miércoles, 13 de julio de 2016

Jun 24_16 Negaos a vosotros mismos y dejad que la Trinidad os transforme.

Rosario vespertino.

Temas: 

  • En las Sagradas Escrituras, se os dice que, si un ángel bajara y os enseñara cosas diferentes a lo que Nosotros, como Dios, os enseñaMos, ése ángel, no viene de Nosotros.
  • Preparaos, pues, Mis pequeños, porque pronto vendrán las pruebas, pruebas muy fuertes para los que han querido hacer su voluntad y pruebas purificadoras y santificadoras para aquellos que han aceptado Nuestra Voluntad en su vida. 
  • DejadMe, pues, Mis pequeños, que os cambie mientras estéis en el Mundo, os puedo transformar en el menor tiempo que vosotros podríais imaginar, soy vuestro Dios, dadMe vuestro “fiat”, dadMe vuestra voluntad.
  • Os repito, Mis pequeños y nunca lo olvidéis, no dejéis entrar en vuestro ser, ni una pizca de soberbia, porque en ése momento, empezaría vuestra destrucción.
  • Son tiempos de confusión, son tiempos de error, son tiempos de traición, son tiempos de un Judas que traiciona lo que tanto Me costó, lo que Me duele, lo que Me hizo Morir por vosotros.



Mensaje de Dios Padre Dios, Nuestro Señor Jesucristo y Dios Espíritu Santo a J. V. 


Primer Misterio. Habla Nuestro Señor Jesucristo.
Sobre: En las Sagradas Escrituras, se os dice que, si un ángel bajara y os enseñara cosas diferentes a lo que Nosotros, como Dios, os enseñaMos, ése ángel, no viene de Nosotros.

Hijitos Míos, os he pedido mucha oración por la santificación de la Iglesia, satanás se ha introducido dentro de ella y está tratando de destruir todo lo que Yo os dejé y que mucho, mucho Me dolió el haberos dejado: Mi Vida, Mi Sangre, Mi Amor y Mis Enseñanzas.

Mis pequeños, desde que caminé sobre la Tierra, tuve muchos ataques por parte del Templo, ciertamente, no todos Me atacaron, pero aquellos que hicieron pacto con satanás, acabaron asesinándoMe en la Cruz.

Os he pedido mucha oración, Mis pequeños y, sobre todo, Discernimiento, para que vosotros, pongáis toda vuestra Fe y toda vuestra vida en Mis Enseñanzas. Os he dicho que si alguien viene y os enseña cosas diferentes a las que Yo os dejé, y aquellas que Mi Padre os dio con los Diez Mandamientos, ésas personas, no vienen de Nosotros; es más, en lasSagradas Escrituras, se os dice que, si un ángel bajara y os enseñara cosas diferentes a lo que Nosotros, como Dios, os enseñaMos, ése ángel, no viene de Nosotros.

Tenéis en las Sagradas Escrituras que Mi Palabra no pasará, que Mi Palabra vivirá hasta el Fin del Mundo, porque Mi Palabra es Ley, es Amor, es Enseñanza, es Protección para todos aquellos que están Conmigo.

Todos aquellos que no están Conmigo están con satanás, todos aquellos que os confunden utilizando Mis Palabras y, para ello, utilizando mentira, son hijos de satanás, son anticristos, están en contra de Mi Palabra, están en contra de Mis Enseñanzas, están engañando a Mis hijos, a vuestros hermanos.

Mis pequeños, estáis viviendo momentos de confusión, pero la están viviendo aquellos que no están Conmigo, aquellos que se están dejando engañar, porque no tienen Mis Palabras y Mi Vida en su corazón.

Vosotros, los que vivís en paz, aún a pesar de que estáis viendo a vuestro alrededor confusión, maldad, destrucción, os mantenéis en ella, porque Me tenéis en vuestro corazón, porque vivís Mis Palabras, porque las enseñáis, porque las gozáis, porque las respetáis porque vienen de Mí, vuestro Dios.

Fácilmente veréis a vuestro alrededor, aquellos que no están Conmigo, aquellos que no Me viven, aquellos que van a ser eliminados de la Tierra, que son aquellos que se han dejado guiar por la maldad que crea la confusión. Han permitido que en su corazón crezca lo que les conviene escuchar y, vosotros, los que estáis Conmigo, sufrís, sufrís grandemente en vuestro corazón, al ver las atrocidades que se están cometiendo contra Mis Palabras, contra Mis Leyes, contra Mi Amor.

Os he pedido que oréis fuertemente por todos aquellos hermanos vuestros que están confundidos, salvadlos, son Mis hijos, son vuestros hermanos. 

Vosotros, manteneos unidos a Mí, a través de Mi Palabra, a través de las Obras que Me visteis hacer, que las tenéis en las Sagradas Escrituras. Sois Mis apóstoles de estos tiempos, vosotros debéis reproducirMe ante vuestros hermanos, deberéis hacer lo que Yo hice por vuestros hermanos en aquél tiempo, es vuestro deber fraterno y Divino, porque Yo vivo en vuestro corazón y Me vais a transmitir a Mí, a vuestros hermanos, vuestros hermanos os verán a vosotros, pero, realmente, Me verán a Mí, por las obras que haréis y las virtudes que viviréis, porque Yo, Vivo en vosotros.

Es una gran tarea que tenéis para estos tiempos, Mis pequeños, Mis escogidos, una responsabilidad grande, pero muy bella, que es la de transmitirMe a vuestros hermanos y salvarles su alma, como Yo lo he hecho con la vuestra.

Manteneos firmes, Mis pequeños, manteniendo Mi Palabra y Mis Obras en vuestro corazón y no os mováis de ahí. No importa lo que os digan, no importa lo que os prometan, si lo que os digan y prometan, va en contra de lo que tenéis en las Sagradas Escrituras, no les hagáis caso, orad por ellos, y vosotros estaréis Conmigo eternamente.

Vuestra tarea, os repito, es muy bella, sólo espero el momento en que os abrace tiernamente, cuando regreséis al Reino de los Cielos y os agradezca el haber vivido para Mí y haber triunfado, como Yo triunfé, dándoos la salvación a todos vosotros.
Gracias, Mis pequeños.


Segundo Misterio. Habla Nuestro Señor Jesucristo.
Sobre: Preparaos, pues, Mis pequeños, porque pronto vendrán las pruebas, pruebas muy fuertes para los que han querido hacer su voluntad y pruebas purificadoras y santificadoras para aquellos que han aceptado Nuestra Voluntad en su vida. 

(Lenguas…) Hijitos Míos, en la Cruz, tuve un Dolor muy fuerte ante Mi Padre, cuando Le dije: “Padre, ¿por qué Me has abandonado?” Ciertamente, fue un Dolor muy grande porque, en ese momento, Yo tomaba todos los pecados del Mundo y Mi Padre, viéndoMe como pecador, apartaba Su Gracia de Mí. Un Dolor muy grande, Mis pequeños, un Dolor muy grande que Yo no Me merecía, por Ser Hijo de Dios, pero que lo tomé por vuestra salvación.

Ciertamente, en estos tiempos, vosotros mismos sentiréis también ése alejamiento de Nuestra Gracia, ésa separación de la Gracia de Dios sobre la creatura. 

Os he dicho que, vosotros, como hijos Míos, padeceréis también un tiempo de dolor y purificación, como Yo lo padecí por vosotros y, así, entenderéis lo que Yo hice por vosotros, pero que la gran mayoría, no habéis respondido como hijos, como hermanos de Todo un Dios, que se dio para abriros las Puertas del Cielo nuevamente.

¡Cuánta maldad hay en vuestro corazón, Mis pequeños! ¡Cuánta falta de amor hacia todo lo que Yo hice por vosotros! Me di totalmente por cada uno de vosotros y casi no encuentro corazones que se duelan, junto con el Mío, que quieran acercarse y decirMe alguna Palabra de agradecimiento y de Amor por lo que hice por vuestra alma.

Lo digo así, en singular, porque os he dicho que Yo Me di por cada uno de vosotros y espero el agradecimiento de cada uno de vosotros; no encuentro almas agradecidas, no encuentro almas que se acerquen a Mí, en compasión y en amor a aliviar ésos momentos de tanto dolor.

¡Cuánta falta de amor existe en el corazón del hombre! Me veis como algo que sucedió en el tiempo y que ya pasó y que no es necesario actualizarlo, porque no queréis tener compromisos ni mover vuestro corazón hacia el amor, hacia vuestro Dios.

La Purificación que se os avecina y que es inminente, será para que vuestro corazón conozca lo que Yo hice por cada uno de vosotros y conoceréis, también, vuestros errores. Conoceréis la maldad que habéis dejado entrar a vuestro corazón y que, además, habéis transmitido y, si os dais cuenta, al haber hecho esto, os habéis vuelto esclavos de satanás. Transmitís su maldad, y él, que tanto mal os hace, se vuelve parte de vuestra vida. 

En cambio, de Mí, no os acordáis, siendo que de Mí, sólo habéis recibido Bondad, Amor, Salvación. Recuperé el Reino de los Cielos para cada uno de vosotros y ¿cuándo meditáis en esto, Mis pequeños? Ciertamente si no meditáis en todo esto que Yo hice por vosotros, menos Me agradeceréis.

¡Cuánto olvido hacia vuestro Dios, Me debéis tanto!, y os olvidáis de Mí. 

En esta Purificación, tendréis momentos que permitiré, para que reflexionéis sobre vuestra vida: qué habéis hecho y qué dejasteis de hacer. Que reflexionéis sobre Mi Donación por vuestra salvación, por vuestro bien y cómo habéis respondido a todo este regalo Divino para vuestra salvación y vuestro crecimiento espiritual.

Ciertamente sentiréis la soledad que Yo sentí en la Cruz, por parte de Mi Padre, y no Me la merecía, porque no Soy un pecador, pero tomé vuestros pecados, de todos los tiempos, y Mi Padre Me vio como a un pecador y eso, para Mí, fue muy doloroso, denigrante, ¿cómo, Todo un Dios, hecho pecado, cuando Soy Todo Bondad, Amor, Pureza, Santidad?, y lo hice por vosotros. ¡Sufrí tanto y sigo sufriendo!, porque no encuentro almas agradecidas, no encuentro almas amorosas, no encuentro almas que Me den su vida, no encuentro almas que Me permitan acompañarles en su trayecto sobre la Tierra, en su misión, que puede ser santísima, si Me permiten acompañarles, guiarles, aconsejarles.

Desperdiciáis tanto tiempo de vida, porque todo lo queréis hacer con vuestro libre albedrío, con vuestra voluntad, que no tiene nada de sabia. Sois tan defectuosos, pudiendo ser santos y llenos de bendiciones por parte Nuestra, si vivierais para Nosotros, si vivierais bajo Nuestra Divina Voluntad, pero preferís la mediocridad porque no dejáis que Nosotros os guieMos y os aconsejeMos.

Vivís en el Mundo, pero para el Mundo. Ciertamente, fuisteis enviados al Mundo, pero no para vivir en el Mundo ni pertenecer para el Mundo, fuisteis enviados al Mundo para una misión sublime, la de llevar Mi Palabra, la de llevar Mi Ejemplo, la de llevar Mi Amor, la de salvar almas y, de esta forma, no os enlodaríais con el pecado ni con la maldad de satanás, porque aquellos que Me pertenecen no son del Mundo ni quieren estar en el Mundo, ya que respetan Nuestra Voluntad y aceptan Nuestros Mandatos. ¿Cuántos realmente, hay en el Mundo que se dejan mover por Nuestra Voluntad? 

El Mundo sería otra cosa si os dejarais mover por Nuestra Sabiduría Divina: viviríais en paz, en armonía, viviríais envueltos en Nuestro Amor. Tendríais Bendiciones que ni siquiera podéis imaginar, seríais almas consentidas, viviendo a unos niveles altísimos que aún no conocéis porque no os lo merecéis por vivir como estáis viviendo, porque estáis viviendo en el lodo, estáis viviendo en el mal.

Os levanté con Mi Donación, abrí nuevamente las Puertas del Cielo para todos vosotros, y vuestra mente, pequeña y mediocre, porque no habéis querido uniros a Nuestra Voluntad, no alcanza a reconocer la grandiosidad de la Redención que cada uno de vosotros recibisteis por Mi Sacrificio, por Mi Donación, por Mi Amor, pero, sobre todo, porque acepté la Voluntad de Mi Padre, que es vuestro Padre.

Preparaos, pues, Mis pequeños, porque pronto vendrán las pruebas, pruebas muy fuertes para los que han querido hacer su voluntad y pruebas purificadoras y santificadoras para aquellos que han aceptado Nuestra Voluntad en su vida. Estáis llamados a ser llamados hijos de Dios los que habéis aceptado lo que Nosotros os heMos pedido. 

Benditos seáis, Mis pequeños, los que estáis Conmigo, los que estáis en Nuestra Santísima Trinidad.
Gracias, Mis pequeños.


Tercer MisterioHabla Dios Espíritu Santo.
Sobre: DejadMe, pues, Mis pequeños, que os cambie mientras estéis en el Mundo, os puedo transformar en el menor tiempo que vosotros podríais imaginar, soy vuestro Dios, dadMe vuestro “fiat”, dadMe vuestra voluntad.

(Lenguas…) Hijitos Míos, Soy vuestro Dios Espíritu Santo. La gente se olvida de Mí, la gente se olvida de Mi Amor, la gente se olvida de Mis Dones, la gente se olvida de Mis Potencias Espirituales. Yo Soy Quien os guía, estoy en vuestro corazón, conozco vuestro interior, conozco vuestros pensamientos, os conozco perfectamente, pero no Me dejáis actuar en vuestro ser.

Yo puedo hacer de vosotros grandes hombres, grandes almas, pero os mantenéis muy distraídos en las cosas del Mundo. 

Cuánto desperdicio por parte vuestra, ¡Yo, viviendo en vuestro interior y no tomáis de Mis Riquezas! Soy el Todo, junto con el Padre y el Hijo. De Mí, podéis obtener grandes regalos espirituales que os harán conocer más profundamente Nuestro Amor. 

PedidMe Sabiduría, Mis pequeños, pedidMe Mis Dones, que, Yo, gustosamente os los daré. 

Vosotros fuisteis creados por el Padre para gozar inmensamente de la Creación, todo lo que os rodea fue creado para vuestro bien, no para que sufrierais como ahora estáis sufriendo por causa del pecado. Fuisteis creados para ser gozo de Amor de Nuestra Santísima Trinidad.

¡Cuánto desperdicio de parte vuestra! Tener a vuestro Dios en vuestro interior y no invitarLo a Ser parte de vuestra vida. Yo llego a vosotros en el momento de la concepción y, desde ése preciso momento, Soy parte de vuestro ser. Desde pequeños os voy instruyendo, os voy guiando, os voy ayudando a que os deis cuenta a Quien pertenecéis y a lo que vinisteis a la Tierra.

Cuando sois pequeñitos es cuando estáis más abiertos a la escucha de lo espiritual y os dejáis mover más fácilmente, pero vais creciendo y vais cerrando vuestro corazón, os olvidáis de Mí, de Mis Consejos, de la vida íntima espiritual que debéis tener todos vosotros.

Es un regalo muy grande, de parte de vuestro Padre Dios en vuestra creación, el que Yo, vuestro Dios Espíritu Santo, habite en vosotros y os comparta, desde pequeños, la vida Divina del Cielo.

Si vosotros os mantuvierais con vuestro corazón abierto a todo lo que Yo os pudiera enseñar, seríais inmensamente felices y, además, con unas potencias Divinas, bellísimas, grandísimas. Mis Dones Divinos son para todos vosotros, ésa es la tarea que Me encomendó el Padre para cada uno de vosotros, el ir formando hijos de Dios, pero son tan pocas las almas que dejan abiertas su mente y su corazón a Mis Enseñanzas, a Mi Guía Divina, al Amor Divino.

Cuando llegue el momento en que os deis cuenta lo que pudisteis haber tenido de parte Mía y que no aprovechasteis, lloraréis de coraje por vuestra tontería, por vuestra negligencia, por vuestra mediocridad, porque no quisisteis ser perfectos, porque el Padre Me pidió a que os ayudara a que fuerais perfectos.

¡Cuánto habéis desperdiciado! Pudiendo haber tenido ya, inmensidad de Bendiciones y de Dones, que estoy dispuesto a daros, hasta colmaros. ¡Cuánto error de vuestra parte al no invocarMe, para que os ayudara a crecer a niveles altísimos de espiritualidad! 

Vosotros mismos, por vuestra falta de Sabiduría, que, ciertamente, pudisteis haber tenido, si hubierais abierto vuestro corazón desde pequeños, tendríais inmensidades en vuestro ser, fuisteis creados para ser perfectos, como lo eran vuestros Padres, Adán y Eva, antes del Pecado Original.

Todavía es tiempo, Mis pequeños, en que podréis crecer. Yo puedo hacer grandes obras en un mínimo de tiempo, simplemente, negaos a vosotros mismos y dejad que la Trinidad os transforme; que Yo, vuestro Dios, Espíritu Santo, haga la obra que el Padre Me ha encomendado que haga en cada alma y, esto es, que os lleve hacia la perfección. No quiero que regreséis al Reino de los Cielos siendo almas mediocres, almas que desperdiciaron su tiempo aquí en la Tierra, pudiendo haber hecho grandes cosas por vuestros hermanos y dando un gran gusto y gran amor a Quien os creó, vuestro Padre Dios. Debéis regresar con las manos llenas, alegres de haber servido a vuestro Dios, con la frente en alto, para ver directamente a los Ojos de Quien os creó y que os concedió la Gracia de la vida, para servir al Creador del Universo; y no llegar con los ojos viendo al suelo, avergonzados de no haber hecho gran cosa o prácticamente nada por vuestros hermanos, pero, sobre todo, por Quien os creó.

DejadMe, pues, Mis pequeños, que os cambie mientras estéis en el Mundo, os puedo transformar en el menor tiempo que vosotros podríais imaginar, soy vuestro Dios, dadMe vuestro “fiat”, dadMe vuestra voluntad. Ciertamente, al ser transformados, dejaréis una vida pasada, gustos que no os llevaban a nada y empezaréis a vivir una vida que os llenará de un Fuego Abrasador que gozaréis inmensamente. Yo Soy ése Fuego que abrasará la Tierra entera, destruiré todo aquello que os ha causado tanto mal, renovaré a las almas que se dejen transformar y, las que queden, gozarán el Nuevo Reino de Dios aquí en la Tierra. 

Soy vuestro Dios Espíritu Santo, dadMe vuestro “fiat”, dadMe la libertad total de hacer de vosotros verdaderos hijos de Dios.
Gracias, Mis pequeños.


Cuarto Misterio. Habla Nuestro Señor Jesucristo.
Sobre: Os repito, Mis pequeños y nunca lo olvidéis, no dejéis entrar en vuestro ser, ni una pizca de soberbia, porque en ése momento, empezaría vuestra destrucción.

Hijitos Míos, Yo formé un grupo de apóstoles, un grupo de discípulos, pero a lo que voy, Mis pequeños, es que concienticéis que primero fue un grupo, luego fueron grupos y lo hice así, porque cada uno de vosotros tenéis diferentes dones y crecéis en forma diferente en lo espiritual, y cada uno de vosotros tenéis una diferente misión, pero guiados por un mismo Espíritu.

Al estar en grupo, Mis pequeños, os reforzáis unos a otros con los diferentes dones que tenéis. Cada uno de vosotros os complementáis, os ayudáis; cuando algún problema se os presenta compartís con vuestros hermanos, y entre todos resolvéis la situación que os afecta y, esto os lo digo, Mis pequeños, porque tendréis ataques muy fuertes de satanás, porque él también tiene sus grupos. 

Ciertamente, estando Yo, vuestro Dios, con vosotros, seréis invencibles si os mantenéis en Mí, bajo Mi Sabiduría, bajo Mi Guía, bajo Mis Potencias. Sois instrumentos Míos, Yo Soy vuestro Dios y, estando Conmigo, vencereMos a satanás, pero os deberéis de mantener siempre en grupo, humildes, sencillos, compartidos, no tratando de buscar, en ningún momento, liderazgo. Yo Soy vuestro Dios y Yo os guío, en ningún momento recibiréis guía humana, porque en ése momento, caeréis.

Satanás es más poderoso que la mejor guía humana que podáis tener. Si no estáis Conmigo o con Mi Hija, la Siempre Virgen María y con la ayuda del Cielo, seréis vencidos fácilmente.

Satanás ha preparado su ejército para tratar de destruiros, para tratar de destruir Mi Obra, para burlarse de vosotros, para burlarse de Mí, vuestro Dios y Creador.

Os he dicho que la lucha es contra espíritus y satanás tiene poseídos a hermanos vuestros para atacaros.

Yo también he armado Mi ejército, pero en total libertad, respetando vuestro libre albedrío y permitiendo vosotros, haciendo a un lado vuestra voluntad, que Mi Voluntad os posea. Las almas en el Cielo, gozan de Mi Posesión Divina, os he dicho que el máximo gozo que puede tener un alma en el Cielo, es vivir en total fusión Conmigo. 

Imaginad, Mis pequeños, lo que ya podríais tener desde ahora en la Tierra, si quisierais tener ésa fusión total Conmigo, pero, para esto, debéis meditar, primeramente, que no sois nada, que sois una nulidad si no estoy Yo con vosotros. Os debéis, luego, negar a vosotros mismos y ahí solamente lo podréis hacer con la ayuda de Mi Santo Espíritu, en donde deberéis desaparecer para el Mundo y esto es: apartar honores, apartar todo aquello que os haga sentir superiores a vuestros hermanos. No os veáis con ojos humanos, os deberéis ver siempre ante Mis Ojos, porque Soy vuestro Creador, Soy vuestro Dios y, estando ante Mí, siempre sabréis que no sois nada.

Mis pequeños, en esto os insisto, porque no quiero en vosotros, ni una pizca de soberbia, porque en el momento en que vosotros dejarais entrar soberbia en vuestro ser, es como el piquete de una alimaña y que su veneno se va difundiendo por todo vuestro ser y os acaba matando. La soberbia destruye, aniquila, echa a perder grandes obras humanas, como sois vosotros, cada uno de vosotros. Sois una obra inmensa a Mis Ojos, Yo Me delito con Mi Obra, que sois cada uno de vosotros pero, siempre y cuando os mantengáis en humildad, nunca permitiendo que las palabras de aliento, de agradecimiento que se os den, no os las apropiéis, son Mías, porque Soy vuestro Creador.

Vosotros os debéis llenar de alegría inmensa, en el saber que estáis viviendo y trabajando para Mí, vuestro Dios. Que os permití tener vida para servirMe y eso os debe llenar de una alegría inmensa y más que todo, que vosotros llevéis a cabo todos vuestros actos en la forma más perfecta posible porque luego Me los entregaréis a Mí y os deberéis deleitar en darMe todos, todos los actos que llevasteis a cabo y que éstos sean perfectos. Vosotros quedaréis vacíos, no os quedaréis con nada de lo que vuestros hermanos piensen de vosotros, que os baste saber que Yo os amo Infinitamente, porque eso es lo más valioso que un alma puede tener. Mi Amor es el que os da la vida y eso vale muchísimo más que cualquier regalo que un ser humano os pueda dar en alabanzas, en apreciar vuestro trabajo. En caso de que Yo permitiera que vosotros llevarais a cabo un milagro y que os llenaran de alabanzas por ello, en vosotros no debe quedar ningún tipo de agradecimiento ni de alegría por ello, es Mío, el milagro lo realicé Yo y vosotros fuisteis los ejecutores, vuestro gozo debe estar en el entregarme todo lo que vuestros hermanos piensan de vosotros y eso Me hará feliz y Mi felicidad os hará felices a vosotros. Vivís por Mí y para Mí, no vivís para vuestros hermanos, vivís para servirles, pero para hacer Mi Obra en ellos.

Os repito, Mis pequeños y nunca lo olvidéis, no dejéis entrar en vuestro ser, ni una pizca de soberbia, porque en ése momento, empezaría vuestra destrucción.
Gracias, Mis pequeños.


Quinto MisterioHabla Nuestro Señor Jesucristo.
Sobre: Son tiempos de confusión, son tiempos de error, son tiempos de traición, son tiempos de un Judas que traiciona lo que tanto Me costó, lo que Me duele, lo que Me hizo Morir por vosotros.

Yo fundé la Iglesia, Mis apóstoles, Mis discípulos, fueron fundadores también de Mi Iglesia, porque ellos siguieron Mi Ejemplo, Mis Palabras y mantuvieron Mi Amor.

Ciertamente, escogí hombres con defectos y cualidades y uno de ellos Me traicionó desde el principio, Judas. Pero con la ayuda de Mi Santo Espíritu, fueron transformados, éstos, Mis primeros apóstoles y dieron un gran fruto.

El tiempo pasó, la Evangelización llegó a todos los rincones de la Tierra, pero nuevamente, el hombre falló, muchos Judas han surgido a lo largo de la historia, pero también han surgido grandes apóstoles en diferentes tiempos y, con decir apóstoles, son los ministros de Mi Iglesia, con diferentes dignidades y autoridades y os han dejado un gran ejemplo, que os han ayudado a crecer en vida espiritual y en amor.

Ciertamente, los que han sido escogidos por Mi Padre y que son almas sacerdotales y religiosas, llevan una gran misión. Vosotros, en general, laicos y consagrados, aún no os dais cuenta de la gran dignidad que tienen estas almas sacerdotales y religiosas.

Son almas con un potencial espiritual tremendo, pero que tampoco han sabido aprovechar plenamente, salvo algunos casos que vosotros conocéis, como grandes santos de la Iglesia. 

A lo largo de la historia, como os dije, han surgido ésos Judas, que se vendieron a satanás y que han querido destruir Mi Obra, pero Yo os dije que ciertamente satanás os atacaría, pero que Mi Iglesia permanecería hasta el fin del Mundo.

En los últimos tiempos, Mi Iglesia ha tenido grandes caídas, a tal grado que Mi Hija, La Siempre Virgen María, Mi Madre, Mi Esposa en Nuestra Santísima Trinidad, en Sus Apariciones, se ha quejado gravemente contra las almas sacerdotales. En las grandes Apariciones que ha tenido en los diferentes países, les ha llamado la atención fuertemente, porque no están cumpliendo correctamente con su misión.

No entendéis, almas sacerdotales y religiosas, que vosotras debéis unir el rebaño, llevar Mi Palabra, convencer en el Amor a vuestros hermanos con Mis Enseñanzas, unirlos, para que todos seáis nuevamente, un solo pueblo, un solo rebaño, guiados por Mí, Jesucristo, vuestro Salvador.

La maldad ha entrado a la Iglesia y no la han querido erradicar, Mi Madre se sigue quejando de cómo es mal llevada, cómo es traicionada y cómo Me ha traicionado a Mí, Su Hijo, vuestro Dios y Salvador. Ha sido ultrajada, ya no es maestra, ya no es guía, ciertamente, todavía hay santidad dentro de ella, pero a los ministros y sacerdotes santos, que aman lo que Yo construí para el bien de la humanidad, son rechazados, son hechos a un lado, porque, según los superiores de ellos, piensan a la antigua, ya no piensan en forma moderna, porque, ahora, el modernismo, Me ha hecho a un lado, ha hecho a un lado Mis Mandamientos, Mis Leyes, Mis Enseñanzas. El hombre ha hecho su propia iglesia, pero una iglesia fundada en la maldad de satanás, con equivocaciones, sin prohibiciones, permitiendo aquello que os separa de Mí, que es el pecado.

Ya no Soy Yo el que Vive en el corazón de muchos de Mis ministros de la Iglesia, son hombres de mundo, no son hombres de Dios, Ya no Soy Yo Encarnado en ellos. En muchos de ellos, es el mismo satanás encarnado en ellos y de ahí surgen los escándalos que van dividiendo a la Iglesia, a Mi Iglesia.

Son tiempos de confusión, son tiempos de error, son tiempos de traición, son tiempos de un Judas que traiciona lo que tanto Me costó, lo que Me duele, lo que Me hizo Morir por vosotros.

Dejad que Mi Santo Espíritu os una y os dé la Verdad, que os guíe en la Verdad que Yo os dejé, manteneos en las Escrituras, manteneos en el Libro Sagrado, en las Enseñanzas Divinas y no os salgáis de ellas. Son tiempos de confusión, son tiempos de mentira, son tiempos de maldad, los Míos, los escogidos, se dejarán guiar por Mi Santo Espíritu, no, así, los que se dejen engañar por satanás, porque les conviene lo que se les permitirá. 

Os he dicho que el camino para el Cielo, es un camino difícil, pedregoso, doloroso, en cambio, aquél que os dé un camino fácil, y os prometa que se os dará la Gloria sin ningún tipo de sufrimiento, no viene de Mí.

Tomad, pues, vuestra cruz, Mis pequeños, los que Me pertenecéis, luchad contra todos los ataques que tendréis, Yo estaré con vosotros, triunfaréis, porque primero Yo triunfé tomando Mi Cruz y vencí al mal y Resucité, vosotros, los que Me sigáis, resucitaréis Conmigo, os lo prometo.
Gracias, Mis pequeños.

www.diospadresemanifiesta.com

Jun 16_16 Los errores en los que habéis vivido toda vuestra vida, han causado asco en el Cielo.

Rosario vespertino


Temas: 

  • Manteneos en paz y, así, vosotros podréis manejar muy bien vuestro discernimiento y la Sabiduría que Mi Santo Espíritu acrecentará en vosotros, para que podáis guiar a muchos de vuestros hermanos.
  • Mucha humildad deberéis vivir, estad siempre conscientes en que, sin Mí, sois nada, obraréis todo esto que os he dicho, porque, Yo, estaré trabajando en vosotros, pero si dejáis entrar soberbia en vuestro ser, perderéis todo y Me perderéis a Mí, vuestro Dios.
  • De esto y de muchas otras cosas os daréis cuenta cuando venga la iluminación de vuestras conciencias, de cómo habéis desperdiciado el tiempo del Cielo en la Tierra. Ciertamente, lloraréis vuestros errores y se os dará una oportunidad más, para que os mejoréis, pero ¿realmente aprovecharéis esta otra oportunidad para mejoraros?
  • ¡Tenéis tanto qué hacer por Mí, en la Tierra, mientras tengáis vida!, ayudadMe, Mis pequeños y alcanzadMe la salvación de tantos hermanos vuestros como podáis. Ciertamente, os haré conocer el valor de vuestra existencia y el gusto que Me estáis dando al trabajar para Mí, vuestro Dios.
  • Cuando se vive en estado de Gracia, vuestras potencias espirituales están abiertas, no hay nada que impida que Mi Santo Espíritu trabaje en vosotros, que  os explique muchas cosas que no conocéis, que os enseñe cosas que verdaderamente conocían vuestros Primeros Padres, pero que se perdieron por el Pecado Original.




Mensaje de Dios Padre y Nuestro Señor Jesucristo a J. V. 


Primer Misterio. Habla Dios Padre.
Sobre: Manteneos en paz y, así, vosotros podréis manejar muy bien vuestro discernimiento y la Sabiduría que Mi Santo Espíritu acrecentará en vosotros, para que podáis guiar a muchos de vuestros  hermanos.

A vosotros, Mis pequeños, los que he escogido para ser Luz en estos tiempos, cuando todo empiece a darse, cuando los acontecimientos os anuncien que os estoy llevando ya a la Purificación, os he dicho que vuestro signo determinante ante vuestros hermanos va a ser la Paz que emanaréis hacia ellos.

En estos momentos, vosotros elucubráis mucho de cómo sucederá todo lo que os he anunciado y, os vuelvo a repetir, que no os imagináis, siquiera, de cómo va a ser esta Purificación de toda la humanidad.

Vosotros, los que estáis Conmigo, los que habéis sido evangelizados, ya por años, Mi Santo Espíritu os irá moviendo, os irá indicando qué hacer.

Manteneos en paz y, así, vosotros podréis manejar muy bien vuestro discernimiento y la Sabiduría que Mi Santo Espíritu acrecentará en vosotros, para que podáis guiar a muchos de vuestros  hermanos.

El estar en paz, va a hacer que vosotros podáis ayudar a vuestros hermanos a que se tranquilicen. El estar en paz, va a ser un signo inequívoco de que Yo estoy con vosotros. El estar en paz va a ayudar a muchos de vuestros hermanos a que entiendan que Yo Existo, que Yo Vivo en vuestro corazón, que Yo voy a estar guiando los acontecimientos y que ellos deben también mantener una posición tranquila, de paz, además, seguros de que Yo, vuestro Dios, estoy manejando estos acontecimientos para vuestro bien y, por eso, os debe llevar a vosotros a la seguridad de que todo va a salir bien, a pesar de que, quizá, no os podáis explicar los acontecimientos que estaréis viviendo, pero, si confiados estáis en Mí, no os deberéis preocupar en lo absoluto, ni perder la paz. Que, ciertamente, muchos de vuestros hermanos estarán observando, y preguntándose por qué vosotros estáis con ésa paz, mientras que ellos, no saben qué hacer.

Vosotros, los que habéis sido escogidos de tiempo atrás y que habéis seguido toda la Evangelización que os he dado, daréis un gran ejemplo ante vuestros hermanos en muchos lugares del Mundo, por no decir todos. Uniréis a las muchedumbres; ayudaréis a bien morir a muchos, que heridos estarán por las catástrofes naturales; ayudaréis a otros a que perseveren y sigan adelante.

Dejaos mover, pues, por Mi Santo Espíritu, para que vosotros os deis cuenta que estáis siendo guiados por caminos seguros y hacia un Bien necesario para vuestra alma pero, a la vez, con la Sabiduría que estaréis recibiendo de Él, ayudaréis a vuestros hermanos a que abran su corazón a Mi Amor, a que se dejen, también, guiar y que puedan ver un camino nuevo, seguro y santo, como nunca antes habían imaginado poder ver.

Vosotros gozaréis lo que haréis en ésos momentos, porque es cuando viviréis palpablemente Mis Enseñanzas que os di por años. Gozaréis en servirMe en ésos tiempos, muchas cosas bellas y santas podréis hacer y, aún, milagros, entre vuestros hermanos.

No claudiquéis, Mis pequeños, porque si se os cierra una puerta, cinco o diez más se os abrirán, Yo estoy con vosotros y os estaré cuidando para que no erréis ni caigáis. A pesar de que satanás os quiera hacer caer, no lo logrará.

Os Bendigo, Mis pequeños y en ningún momento Me he de apartar de vosotros y así lo espero también, de vosotros mismos. Quiero que os mantengáis en todo momento junto a Mí, para que caminemos juntos, ya desde ahora y por toda la eternidad.
Gracias, Mis pequeños. 


Segundo Misterio. Habla Nuestro Señor Jesucristo.
Sobre: Mucha humildad deberéis vivir, estad siempre conscientes en que, sin Mí, sois nada, obraréis todo esto que os he dicho, porque, Yo, estaré trabajando en vosotros, pero si dejáis entrar soberbia en vuestro ser, perderéis todo y Me perderéis a Mí, vuestro Dios.

Vosotros habéis sido preparados para ayudar a vuestros hermanos, Mi Santo Espíritu os dará las palabras, os dará el trato bello, con el que vosotros llegaréis al corazón de vuestros hermanos para que cambien. Ayudad a todos, no os preguntéis si lo que dijisteis les habrá ayudado o no, lo que salga de vuestros labios irá impregnado de Mi Santo Espíritu y dejará una Luz interior, que si hay un ambiente benigno, se aumentará en ésa alma y le ayudará a que regrese a Mí.

Vosotros, sois instrumentos y seréis tomados por Mi Santo Espíritu, que ya habita entre vosotros. No preparéis nada, como dice en la Sagradas Escrituras, vosotros iréis a donde Yo os lleve, y las palabras que saldrán de vuestros labios, serán las Nuestras, las de Nuestra Santísima Trinidad.

Vuestra tarea es llevar Nuestra Palabra y Nuestra Presencia, a todos los lugares a donde queremos que vosotros vayáis. Ya os había dicho, Yo, vuestro Hermano Jesucristo, vuestro Dios, vuestro Salvador, que no iba a bajar a Evangelizar en estos momentos, porque vosotros sois Mis evangelizadores, vosotros sois Mis apóstoles de estos tiempos y Yo estaré en vosotros.

En un principio, os asombraréis de las palabras que saldrán de vuestros labios, ciertamente, os daréis cuenta que no son vuestras palabras, que no son vuestros pensamientos, que no es vuestra forma de ser y así, os iréis dando cuenta de que Soy Yo, vuestro Dios, el que estaré moviendo corazones a través de vosotros. ¿No se os hace esto una tarea bellísima?, pero, sobre todo, el que Yo os haya tomado como Mis instrumentos. Para vosotros, deberá ser como una Gracia muy grande y, de hecho es, porque el que hayáis sido escogidos por vuestro Dios, el Creador del Universo, vuestro Salvador, vuestro Guía, en Mi Santo Espíritu. Esto os debe llevar a una alegría santa, inimaginable, saber que sois pocos los escogidos para esta misión y que fuisteis preparados por años, para servir a vuestro Dios y Creador. 

Esto os debe de llenar de gran alegría, os repito, pero, también, deberéis actuar con gran humildad, porque si entra en vosotros la soberbia, porque, ciertamente, haréis grandes cosas a los ojos de vuestros hermanos, si vosotros os apropiáis en algún momento de las palabras que salgan de vuestros labios o de los milagros que podáis hacer o de todo lo extraordinario que pueda salir de vosotros, que sois instrumentos Celestiales, si os apropiáis de ello y caéis en soberbia, podréis echar a perder Mi Obra en vosotros y desperdiciaréis años de guía espiritual, cayendo a la soberbia a donde os puede llevar satanás. 

Mucha humildad deberéis vivir, estad siempre conscientes en que, sin Mí, sois nada, obraréis todo esto que os he dicho, porque, Yo, estaré trabajando en vosotros, pero si dejáis entrar soberbia en vuestro ser, perderéis todo y Me perderéis a Mí, vuestro Dios.

Tened cuidado, Mis pequeños, manteneos siempre sencillos, humildes y donados totalmente a la causa por la que fuisteis enviados a la Tierra, que es la salvación de las almas y llevar Mi Amor a los hombres. 
Gracias, Mis pequeños.


Tercer MisterioHabla Dios Padre.
Sobre: De esto y de muchas otras cosas os daréis cuenta cuando venga la iluminación de vuestras conciencias, de cómo habéis desperdiciado el tiempo del Cielo en la Tierra. Ciertamente, lloraréis vuestros errores y se os dará una oportunidad más, para que os mejoréis, pero ¿realmente aprovecharéis esta otra oportunidad para mejoraros?

Hijitos Míos, empezad a gozar, ya desde ahora, los Cielos Nuevos y las Tierras Nuevas que os daré. A vuestros ojos humanos, a vuestro entendimiento pequeño, se os va a hacer extraordinario y, de hecho, lo es, el vivir como se vive en el Cielo, que es lo opuesto de lo que estáis viviendo ahora.

Satanás os fue llevando poco a poco, a ir destruyendo Mi Obra en vosotros. A vosotros se os ha hecho natural, vivir en la maldad de satanás todos los días y, de repente, cuando Yo os dé, a los que os habéis ganado ésas Tierras Nuevas que viviréis, no entenderéis, si no sois preparados antes por Mi Santo Espíritu, el cómo es posible que no os dierais cuenta en los errores que vivíais todos los días.

Os digo, nuevamente, satanás os fue llevando a una degradación espiritual y aún humana, que habéis vivido como algo normal en vuestra existencia, cuando, realmente, estáis viviendo cosas abominables a Mis Ojos. 

Cuando vosotros tengáis la experiencia de la iluminación de vuestras conciencias, empezará el cambio fuerte de vuestra vida. Os enseñaré, ahí, lo que debisteis haber vivido, cómo os debisteis de haber comportado, primeramente, Conmigo, en Mi Santísima Trinidad; cómo debisteis haber respetado a Mi Hija, la Siempre Virgen María, al Señor San José, a los Santos Ángeles; cómo convivir con el Cielo, con los Santos. Os daréis cuenta cómo desperdiciasteis vuestro tiempo, tiempo de vida que Me pertenece, porque Yo os di el don de la vida y vosotros desperdiciasteis tantas oportunidades para vuestra perfección y para el bien de vuestros hermanos, ayudándoles en su crecimiento espiritual. Lloraréis todo lo que hicisteis. Si, realmente, en vuestro corazón hay arrepentimiento y el reconocimiento de vuestros errores, ésta iluminación de vuestras conciencias, os darán la pauta de cómo os deberéis ir mejorando, porque el error o los errores en los que habéis vivido toda vuestra vida, han causado asco en el Cielo y, perdón que lo diga así, Mis pequeños, pero vuestra forma de actuar, día a día, viviendo en vicios, en maldad, en la podredumbre, no puede causar otra cosa que eso, Mis pequeños, y os daréis cuenta de ello cuando Yo os deje ver cómo se vive en el Reino de los Cielos.

No vivís en la Bondad, en las Virtudes, en el Amor, en el cuidado de unos para con los otros, en el recrearse en todo momento en las Palabras que Yo os dejé en las Sagradas Escrituras, en los Ejemplos, en la Vida que os dejó Mi Hijo en Su paso por la Tierra.

Ahora no gozáis los momentos de la Vida de Mi Hijo, que Se dio por vosotros, por vuestra salvación. Hay tantas Delicias, tanta Sabiduría, tanto Amor en lo que os heMos dejado en las Sagradas Escrituras y vosotros, ni siquiera abrís el Libro, para tomar de él, la Sabiduría Celestial que se os ha dejado. No os tomáis el tiempo, cuando menos, de leer algún pasaje todos los días y meditarlo. Mi Santo Espíritu, os ilumina, cada vez que lo abrís con el deseo de perfeccionaros. En el mejor de los casos, le tenéis un lugar reservado al Libro, a las Sagradas Escrituras, a la Santa Biblia, en vuestro hogar, pero ahí está, en un lugar muy importante en vuestro hogar, pero, solo, sin abrirlo, sin tomar de él la riqueza espiritual que, desde el Cielo, os heMos enviado.

Tenéis tanto qué aprender, creéis que sabéis mucho, pero os he dicho que estáis en párvulos y que sois malos estudiantes. Os conformáis con tan poco, no queréis ser de los mejores estudiantes; no queréis ser de Mis mejores hijos, que hayáis leído las Sagradas Escrituras y que lo toméis como un Libro de consulta continua, para sacar de él, su gran Sabiduría, Sabiduría Divina que he puesto en la Sagrada Biblia.

De esto y de muchas otras cosas os daréis cuenta cuando venga la iluminación de vuestras conciencias, de cómo habéis desperdiciado el tiempo del Cielo en la Tierra. Ciertamente, lloraréis vuestros errores y se os dará una oportunidad más, para que os mejoréis, pero ¿realmente aprovecharéis esta otra oportunidad para mejoraros?
Gracias, Mis pequeños.


Cuarto Misterio. Habla Dios Padre.
Sobre: ¡Tenéis tanto qué hacer por Mí, en la Tierra, mientras tengáis vida!, ayudadMe, Mis pequeños y alcanzadMe la salvación de tantos hermanos vuestros como podáis. Ciertamente, os haré conocer el valor de vuestra existencia y el gusto que Me estáis dando al trabajar para Mí, vuestro Dios.

Imaginad, Mis pequeños, por un momento, que vosotros entráis a un cuarto y hay muchos estantes con infinidad de regalos, de cosas bellas y que podéis tomar lo que queráis; luego, abriendo otra puerta, hay una escalera vertical con muchos escalones, ciertamente, se ve pesado el subir pero ésta os llevará a un gran salón, con muchos más regalos y sorpresas pero, por flojera, no subís esa escalera con tantos escalones porque no os queréis cansar, no queréis hacer un esfuerzo mayor y os conformáis con lo que veis en el primer cuarto, así estáis la gran mayoría de vosotros.

Ciertamente, cada uno de vosotros baja a la Tierra con dones que Yo os doy, para que llevéis a cabo vuestra misión en la Tierra. Os he pedido tanto que os perfeccionéis, porque Soy vuestro Padre y a Mí Me gusta la perfección, pero, ciertamente, tenéis que trabajar mucho y, especialmente, contra vosotros mismos. Como os he explicado antes, os debéis negar, debéis ir quitando toda maldad, vicios, todo aquello negativo que no os deja crecer, pero ¡no! os da flojera eliminar lo que traéis y que ya os habéis acostumbrado a vuestra parte negativa y vivís en la mediocridad.

Ciertamente, a ratos hacéis cosas buenas, pero a ratos también hacéis cosas malas, no sois constantes en lo bueno y desperdiciáis mucho las cualidades que Yo os he dado, porque no os queréis perfeccionar.

Ésas escaleras verticales, altas, de muchos escalones, el solo pensar en ellas, os da flojera. 

Ciertamente, será pesada la subida, pero pocos son los que toman el riesgo, y el premio, ciertamente, estará allá arriba esperándoos y, así, es a lo largo de vuestra existencia. Los mejores regalos, la mejor vida espiritual, la obtienen aquellas almas valientes, intrépidas, sabias, inteligentes que saben sacarles provecho a los dones que Yo os he dado.

Cada uno de vosotros tenéis un potencial muy grande, todos vosotros podéis llegar a la perfección y decir perfección es poder alcanzar capacidades espirituales y aún físicas extraordinarias, pero os da flojera trabajar en ello.

¡Cuánto desperdicio de dones!, y luego, Me echáis la culpa a Mí, vuestro Dios de que no avanzáis, que no podéis hacer muchas cosas, porque os faltan capacidades o porque los otros sí tienen y vosotros no, cuando os estoy diciendo que todos vosotros podéis llegar a grados altísimos en vuestras capacidades espirituales y aún físicas.

También os he dicho que vosotros deis el primer paso y Yo os ayudaré con el resto de vuestro esfuerzo, pero, cuánto, ¡cuánto trabajo os causa dar el primer paso! Ponéis tantos pretextos para dar un primer paso y no os dais cuenta que, aún, ése primer paso recibirá ayuda de Mi parte y, cuando empecéis a dar los demás pasos, todo se irá aliviando, no será ya pesada la carga, iréis mejorando, sin tanto sufrimiento, porque Yo estaré con vosotros.

Siempre, el triunfo, en cualquier cosa que vosotros queráis lograr, exigirá un esfuerzo, un primer esfuerzo, el resto es más fácil, pero son pocas, muy pocas las almas que se vencen a sí mismas y que llevan a cabo ése primer esfuerzo.

El éxito es para los triunfadores, para los que saben trabajar, para los que saben vencerse a sí mismos, para los que realmente quieren ser Mis hijos. 

Ved la Vida de Mi Hijo sobre la Tierra, Sus Sufrimientos, Dolores, persecuciones, aunque sí tenía momentos también bellos, todo lo hizo por vosotros, se venció a Sí Mismo, o sea, aceptó Mis Órdenes de Padre, para vuestra ayuda, para que os pudiera abrir nuevamente las Puertas del Cielo. Aceptó, en obediencia, lo que Yo Le pedí y llegó el Triunfo y vosotros estáis gozando Su Triunfo, pero Le dolió mucho y ¿cuándo, realmente, Le habéis dado las gracias a Mi Hijo por lo que hizo por vosotros? ¿Cuántas veces Lo habéis acompañado en Sus momentos de Dolor, en Sus momentos de cansancio?, o ¿cuántas veces Lo habéis acompañado, en Sus momentos de Oración en donde platicaba Conmigo?, que Me pedía Fortaleza para seguir adelante, porque la lucha era tremenda, ya que satanás se había apropiado de una gran cantidad de almas.

A vosotros os ha tocado ser Luz, en estos momentos de obscuridad. Sois Luz y Guía para tantas almas que van caminando por el Mundo que se tropiezan y caen muy seguido, porque no hay una Luz, una guía, que las lleve por caminos seguros y que las traiga a Mi Presencia. Sois ésa Luz, Mis pequeños, traedMe almas, llevadlas por un camino seguro. Guiadlas para que Me conozcan, convenced a aquellas almas que están caminando en el error, que le han abierto su mente y su corazón a satanás.

¡Tenéis tanto qué hacer por Mí, en la Tierra, mientras tengáis vida!, ayudadMe, Mis pequeños y alcanzadMe la salvación de tantos hermanos vuestros como podáis. Ciertamente, os haré conocer el valor de vuestra existencia y el gusto que Me estáis dando al trabajar para Mí, vuestro Dios.

Ahora no lo entendéis ni lo valoráis como realmente es, pero, cuando os deis cuenta de la tarea que Yo os permití tener, lo gozaréis inmensamente. 

En cierta forma, ahora no permito que conozcáis plenamente el valor de vuestra misión, para que no caigáis en soberbia, pero, vuestra tarea, en estos momentos de cambio, de lucha, es grandísima. Es bellísima vuestra misión, un alma, vale muchísimo, seguid adelante, dejaos llevar por Mí, Soy vuestro Dios y estáis llamados a hacer grandes cosas para el Reino de los Cielos, no os desaniméis, Mis pequeños, grandes cosas os esperan. 
Gracias, Mis pequeños.


Quinto MisterioHabla  Dios Padre.
Sobre: Cuando se vive en estado de Gracia, vuestras potencias espirituales están abiertas, no hay nada que impida que Mi Santo Espíritu trabaje en vosotros, que  os explique muchas cosas que no conocéis, que os enseñe cosas que verdaderamente conocían vuestros Primeros Padres, pero que se perdieron por el Pecado Original.

Hijitos Míos, muchos de vuestros hermanos se preguntan, cómo es posible que algunos puedan entender las Palabras que os digo y otros no. Leen exactamente lo mismo, pero su entendimiento es diferente y, os he dicho que, cuando se vive en estado de Gracia, vuestras potencias espirituales están abiertas, no hay nada que impida que Mi Santo Espíritu trabaje en vosotros, que os explique muchas cosas que no conocéis, que os enseñe cosas que verdaderamente conocían vuestros Primeros Padres, pero que se perdieron por el Pecado Original.

Las almas, cuando no están en estado de Gracia, es como si tuvieran un velo delante de sus ojos, un velo que no permite que su mente entienda todo, un velo que impide que escuchéis muchas cosas que hay a vuestro alrededor, que os pueden hacer crecer en todos sentidos, pero al tener ése impedimento con que el pecado os limita, no crecéis ni entendéis Mis Misterios, Mi Sabiduría y no aprovecháis plenamente Mi Amor.

Muchos de vosotros os enojáis Conmigo porque os sentís tontos, al no entender pasajes de las Sagradas Escrituras o el Conocimiento que estoy dando en estos tiempos para que os preparéis ante los acontecimientos que ya están sobre vosotros, pero, no es Mi culpa, Mis pequeños, que no entendáis.

Os vuelvo a repetir, es vuestra vida en pecado lo que impide que entendáis lo que Yo os quiero dar, y que Me interesa, a Mí, mucho que lo tengáis, pero os he dicho que vosotros sois libres. Vosotros, os podéis mantener en estado de Gracia y, el estado de Gracia, es como una llave que abre todas vuestras capacidades, físicas y espirituales, para todos los regalos que Yo os quiero dar; pero, si vosotros preferís vivir en el mal, vivir en el error, Yo no os puedo forzar.

¿Queréis escuchar a satanás en lugar de escucharMe a Mí?, Yo Me hago a un lado y os dejo con el enemigo. Si queréis estar plenamente Conmigo, no Me invitéis a vuestro corazón cuando esté sucio, con pecados graves y la presencia del enemigo esté ahí, en vuestro corazón.

Si vais a invitarMe a entrar en vuestro corazón, hacedlo, pero debéis estar limpios, y satanás no debe estar presente en vuestro corazón, en ningún momento.
Gracias, Mis pequeños.

www.diospadresemanifiesta.com