuerzas de satanás.
Gracias, Mis pequeños.
Segundo Misterio, Habla Dios Padre.
Sobre: Seguiré hablando a través de Mis pequeños, no Me apartaré de ésta humanidad, aún a pesar de que muchos de vosotros no queréis saber nada de Mí.
(Lenguas…) Hijitos Míos, os he ejemplificado en la antigüedad cómo, aquellos a los cuales Yo tomaba como profetas o portavoces Míos ante el pueblo, eran gente insignificante, muchos de ellos, pequeños, casi niños, en los cuales Yo Me manifestaba, para que se viera que era Mi Fuerza la que los movía y que Yo Hablaba a través de ellos.
En estos tiempos sigo tomando a los pequeños, no he tomado a los sabios, a los entendidos, a aquellos con grandes conocimientos catedráticos, no, Mis pequeños, son gente común y corriente, gente pequeña que Me han dado todo su ser, que han querido que Yo Me manifieste a través de ellos, haciéndose a un lado, para que Yo pueda hablar a Mi pueblo nuevamente.
Son pequeños, y debéis entenderlos cuando haya algún error de parte de ellos. No son gente importante y esto lo digo porque sois muy dados a criticar y no a sacar el provecho que Yo estoy dando a través de ellos, en Enseñanzas, en Vida y lo que vosotros debéis seguir. Estos tiempos son de tribulación.
He dado Conocimiento ya de varios años para acá, Mis pequeños y muchos, muchos hermanos vuestros no quieren entender, no quieren hacer caso, no quieren cambiar de vida. Vosotros lo visteis y lo podéis leer con Noé, vuestro hermano, fue mucho tiempo el que él estuvo avisando a su gente de ése desastre tan grande que iba a venir con el Diluvio, lo tomaban a él y a su familia, como un loco por todo lo que estaba haciendo y diciendo y la prueba no venía.
Ciertamente, los Míos, Mis profetas, videntes, los que escojo, por ser humanos flaquean, pero Yo estoy en ellos y la Fe persiste, aunque ciertamente algunos caen por causa de la crítica, por causa de que no son apoyados por vosotros, sus hermanos. Yo doy a todo la humanidad el Conocimiento de lo que va a venir, se os ha anunciado por mucho tiempo, siguen siendo los locos de éste tiempo Mis videntes y profetas. Ciertamente, flaquean, sufren y siguen cayendo muchos de ellos, han trabajado y eso lo reconozco, pero caen y esto por falta de oración también de vosotros.
Preparaos pues, ya, al momento del cambio, que lo tenéis a puertas, como os he avisado. Tiempo se os dio, mucho tuvisteis de conocimiento y no lo aprovechasteis, la gran mayoría de vosotros, humanidad de este tiempo. Habréis de sufrir con dolor y a veces, con mucho dolor, vuestra falta de Fe, vuestra falta de importancia hacia lo que Yo os estaba dando para que os prepararais. Falta amor también de vuestra parte y el reconocimiento de Mi Presencia en las Palabras que ellos os dijeron. Mucho bien pudisteis haber hecho, mucho bien pudisteis haber transmitido y con eso cambiar el curso de los acontecimientos, pero no se logró.
Los acontecimientos venideros harán el cambio, será benéfico, pero doloroso o muy doloroso para algunos, seguiré hablando a través de Mis pequeños, no Me apartaré de ésta humanidad, aún a pesar de que muchos de vosotros no queréis saber nada de Mí, pero los acontecimientos y el dolor os harán regresar a Mí y Yo sanaré vuestras heridas, enjugaré vuestras lágrimas y os daré nuevo aliento para que sigáis adelante.
No os imagináis, Mis pequeños, de toda la humanidad y del Universo entero, cómo os amo, Soy vuestro Padre, Soy vuestro Dios, Soy vuestro Creador y he puesto todo Mi Amor en cada uno de vosotros al crearos, al daros vida y os cuido en todo momento, pero vosotros no agradecéis ni queréis estar Conmigo, el tiempo y el dolor os harán ver vuestro error, regresaréis, aunque sea con lágrimas en los ojos, pero Yo estaré con vosotros, no os abandono, no abandono a ninguna alma. Aún a pesar de aquellas que Me atacan, sigo tras de ellas, las trato de conquistar, de enamorar para que regresen a Mí. No os imagináis cómo os amo.
Gracias, Mis pequeños.
Tercer MisterioHabla Dios Espíritu Santo.
Sobre: Yo os puedo transformar en un momento, pero necesito que os volquéis totalmente a Mi Voluntad, que es la Voluntad del Padre.
Hijitos Míos, he aquí que Yo, vuestro Dios Espíritu Santo, vengo a renovar la faz de la Tierra. En el Cielo, se pide ya por Mi Presencia ante todos vosotros en la Tierra. En el Purgatorio se ora intensamente para que Yo pueda ya derramarMe sobre todas las almas que habitan en éste momento en la Tierra y en el Universo entero.
Vosotros debéis hacer lo mismo, también, Mis pequeños, pero tan distraídos estáis con lo del mundo, que falta mucha oración de vuestra parte. Pocas almas piden que venga Yo a calmar ésta sed de Amor, de Justicia, de Paz, que tanto necesitáis aquí en la Tierra y se necesita en el Universo entero.
Mis pequeños, recurrid a Mí, son Mis tiempos, son tiempos en que tengo que derramar Mis Gracias, Mis Dones, Mis Virtudes, Mis Bendiciones para preparar el Advenimiento del Hijo de Dios. Mi Esposa, la Siempre Virgen María, atenta está a vuestras peticiones y Ella Misma está orando para que Yo pueda venir a ayudaros.
No os imagináis, Mis pequeños, cómo se ve desde el Cielo la vida de la Tierra. Estáis tan atacados por satanás, que ni cuenta os dais. Estáis viviendo una maldad al extremo y no fuisteis creados para ello. Os habéis acostumbrado a la maldad de satanás, que ya la vivís cotidianamente y no os dais cuenta de ello.
Vendrá el tiempo en que podréis comparar lo nauseabundo en lo cual estáis viviendo ahora, con lo bello que os tiene preparado el Padre para todos vosotros. Vuestra oración, Mis pequeños, tiene que ser más intensa, y sobre todo, más íntima, que salga desde lo más profundo de vuestro corazón. Os debéis unir con las oraciones del Cielo, del Purgatorio y todas llevadas ante la Presencia del Hijo de Dios, para que sean presentadas ante el Padre.
Mis pequeños, debéis tener sed, sed de Vida Verdadera, pedidMe ésa sed, ésa hambre de Amor. Estáis viviendo en un desierto verdadero, en un desierto espiritual, donde no tenéis el Verdadero Alimento, donde no tenéis ésa Agua que quitará la sed de vuestra alma. 
Ciertamente, aquellos que buscan todavía vivir en la Verdad, en el Amor, a pesar de lo nauseabundo que tenéis a vuestro alrededor, llegan a saborear ligeramente éste Alimento Divino y ésta Agua que os purifica y que os quita la sed, pero rápidamente volvéis al Mundo, tan pronto dejáis vuestra oración, porque no sois gente de oración continua. Oráis un momento, regresáis al Mundo, volvéis y otra veis caéis en el Mundo, eso es muy humano, Mis pequeños, pero ¿por qué no buscáis ésa vida más íntima?
Acudid a Mí, Yo estoy en vuestro interior, Yo Vivo con vosotros, Yo os guío y Yo señalo vuestros buenos pasos y buenas acciones, pero también os reprendo cuando habéis caído en el mal y estáis produciendo mal.
Sed humildes y sencillos para que Yo os pueda llenar de Bienes, de Virtudes, de Bendiciones. Yo os puedo transformar en un momento, pero necesito que os volquéis totalmente a Mi Voluntad, que es la Voluntad del Padre. Voy a renovar la Tierra, y va a ser bello, va ser esplendoroso, agradeceréis de corazón tantas Bendiciones que veréis a vuestro alrededor y que se dieron para vosotros.
Seguid adelante, Mis pequeños, los que estáis buscando la Verdad, los que estáis buscando la Vida, la Verdadera Vida en Dios. Os Bendigo, Mis pequeños, Vivo en vosotros, buscadMe en vuestro interior.
Gracias, Mis pequeños.
Cuarto Misterio, Habla Nuestro Señor Jesucristo.
Sobre: Pocas veces oráis o apoyáis a aquellos a los que no conocéis bien y que no consideráis vuestros hermanos o amigos íntimos y Me estoy refiriendo a aquellos que os hacen daño.
Hijitos Míos, cuando un ser querido que vive con vosotros o está cerca de vosotros, se enferma, vosotros lo llenáis de cuidados, os sentáis a su lado, le procuráis lo necesario para que se sienta bien. Le acercáis medicamentos que le devuelvan la salud pero, sobre todo, le dais vuestro apoyo de hermano, de esposo, de amistad. Vosotros podéis reconocer la enfermedad y le dais apoyo al hermano necesitado, porque sabéis que sufre, está adolorido, está apesadumbrado.
Ciertamente, la enfermedad puede ser física, mental, emocional, muchos tipos de enfermedades hay, pero cuando queréis al ser que está junto a vosotros, necesitado por su enfermedad, vosotros le apoyáis, porque le amáis.
Yo, vuestro Hermano Jesucristo, os he dicho que vine a la Tierra por los enfermos, no por los sanos. Ciertamente, todos, todos vosotros sois enfermos, porque estáis enfermos de alma principalmente, y ciertamente, también de cuerpo, porque el Pecado afectó vuestro cuerpo y difícilmente podéis decir que estáis totalmente sanos de cuerpo, porque las enfermedades están siempre a vuestro alrededor acechándoos.
Cuando os he dicho que vengo por los enfermos, os repito, vengo por vuestras enfermedades de alma, Yo Soy vuestro Hermano Mayor y os amo a todos vosotros. Vosotros podéis tener enfermedades sencillas cuando vuestros pecados son veniales, y también podréis tener enfermedades graves, cuando vuestros pecados son aquellos que os pueden llevar a la muerte eterna, pero siempre estoy a vuestro lado.
Acerca del ejemplo que os daba en un principio, de que vosotros apoyáis a aquellos que son de vuestra familia, o que son amigos o muy cercanos a vosotros y les amáis a pesar de su dolor o de su pena, pero pocas veces oráis o apoyáis a aquellos a los que no conocéis bien y que no consideráis vuestros hermanos o amigos íntimos y Me estoy refiriendo a aquellos que os hacen daño, a aquellos que os atacan, ya sea asaltándoos, quitándoos la vida, afectándoos en lo económico o aún quitándoos a algún ser querido, asesinándoles.
Estos hermanos vuestros están muy enfermos, Yo vine por ellos, vine a traer Mi Gracia, vine a traer Mi Amor, también por ellos derramé hasta la última Gota de Mi Sangre. También, por ellos, sufrí Dolores indecibles, insoportables, Yo pensaba en ellos y Yo quiero que vosotros penséis en ellos, que oréis por su salvación, aún a pesar del dolor que os puedan causar por la forma en que os atacan y os dañan. Están enfermos porque satanás se ha posesionado de sus almas y también de esto os di ejemplo para que vosotros lo hicierais, arrojé demonios que estaban en hermanos vuestros, éstos hermanos de ahora, también tienen demonios que los están aquejando, que les han destruido su espiritualidad, si alguna vez la tuvieron.
Ellos necesitan de vosotros, necesitan de vuestra oración, de vuestros sacrificios, de vuestra oración. Ciertamente, se os hace difícil poder pedir por alguien que os ha hecho un mal y a veces muy grande, cuando os quitan a un ser querido, cuando os quitan algo muy valioso, pero debéis tratarlos así, como hermanos vuestros muy enfermos y Me los debéis poner en el Corazón, para que Mis Méritos caigan sobre ellos y se vaya, así, reformando la faz de la Tierra.
Os he dicho que todo va a ser purificado en el Amor, pero si vosotros no lo estáis dando, si vosotros no estáis poniendo de vuestra parte, si de vosotros no está saliendo ése amor purificador y sanador a través de vuestra oración, entonces no pidáis lo que vosotros mismos no estáis dando. Amor os di, Amor os enseñé, Amor debéis dar.
Vosotros estáis ayudándoMe a levantar éste mundo caído en la maldad, en el pecado, en el error, son tantos y tantos hermanos vuestros alrededor del mundo que están muy enfermos y eso os está afectando en vuestra vida diaria.
Los gobernantes de las naciones que se han apartado de Mí. Dentro de Mi Misma Iglesia, muchos se han vendido también al enemigo, se han vuelto más del mundo y se han alejado de la espiritualidad que Yo dejé, que es Vida y si no dan Vida ellos, ¿cómo podéis vosotros tenerla? Tenéis hermanos vuestros que, en éstos tiempos de gran necesidad económica, os están atacando, os están quitando vuestros bienes y, a veces, hasta os están  asesinando para quedarse con lo que vosotros ahorrasteis a través de mucho tiempo de trabajo.
Si vosotros no actuáis en el Amor, si vosotros no pedís por la salud de éstos, vuestros hermanos, seguiréis sufriendo con lo que tenéis a vuestro alrededor. Mi Amor es Purificador, Mi Amor es Sanador, Mi Amor es Santificador, Yo Vine a mostraros todo esto, actuad, Mis pequeños y preparad con vuestro amor Mi Venida a la Tierra, para que podáis convivir Conmigo, con vuestro Dios.
Gracias, Mis pequeños.
Quinto MisterioHabla Dios Padre.
Sobre: Vida os di, Mis pequeños, Vida Mía tenéis y os pido viváis Mi Vida, porque es necesaria para vuestra alma y para la de vuestros hermanos.
Vida os di, Mis pequeños, Vida Mía tenéis y os pido viváis Mi Vida, porque es necesaria para vuestra alma y para la de vuestros hermanos.
Mis pequeños, os he dado una vida Divina, ciertamente, tenéis la vida que vuestros padres, en la Tierra, os transmiten, es vida de cuerpo, es vida humana, pero Yo os doy una Vida Divina, una vida espiritual, inmensamente más grande, más bella que la vida humana. Ciertamente, vuestro ser goza con la vida Divina que se os da; vuestro cuerpo, vuestra alma, están unidos y uno y otro gozan con lo que vosotros hacéis.
Cuando vosotros, realmente, estáis buscando por vuestra perfección, tenéis un gozo inmenso, ciertamente vuestras acciones están ordenadas por vuestra alma internamente. Vosotros meditáis vuestros actos, cuando llegáis a hacer con vuestros actos lo que vuestra mente meditó y os salen bien, vuestro cuerpo y vuestra alma, gozan y así, sois una sola cosa.
Cuando vuestra alma se llena de Mí, vuestro Dios, y vosotros hacéis Mi Voluntad, primero la aceptáis en vuestra alma, la meditáis, la gozáis internamente y luego movéis a vuestro cuerpo a llevar a cabo lo que Yo os pedí y que vuestra alma ya meditó y así, nos volvemos Uno, porque estáis dejándoos mover plenamente por Mí. Vuestra voluntad está en Mi Voluntad y vuestra voluntad movió a vuestro cuerpo a hacer Mi Voluntad y lograsteis hacer un Bien. Ése Bien es reconocido por vuestros hermanos, el gozo que vosotros les dais regresa a vuestro ser y vosotros Me lo ofrecéis y así el gozo es completo.
Eso es la vida del Cielo en la Tierra, Mis pequeños, cuando os dejáis mover por Mí y es Mi Amor el que os da vida y es Mi Amor el que, a través vuestro, da vida a vuestros hermanos. ¿Os dais cuenta ahora el potencial tan grande que tenéis en vosotros?, es un Potencial Divino, Mis pequeños, con el que podéis mover la vida de vuestros hermanos hacia el Bien y de ésta forma estáis atrayendo el Cielo a la Tierra. Lo único que necesitáis, Mis pequeños, es Humildad, Sencillez, Sabiduría, para que os dejéis mover por Mi Voluntad y así se goce el Cielo con la Tierra.
Gracias, Mis pequeños.


www.diospadresemanifiesta.com


No hay comentarios:

Publicar un comentario